sanatero

Se documenta por primera vez, como adjetivo y con la acepción '[persona] que habla mucho y de cosas inútiles e insustanciales', en 1991, en el repertorio de E. A. Ávila titulado  Cómo habla del santiagueño ; desde entonces se registra con cierta frecuencia, fundamentalmente en artículos de prensa de Argentina y Uruguay. Como sustantivo (con el valor 'persona que habla mucho y de cosas inútiles e insustanciales') se atestigua en 1994, en el  Registro del habla de los argentinos  de la Academia Argentina de las Letras. Como 'persona que suele decir sanatas' (es decir, como sinónimo de mentiroso ) se registra en 2005, en un artículo de E. Lynch publicado en Las Nubes (Barcelona) .

En el Diccionario argentino de insultos, injurias e improperios de Marchetti (2014) se incluye la acepción, referida a persona, 'que intenta convencer a sus interlocutores con palabras vacías de sentido lógico y datos inconexos'.