13.ª Entrega (diciembre de 2022)
Versión del 31/12/2022
Equipo Real Academia Española
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azotaina s. (1615-)
azotaina, açotaina, açotayna, azotaína, azotayna
Etim. Derivado de azote1 y -aina.

Se documenta por primera vez en la acepción 'serie de golpes dados con un azote o con otro medio a una persona como castigo o con la intención de hacerle daño', en 1615, en la Segunda parte del ingenioso caballero don Quijote de la Mancha, de M. de Cervantes Saavedra. En los repertorios lexicográficos, se consigna por vez primera en el Diccionario de autoridades (1726). Como 'corriente repentina e intensa [de aire o de agua]', se atestigua por primera vez en 1907, en La de los tristes destinos, de B. Pérez Galdós. 

Vid. también azotaina (DH 1933-36).

Notas filológicas

En la obra Arte poetica española con una fertilissima sylua de Consonantes Communes, Proprios, Esdruxulos, y Reflexos, y un diuino Eestimulo del Amor de Dios (1592), de J. Díaz Rengifo, figura la voz azotaina, con la variante açotayna, en un listado de palabras con distintas terminaciones; en este caso, se incluye entre las terminadas en -ayna. Este primer testimonio, sin embargo, se ha descartado por falta de contexto para interpretar su significado.

  1. >azote
    s. f. Serie de golpes dados con un azote o con otro medio a una persona como castigo o con la intención de hacerle daño.
    Sinónimo: azotina
    docs. (1615-2022) 72 ejemplos:
    • 1615 Cervantes Saavedra, M. Quijote II Esp (CDH )

      — No, en ninguna manera —dijo Merlín—. Aquí, en este instante y en este lugar, ha de quedar asentado lo que ha de ser deste negocio: Dulcinea volverá a la cueva de Montesinos y a su prístino estado de labradora, o ya, en el ser que está, será llevada a los elíseos campos, donde estará esperando se cumpla el número del vápulo.

      — Ea, buen Sancho —dijo la duquesa—, buen ánimo y buena correspondencia al pan que habéis comido del señor don Quijote, a quien todos debemos servir y agradar por su buena condición y por sus altas caballerías. Dad el sí, hijo, desta azotaina, y váyase el diablo para diablo y el temor para mezquino, que un buen corazón quebranta mala ventura, como vos bien sabéis.

    • 2022 Tejedor, A. "Cervantes, Quijote, Zamora" [09-01-2022] La Opinión de Zamora (Zamora) ES (HD)
      De la historia del cerco nos llegó el conocido refrán No se ganó Zamora en una hora, dada la resistencia de la ciudad ante el asedio [...]. Es entonces cuando Sancho, que aún no ha cumplido el compromiso de los cientos de azotes que se ha de dar para desencantar a su señora Dulcinea, se adentra en el bosque y finge la azotaina; pero son tantos los azotes que ha de recibir su culo, que el propio Don Quijote le ruega que haga un alto en la zurra, que ya tendrá tiempo, pues no se ganó Zamora en una hora.
    • 1615 Cervantes Saavedra, M. Quijote II Esp (CDH )

      — No, en ninguna manera —dijo Merlín—. Aquí, en este instante y en este lugar, ha de quedar asentado lo que ha de ser deste negocio: Dulcinea volverá a la cueva de Montesinos y a su prístino estado de labradora, o ya, en el ser que está, será llevada a los elíseos campos, donde estará esperando se cumpla el número del vápulo.

      — Ea, buen Sancho —dijo la duquesa—, buen ánimo y buena correspondencia al pan que habéis comido del señor don Quijote, a quien todos debemos servir y agradar por su buena condición y por sus altas caballerías. Dad el sí, hijo, desta azotaina, y váyase el diablo para diablo y el temor para mezquino, que un buen corazón quebranta mala ventura, como vos bien sabéis.

    • 1625 Vega Carpio, L. Amor secreto hasta zelos p. 35 Decimanona parte comedias Esp (BD)
      D. Iu. Lindo bellaco te has hecho:/ Toma este pliego y mis llaues,/ y di que te dé Fineo/ por ellas quanto pidieres,/ que yo a la puerta me quedo/ A esperar á vn hombre. Fa. Voy/ y con las postas te espero,/ plega á Dios que pare en bien,/ que alguna açotaina tiemblo.
    • a1629 Tirso de Molina Todo es dar [1993] Esp (CDH )
      PulidaVenga a la praza el modorro / porque le demos gigorro / con lo demás que se sigue.Crespo¡Burlaos con el Francisquillo!Carrizo Azotaina ha de haber hoy. PizarroA ver a la reina voy, / que entra esta noche en Trujillo. (Vase)
    • a1638 Pz Montalbán, J. Divino portvgves Antonio Padva p. 168 Segvndo tomo de las comedias Esp (BD)
      Lau. Aqui aguardaremos todas/ a aqueste lado sentadas,/ mientras passa el accidente./ Cel. Plega a Dios que no sea nada./ Fr. Do. Y ella, hermana llegue aqui,/ y hablarela dos palabras,/ que la vandrán por sermon./ Ros. Diga, hermano./ Fr. Do. Digo, hermana,/ su marido está en la guerra,/ ella está sola en su casa,/ si Federico viniere,/ embiele noramala,/ si no con este cordon tiene de auer açotayna.
    • 1679 Henríquez, B. Thesaurus verborum hispano-latinus - (BD)
      Azote. Flagellum, i. Flagrum, verber, plaga, ae. Azotaina. Verberatio. Ruido de azotes. Crepitus plagarum.
    • 1714 Salazar Castro, L. Jornada coches p. 113 Esp (BD)
      Yo vi dar á vno ducientos azotes, porque con el caracter, que disfraza á esse despues de varios hurtos, quiso robar, y estafar los Monasterios de las Capuchinas, y Santa Clara, y con aquel loable exemplo, ha de llevar con licencia de vs. mds. muy buena azotayna el señor Philosofo, que vino del Infierno á predicarnos fidelidad, obediencia, y amor al Soberano.
    • 1726 RAE DiccAutoridades (NTLLE)
      AZOTAINA. s. f. La accion de dár azótes á alguno, que tambien se llama azotína. Es voz baxa y jocosa.
    • 1770 RAE DiccAutoridades 2.ª ed. (NTLLE)
      AZOTAYNA. s. f. joc. Zurra de azotes.
    • 1799 Santos Capuano, J. Zumbas p. 371 Esp (BD)
      [Nota al pie] (1) No faltó quien maliciase que este vapulamiento nocturno fue solo de palabra para acreditar su zelo el tio Juan en razon de la crianza que daba á su sobrino, coligiéndolo del poco efecto que surtian las correcciones. Y siendo así, añadian otros, de estas azotaynas vengan las que quieran.
    • 1802 Serrano, J. Trad Elementos medicina Weikard, I p. 306 Esp (BD)
      El tal joven corrió de casa en casa con unas disciplinas baxo el capote, suplicando que le azotasen. Casi en todas las casas se halláron complacedores que lo servian maravillosamente. En fin, sufriéron sus nervios tambien muchísimo por medio de la repeticion de tan freqüentes azotaynas: yo mismo tuve ocasion de verle temblando por todo su cuerpo, y orile decir: "Desearia de buena gana que me azotasen." Todos se cansáron del exceso de este pesado pasatiempo, y se tuvo cuidado del enfermo de otro modo.
    • 1843-1844 Bretón Herreros, M. Opúsculos prosa [1884] Esp (CDH )

