
Red Panhispánica de Lenguaje Claro
El trabajo de la RAE para promover el lenguaje claro
El trabajo de la RAE
La Real Academia Española tiene una larga trayectoria en materia de claridad lingüística que se ha desarrollado en dos líneas estrechamente relacionadas:
I. Por una parte la RAE ha procurado siempre conciliar la calidad filológica de las obras lingüísticas y literarias que edita con su accesibilidad para todos los hispanohablantes, con independencia de cuál sea su grado de formación.
A este principio obedecieron los sucesivos epítomes de gramáticas y ortografías o las ediciones populares de grandes clásicos. La Academia adoptó, por tanto, el papel de divulgadora, esto es, la «que publica a todos cuanto sabe» —según el Diccionario de autoridades, su primer repertorio—, a lo que se puede hoy añadir «de forma clara y sencilla».
Durante los últimos años, la RAE, en colaboración con la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE), ha multiplicado y diversificado sus obras, elaboradas ahora desde una perspectiva panhispánica. Uno de sus primeros proyectos fue la elaboración de un libro de estilo, anunciada en el II Congreso Internacional de la Lengua Española (2001), que vio la luz en 2018 con el título de Libro de estilo de la lengua española según la norma panhispánica, una vez consensuados con el nuevo enfoque panhispánicos los códigos básicos de la lengua: el Diccionario, la Gramática y la Ortografía, a los que se añadió el Diccionario panhispánico de dudas.
Esta nueva dimensión ensanchó el campo de acción y supuso la apertura de nuevos horizontes, geográficos y humanos, para la tarea académica de poner al alcance de todos los hablantes el conocimiento de la lengua española. El XVI Congreso de la Asociación de Academias de la Lengua Española (Sevilla, 2019) aprobó un ambicioso programa que incluye, como parte esencial, una nueva iniciativa con el propósito de ampliar esa línea de trabajo divulgativa y de ofrecer un servicio renovado a la comunidad hispanohablante.
II. En paralelo, la RAE ha prestado históricamente una atención relevante al lenguaje jurídico.
Consciente del valor de la contribución del lenguaje jurídico a la unidad de la lengua española, desde 2014 la RAE ha intensificado su trabajo en este campo para convertirlo en una línea primordial de su labor, no solo lingüística, sino institucional en el marco de la política panhispánica. Para ello, ha multiplicado su actividad en cinco direcciones:
- La construcción de obras académicas de especialidad en torno a la lengua del derecho. La RAE ha acometido tres proyectos vinculados al lenguaje del derecho: el Diccionario del español jurídico (DEJ) —2016—, el Diccionario panhispánico del español jurídico (DPEJ) —edición impresa de 2017 y digital de 2020, actualizada en 2022 y 2023— y el Libro de estilo de la Justicia (LEJ) —2017—, que se inscriben en el marco de un convenio suscrito con el Consejo General del Poder Judicial de España (CGPJ) a finales de 2014. Las tres obras se proponen promover la claridad y la seguridad del lenguaje jurídico, y fueron refrendadas por la Cumbre Judicial Iberoamericana. El anexo II detalla el planteamiento de su concepción. En 2021 la edición digital del DPEJ recibió casi 30 millones de consultas (en concreto, 28 680 375), con un promedio mensual que supera los 2,5 millones. En 2022 alcanzó los 3,2 millones mensuales.
- La suscripción de acuerdos con las instituciones iberoamericanas responsables de la publicación y actualización de la legislación y la jurisprudencia nacionales para vincular el contenido del DPEJ a las normas legales y sentencias. Estas instituciones impulsan también diversas iniciativas vinculadas al lenguaje claro:
- Consejo General del Poder Judicial de España para la interconexión de la jurisprudencia (2017)
- Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la República Argentina y el Consejo de la Magistratura del Poder Judicial de la República Argentina (2018)
- Consejo Superior de la Judicatura de Colombia (2018)
- Agencia Estatal Boletín Oficial del Estado de España (AEBOE) (2019)
- Biblioteca del Congreso Nacional de Chile (2019)
- Poder Judicial de Costa Rica (2020)
- IMPO-Centro de Información Oficial de Uruguay (2021)
- Ministerio de Justicia de la República de Cuba (2022)
- Ministerio de Justicia y Derechos Humanos de la República del Perú (2022)
- Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ) de la República Dominicana, unidad académica del Poder Judicial dominicano, a través de la cual se canaliza la colaboración de la Consultoría Jurídica del Poder Ejecutivo, que es el organismo responsable de la publicación de la Gaceta Oficial (en proceso)
- La creación de repositorios legislativos en los países iberoamericanos que carecen de ellos. En el marco del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA) y con el apoyo del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación del Gobierno de España y de la Secretaría General Iberoamericana (SEGIB), la RAE, respaldada por la ASALE, impulsa un proyecto de cooperación internacional destinado a promover la creación de bases de datos legislativas homologadas e interconectadas en los países del área (Guatemala, Costa Rica, Nicaragua, Honduras, El Salvador, Panamá y República Dominicana), incluida Cuba, que carecen de repositorios de esta naturaleza.
- Establecimiento de las bases para la creación de una red panhispánica de lenguaje claro como iniciativa necesaria para coordinar todos los esfuerzos, hasta ahora dispares e inconexos, realizados por distintas entidades públicas y privadas en este ámbito.
Un primer paso fue respaldar la creación de la Cátedra Latinoamericana de Lenguaje Jurídico Claro, que se constituyó oficialmente en el marco del VIII Congreso Internacional de la Lengua Española (Córdoba, Argentina, marzo de 2019).
En esta línea, la RAE incorporó por primera vez el lenguaje jurídico claro al programa académico del VIII CILE, dándole oficialmente carta de naturaleza en el foro internacional más relevante en torno a la lengua española.
- La creación en la RAE de una Unidad Especializada en Español Jurídico que permita el adecuado desarrollo de todas las iniciativas y, a la vez, preste servicio lingüístico a los operadores jurídicos.