Agustín de Montiano y Luyando

Detalle del retrato de Agustín Gabriel de Montiano y Luyando por Andrés Ginés de Aguirre, 1765. N. º Inv.: 313. © Real Academia de la Historia

letra F

Toma de Posesión

30 de Octubre de 1742

Fallecimiento

1 de Noviembre de 1764

Agustín de Montiano y Luyando

Académico de número

Valladolid, 1697-Madrid, 1764

El 30 de octubre de 1742 era elegido académico de número el político y crítico literario Agustín de Montiano. El ocupante de la silla F había sido nombrado supernumerario seis años antes, el 6 de marzo de 1736.

Nacido en Valladolid el 28 de febrero de 1697, Montiano consiguió la cédula real para la Academia de la Historia en 1738 y fue uno de sus fundadores y su primer director desde 1738 hasta 1754. Perteneció también a otras muchas academias además de a la de Historia y la RAE; fue miembro de la de los Arcades de Roma (1750), de la de Buenas Letras de Barcelona y Sevilla (1752), de la Real Academia de las Bellas Artes de San Fernando (1754), de la Imperial de San Petersburgo (1759) y de la Academia de los Renacidos en Brasil (1760).

A lo largo de su carrera ocupó también numerosos y relevantes cargos políticos: fue secretario de la junta de comisarios españoles e ingleses, oficial mayor de la Secretaría de Estado (1740), secretario del Despacho de Gracia y Justicia (1746) y secretario de la Cámara de Castilla.

Montiano, aficionado a la literatura y dramaturgo, fue conocido por sus tertulias nocturnas sobre poesía y teatro; fueron asiduos a sus reuniones, entre otros, el escritor Ignacio de Luzán, el arquitecto José de Hermosilla, el arqueólogo Luis José Velázquez, el escultor Felipe de Castro y el lexicógrafo Juan de Iriarte. Participó también como secretario en las sesiones de la Academia del Buen Gusto (1749-1751), que se celebraban en casa de la marquesa de Sarriá. Se escudó bajo el seudónimo del Humilde y recitó numerosos poemas, églogas y sonetos.

En la Real Academia Española leyó una extensa Égloga (1747) y un Discurso sobre el estudio (1749). En 1750 recibió el encargo de escribir una oración al rey con motivo del matrimonio de la infanta María Antonia con el duque de Saboya. Colaboró, también, en los preparativos de la primera gramática de la RAE (1771).

Entre sus publicaciones como dramaturgo, destacan su Discurso sobre las tragedias españolas (1750)donde ensalza la tragedia clásica española— y su Discurso II (1753). En ambos, Montiano presentó sus tragedias Virginia (1750) y Ataúlfo (1753).

Agustín de Montiano, cuyas ideas sobre el teatro y la formación de actores llegan a nuestros días, murió en Madrid el 1 de noviembre de 1764.

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