Sintaxis

30 El adverbio y el grupo adverbial

30.14 El grupo adverbial

30.14a Los adverbios son núcleos sintácticos que pueden dar lugar a grupos adverbiales, y así incluir modificadores y complementos. Según esto, el segmento subrayado en Había llegado un poco antes de las cuatro es un grupo adverbial. El cuantificador de grado un poco modifica al segmento antes de las cuatro, que constituye a su vez un grupo adverbial incluido en el primero. Está formado por el adverbio antes y su complemento de las cuatro. Como se explicó en el § 30.6i, el adverbio antes sitúa el evento al que modifica en un punto temporal anterior al que expresa su complemento. La misma pauta corresponde a después, luego, previamente, anteriormente y otros adverbios temporales, si bien no todos admiten cuantificadores de grado. Se subrayan los grupos adverbiales completos en los siguientes ejemplos:

Pero ellos terminaron mucho antes de que mi tía Mariana muriera (Aguilar Camín, Error); Estuve en el baño hasta bastante después de medianoche (Atxaga, Traductor); Pero, tres días después, luego de un irrebasable fallo cardíaco, […] (Carpentier, Siglo); […] anteriormente a la determinación de asesinar a Barsut (Arlt, Locos); Pero previamente a la tarea de mezclar colores y concretar trazados, debíamos […] (Mujica Lainez, Bomarzo); […] ese don que poseen algunos cuerpos castigados por la enfermedad o la autorrepresión para vibrar anticipadamente a las promesas más febriles de la vida (Marsé, Montse).

La relación entre los grupos adverbiales y los preposicionales se estudia en el § 29.2.

30.14b Los adverbios locativos analizados en los § 29.3l y ss. y 30.5 (delante/detrás; encima/debajo; dentro/fuera, etc.) pertenecen al mismo grupo:

Al comprobar que unos metros delante de él la caravana formada por las motos y nuestro propio auto ralentizaba aún más la marcha (García Sánchez, Alpe d’Huez); Ellas suelen estar muy encima de sus reclamos y el bebé se hace muy dependiente (Penerini, Aventura); Ya digo que se termina por estar colado demasiado dentro de unos moldes y con la retina llena de sus imágenes (Rojo, Hotel).

Los modificadores de los adverbios pertenecen a varios grupos. Pueden ser cuantificadores de grado, que, a su vez, pueden estar representados por otros adverbios (muy bien) o por grupos nominales (dos horas después). Pueden ser también adverbios de foco (§ 30.2m y también § 40.8 y 40.9), sean de inclusión (también ordenadamente), de exclusión (solo hoy), de particularización (precisamente aquí) o de aproximación (casi esporádicamente). Las combinaciones del tipo «adverbio demostrativo + adverbio temporal o locativo» (aquí detrás, allá lejos) se analizan en los § 17.8p y ss. Las construcciones río abajo, cuesta arriba, camino adelante y otras similares, que son también grupos adverbiales, se estudiaron en los § 30.5n y ss. Los grupos adverbiales pueden formarse también por coordinación (antes y después; políticamente y económicamente). Sobre la omisión del segmento -mente en construcciones como atenta y respetuosamente, véanse los § 7.14e y ss.

30.14c No suele ser posible la concurrencia de dos adverbios en -mente. Se prefiere, por tanto, solo políticamente a solamente políticamente. Se obtienen asimismo contrastes como sorprendentemente {fácil ~ *fácilmente} o lamentablemente {inútil ~ *inútilmente}. De manera análoga, de las dos opciones que se muestran en Resultaron {maravillosos ~ maravillosamente}, solo en la primera se admite el modificador verdaderamente. No se percibe con tanta claridad en otras lenguas románicas el rechazo que muestra el español a estas combinaciones (cf. cat. totalment malament ‘totalmente mal’). Los textos muestran algunas combinaciones de dos adverbios en -mente que pertenecen al mismo segmento sintáctico: Podría ser que un día de trabajo represente dos de reclusión y podríamos, entonces, bajar no solamente rápidamente el tiempo que le correspondería estar allá, sino que no habría que pagar […] (Actas Asamblea Panamá 25/4/2005), y muchas más cuando los adverbios en -mente que se suceden no comparten grupo fónico ni forman grupo adverbial: […] que afortunadamente solamente aparecen de vez en cuando y con una periodicidad más o menos conocida (Ruiz Gopegui, Hombres). Tampoco comparten grupo fónico los adverbios en -mente que se suceden en las construcciones apositivas o coordinadas, así como en opciones estilísticas particulares poco representativas del español general: Y su voz sonó extrañamente suavemente paradójicamente calma (Cabrera Infante, Delito), sin comas en el texto original.

