singuango

singuango. V. zanguango.

Diccionario Histórico del Español de Canarias © Todos los derechos reservados

ISBN 978-84-88366-95-5 (o.c.)978-84-88366-93-1 (v.1) 978-84-88366-94-8 (v.2)

zanguango, ga, chinguango, sanguango, singuango. adj. Dicho de una persona: Boba o atontada. U.t.c.s. y c. insulto.

                s.xvii (1993) González Yanes Viejos apodos (p.335): Juan Domingo, que dicen Chinguango (La Laguna).

                8-ix-1848 Jable (El Eco de la Juventud, p.38): Ve una trajedia?/ rie el zanguango;/ viene el sainete?/ ya está llorando. (J.M.V.). 25-viii-1869 Jable (El Eco del Comercio, p.4): El Eterno se acercó al pretil de la azotea, miró con sorna á los dos zanguangos, meneó la cabeza, y se retiró á su jaula, diciendo: ─¡El Padre nunca bajó! a1887 (1993) Maffiotte Glosario (p.115): Singuango (Zanguango). Individuo para poco, pazguato. 18-iii-1892 Jable (Diario de Tenerife, p.3): Y para consolar al triste (que suele ser un zanguango muy alegre) le regalan la alegría del marido y de las hijas. 1898 Millares Nuestra Señora (p.63): ─Aquí la tienes, aquí tienes a tu Gertrudis, bobo. ¡Ay qué bobo, qué inocente, qué singuango!

                17-xii-1910 Jable (La Región Canaria, p.1): ¿Y á dónde me deja V. el zanguango de Serrano?... 1924 Millares Léxico de GC (p.163): Singuango. Vocablo de configuración americana. Un singuango es un pobre de espíritu, un inocente, un bobalicón. 1926 Millares Canariadas (p.121): Maravillaba pensar que aquel singuango fuese hermano de los listísimos y despejados vástagos de la aprovechada estirpe de los Pérez-Porriño [...]. 24-iii-1933 Millares Maestro Canino: Carrizo. ¡Qué plomo sos! Vete pa tu casa. ¿No te he dicho ya que te han engañado, singuango? a1937 (2005) Hernández de las Casas Voces de LP (p.138): Sanguango, sanaso. Atontado. Ibídem (p.138): Singuango. Bobalicón. 1941 (2007) Doreste Vino tintillo (p.111): Yo creía que en esta casa se habían convertido todos en unos singuangos. 1-v-1948 Jáimez Mojo: Manolito, que por su timidez resultaba un poco singuango, no pudo competir con el Chesne, y perdió la partida. 1957 Nácher Guanche (p.15): Ahora veremos qué se le antoja a este sanguango. 13-iii-1958 Jable (Diario de Las Palmas, p.3): Su marido, Don Antonio de Orleáns, que tenía una gran percha, pareció no obstante algo «singuango», aunque como decimos, nadie le discutió su gallarda apostura. 26-x-1960 (1976) Guerra Cuentos iii (p.84): Fleitas, que era algo sanguango, se trabó en un medio aparte con Monagas.

¨En el drae-01 se encuentra zanguango con una acepción próxima, marcada como coloquial: «Indolente, embrutecido por la pereza». Alcalá Venceslada la define, en cambio, con el rasgo de 'bobo', con que se emplea en las islas: «persona joven bobalicona». El damer registra la palabra con el significado de «Persona tonta» en Argentina, Chile (poco usada), Cuba y Uruguay. La variante sanguango la recoge el corde únicamente en seis textos canarios, cinco de Enrique Nácher y uno de Pancho Guerra.

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ISBN 978-84-88366-95-5 (o.c.)978-84-88366-93-1 (v.1) 978-84-88366-94-8 (v.2)