Diccionario histórico de la lengua española

9.ª Entrega (septiembre de 2020)
Versión del 30/09/2020
Equipo Real Academia Española
Familia Ver familia de palabras

apanderetado, a adj. (1894-)

apanderetado

Etim. Derivado de pandereta¹, con a- y -ado, a.

Se documenta por primera vez, en la acepción 'que ha recibido un daño físico o moral', en 1894, en un artículo publicado en La Unión Católica (Madrid). En la acepción 'que presenta una imagen estereotipada' se atestigua por vez primera en 1916, en el artículo "Artistas contemporáneos. Julio Romero de Torres", publicado en La Esfera (Madrid).

adj. Que ha recibido un daño físico o moral.
docs. (1894) Ejemplo:
- 1894 Anónimo (El Párroco de Cobeña) "Obra pía Cobeña" [09-03-1894] La Unión Católica (Madrid) Esp (HD)
  ■ ¡Ah! señores de la Junta de Beneficencia, si fuera posible cambiar por algunos días de sitio y cargo, si pudiera ser el que alguno de ustedes, por otro arte que hoy no conocemos, ni puede conocerse, se pudiera tornar humilde Cura de esta villa, pasear por estas malas calles, penetrar en humildes viviendas, respirar en algunas covachas miseria y muerte, oír lamentos, gemidos, ayes de necesidad salidos de un pecho apanderetado, ver muchas lástimas del pobre jornalero, pária de nuestra civilización, oir contar tristezas al desgraciado anciano que no lo puede ganar con su sudor, escuchar lo que dice la enferma ó parida en necesidad y sin socorro, faltar por no pisar á muchos desgraciados que á falta de otra comida se recuestan en una plaza á tomar sol y aire [...] ¿No había de levantar su voz hasta el Cielo donde viven los señores de la beneficencia para que le oyeran, y se diese á cada uno lo que le pertenece?
adj. Estereotipado como folclórico y festivo.
Sinónimo: panderetero, a
docs. (1916-1967) 2 ejemplos:
- 1916 Anónimo "Romero de Torres" [02-09-1916] La Esfera (Madrid) Esp (HD)
  Cinco años después, volvía á obtener Julio Romero de Torres otra tercera medalla. Entonces pinta lienzos un poco sorollistas, excesivamente «inflados de luz», en una errónea participación del concepto acromado, apanderetado de Andalucía. Nada tampoco nos promete aún la que había de ser tendencia definitiva.
- 1967 Velázquez, J. "Sevilla" [13-07-1967] Diario de Las Palmas (Las Palmas de Gran Canaria) Esp (HD)
  Esa su entera verdad, la perdió la calle de Las Sierpes cuando una casi ancestral actitud de "placentero y bullicioso palenque de toda suerte de transacciones, mentidero del ocio y salón de los pasos perdidos de Sevilla" (1), se vé hoy trasmutada en un ritmo más en desasosiego. Aquel "ritmo lento" y "conversación saboreada en corros" ya casi no existe en la más "apanderetada" calle sevillana; todo el mundo marcha más aprisa. Las entidades bancarias desalojaron a casi todos los "cafés", donde el sesteo y la transacción comercial se acunaba en horas y horas; el viandante que más remiso lleva sus pasos es el forastero. La curiosidad la ve éste despierta ante un pintoresquismo muy profusamente expuesto. Hasta el Círculo de Ganaderos y Agricultores se ha visto postergado en su vieja designación [...]. Se me antoja pensar que sólo el puro recuerdo de la clásica gloria carcelaria de Cervantes es lo que de viejo va conservando la calle Las Sierpes: pues por allí, por el Núm. 91, lapidariamente, hay constancia certificadora del inmueble donde estuvo radicada la Cárcel Real.