      Es cierto que áun hace la navajade las suyas y que hay todavía en cada plazuela varias cátedras, no reconocidas por la Direccion de Estudios, donde se enseña grátisel arte ameno y persuasivo de esgrimirse á desvergüenzas; pero estas mismas desvergüenzas son ya algo más cultas y ménos peladas que in illo tempore, y para bien de la moral pública, ménos frecuentes los repelones y las azotainas. Hasta en la ropa, cuando no se viste el uniforme legalque iguala al rico con el pobre y al noble con el plebeyo, hay cierta arbitrariedad, cierta insubordinacion que se asemeja mucho á la anarquía.

    • 1871 Fdz Glz, M. Francisco Estevan [1871] Esp (CDH )
      Aún no tenia cuatro años y ya el angelito nadaba y se chapuzaba en el estanque del huerto, dando sustos á su madre, que lo cogia por una pierna, lo sacaba del agua y le aplicaba guapamente una azotaina, que Francisco sufria con impaciencia, pero sin llorar ni dar gritos, lo que ya en tan corta edad era una señal fuertísima de la fortaleza, ó como diria un guapo, del poder que mas adelante le hizo tan famoso.
    • 1882 Pz Rosales, V. Recuerdos (1814-1860) [1993] Chile (CDH )
      Tengo a la vista el trabajo de aquel solitario huésped del desierto, trabajo que, sin más que atenuar el alcance de alguna que otra voz antiparlamentaria, entrego a los curiosos en calidad de fotografía instantánea de las costumbres que aún fomenta en el ánimo de nuestros rústicos campesinos la religiosa creencia de que el marido responde en la otra vida de cuantos pecados cometa en ésta la mujer, si los deja pasar sin mechoneo, paliza y azotaina.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 274 México (CDH )

      Detúvose en narrar su niñez, con complacencias de artista, pues con sus lecturas, sus viajes y sus años, apreciaba mejor ahora los encantos de la época aquella en la que había de todo: hurto de frutas, por encima de tapias y cercados; días de sol, pasados en las montañas, con escondrijos salvajes y árboles amigos; baños en el río; siestas paradisiacas con su cuerpo de rapaz escurriendo agua, y tan limpio como su alma de niño; batallas campales, a pedrada limpia, con los demás granujas del pueblo; azotainas de padres y hermanas mayores, que lo dejaban lleno de cardenales [...].

    • 1903 Obligado, P. S. Tradiciones argentinas [1903] Argentina (CDH )
      Iba ya á bajar del cancel al pretil, cuando á curiosidad llamóle un blanco papel, recién pegado, en el que con hermosa letra se ofrecía buena gratificación al alma caritativa que, á más de serlo, fuera también honrada y quisiera entregar en la sacristía grueso rosario con paternosters, de oro, que en la azotaina y tinieblas de maitines habíase extraviado.
    • 1927 Valle-Inclán, R. M. Tirano [1993] Esp (CDH )

      La chinita *, en el fondo del jacal, se mete la teta en el hipil *, desapartando de su lado al crío que berrea y se revuelca en tierra. Acude a levantarle con una azotaina, y suspenso de una oreja le pone fuera del techado.

    • 1968 Martín Vigil, J. L. Curas comunistas [1968] Esp (CDH )

      — Vamos —dijo Felipe—, que tú estás por depurarlos.

      — ¡Si no hace falta! Verás, unos azotes a tiempo, y a otra cosa.

      — Me hace el efecto de que subestimas el problema. A mí no me parece que el padre Quintas sea susceptible de corrección a base de azotaina.

      — ¿Qué pasa con ese cura?

      — No le conozco, pero me ha bastado verlo y oírlo, para darme cuenta de que es un hueso duro de roer.

    • 1982 Rangel, C. Tercermundismo [1982] 164 Venezuela (CDH )
      Mucho más frecuentes eran los azotes, o el cepo. Las víctimas de éste último eran apedreadas y cubiertas de porquería por el público. Las lesiones así sufridas a veces causaban la muerte. La última azotaina pública registrada en la ciudad de Saint Albans tuvo lugar en 1838.
    • 1995 Ribeyro, J. R. Santiago [1995] Perú (CDH )

      BASILIO.—Un vejete enamoradizo y celoso me salió al paso y porque mi voz le disgustó, me acusó de herejía y de contumelia. Me he librado de una azotaínapública porque abjuré "in vehementi". ¡Pero don Mateo de Amusquíbar me las pagará! ¡Preparo contra él una canción que hará reír a toda la Ciudad de los Reyes!

    • 2002 García Márquez, G. Vivir [2002] Colombia (CDH )

      Le encantaba contar chistes en la mesa, y algunos muy buenos, pero los repetía tanto que un día Luis Enrique se levantó y dijo:

      — Me avisan cuando acaben de reírse.

      Sin embargo, la azotaina histórica fue la noche en que no apareció en la casa de los padres ni en la de los abuelos, y lo buscaron en medio pueblo hasta que lo encontraron en el cine.

