bañador

Diccionario histórico de la lengua española (2013- )

También en esta página: DH (1933-1936)
bañador, a s., adj. (1247-)
bañador, bannador, baynnador, banador, vannador, vañador
Etim. Voz tomada del latín balneātor, is 'persona que tiene un establecimiento de baño', y esta, a su vez, de balneum, 'espacio o establecimiento para el baño' (véase OLD, s. v.).

Se documenta por primera vez, en la acepción 'hombre que tiene un establecimiento de baño', en 1247, en los  Fueros de Aragón (BNM 458) , como  bannador . Hacia 1250 se atestigua en el  Vidal Mayor , como  baynnador , mientras que como  banador  se registra en el  Fuero de Cáceres  (c1234-1275), y como  bañador  no se documenta en uso léxico hasta 1745, en las  Cartas Eruditas  de B. J. Feijoo. Se consigna en los diccionarios bilingües de Nebrija (1492 y 1495), Percival (1591), Oudin (1607) y Sobrino (1705), en todos los casos bajo el lema  bañador . Con el valor 'persona que asiste a otra durante el baño' se documenta por primera vez hacia 1253, en el  Sendebar , con la variante  bañador  y, más frecuentemente, con la de  vañador . Es una voz que, si bien se atestigua escasamente, permanece en la lengua durante siglos, aunque las características de dicha ocupación varían con el tiempo, y ya en el siglo XIX se documenta mayoritariamente en textos que describen costumbres orientalistas (así en las  Escenas de 1835  de R. Mesonero Romanos en 1835, o en la  Traducción de Viage a Oriente , de E. Ochoa, en 1846), mientras que en el siglo XXI hace referencia a una  bañadora  que "bañaba personas a domicilio" (en  Amigas mías , de Á. Pradelli, en 2002). Se consigna en el diccionario académico desde 1770, en la segunda edición del Diccionario de  Autoridades . Como adjetivo ('que baña') se documenta en 1852, en El talento bajo todos sus aspectos y relaciones, de J. M. Berriozabal, como lluvia bañadora de los árboles. También como adjetivo, pero en donde 'que baña' se refiere a cubrir algo con una capa de otra sustancia, se atestigua en 2014, en una receta de castañas bañadas en chocolate, publicada en El Heraldo de Aragón (Zaragoza), si bien el adjetivo se consigna ya lexicográficamente desde el DRAE-1899. En 1869 se documenta la acepción 'persona que se baña en un lugar público', en la novela  Teresa Limeña  de S. Acosta Samper. Se atestigua también en dos testimonios de prensa española peninsular, y se consigna en los diccionarios de Alemany Bolufer de 1917, en el DMILE -1927 y en el  Diccionario de americanismos  de Santamaría de 1942; en los tres casos, con la marca diatópica de ecuatorianismo.

Finalmente, se consignan tres acepciones lexicográficas de carácter dialectal y restringido. En el Diccionario de guatemaltequismos de Sandoval (1941) se recoge, como adjetivo, aplicado a personas o animales que son 'muy aficionados a bañarse o a tomar baños'. En el Diccionario del habla nicaragüense de Valle (1948) se consignan dos acepciones: 'individuo experto y valeroso acostumbrado a vadear ríos caudalosos o crecidos' y 'nadadores que sacan el pescado de las pozas cuando lo matan con explosivos'.

Notas filológicas

Se atestigua banador en la Respuesta de Cuenca en la que se expone, punto por punto, las rectificaciones de sus gremios al primer proyecto de Ordenanzas Generales de 1495 ("A la déçima terçia, que fabla çerca del batanar de los pannos, que es buena e se deve guardar commo en ella se contiene, e más se deve haser que ninguno non sea batanador syn que primeramente venga a jurar en la Casa de la Veeduría que eche a los pannos la tierra de mangán e melesynas que sus duennos dieren para sus pannos, e que dé fianças para lo ropa que dannare, e sy de otra guysa usare de banador, incurra en cierta pena", en el Archivo General de Simancas (AGS), Diversos de Castilla, leg. 1, f. 43v-46v, según la edición de Paulino Iradiel Murugarren en el libro Evolución de la industria textil castellana en los siglos XIII-XVI, Salamanca, 1974, pp. 373-380 ). Comprobada la lectura del manuscrito, consideramos que si bien esta es correcta, se debe a un error del copista, pues el sentido del texto nos indica que la forma que debería figurar es batanador, no banador.

Vid. también bañador (DH 1933-1936). 

    Acepción en desuso
  1. ac. etim.
    s. m. Hombre que tiene un establecimiento de baño.
  2. s. m. y f. Persona que asiste a otra durante el baño.
  3. Acepción en desuso
  4. adj. Que baña. ⇨ Dicho del agua: Humedecer, regar o...
  5. s. m. y f. Persona que se baña en un lugar público.
  6. adj. Que baña. ⇨ Cubrir algo con una capa de...
  7. Acepción lexicográfica
  8. adj. Gu "Dícese de las personas o animales muy aficionados a bañarse o a tomar baños" (Sandoval, DiccGuatemaltequismos-1941).
  9. Acepción lexicográfica
  10. s. m. y f. Ni "Nadadores que sacan el pescado de las pozas cuando lo matan con explosivos" (Valle, DiccNicaragüense-1948).
  11. Acepción lexicográfica
  12. s. m. y f. Ni "Se llama al individuo experto y valeroso acostumbrado a vadear ríos caudalosos o crecidos" (Valle, DiccNicaragüense-1948).
bañador s. (1770-)
bañador, bañadorcito
Etim. Derivado de bañar y -dor.

