caña

Diccionario histórico de la lengua española (1933-1936)

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caña

 

caña. V. aguardiente de caña.

1. ~ de azúcar, ~ de açúcar. loc. sust. Planta gramínea, originaria de la India, con el tallo leñoso, de unos dos metros de altura, hojas largas, lampiñas, y flores purpúreas en panoja piramidal, cuyo tallo está lleno de un tejido esponjoso y dulce, del que se extrae azúcar.

                28-i-1492 (1981) Registro del Sello i (133, p.65): [...] a propósito de 30.000 maravedís y ciertas cañas de azúcar.

                26-viii-1507 (1974) Protocolo de J. Ruiz de Berlanga (107, p.91): [...] 8 fanegadas de tierra de regadío, en el valle de Taganana, para plantar caña de azúcar. 15-ii-1524 (2003) Sánchez Valerón/Martín Santiago Génesis (p.200): [...] arrienda [...] un ingenio para moler caña de azúcar en la Vega de Aguatona [...]. 16-xi-1525 (2003) Ibídem (p.207): Martín Alemán, vecino de Gran Canaria, arrienda a Alonso de Matos, de igual vecindad, la mitad de un ingenio de moler caña de azúcar, que él tiene en la Vega de Aguatona [...]. 2-iv-1527 (1990) Protocolos de B.Justiniano i (1156, p.399): Elvira Díaz, vecina, mujer de Pedro de Lugo, difunto, arrienda a Doménigo Rizo, mercader genovés, estante presente, los bienes siguientes: [...] la mitad del ingenio de moler cañas de azúcar con casas de calderas, de purgar, casas de morada, casas de mieses [...]. 28-vi-1527 (1986) Acuerdos del Cabildo de Tf v (189, p.181): [...] qualquier persona que tomare caña de açúcar sin voluntad de su dueño pague de pena por cada caña medio real [...]. 1531 (1974) Ordenanzas de GC (p.115): Primeramente que ningund cañabero que tomare a curar cañas de açúcar pueda tener ny tomar más de dos suertes [...].

                1694 (1993) Marín de Cubas Historia (lib. 2º, cap. 11, p.169): Plantó caña de azúcar en el valle de Guiniguada é hizo el primer ingenio Pedro de Vera.

¨Solo nos ha interesado reunir ejemplos del uso inicial de la locución caña de azúcar, pues pronto fue la denominación más universal de todas las empleadas, como son cañamiel, caña dulce o cañaduz, y ha de atribuirse a los maestros azucareros portugueses el que en la documentación canaria se generalice precisamente caña de azúcar cana de açúcar, con mucha frecuencia simplificada, como era lo lógico, en caña, que se convierte así, por antonomasia, en el nombre habitual, dentro del léxico azucarero. En Madeira, canas se aplica ya a la caña de la que se obtiene el azúcar desde 1477 y canas de acucar aparece así escrito en 1506, según Nunes Nunes (pp.366-367).

2. ~ de hoja. V. hoja.

3. ~ de planta. V. planta.

4. ~ de soca. V. zoca.

5. ~ leja. V. cañaheja.

6. ~ limón. Planta gramínea cultivada, de hojas cortantes y olor a limón, usada como sedativo e hipotensiva (Cymbopogon citratus).

                1955 Jiménez Mitos (p.33): Como tonificador y digestivo: utilizan la manzanilla, hierba-Luisa, pasote, torongil sidrado y caña limón.

¨El nombre se debe a que esta gramínea tiene un «agradable e intenso sabor y olor a limón», según Ardévol/González (p.30).

7. ~ rueca. (Del port. mad. cana de roca). Caña común, planta gramínea de tallo leñoso, hueco y flexible.

                19-iv-1605 Protocolos de Go (p.332): Juan Ramos Bermúdez, vecino del valle de San Pedro de Ermigua, da a Lorenzo Hernández, oficial de zapatero, vecino también del valle, unas tierras de pan sembrar al tercio en este valle, en la cabezada arriba de su hacienda, desde las cañas ruecas a dar a la acequia alta [...]. 27-ii-1630 (1996) Colec. Documental de Go (32, p.98): [...] y la han de partir con sus entradas y salidas con la tierra, parral, árboles y lagar que está debajo y las cañas ruecas que le han de tocar. 19-ix-1630 (1996) Ibídem (32, p.105): [...] dividiendo las parras por pies y las cañas ruecas que están al lado de la acequia las partan a mitad al tiempo que se cojan.