    • 2011 Aguinis, M. Liova corre el poder Ar (CORPES)
      La batalla no cesaba porque llegaban más peones. Iván nos indicó que retrocediésemos hacia un ángulo donde se amontonaba el aserrín. Cuando subimos a la cumbre del montículo, mientras con su mano derecha proseguía la azotaina, su izquierda activó el fuelle. De súbito se levantó una densa nube de aserrín, como granizo, que dio en la cara y los ojos de los peones sublevados. Enceguecidos, comenzaron a huir, algunos sobándose el cuerpo y otros agarrándose piernas, cuellos, brazos y cabezas sangrantes.
    • 2022 Tejedor, A. "Cervantes, Quijote, Zamora" [09-01-2022] La Opinión de Zamora (Zamora) ES (HD)
      De la historia del cerco nos llegó el conocido refrán No se ganó Zamora en una hora, dada la resistencia de la ciudad ante el asedio [...]. Es entonces cuando Sancho, que aún no ha cumplido el compromiso de los cientos de azotes que se ha de dar para desencantar a su señora Dulcinea, se adentra en el bosque y finge la azotaina; pero son tantos los azotes que ha de recibir su culo, que el propio Don Quijote le ruega que haga un alto en la zurra, que ya tendrá tiempo, pues no se ganó Zamora en una hora.
    • 1615 Cervantes Saavedra, M. Quijote II Esp (CDH )

      — No, en ninguna manera —dijo Merlín—. Aquí, en este instante y en este lugar, ha de quedar asentado lo que ha de ser deste negocio: Dulcinea volverá a la cueva de Montesinos y a su prístino estado de labradora, o ya, en el ser que está, será llevada a los elíseos campos, donde estará esperando se cumpla el número del vápulo.

      — Ea, buen Sancho —dijo la duquesa—, buen ánimo y buena correspondencia al pan que habéis comido del señor don Quijote, a quien todos debemos servir y agradar por su buena condición y por sus altas caballerías. Dad el sí, hijo, desta azotaina, y váyase el diablo para diablo y el temor para mezquino, que un buen corazón quebranta mala ventura, como vos bien sabéis.

    • 1625 Vega Carpio, L. Amor secreto hasta zelos p. 35 Decimanona parte comedias Esp (BD)
      D. Iu. Lindo bellaco te has hecho:/ Toma este pliego y mis llaues,/ y di que te dé Fineo/ por ellas quanto pidieres,/ que yo a la puerta me quedo/ A esperar á vn hombre. Fa. Voy/ y con las postas te espero,/ plega á Dios que pare en bien,/ que alguna açotaina tiemblo.
    • a1629 Tirso de Molina Todo es dar [1993] Esp (CDH )
      PulidaVenga a la praza el modorro / porque le demos gigorro / con lo demás que se sigue.Crespo¡Burlaos con el Francisquillo!Carrizo Azotaina ha de haber hoy. PizarroA ver a la reina voy, / que entra esta noche en Trujillo. (Vase)
    • a1638 Pz Montalbán, J. Divino portvgves Antonio Padva p. 168 Segvndo tomo de las comedias Esp (BD)
      Lau. Aqui aguardaremos todas/ a aqueste lado sentadas,/ mientras passa el accidente./ Cel. Plega a Dios que no sea nada./ Fr. Do. Y ella, hermana llegue aqui,/ y hablarela dos palabras,/ que la vandrán por sermon./ Ros. Diga, hermano./ Fr. Do. Digo, hermana,/ su marido está en la guerra,/ ella está sola en su casa,/ si Federico viniere,/ embiele noramala,/ si no con este cordon tiene de auer açotayna.
    • 1679 Henríquez, B. Thesaurus verborum hispano-latinus - (BD)
      Azote. Flagellum, i. Flagrum, verber, plaga, ae. Azotaina. Verberatio. Ruido de azotes. Crepitus plagarum.
    • 1714 Salazar Castro, L. Jornada coches p. 113 Esp (BD)
      Yo vi dar á vno ducientos azotes, porque con el caracter, que disfraza á esse despues de varios hurtos, quiso robar, y estafar los Monasterios de las Capuchinas, y Santa Clara, y con aquel loable exemplo, ha de llevar con licencia de vs. mds. muy buena azotayna el señor Philosofo, que vino del Infierno á predicarnos fidelidad, obediencia, y amor al Soberano.
    • 1726 RAE DiccAutoridades (NTLLE)
      AZOTAINA. s. f. La accion de dár azótes á alguno, que tambien se llama azotína. Es voz baxa y jocosa.
    • 1770 RAE DiccAutoridades 2.ª ed. (NTLLE)
      AZOTAYNA. s. f. joc. Zurra de azotes.
    • 1799 Santos Capuano, J. Zumbas p. 371 Esp (BD)
      [Nota al pie] (1) No faltó quien maliciase que este vapulamiento nocturno fue solo de palabra para acreditar su zelo el tio Juan en razon de la crianza que daba á su sobrino, coligiéndolo del poco efecto que surtian las correcciones. Y siendo así, añadian otros, de estas azotaynas vengan las que quieran.
    • 1802 Serrano, J. Trad Elementos medicina Weikard, I p. 306 Esp (BD)
      El tal joven corrió de casa en casa con unas disciplinas baxo el capote, suplicando que le azotasen. Casi en todas las casas se halláron complacedores que lo servian maravillosamente. En fin, sufriéron sus nervios tambien muchísimo por medio de la repeticion de tan freqüentes azotaynas: yo mismo tuve ocasion de verle temblando por todo su cuerpo, y orile decir: "Desearia de buena gana que me azotasen." Todos se cansáron del exceso de este pesado pasatiempo, y se tuvo cuidado del enfermo de otro modo.
    • 1822 Anónimo (M.) Trad Compadre Mateo, Laurens, II p. 16 (BD)
      En consecuencia de ámbos enormes delitos, se decidió que por el segundo caso se echaria mano de unas disciplinas de cuero de buey y de burro, que con ellas se me plantarian treinta y nueve azotes en las espaldas, miéntras se recitase por tres veces el verso 38 del salmo 78; lo que se ejecutó el mismo día; pero como me cisqué durante la azotayna, no recibí mas que veinte y dos azotes, y me absolviéron de los demas, segun ordena en el capitulo II; parrafo II y 14 del Maccoht.
    • 1843-1844 Bretón Herreros, M. Opúsculos prosa [1884] Esp (CDH )

      Es cierto que áun hace la navajade las suyas y que hay todavía en cada plazuela varias cátedras, no reconocidas por la Direccion de Estudios, donde se enseña grátisel arte ameno y persuasivo de esgrimirse á desvergüenzas; pero estas mismas desvergüenzas son ya algo más cultas y ménos peladas que in illo tempore, y para bien de la moral pública, ménos frecuentes los repelones y las azotainas. Hasta en la ropa, cuando no se viste el uniforme legalque iguala al rico con el pobre y al noble con el plebeyo, hay cierta arbitrariedad, cierta insubordinacion que se asemeja mucho á la anarquía.

