Diccionario histórico de la lengua española

11.ª Entrega (octubre de 2021)
Versión del 29/10/2021
Equipo Real Academia Española
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tuberculígeno, a adj. (1886-)

tuberculígeno

1. ac. etim.
   adj. Med. Que produce tuberculosis.
   Sinónimos: tuberculífero, a; tuberculinógeno, a; tuberculógeno, a
   docs. (1886-2014) 16 ejemplos:
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   • 1886 Ezquerra Baig, R. Infecciosidad tuberculosis p. 29 Esp (BD)
     Weigert (de Leipzig) participa de la opinion de Ziegler sobre los gérmenes tuberculosos. La infecciosidad de los esputos, dice Weigert, hace que el veneno (?) tuberculoso esté muy difundido: todo el mundo le respira en mayor ó menor cantidad. Hace falta admitir ademas de los gérmenes tuberculígenos una predisposicion para contraer dicha enfermedad, y esta predisposición no es debida — añade — á las modificaciones impresas en los órganos por procesos inflamatorios simples, sino al estado de debilidad del individuo [...].
   • 2014 Puerta Jiménez, I. Medicina de laboratorio en Murcia pp. 108-109 Esp (BD)
     Análisis semántico de la terminología utilizada. Vocabulario. [...] LEPRA: [...] Los bacilos de la lepra (Bacilo de Hansen) se hallan en abundancia en los tejidos leprosos y gran parte son intracelulares. Se parecen mucho a los tuberculígenos por la forma y por ser ácido-resistentes, aunque son un poco más cortos y un poco menos ácido-resistentes. También toman los colores de la anilina más rápidamente que aquellos.

   • 1886 Ezquerra Baig, R. Infecciosidad tuberculosis p. 29 Esp (BD)
     Weigert (de Leipzig) participa de la opinion de Ziegler sobre los gérmenes tuberculosos. La infecciosidad de los esputos, dice Weigert, hace que el veneno (?) tuberculoso esté muy difundido: todo el mundo le respira en mayor ó menor cantidad. Hace falta admitir ademas de los gérmenes tuberculígenos una predisposicion para contraer dicha enfermedad, y esta predisposición no es debida — añade — á las modificaciones impresas en los órganos por procesos inflamatorios simples, sino al estado de debilidad del individuo [...].
   • 1889 Zerolo, T. Climatoterapia tuberculosis [1889] p. 30 Esp (BD)
     PRIMERO. Porque hay esputos de tuberculosos sin bacillus de Koch. SEGUNDO. Porque puede haber bacillus de Koch en esputos y otras secreciones y excreciones de personas sanas, ó que padezcan afecciones no tuberculosas. TERCERO. Porque el mismo Koch confiesa que puede haber tuberculosis sin bacillus. CUARTO. Porque hombres eminentes de la ciencia afirman que el verdadero agente fimatógeno es el micrósporon furfur, contenido en todas las granulaciones tuberculosas y en todos los esputos de los tísicos.QUINTO. Porque otros hombres también ilustres, sostienen que el micro-organismo tuberculígeno está en las zoogleas; y SEXTO. Porque del mismo modo tuberculizan las inyecciones de materia caseosa, pus, mercurio, etc.
   • 1894 Monmeneu Lpz Reynoso, J. Enfermedades infecciosas Madrid p. 198 Esp (BD)
     El objeto de estas prevenciones, no es más que matar el bacilo tuberculígeno y evitar el contagio. Es la profilaxia más racional y sencilla: dada la causa, destruirla; impedir la enfermedad suprimiendo el microbio que la engendra ú oponiéndose á su paso al organismo sano.
   • 1900 Araujo, F. "La cuestión de la tuberculosis" [01-10-1900] La España Moderna (Madrid) Esp (HD)
     Además de estas condiciones desfavorables para los bacilos tuberculígenos y de la defensa que ofrecen la piel y las mucosas, está demostrado que, aun penetrando en nuestro organismo, los bacilos no producen la enfermedad si SON ESCASOS, pues los destruyen los corpúsculos blancos de la sangre que los engloban (fagocitosis), haciéndolos inofensivos.