30.14d A pesar de que en los apartados precedentes se ilustran diversos tipos de grupos adverbiales, existen más dificultades para formar estas secuencias que para construir grupos adjetivales, nominales o verbales. Sería esperable, por ejemplo, que, del mismo modo que se forma el grupo adjetival subrayado en Es muy consecuente con sus convicciones, se creara con igual naturalidad el subrayado en Actuó muy consecuentemente con sus convicciones, pero los hablantes perciben este último como algo forzado y prefieren omitir el modificador (Actuó consecuentemente con sus convicciones), o bien el complemento (Actuó muy consecuentemente). Esta resistencia no se aprecia, en cambio, en los grupos adverbiales formados con los adverbios locativos o temporales mencionados en las páginas precedentes (antes, después, cerca, lejos, etc.), como en Había llegado un poco antes de las cuatro o Se encontraban muy lejos del frente. En los apartados siguientes se analizarán otros aspectos de las limitaciones que existen en la creación de grupos adverbiales.

30.14e Muchos adverbios derivados de adjetivos que llevan complemento preposicional no pueden heredar ese complemento (§ 1.8j). Se obtienen así contrastes como culpable de robo ~ *culpablemente de robo; abierto a otras influencias ~ *abiertamente a otras influencias; parco en palabras ~ *parcamente en palabras; cruel con ella ~ *cruelmente con ella; hábil para el dibujo ~ *hábilmente para el dibujo, entre otros muchos similares. Como es lógico, se excluyen estas combinaciones en la interpretación en la que el grupo preposicional complementa al adverbio, pero pueden admitirse si inciden sobre algún otro predicado, como en Lo habían adobado cruelmente con sangre de la madre (Scorza, Tumba), donde el grupo preposicional que encabeza con no incide sobre el adverbio cruelmente, sino sobre el grupo verbal que se subraya.

30.14f Cabe pensar que la restricción que se acaba de describir obedece a la diferente manera en que los adverbios y los adjetivos cubren o saturan sus requisitos argumentales. Así, como se explica en los § 36.5k y ss., muchos de los complementos que admiten o requieren los adjetivos denotan la materia o el dominio al que se refiere la cualidad expresada por esos adjetivos. Así sucede con los complementos de ámbito y limitación (fácil de decir, hábil en los negocios), de reacción sensible y predisposición (desagradable al oído, áspero al paladar) o de tendencia o propensión (respetuoso con sus compañeros), entre otros muchos. Es razonable suponer que los adverbios correspondientes a estos adjetivos rechazan los complementos preposicionales porque los adverbios modifican a predicados verbales, no a los sustantivos que designan las entidades en relación con las cuales se manifiestan las inclinaciones o las reacciones mencionadas. Así, el complemento con él en cruel con él, en el que el pronombre subrayado designa un individuo, exige un grupo nominal con una interpretación paralela a la del pronombre (como en El jefe había sido cruel con él), requisito semántico que no puede cumplirse si la estructura adverbial proporciona un evento en lugar de un individuo (*cruelmente con ella).

30.14g Los adjetivos con complemento preposicional de los que se derivan adverbios que mantienen ese complemento se limitan a un número relativamente reducido de casos. Destacan en especial los que expresan unión, similitud, coincidencia o confluencia de personas o cosas (paralelo, parecido, similar, análogo, proporcional o tangencial), a los que se agregan los adjetivos junto y conjunto. Se forman así grupos adverbiales como los que contienen los textos siguientes (se subraya el adverbio que los encabeza y la preposición que este selecciona):

Dijo que paralelamente a ese plan, se realizarán las evaluaciones para elaborar un programa de reparaciones (Dedom 29/8/1986); Muy parecidamente a lo que hemos hecho al imitar los otros animalitos, podemos representar al gallo con […] (Fortún, Bazar); El público, aun en temas familiares, olvida en una semana las dos terceras partes de lo que oye o ve, similarmente a lo que sucede con los avisos de la publicidad en televisión (Ferrer, E., Información); Pero, análogamente a lo que ocurre con la morfina, esta formulación puede ser utilizada exitosamente por el hombre incapaz de crearla (Chiozza, Cuerpo); […] hasta que la resistencia de la pared, que no disminuía proporcionalmente a la sucesión y al esfuerzo de los golpes, me arrojó al suelo (Bioy Casares, Invención); […] para exigir, conjuntamente con los tres que entraron hoy, las mejoras que durante estos días se han venido exigiendo por los demás (Paz Hernández, Huelga).