    • 1828-1870 Bretón Herreros, M. Poesías [1884] 274 Esp (CDH )
      / En fin, sobre el bofeton / Llevó su azotaina Juan... / Y era un sol el pobrecillo! / Y parecido á papá! / Al cabo de media hora / Se restableció la paz, / Y otra media se pasó / En mirarnos y callar.
    • 1871 Facundo HChucho [1890] México (CDH )

      Oyó reir á Chucho con la criada con la mayor frescura y naturalidad: la criada huía de Chucho que la perseguía con un fuete.

      Elena se lanzó furiosa sobre Chucho y sin decirle ¡agua va! le aplicó una azotaina inquisitorial.

      Chucho dió una docena de dósde pecho, y Refugio, que así se llamaba la nana, impidió parte de la ejecución.

      Chucho lloró con verdadero dolor: fué ésta la más fuerte de sus impresiones y el primero de sus momentos amargos, y se ocultó en un rincón donde lo sorprendió el sueño.

    • 1871 Fdz Glz, M. Francisco Estevan [1871] Esp (CDH )
      Aún no tenia cuatro años y ya el angelito nadaba y se chapuzaba en el estanque del huerto, dando sustos á su madre, que lo cogia por una pierna, lo sacaba del agua y le aplicaba guapamente una azotaina, que Francisco sufria con impaciencia, pero sin llorar ni dar gritos, lo que ya en tan corta edad era una señal fuertísima de la fortaleza, ó como diria un guapo, del poder que mas adelante le hizo tan famoso.
    • 1872 Palma, R. Tradiciones peruanas I [2003] Perú (CDH )

      — ¡Cuenta, pícaros godos, con que vayan a contar lo que ha pasado! Al primero que descubra yo que ha ido con el chisme lo tundo vivo.

      «¿Si se habrá vuelto loco su merced?», se preguntaban los muchachos; pero no contaron a sus familias lo sucedido, si bien el escozor de los ramalazos los traía aliquebrados.

      ¿Qué mala mosca había picado al magister , que de suyo era manso de genio, para repartir tan furiosa azotaina? Ya lo sabremos.

      Al siguiente día presentáronse los chicos en la escuela, no sin recelar que se repitiese la función. Por fin, don Faustino hizo señal de que iba a hablar.

    • 1874 Palma, R. Tradiciones peruanas II [2003] Perú (CDH )

      El ultraje inferido a D. Cristóbal había quedado en el secreto; pues el alcalde prohibió a los carceleros que hablasen de la azotaina. Acaso la conciencia le gritaba a D. Diego que la vara del juez lo había servido para vengar en el jugador los agravios del galán.

    • 1874 Palma, R. Tradiciones peruanas II [2003] Perú (CDH )
      Pues la panadería de D. Jaime el catalán, o de cualquier otro desalmado, no estaba lejos, y la infeliz criada pasaba allí semanas o meses sufriendo azotaina diaria, cuaresmal ayuno, trabajo crecido y todos los rigores del más bárbaro tratamiento. Y cuenta que esos siglos no fueron de librepensadores como el actual, sino siglos cristianos de evangélico ascetismo y suntuosas procesiones; siglos, en fin, de fundaciones monásticas, de santos y de milagros.
    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )

      Dice Meléndez que el padre Gil la amenazó con sacarle el diablo a azotes; que el maligno tembló ante la deshonra de la azotaina, y que cuando ya lo tuvo más dócil que la cera, trasladaron a la endemoniada a la capilla de San Jerónimo, donde ésta confesó que no había tal diablo de por medio, sino que todo había sido fingimiento para mantener no sé qué relaciones pecaminosas con un prójimo.

    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )
      Don Gabriel estaba ya en la calle, montado en un burro semitísico y acompañado de verdugo, pregonero y ministriles, cuando llegó un escribano con orden superior aplazando la azotaina para el siguiente día. Era cuanto los amigos habían podido obtener del irritado gobernador.
    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )
      Gracias a este recurso, todos los de la banda fueron atados al rollo, y tras de pública azotaina, suspendidos en la horca. Sólo la Magdalena escapó de caer en manos de la justicia. Suponemos cristianamente que, andando los tiempos, tan gran pecadora llegaría a ser otra Magdalena arrepentida.
    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )
      Sin perjuicio de la azotaina, al que durante tres días no sabía al dedillo la lección lo plantaba en el patio de la casa a la vergüenza pública, adornándole la cabeza con una coroza o cucurucho de cartón donde estaban escritas con letras gordas como celemines estas palabras:
    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )

      En ciertas escuelas protegidas por la nobleza de Lima los condesitos y marquesitos gozaban de un privilegio curioso. Todos concurrían acompañados de un negrito de su misma edad, hermano de leche del amito, el cual era el editor responsable de las culpas de su aristocrático dueño. ¿No sabía el niño la lección? Pues el negrito aguantaba la azotaina, y santas pascuas.

    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Perú (CDH )
      Y sacando a lucir el San Martín de cinco ramales, empezó la azotaina. Los muchachos se escondieron entre la muchedumbre, y don Bonifacio, entusiasmado en la faena, no ya sólo hizo crujir el látigo sobre los escolares, sino sobre hombres y mujeres del pueblo.
    • 1882 Pz Rosales, V. Recuerdos (1814-1860) [1993] Chile (CDH )
      Tengo a la vista el trabajo de aquel solitario huésped del desierto, trabajo que, sin más que atenuar el alcance de alguna que otra voz antiparlamentaria, entrego a los curiosos en calidad de fotografía instantánea de las costumbres que aún fomenta en el ánimo de nuestros rústicos campesinos la religiosa creencia de que el marido responde en la otra vida de cuantos pecados cometa en ésta la mujer, si los deja pasar sin mechoneo, paliza y azotaina.
    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas V [2003] Perú (CDH )
      Palabra más, palabras menos, tal era la fórmula de los pregones que, así la Inquisición como el Cabildo de Lima, empleaban para la azotaina de brujas y ladrones.
    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas V [2003] Perú (CDH )
      David, que tenía en perspectiva una azotaina por recogerse en casita a hora tan avanzada, iba corriendo y desempedrando calles, cuando al doblar una esquina tropezó con un hombre corpulento, embozado en un poncho, que le arrimó un soberano puntapié, en el mapamundi, diciéndole:
    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas VI [2003] Perú (CDH )
      En cuanto a Ica, consta en uno de los números de El Imparcial , periódico que en 1873 se publicaba en esa ciudad, que una pobre mujer de Pueblo Nuevo fue atada a un árbol por un hombre, el que la aplicó una terrible, azotaina en castigo de haberlo maleficiado.
    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas VI [2003] Perú (CDH )
      [...] no la hubiese curado con algunas gotas del néctar de su castísimo seno. Añaden los dichos borroneadores de papel que no usaba medias, que andaba puerca y desgreñada, que dormía entre sábanas de jerga y que de cada azotaina que se arrimaba en el carabanchel de popa, sacaba del purgatorio un celemín de ánimas benditas.
    • 1883 Pardo Bazán, E. Tribuna [1995] Esp (CDH )

      — A bien que una nación no es ninguna naranja para hacer cuarterones tan fácilmente... ¿Sabe usted lo que contaron de ese viejecito..., del patriarca? Mire usted: yo me explico que sea republicano... ¡Había cosas en aquellos tiempos antiguos! ¡Era el segundo de una casa rica..., poderosa, hombre! El mayorazgo arrambló con todo, ¿eh?, mimos y hacienda, y a él le quedó un palomar viejo y la memoria de las azotainas... Otro se hubiera hecho misántropo...