   • 1918 Anónimo (Dr. Íñigo) "Peritonitis tuberculosa" [01-06-1918] Revista de Sanidad Militar (Madrid) Esp (HD)
     De todos modos, no hay que fiarse demasiado, y tener en cuenta, que si bien de momento la mejoría es admirable, en algunos casos, especialmente cuando no ha sido posible extirpar el foco tuberculígeno, la mejoría se detiene, y el enfermo sufre nuevos brotes: unas veces en zonas peritoneales que se conservaron sanas, otras en órganos distantes: pulmón, pleura, riñon, órganos genitales, meninges, etc., sucumbiendo, finalmente, á lá infección tuberculosa de la que un momento le creímos curado.
   • 1928 Agustín, J. "Sanatorio antituberculoso Ejército" [15-10-1928] Revista de Sanidad Militar (Madrid) Esp (HD)
     Miles y miles de hombres procedentes de todas las regiones y de todos los sectores sociales, son llamados todos los años para formar el Ejército español y son llamados a los veintiún años de edad; época de la vida la más propicia para tuberculizarse, la conturbación moral que lleva consigo el abandonar su hogar, su pueblo, el cambio de ambiente físico y moral, la vida en común, las fatigas propias de la instrucción, el cambio de alimentación, la obligada residencia en las grandes ciudades, centros tuberculígenos, hacen del recluta un ser adecuado para ser infestado por el bacilo de Koch [...].
   • 1946 Cerviá, T. / Pérez, J. "Primeros resultados tuberculina P.P.D." [31-03-1946] Revista Clínica Española (Madrid) Esp (HD)
     Estas diferencias, que como se verá en se­guida, son de la mayor importancia, pueden es­tribar en los siguientes factores: 1.º Empleo de las más diversas cepas bacila­res (humana, bovina, mixta, etc.) y diverso po­der tuberculígeno entre unas y otras cepas. 2.º Diversidad de medios de cultivo empleados: desde el caldo de carne vacuna glicerinado al 5 por 100 hasta la adición de glucosa, fosfato sódico, patata o huevo [...].
   • 1958 Mora Portillo, C. F. Medicina forense, I p. 408 Gu (BD)
     Admitida la efectividad del traumatismo como elemento tuberculígeno accesorio, podemos decir que actúa de varios modos: localizando, revelando, agravando o generalizando la tuberculosis. La localiza cuando en una región traumatizada, sobre todo si es una articulación, aparece una afección tuberculosa.
   • 2007 Reyes Ávila, L. E. Vacunación paratuberculosis ovina pp. 15-16 Esp (BD)
     La estrecha relación de Map con otras especies o subespecies del género Mycobacterium se puso de manifiesto desde el comienzo de su investigación, ya que Johne y Frothingham lo consideraron un bacilo tuberculígeno aviar, relación que se ha comprobado posteriormente al observarse la existencia de reacciones inmunológicas cruzadas (Smythe, 1951; Stanford, 1983; Burrells et al., 1995; Nielsen et al., 2001) y al demostrar experimentalmente que dicho agente puede llegar a producir lesiones tuberculosas en pollos (Van Kruningen et al., 1991).
   • 2014 Puerta Jiménez, I. Medicina de laboratorio en Murcia pp. 108-109 Esp (BD)
     Análisis semántico de la terminología utilizada. Vocabulario. [...] LEPRA: [...] Los bacilos de la lepra (Bacilo de Hansen) se hallan en abundancia en los tejidos leprosos y gran parte son intracelulares. Se parecen mucho a los tuberculígenos por la forma y por ser ácido-resistentes, aunque son un poco más cortos y un poco menos ácido-resistentes. También toman los colores de la anilina más rápidamente que aquellos.

   • 1886 Ezquerra Baig, R. Infecciosidad tuberculosis p. 29 Esp (BD)
     Weigert (de Leipzig) participa de la opinion de Ziegler sobre los gérmenes tuberculosos. La infecciosidad de los esputos, dice Weigert, hace que el veneno (?) tuberculoso esté muy difundido: todo el mundo le respira en mayor ó menor cantidad. Hace falta admitir ademas de los gérmenes tuberculígenos una predisposicion para contraer dicha enfermedad, y esta predisposición no es debida — añade — á las modificaciones impresas en los órganos por procesos inflamatorios simples, sino al estado de debilidad del individuo [...].