Se documenta por primera vez, en la acepción 'recipiente donde se baña algo, y en particular, velas', en 1770, en el Diccionario de Autoridades, en el que se define como "especie de caxon de que se sirven los cereros para la fábrica de las velas y en que se dan los diferentes baños con que se forman". De 1777 es su primera documentación léxica, en la Traducción de Arte de cerero, de H. L. Duhamel du Monceau, por M. F. Suárez y Núñez, en la que la voz figura en cursiva. En 1847 se documenta por primera vez con el significado 'espacio artificial de aguas destinadas al baño', en un anuncio publicado en El Tiempo de Madrid, en el que el término se hace equivaler a pozos. En la acepción 'recipiente donde se lava algo' se atestigua en 2009, en la novela El abrigo negro, de S. Anze, y se consigna en el Diccionario de americanismos de la ASALE con marca de uso correspondiente a Bolivia. Con el valor 'recipiente donde se lava el cuerpo o parte de él' se consigna también en el mismo diccionario, y se documenta ya en 1847, en el Boletín de Medicina, Cirugía y Farmacia (Madrid), en relación con los baños de asiento, como en otro testimonio, unos años más tarde, en El Pensamiento Español (Madrid) de 1863; si bien la voz también puede referirse a recipientes de mayores dimensiones, semejantes a una bañera, como en un anuncio de 1856 del Diario Oficial de Avisos de Madrid

En la acepción 'traje de baño, especialmente el de hombre y el de una sola pieza para mujer' se documenta desde 1875, en El Folletín (Correo de Andalucía) de Málaga, en la descripción de unos cuadros costumbristas que pretenden reproducir el lenguaje oral. Voz de amplia difusión en todo el siglo XX y hasta la actualidad, se usa tanto para designar prendas de una sola pieza para mujer y para hombre (por ejemplo, en una columna de Carmen de Burgos, en la revista madrileña Nuevo Mundo , en 1911, para el bañador femenino; o en 1990, en Cómo ser mujer y no morir en el intento , de C. Rico Godoy, para el masculino), como para referirse a cualquier traje de baño de una o dos piezas (por ejemplo, en La otra orilla de la droga , de J. L. Tomás García, en 1985; o en El cruce de la bahía de Guánica , en 1989). Se consigna por primera vez en el DRAE de 1884 como "traje para bañarse". 

  1. s. m. Recipiente donde se baña algo, y en particular, velas.
  2. Acepción en desuso
  3. s. m. Espacio artificial de aguas destinadas a baños terapéuticos.
  4. s. m. Recipiente donde se lava algo.
      Acepción en desuso
    1. s. m. Recipiente donde se lava el cuerpo o parte de él.
  5. s. m. Traje de baño, especialmente el de hombre y el de una sola pieza para mujer.
bañador2 s. (1880)
bañador
Etim. Calco del francés baigneuse, voz atestiguada en esta lengua al menos desde 1824 como 'sombrero de pliegues' (véase TLF, s. v. baigneur, euse).

Se documenta únicamente, con la acepción 'sombrero para mujer', en 1880, en  La Guirnalda (Madrid) , en un uso metalingüístico en el que se alude a un tipo de sombreros de gran tamaño que reciben el nombre de "bañadores",  "los más en boga" en aquel momento. Este texto guarda un paralelismo absoluto con otro publicado también el 20 de julio de 1880 en la sección "Revue des modes" del Journal de Roubaix: Moniteur politique, industriel et comercial du Nord (p. 3: "Quant aux chapeaux les plus en vogue en ce momento sont les grandes baigneuses de paille d'Italie. Les garnitures blances, en batiste de soie ou en dentelle, sont celles qui ont le plus d'élégance et de distinction").

    Acepción en desuso
  1. s. m. Sombrero para mujer.
bañador3 s. (2006-)
bañador
Etim. Calco del inglés [wall] washer, voz atestiguada en esta lengua al menos desde 1966 como 'sistema de iluminación' y esta, a su vez, de wall y washer (OED, s. v.).

Se documenta por primera vez, en la acepción 'sistema de iluminación diseñado para proyectar luz uniforme sobre paredes en estancias grandes', en 2003, en la publicación especializada Detail ( Bilbao). Se atestigua en textos especializados en iluminación y tiene una difusión escasa, similar a la de su sinónimo bañadora.

  1. ac. etim.
    s. m. Electr. Sistema de iluminación diseñado para proyectar luz uniforme sobre paredes en estancias grandes.
    1. s. Frecuentemente, con el complemento de pared.

Diccionario histórico de la lengua española (1933-1936)

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