    • 1885 Martí, J. Lucía Jerez [1994] Cuba (CDH )

      [...] de tal modo que, si se va a ver, está hoy viviendo la gente con tantas mañas, que es ya hasta de mal gusto ser honrado.

      En este diario y en aquél, no bien puso el pie en el país, escribió el Sr. Valle con mano ejercitada, aunque un tanto febril y descompuesta, sus azotainas contra las monarquías y vilezas que engendra, y sus himnos, encendidos como cantos de batalla, en loor de la libertad, de que "los campos nuevos y los altos montes y los anchos ríos de esta linda América, parecen natural sustento".

    • 1885-1887 Pz Galdós, B. Fortunata [1993] Esp (CDH )

      — Dámele acá... no puedes ya con tu alma... Ea, caballerito; a callar se ha dicho...

      El Pitusole dio un porrazo en la cabeza.

      — Mira que te estrello... Verás la azotaina que te vas a llevar. ¡Y qué gordo está el tunante! parece mentira...

      — Quelo un batón... ¡hostia!

    • 1888 Pz Galdós, B. Miau [2003] Esp (CDH )

      Hacía un movimiento para echarse de la cama y correr a la de Luis con ánimo de darle azotes, y se reprimía luego. ¡Ah! como pusiera las manos en él, no se contentaría con la azotaina..., le ahogaría, sí. ¡Tal furia le abrasaba el alma y tal sed de destrucción tenían sus ardientes manos!

    • 1890 Medina, J. T. HInquisición Chile [2003] Chile (CDH )
      [...] después de haber hecho ya declarar a muchos de los que habían figurado en sus percances con el Obispo, amenazando siempre con el Santo Oficio —cuyos ministros de tan mala data parecían hallarse por ese entonces— lograba que pareciese ante su presencia como comisario y a declarar contra el Obispo el mismo Juan de Morales Salguero que había propinado la azotaina al clérigo Salvador de Ampuero!
    • 1894 Pz Galdós, B. Torquemada [2002] Esp (CDH )

      No te detengas a medio éxito. Fuera escrúpulos, fuera delicadezas que ya resultarían afectadas. ¿No has conseguido aún que el amo os dé coche para salir publicando por calles y paseos la venta que habéis hecho de...? ¡Oh! no me tires del pelo. Me haces daño.

      — Es que me pones nerviosa... ¡Pobre ser delicado y enfermo, a quien no se puede aplicar el correctivo de una azotaina!

      — Decía que la venta... Bueno: retiro la palabra. ¡Ay!... Ello es que harás muy bien en sonsacarle el gasto del coche.

    • 1895 Valera, J. Juanita la Larga [1985] Esp (CDH )
      — Aun sin propasarme hasta el extremo de la azotaina, y aun sin cometer ningún crimen, he de castigarla, valiéndome de la lengua, que ha de lanzar contra ella palabras que le abrasen el pecho. Ha de lanzar mi lengua más rayos de fuego que la uña del boticario. Cada una de las palabras que yo le diga ha de ser como una ponzoñosa de alacrán que le desgarre y envenene las entrañas.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 274 México (CDH )

      Detúvose en narrar su niñez, con complacencias de artista, pues con sus lecturas, sus viajes y sus años, apreciaba mejor ahora los encantos de la época aquella en la que había de todo: hurto de frutas, por encima de tapias y cercados; días de sol, pasados en las montañas, con escondrijos salvajes y árboles amigos; baños en el río; siestas paradisiacas con su cuerpo de rapaz escurriendo agua, y tan limpio como su alma de niño; batallas campales, a pedrada limpia, con los demás granujas del pueblo; azotainas de padres y hermanas mayores, que lo dejaban lleno de cardenales [...].

    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 367 México (CDH )

      Seguían después las efemérides menores, toda la bárbara existencia de nuestras casas de vecindad; las riñas y palizas cotidianas de padres, maridos y amasios; el recuento de los golpes, al través de puertas y paredes; la no intervención de los demás vecinos, que presencian las azotainas inconmovibles y torvos; el viaje final de la mujer golpeada, con el jarro vacío, en pos del pulque de la reconciliación, cubriéndose con el rebozo los cardenales del cuerpo, sonriente y satisfecha de que su hombre la martirice; para eso es suya, para eso la adora...

    • 1903 Obligado, P. S. Tradiciones argentinas [1903] Argentina (CDH )
      Iba ya á bajar del cancel al pretil, cuando á curiosidad llamóle un blanco papel, recién pegado, en el que con hermosa letra se ofrecía buena gratificación al alma caritativa que, á más de serlo, fuera también honrada y quisiera entregar en la sacristía grueso rosario con paternosters, de oro, que en la azotaina y tinieblas de maitines habíase extraviado.
    • 1903 Obligado, P. S. Tradiciones argentinas [1903] Argentina (CDH )

      — Pues bien: si la letra es del mismo y no hay modo de persuadir al niño, aplíquesele el principio de su propio maestro, la letra con sangre entra, y después de una azotaina confesará. ¿Quién le mete á esos jeroglíficos que no entiende?