   • 1889 Zerolo, T. Climatoterapia tuberculosis [1889] p. 30 Esp (BD)
     PRIMERO. Porque hay esputos de tuberculosos sin bacillus de Koch. SEGUNDO. Porque puede haber bacillus de Koch en esputos y otras secreciones y excreciones de personas sanas, ó que padezcan afecciones no tuberculosas. TERCERO. Porque el mismo Koch confiesa que puede haber tuberculosis sin bacillus. CUARTO. Porque hombres eminentes de la ciencia afirman que el verdadero agente fimatógeno es el micrósporon furfur, contenido en todas las granulaciones tuberculosas y en todos los esputos de los tísicos.QUINTO. Porque otros hombres también ilustres, sostienen que el micro-organismo tuberculígeno está en las zoogleas; y SEXTO. Porque del mismo modo tuberculizan las inyecciones de materia caseosa, pus, mercurio, etc.
   • 1894 Monmeneu Lpz Reynoso, J. Enfermedades infecciosas Madrid p. 198 Esp (BD)
     El objeto de estas prevenciones, no es más que matar el bacilo tuberculígeno y evitar el contagio. Es la profilaxia más racional y sencilla: dada la causa, destruirla; impedir la enfermedad suprimiendo el microbio que la engendra ú oponiéndose á su paso al organismo sano.
   • 1900 Araujo, F. "La cuestión de la tuberculosis" [01-10-1900] La España Moderna (Madrid) Esp (HD)
     Además de estas condiciones desfavorables para los bacilos tuberculígenos y de la defensa que ofrecen la piel y las mucosas, está demostrado que, aun penetrando en nuestro organismo, los bacilos no producen la enfermedad si SON ESCASOS, pues los destruyen los corpúsculos blancos de la sangre que los engloban (fagocitosis), haciéndolos inofensivos.
   • 1906 Anónimo "Trad Transmisibilidad tuberculosis, Arloing" [30-11-1906] Revista Balear de Ciencias Médicas (Palma de Mallorca) Esp (HD)
     Las modificaciones son más ó menos profundas, y de ellas resulta que tal bacilo, desarrollado en una especie animal dada, puede tuberculizar, sin embargo, á otra especie, mientras que otro bacilo, en iguales condiciones, parecerá desprovisto de poder tuberculígeno. En suma, existen numerosas variedades de bacilos tuberculosos, pudiendo pasar, por transiciones convenientemente dirigidas, del bacilo de los mamíferos y del hombre al de las aves y á los de los peces, reptiles y batracios.
   • 1911 Durán Trinchería, J. "Orientaciones antituberculosas" [01-04-1911] Revista de Ciencias Médicas de Barcelona (Barcelona) Esp (HD)
     Pero han bajado otra vez las aguas de la avenida panspermista, y si queda en su fondo inconmovible la doctrina bacilar de la tuberculosis, la destrucción del bacilo ha perdido gran parte de su importancia profiláctica al quedar evidenciado que los gérmenes tuberculígenos se hallan de tal modo esparcidos en nuestro ambiente, que puede decirse que conviven con nosotros en todo tiempo y lugar.
   • 1918 Anónimo (Dr. Íñigo) "Peritonitis tuberculosa" [01-06-1918] Revista de Sanidad Militar (Madrid) Esp (HD)
     De todos modos, no hay que fiarse demasiado, y tener en cuenta, que si bien de momento la mejoría es admirable, en algunos casos, especialmente cuando no ha sido posible extirpar el foco tuberculígeno, la mejoría se detiene, y el enfermo sufre nuevos brotes: unas veces en zonas peritoneales que se conservaron sanas, otras en órganos distantes: pulmón, pleura, riñon, órganos genitales, meninges, etc., sucumbiendo, finalmente, á lá infección tuberculosa de la que un momento le creímos curado.
   • 1922 Blanco Turiño, S. "Bacteriólogos españoles" [20-05-1922] El Sol (Madrid) Esp (HD)
     El asunto suscitado por el doctor Verdes Montenegro en la Hoja de Biología y Medicina, de EL SOL, sobre los estudios de Ferrán en las mutaciones de los bacilos tuberculígenos y la aplicación terapéutica de la vacuna antialfa deben ser discutidos.
