Diccionario histórico de la lengua española

5.ª Entrega (enero de 2018)
Versión del 31/01/2018
Equipo Real Academia Española
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pandorgueo s. (2012-)

pandorgueo

Etim. Derivado de pandorguear y -o.

Con la acepción de 'celebración de la pandorga' se documenta esporádicamente en algunos textos periodísticos que relatan de un modo u otro alguna experiencia o noticia en torno a la fiesta de la pandorga que se festeja en Ciudad Real (España). Así, se registra en el artículo titulado "La Pandorga no es para dormir", de M. Rojo, publicado en la sección de viajes de ABC (Madrid) en agosto de 2012; vuelve a atestiguarse en otro artículo periodístico, "La campa tintorra y calimocha", de M. Valero, publicado en el diario miciudadreal.es (Ciudad Real) en agosto de 2017.

>pandorguear+–o
s. m. Esp: Cent coloq. Celebración de la pandorga.
docs. (2012-2017) 2 ejemplos:
- 2012 Rojo, M. "Pandorga no dormir" [08-08-2012] ABC (Madrid) Esp (HD)
  Me marcho con mi soltería a la Plaza Mayor a buscar un ambiente más veterano. Aquí se encuentra el Ayuntamiento. El lugar no está para plenos. Está perfectamente acondicionado con barras laterales al aire libre y un escenario con conciertos que se prolongan hasta las seis de la mañana. Puestos a desafiar mi senectud, decidí que aún era pronto para retirarse. A ver qué daba de sí el pandorgueo. El sitio que sirve de embudo a los descarriados es la discoteca Miko, que aguanta operativa incluso a plena luz del día.
- 2017 Valero, M. "La campa" [04-08-2017] Mi Ciudad Real (Ciudad Real): miciudadreal.es Esp (HD)
  Lo que más me ha llamado la atención es lo de la Pandorga, que ya sé que hay por ahí entendidos en la materia y analistas sesudos sobre el origen de tal evento apegado a los frutos de la tierra que se le ofrenda a la Madre de Dios, críticos con esa antropología costumbrista y religiosa que sólo sirve para mantener la línea del tiempo viva de vivas marianas y de caspa sobre el hombro social de las multitudes. Pero en el fondo es una fiesta de bacanal colectiva y punto pelota, lo cual debe ser un incordio, en estos tiempos tan correctos y contestatarios que ablentan los días, para las personas abstemias que pueden exigir una pandorga alternativa a base de limonada púber o agua del grifo, pero en plan masa. ¿Qué el agua no atrae a las masas y el pimple discrecional, sí? Pues tenemos un problema. ¿Será de izquierdas empaparse de vinaco oculto tras la masa informe del rebaño humano y de derechas reivindicar una pandorga libre de grados? Conste que no moralizo, y que cada cual puede hacer de su capa un capote siempre y cuando no afecte al espacio público. Y aquí sí que me pondría de parte para zanjar el debate. Los grupos políticos en contacto con el Consejo de la Juventud deberían llegar a un acuerdo tácito y explícito: dejar la campa tintorra y calimocha como los chorros del oro, formando cuadrillas de jóvenes-jóvenas de apoyo a los sufridos limpiadores municipales. Y si no, se suspende el pandorgueo. ¿Qué esto de prohibir es de derechas? Bueno, lo dejo, que me toca corregir la novela.