    • 1903 Obligado, P. S. Tradiciones argentinas [1903] Argentina (CDH )
      Menos, el Sr. D. Francisco de la Peña, español seriote, grave y más godo que el rey, y como, aquél ignoraba que era llamado á presenciar la azotaina de su vástago.
    • 1903 Obligado, P. S. Tradiciones argentinas [1903] Argentina (CDH )
      Pero azotes por azotes, compelido el niño entre dos azotainas, y desconfiando de la frágil naturaleza infantil, el maestro, advertido por Rivadaviá, que sus amistades en la Secretaría del virrey teníanle al corriente de la investigación, aconsejó á uno que pusiera pies en polvorosa, aviso que no se hizo repetir, y al otro que confesara la verdad y cantara de plano, pues ya no habría peligro ni para el inocente copista.
    • 1907 Glz Prada, M. Ventrales Horas de lucha Perú (CDH )

      La ejecución tiene lugar en la plazuela de Santo Domingo, ante muchos espectadores que vienen a presenciar una cosa nueva en Lima: una azotaina pública. Obedeciendo la orden de un oficial o ayudante de verdugo que preside el acto, nuestro digno conciudadano se afloja los pantalones, se tiende en el suelo y, a compás de un tambor, recibe en silencio la dosis que para el mal de uñas le administran los doctores en moralidad.

    • 1907 Glz Prada, M. Ventrales Horas de lucha Perú (CDH )

      Nos hallamos, pues, en la actitud más cómoda para la flagelación; y hagamos algo más que nuestro compatriota de marras: regocijémonos. Los azotes son higiénicos y saludables, cuando reina una temperatura muy fría, cuando la dosis no pasa de lo regular, cuando no carga mucho la mano del verdugo. A más, una solfa, sabiamente administrada, predispone al amor, sirve de afrodisíaco. También sirve de aperitivo, dado qué desde las azotainas chilenas se nota en el país una furiosa rabia de comer.

    • a1911 Anónimo Recreo hijos [1911] Esp (CDH )
      En la primera, nadie podía sentarse sin llevar una azotaina; la segunda, al olerla, hacia estornudar sesenta y seis veces seguidas, y la última, era una especie de rabo, que tenía la endiablada propiedad de hacer salir corriendo y rebuznando al infeliz a quien se le prendía.
    • c1916 Blasco Ibáñez, V. Trad Mil noches [2003] Esp (CDH )
      "¡Para esto sirve eso!" Y yo acabé por convencerme de que eso no servía más que para proporcionar una azotaina; y así con todo lo demás".
    • 1919 Arguedas, A. Raza [1988] Bolivia (CDH )
      Entonces uno de los cabos desligóse de la cintura su látigo rematado en la punta por una porra de estaño y comenzó la azotaina, haciendo silbar su cuerda con fruición y hasta con entusiasmo.
    • 1919 Arguedas, A. Raza [1988] Bolivia (CDH )
      Todo el día duró la azotaina; y el día entero también permanecieron los patrones como testigos exasperados pero impotentes ante la crueldad del agraviado y vengativo Pantoja.
    • 1927 Noel, E. Siete cucas [1992] Esp (CDH )
      Y este hombre de roble, que doblegaba aunque solamente fuera las ramas al viento que soplaba de siglos atrás, era quien un día había exclamado al conocer la azotaina y venganza de las Cucas en carne de los suyos.
    • 1927 Valle-Inclán, R. M. Tirano [1993] Esp (CDH )

      La chinita *, en el fondo del jacal, se mete la teta en el hipil *, desapartando de su lado al crío que berrea y se revuelca en tierra. Acude a levantarle con una azotaina, y suspenso de una oreja le pone fuera del techado.

    • 1928 Carrasquilla, T. Marquesa Yolombó [1984] Colombia (CDH )

      Sí señor: tendido, boca abajo, cuan largo es, en la banquilla recia y patiabierta de las azotainas legales, que han traído, en un periquete, le aplican, con el vergajote ritual, diez lapos, en esa parte, que, merced a su indecoro, lleva al sereno. El indómito puja; pero no da un ay.

    • 1932 Trens, M. B. "No flageléis niños" [31-05-1932] Crisol (Ciudad de México) Mx (HD)
      Estos disciplinantes, cuando salían en procesión iban de dos en dos, desnudos hasta la cintura, mezclados hombres y mujeres, portaban látigos terminados en nudos de hierro, y en sus cánticos invitaban a pedir perdón flagelándose. Se azotaban mutuamente con encarnizamiento, se ensangrentaban las carnes, se las laceraba, y mientras estos dolores les arrancaban gemidos y los hacían derramar copiosas lágrimas, la azotaína se hacía con más fervor [...].
    • 1948 Marechal, L. Adán Buenosayres [1999] Argentina (CDH )

      Simultáneamente descubrí que algo de mis penitencias había trascendido a la casa de pensión donde yo vivía entonces y que regenteaba una triste arpía llamada irónicamente doña Consuelo: al parecer, mis vecinos de habitación habían captado a través de los tabiques el chis-chas de mis nocturnas azotainas y parte de los monólogos con que yo las iba exaltando sin darme cuenta.

    • 1965 Escobar, J. Itinerario cocinas Castilla [1968] Esp (CDH )
      El novio, en un arranque de furor y de hombría, atenazó con sus manos poderosas a la que ya era su mujer, y levantando la amplitud albar de su vestido nupcial, dejando al descubierto en el revuelo la mitad meridional del cuerpo, donde las puntillas y las blondas resaltaban de la carne morena, le propinó una restallante e impetuosa azotaina.
    • 1968 Lpz Ibor, J. J. Vida sexual [1968] Esp (CDH )
      Las niñas, sobre todo, encuentran una atracción especial y descubren cierta actitud erótica de forma espontánea en los juegos de castigo y de azotaina. Hay también un sadismo latente en el gusto por los espectáculos brutales o sanguinarios, como son boxeo, los deportes peligrosos y las corridas de toros.
    • 1968 Martín Vigil, J. L. Curas comunistas [1968] Esp (CDH )

      — Vamos —dijo Felipe—, que tú estás por depurarlos.

      — ¡Si no hace falta! Verás, unos azotes a tiempo, y a otra cosa.

      — Me hace el efecto de que subestimas el problema. A mí no me parece que el padre Quintas sea susceptible de corrección a base de azotaina.

      — ¿Qué pasa con ese cura?

      — No le conozco, pero me ha bastado verlo y oírlo, para darme cuenta de que es un hueso duro de roer.

    • 1970 Donoso, J. Obsceno pájaro [1990] Chile (CDH )
      Le soltaba monsergas interminables, que cuando la pareja era reciente culminaban en azotainas que el marido propinaba a Emperatriz, en esa época terminaban en los deleites del lecho conyugal donde hacían las paces.
    • 1972 García Hortelano, J. Mary Tribune [1999] Esp (CDH )
      Simultáneamente, Sagrario soltó la mano de José Luis, Andrés se puso en pie, Mary dejó abierta su boca, Bert rió roncamente, José María fingió una azotaina y el artesano preguntó que qué sucedía. Que yo era un malnacido.
    • 1975 Agosto Muñoz, N. Posesión vudú [1975] Puerto Rico (CDH )
      Allí se someten a una azotaina ritual con el látigo preparado con las hojas de la palma de aizan, y luego son finalmente consagrados y llevados a la cámara de iniciación.
    • 1981 Arrau, S. Digo [1992] Chile (CDH )

      VILLAGRA¿Hijo, decís...?