   • 1928 Agustín, J. "Sanatorio antituberculoso Ejército" [15-10-1928] Revista de Sanidad Militar (Madrid) Esp (HD)
     Miles y miles de hombres procedentes de todas las regiones y de todos los sectores sociales, son llamados todos los años para formar el Ejército español y son llamados a los veintiún años de edad; época de la vida la más propicia para tuberculizarse, la conturbación moral que lleva consigo el abandonar su hogar, su pueblo, el cambio de ambiente físico y moral, la vida en común, las fatigas propias de la instrucción, el cambio de alimentación, la obligada residencia en las grandes ciudades, centros tuberculígenos, hacen del recluta un ser adecuado para ser infestado por el bacilo de Koch [...].
   • 1933 Anónimo "Trad Tuberculosis, Calmette" [01-11-1933] España Médica (Madrid) Esp (HD)
     Hemos conocido muchos establos en los que el 100 por 100 de las vacas lecheras reaccionaban a la tuberculosis. Porque estas vacas, lo mismo que los monos de las bellas experiencias de Wubert en Kindia, que se han hecho tuberculosos a los seis meses de contacto en los mismos locales con monos bacilíferos, no han bebido jamás alcohol. Es, pues, inexacto atribuir al alcoholismo las nocividades específicamente tuberculígenas.
   • 1940 Gamboa Echandía, R. / Pedraza, H. Higiene y alimentación niño p. 38 Co (BD)
     Para hacer posible la vacunación por medio de bacilos vivos, Calmette y Guerin, después de numerosos experimentos, lograron cultivar un bacilo absolutamente desprovisto de toda propiedad tuberculígena. Estos cultivos fueron hechos 230 veces sucesivas, en papa con bilis de buey glicerinada al 5%, en el término de trece años.
   • 1946 Cerviá, T. / Pérez, J. "Primeros resultados tuberculina P.P.D." [31-03-1946] Revista Clínica Española (Madrid) Esp (HD)
     Estas diferencias, que como se verá en se­guida, son de la mayor importancia, pueden es­tribar en los siguientes factores: 1.º Empleo de las más diversas cepas bacila­res (humana, bovina, mixta, etc.) y diverso po­der tuberculígeno entre unas y otras cepas. 2.º Diversidad de medios de cultivo empleados: desde el caldo de carne vacuna glicerinado al 5 por 100 hasta la adición de glucosa, fosfato sódico, patata o huevo [...].
   • 1953 VV. AA. DiccEnciclop UTEHA [01-01-1953] (FG)
     tuberculígeno, na. adj. Med. Que origina tuberculosis.
   • 1958 Mora Portillo, C. F. Medicina forense, I p. 408 Gu (BD)
     Admitida la efectividad del traumatismo como elemento tuberculígeno accesorio, podemos decir que actúa de varios modos: localizando, revelando, agravando o generalizando la tuberculosis. La localiza cuando en una región traumatizada, sobre todo si es una articulación, aparece una afección tuberculosa.
   • 2007 Reyes Ávila, L. E. Vacunación paratuberculosis ovina pp. 15-16 Esp (BD)
     La estrecha relación de Map con otras especies o subespecies del género Mycobacterium se puso de manifiesto desde el comienzo de su investigación, ya que Johne y Frothingham lo consideraron un bacilo tuberculígeno aviar, relación que se ha comprobado posteriormente al observarse la existencia de reacciones inmunológicas cruzadas (Smythe, 1951; Stanford, 1983; Burrells et al., 1995; Nielsen et al., 2001) y al demostrar experimentalmente que dicho agente puede llegar a producir lesiones tuberculosas en pollos (Van Kruningen et al., 1991).
   • 2014 Puerta Jiménez, I. Medicina de laboratorio en Murcia pp. 108-109 Esp (BD)
     Análisis semántico de la terminología utilizada. Vocabulario. [...] LEPRA: [...] Los bacilos de la lepra (Bacilo de Hansen) se hallan en abundancia en los tejidos leprosos y gran parte son intracelulares. Se parecen mucho a los tuberculígenos por la forma y por ser ácido-resistentes, aunque son un poco más cortos y un poco menos ácido-resistentes. También toman los colores de la anilina más rápidamente que aquellos.

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