                1734 Hoyo Carta de Lisboa (p.82): Abrieron la difunta, y en la barriga le hallaron un pedazo de caña, de estas que vulgarmente llamamos de rueca, de media tercia de largo y de la tercera parte del grueso.

                1945 (1985) Pérez Vidal san Juan (p.259): Para que nazca y crezca con fuerza el pelo se recomienda arrancarse unos cuantos el día de San Juan y colocarlos con las puntas hacia arriba dentro de un canuto de una caña rueca que esté plantada. 1946 Pérez Vidal Edición de Lugo (p.167): La «valencia» consiste en una caña hueca (en La Palma, caña rueca, del port. «canna (sic) de roca») a la cual se le han quitado todos los tabiques interiores [...]. 1946 Régulo Pérez Cuestionario (p.37): Caña (clases: caña rueca, caña dulse, etc.).

¨La razón por la que el étimo portugués se ha transformado está en que las ruecas solían confeccionarse con esta caña.

8. ~ santa. caña limón.

                1928 Terry Fuego (p.40): También observaba Paquito a las mujeres que traían hierbas del monte de las Mercedes [...]. El torongil, la caña santa, el tocilado, la hierba cumbre, el pazote, la ruda, la tostonera, las varillas de treinta nudos, la estrella de mar. Ibídem (pp.40-41): El torongil para curar males del corazón; la caña santa para amortiguar dolores de vientre, hacer cesar las indigestiones y poner el estómago en buen uso. 8-v-1929 Jable (El Progreso, p.1): Y aunque la iglesia tiene bien cerca para bautizarse de nuevo, si se fractura el bautismo, el dolor, las medicinas y los días de cama no se los evita ni con sifón o agua de caña santa. 1957 (2001) Navarro Correa Habla Valle Gran Rey (p.44): caña santa.- Cierta hierba cuyas hojas, parecidas a las de la caña, son de olor agradable y se emplean para tisanas.

¨Es muy probable que el nombre le venga dado por sus cualidades curativas. Ejemplos más recientes, que prueban la continuidad de su uso, se tienen en el decan i.

9. arrancar alguien la ~. fr. Marcharse.

                c1860 Pérez Galdós Voces (p.98): Arrancar la caña. Marcharse. Huir. a1887 (1993) Maffiotte Glosario (p.36): Arrancar la caña. Fr. que significa echar á correr. Ibídem (p.89): Cuentan de un «roncote» que al llevar á un hijo suyo á la iglesia para que lo bautizaran, se enteró de que era necesario pagar alguna cosa, lo que le hizo exclamar: «Mi jijo, quéate inglés», y sin esperar á que cristianaran al niño, «arrancó la caña pal risco». 1899 Pícar Tiempos mejores (p.82): Nos traia á turrecasinchado y si arrancó la caña fue porque lo chiringamos y cogió chilla: entonces nosotros privados porque caminó, nos embullamos y atoreándole le pusimos como un chanco.

                1905 Pícar Ageneré (p.74): Adiós tiempo impetuoso, al arrancar la caña te llevaste consigo los nacimientos anacrónicos con sus hermandades de hopas rojas [...]. Ibídem (p.97): Arrancar la caña. Marcharse. 1932 Millares Cómo hablan los canarios (p.12): Arrancar la caña. Frase enérgica y pintoresca que vale tanto como marcharse definitivamente y violentamente de alguna parte por impulso propio u obligado por las circunstancias. Es también fórmula para despedir a alguien de mala manera y con amenazas: ¡Arranca la caña! 1950 (2005) Rosario Viaje (p.46): [...] creyendo sin duda que detrás de cada matorral había un soldado armado hasta los dientes y decididamente dispuestos a terminar con toda Holanda, «arrancaron la caña», como vulgarmente se dice [...]. 1955-56 (1977) Guerra Memorias (p.33): Arranque la caña, hermano. O séase, pique el tole. Mejor hoy que mañana, ¿oyó?

¨Según Guerra Navarro (s.v. arrancar), «La popular frase puede tener un origen folklórico. Los romeros de lejos solían pasar por las cumbres empuñando una caña tierna o seca, una cañaleta o una caña dulce, blando, pero ilusionado valimiento del duro peregrinaje. Los de la caña dulce iban y venían a la Virgen jinamera, según se empieza a correr el camino del Sur. Cuando acababan las promesas y ya estaba bien de jolgorio, siempre habría un jefe de cuadrilla, menos animoso y armado de un gordo reloj, que allá cuando le parecía, diría de retornar. Y lo diría así: "¡Arrancando la caña!". Con lo que cada cual echaría mano de nuevo a su elemental báculo y saldría al camino, de vuelta».

 

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