      VALDIVIAAsí lo considero, no como a sirviente.

      MARCOSPoco ha ordenásteis, si mal no recuerdo, que le propinasen una feroz azotaina.

      VALDIVIALo que demuestra que es tratado como hijo. Alonso a menudo es tozudo y...

      VILLAGRARebelde, diréis. Y de mala índole.

    • 1982 Allende, I. Casa espíritus [1995] 13 Chile (CDH )
      Llevado por el entusiasmo de su celo vocacional, el sacerdote debía contenerse para no entrar en abierta desobediencia con las instrucciones de sus superiores eclesiásticos, sacudidos por vientos de modernismo, que se oponían al cilicio y a la flagelación. Él era partidario de vencer las debilidades del alma con una buena azotaina de la carne.
    • 1982 Arrabal, F. Torre herida [1983] Esp (CDH )
      Quizás ésta fue la azotaina más dolorosa que nunca le diera su progenitor. Le había quitado los mocos. Para siempre, se dijo rencorosa Nuria.
    • 1982 Rangel, C. Tercermundismo [1982] 164 Venezuela (CDH )
      Mucho más frecuentes eran los azotes, o el cepo. Las víctimas de éste último eran apedreadas y cubiertas de porquería por el público. Las lesiones así sufridas a veces causaban la muerte. La última azotaina pública registrada en la ciudad de Saint Albans tuvo lugar en 1838.
    • 1984 Morales Pettorino, F. / Quiroz Mejías, Ó. / Peña Álvz, J. J. DiccChilenismos, I Ch (NTLLE)
      azotaína [...] f. fam. pop. Azotaina; zurra de azotes.
    • 1990 Pombo, Á. Metro platino [1993] 419 Esp (CDH )
      Cuando la mujer, que era por lo visto la madre del chiquillo, logró sacarle la mano del bolsillo y liberar al tordo, estaba muerto. «¡Mira lo que has hecho, mira!», vociferaba la madre. Era una azotaina claramente ineficaz, una rutina. «¡Es el pequeño, señorita, es más malo que la tiña!»
    • 1995 Britton, R. M. No pertenezco [1995] Panamá (CDH )
      A Enericia le prohibió que le diera a Helena ninguno de sus brebajes, so pena de una buena azotaina, por muy libre que fuera y la mujer bajó los ojos e inclinó la cabeza como si en verdad aceptara sus disposiciones. Durmió en el lecho matrimonial esa noche, la adorable cabeza apoyada en su pecho sin atreverse a tocarla, porque en su cuerpo ardían los fuegos de otra mujer.
    • 1995 Ribeyro, J. R. Santiago [1995] Perú (CDH )

      BASILIO.—Un vejete enamoradizo y celoso me salió al paso y porque mi voz le disgustó, me acusó de herejía y de contumelia. Me he librado de una azotaínapública porque abjuré "in vehementi". ¡Pero don Mateo de Amusquíbar me las pagará! ¡Preparo contra él una canción que hará reír a toda la Ciudad de los Reyes!

    • 2001 RAE DRAE 22.ª ed. (NTLLE)
      azotaina. [...] f. coloq. Zurra de azotes.
    • 2002 García Márquez, G. Vivir [2002] Colombia (CDH )

      Le encantaba contar chistes en la mesa, y algunos muy buenos, pero los repetía tanto que un día Luis Enrique se levantó y dijo:

      — Me avisan cuando acaben de reírse.

      Sin embargo, la azotaina histórica fue la noche en que no apareció en la casa de los padres ni en la de los abuelos, y lo buscaron en medio pueblo hasta que lo encontraron en el cine.