30.14h También admiten complementos los adverbios derivados de varios adjetivos que expresan las nociones opuestas a estas, es decir, disimilitud, oposición o disparidad:

[…] contrariamente a la presunción, por parte de Fernandito, de la culpabilidad erótica paterna (Pombo, Matilda); La flora y la fauna marinas son, opuestamente a las terrestres, ricas y abundantes (Castro/Handel/Rivolta, Actualizaciones); […] independientemente de sus fortunas o relaciones familiares (Fuentes, Laura Díaz).

Lo hacen asimismo los derivados de adjetivos que se refieren a otras relaciones temporales, como anterior, posterior o previo, mencionados en el § 30.14a, y también espaciales, como oblicuo, perpendicular, transversal:

Si se toma una moneda en la mano y se mantiene con el brazo extendido perpendicularmente a la línea de visión, su imagen retinal es circular (Pinillos, Psicología); Según una visión que cruza transversalmente a los partidos […] (Hoy [Chile] 7/7/1997).

30.14i Aceptan, finalmente, con cierta facilidad los complementos preposicionales los adverbios derivados de adjetivos que admiten para, en particular los que designan la persona que resulta beneficiada o perjudicada por alguna situación, como en lesivamente para sus intereses; provechosamente para todos; desfavorablemente para nuestro equipo, etc. He aquí algunos ejemplos de adverbios que se construyen con esta preposición y forman grupos adverbiales con tales complementos:

Afortunadamente para él, el carpintero y su mujer se mudaron de la casa pronto (Baroja, Hierba); —Felizmente para algunos señores —agregó en seguida (Mallea, Bahía); Desafortunadamente para los indígenas, el español Juan González, quien conocía la lengua indígena, había presenciado el areyto (Silvestrini/Luque, Historia).

30.14j Los adverbios suelen admitir dos tipos de modificadores: adverbios de precisión o imprecisión (justo encima de la mesa, inmediatamente después, más o menos cerca de su casa) y adverbios o expresiones de grado (muy comedidamente, bastante bien). Los primeros modifican principalmente a los adverbios o frases adverbiales que expresan relaciones temporales o espaciales. Entre ellos se cuentan los adverbios justo, justamente, inmediatamente, mismamente, casi y la locución más o menos. El adverbio mismo puede considerarse desde un punto de vista semántico un modificador de este tipo, pero se caracteriza por posponerse al adverbio al que modifica, a menudo situándose entre este y su complemento: *mismo encima de la mesa ~ encima mismo de la mesa; *mismo allí ~ allí mismo: […] detrás mismo de los altares y columnas de las iglesias (Jiménez Lozano, Grano). Sobre otros aspectos del adverbio mismo, véanse también los § 13.11a y ss. y 16.6o.

30.14k Los modificadores de grado son admitidos por los adverbios o locuciones adverbiales que expresan dimensiones graduables, entre los que se cuentan los de manera y algunos de lugar y tiempo. Con respecto a los de manera, son graduables tanto los adverbios propios bien y mal, como todos aquellos que derivan de adjetivos calificativos graduables (muy claramente, bastante alto). En cambio, no son graduables los adverbios derivados de adjetivos relacionales, interpretados generalmente como adverbios de punto de vista o de ámbito (*muy históricamente, *bastante ruralmente). En efecto, la mayor parte de los adverbios oracionales rechazan los adverbios de grado (*Muy evidentemente, él estaba al tanto), pero unos pocos los aceptan (Muy probablemente, él estaba al tanto). En cuanto a los adverbios de lugar y tiempo, son graduables los que denotan relaciones espaciales o temporales que señalan un punto, un área o un intervalo que se interpreta por su relación con otro punto de referencia. Admiten gradación cerca, lejos, arriba, abajo, dentro, adentro, antes, después, pronto, tarde o temprano, pero no suelen aceptarla, en cambio, encima, luego, debajo o detrás, con ciertas excepciones relativas a los usos figurados o traslaticios, como en estar muy encima de una persona (‘estar muy pendiente de ella’) o en otros que se mencionaron en el § 30.5h. En el § 30.7c se vio que solo algunos adverbios de frecuencia son graduables. Los grupos nominales que se usan como cuantificadores de grado (como en dos pasos delante de mí; cinco metros atrás) se estudiaron en el § 30.7d.

Información adicional

En relación con este capítulo, las siguientes entradas del Glosario de términos gramaticales podrían ser de su interés:
complemento del adverbio, cuantificación de grado, grado, sintagma adverbial

 

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