    • 2011 Aguinis, M. Liova corre el poder Ar (CORPES)
      La batalla no cesaba porque llegaban más peones. Iván nos indicó que retrocediésemos hacia un ángulo donde se amontonaba el aserrín. Cuando subimos a la cumbre del montículo, mientras con su mano derecha proseguía la azotaina, su izquierda activó el fuelle. De súbito se levantó una densa nube de aserrín, como granizo, que dio en la cara y los ojos de los peones sublevados. Enceguecidos, comenzaron a huir, algunos sobándose el cuerpo y otros agarrándose piernas, cuellos, brazos y cabezas sangrantes.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      azotaina [...] f. coloq. Zurra de azotes.
    • 2022 Tejedor, A. "Cervantes, Quijote, Zamora" [09-01-2022] La Opinión de Zamora (Zamora) ES (HD)
      De la historia del cerco nos llegó el conocido refrán No se ganó Zamora en una hora, dada la resistencia de la ciudad ante el asedio [...]. Es entonces cuando Sancho, que aún no ha cumplido el compromiso de los cientos de azotes que se ha de dar para desencantar a su señora Dulcinea, se adentra en el bosque y finge la azotaina; pero son tantos los azotes que ha de recibir su culo, que el propio Don Quijote le ruega que haga un alto en la zurra, que ya tendrá tiempo, pues no se ganó Zamora en una hora.
    dar azotaina
    docs. (1891-1995) 9 ejemplos:
    • 1891 Pardo Bazán, E. Piedra angular [2002] Esp (CDH )
      — ¿Nos daría usted una azotaina? —interrogó Febrero mirando a Cáñamo con soberana insolencia festiva—. Ya me lo sospechaba yo, señor de Cáñamo. Ya suponía que, por gusto de usted, restableceríamos en todo su esplendor el trato de cuerda, las pesas, el potro, las cuñas, las seis azumbres de agua echadas por un embudo, con otros modos finos de preguntar que gastaban nuestros insignes abuelos.
    • 1995 Britton, R. M. No pertenezco [1995] Panamá (CDH )
      Le daría una buena azotaína a Enericia por embustera, para quitarle esos aires de sabelotodo. ¡Mira que asegurarle que a veces, se encuentra gran gozo entre hombre y mujer! Eso será verdad entre esclavos, en realidad casi animales, pero ella no se acostumbrará nunca.
    • 1891 Pardo Bazán, E. Piedra angular [2002] Esp (CDH )
      — ¿Nos daría usted una azotaina? —interrogó Febrero mirando a Cáñamo con soberana insolencia festiva—. Ya me lo sospechaba yo, señor de Cáñamo. Ya suponía que, por gusto de usted, restableceríamos en todo su esplendor el trato de cuerda, las pesas, el potro, las cuñas, las seis azumbres de agua echadas por un embudo, con otros modos finos de preguntar que gastaban nuestros insignes abuelos.
    • c1910 Zaldumbide, G. Égloga trágica [1962] Ecuador (CDH )
      Culpa mía no fue si el majagranzas de mi historia los trastocaba, ignaro y malévolo, a punto de merecer que le "levantaran los fondillos y le dieran una azotaina", como le dijo el entonces famoso Tuerto Calle.
    • 1914 Alcalde Río, H. Escenas cántabras [1914] 254 Esp (CDH )
      ¡Si no es porque me contuvo Carmen, te lo juro, Celia, como llámome Rosa, la regazo las sayas a la cabeza y doila una azotaina en metá del baile que póngola, lo que tú sabes, como un tomate...!
    • c1916 Blasco Ibáñez, V. Trad Mil noches [2003] Esp (CDH )
      "¡Grita porque quiere obligarnos a explicarle para qué sirve eso!" Entonces la reina, mi madre, en el límite de la indignación, a pesar de mis protestas de arrepentimiento, me ponía el trasero al aire y me daba una azotaina furiosa, gritando: "¡Para esto sirve eso!" Y yo acabé por convencerme de que eso no servía más que para proporcionar una azotaina; y así con todo lo demás".
    • 1918 Pocaterra, J. R. Tierra [1991] 90 Venezuela (CDH )
      Cuando el indio, desesperado, gastado, viendo irse su trabajo y su vida por aquel tonel de las Danaides, sigue el impulso primitivo y huye, se le persigue, se le acosa como en los buenos días de Las Bastidas y Gutierre de la Peña, se le trae atado y se le da una azotaina con vergas de toro, cargando a su cuenta los diez pesos que se pagan al autor de la captura, que frecuentemente es el mismo que le aconsejara huir, para ganarse luego los cuarenta bolívares de la pingüe cacería...
    • 1978 Tusquets, E. Mismo mar [1990] 168 Esp (CDH )
      —Apolo no nos importaba nada a ninguno de los tres—, pero que podía convertirse cualquier día —que pudo convertirse ante mis ojos atónitos un día de aquel mismo verano— en la más desmelenada e incontrolada de las bacantes dionisíacas, en una arpía vocinglera y destemplada, que gritaba y gritaba como una rata sucia a la que le estuvieran rompiendo a escobazo limpio el espinazo —aunque nadie le estaba haciendo, ni siquiera diciendo, nada—, entre un pataleo pueril —por el que a mí me hubieran dado una buena azotaina— y un frenético agitar de brazos, las facciones —nada helénicas ya— contraídas en un rictus grotesco, la boca llena de espuma, los ojos —los grandes ojos claros— ahora achicados y mezquinos —ojos de alimaña furiosa, de rata acorralada—, mientras nos insultaba a todos —hasta a la misma Generala [...].
    • 1982 Allende, I. Casa espíritus [1995] 118 Chile (CDH )
      Esteban gritaba como un enajenado, paseándose por la sala a grandes trancos y dando puñetazos a los muebles, argumentando que si Clara pensaba seguir los pasos de su madre, se iba a encontrar con un macho bien plantado que le bajaría los calzones y le daría una azotaina para que se le quitaran las malditas ganas de andar arengando a la gente [...].
    • 1988 Hidalgo, M. Azucena [1988] Esp (CDH )
      Y he recordado el refugio seguro de sus faldas cuando mi padre o mi madre me perseguían para darme una azotaina. Esa infancia se me está muriendo ahora por segunda vez y noto que me voy a hacer definitivamente mayor de golpe, con la certeza de que la muerte me concierne y de que ya no quedan ojos donde encontrar la seguridad de un amor fiable y sin condiciones.
    • 1995 Britton, R. M. No pertenezco [1995] Panamá (CDH )
      Le daría una buena azotaína a Enericia por embustera, para quitarle esos aires de sabelotodo. ¡Mira que asegurarle que a veces, se encuentra gran gozo entre hombre y mujer! Eso será verdad entre esclavos, en realidad casi animales, pero ella no se acostumbrará nunca.
  2. >azote
    s. f. Corriente repentina e intensa [de aire o de agua].
    Sinónimo: azote
    docs. (1907-2017) 4 ejemplos:
    • 1907 Pz Galdós, B. Tristes destinos [2002] Esp (CDH )
      Tras un silencio de vaga inquietud, en que unos ponían su atención en los conflictos humanos, otros en la tormenta que ya descargaba sobre Madrid azotaina furiosa de viento y lluvia, el armero creyó llegado el caso de las resoluciones urgentes, y lo manifestó así: «Tenemos que preparar tu salida, Santiago, y ello no es cosa que puede dejarse para mañana. Despídete, y echemos a correr».
    • 1916 Anónimo "Chocolate batido" [09-09-1916] Cromos (Bogotá) Co (HD)
      Una llovizna fina, en alas de un viento espasmódico, nos azotaba el rostro y nos penetraba la carne como con agudos estiletes. Don Julio se quedó en su oficina, atendiendo a sus quehaceres. Y nosotros nos desnivelamos por Las Aguas abajo, con nuestra libra de «desengrasado» en el bolsillo de nuestro gabán, cuyo cuello tuvimos que levantar para evitar la azotaina venteada de los páramos.
    • 1946 Gras, M. C. Pintor Gras p. 96 Ar (BD)
      El viaje, distintamente del realizado por Gras en 1827, resulta pródigo en contratiempos. A poco de dejar la villa de Luján, el convoy ha debido soportar durante más de dos días la azotaina de un furioso viento norte, portador de una lluvia copiosa que puso intransitable el camino y determinó la crecida del Arroyo Ramallo, obligando a la tropa a detener su marcha por algunos días. Un pampero helado que sucedió al temporal, puso a prueba la buena salud de los expedicionarios.
    • 2017 Schz-Girón, R. Viento que fue p. 65 Esp (BD)
      Y Atocha, mano a mano con la almohada tal tanta noche, se dejó invadir por una sensación de gratitud hacia el cielo, y como alguna vez, pocas, pero alguna sí, por otra hija de un difuso temor. ¿Y si lo que quema su corazón le hace ver lo que no hay? ¿Y si fuese todo ilusión suya? Antes que Martín llegue a su casa, descargó una azotaina de lluvia que encharcó los alcorques. Cogidas del brazo y protegidas en la bóveda negra del paraguas, le adelantaron dos mujeres.

Diccionario histórico de la lengua española
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