pulmonal

Se documenta por primera vez, con la acepción de 'perteneciente o relativo a los pulmones', hacia 1400, en Visita y consejo de médicos de E. de Sevilla (lectura comprobada en el fol. 28r del manuscrito 18052 de la Biblioteca Nacional de España), y no vuelve a registrarse hasta 1721, en el Arcanismo Antigalico de F. Suárez de Ribera, cuando se produjo la consolidación, en el léxico médico, de los adjetivos cuyo sufijo se remonta al latino -ālis y que sirven para localizar las partes o dolencias del cuerpo humano. Desde entonces esta palabra se localiza principalmente en textos especializados sobre medicina, y hacia el mismo período, es decir, el siglo XVIII, empieza a atestiguarse pulmonar, voz que se impuso en los textos, hasta la actualidad, a su rival pulmonal.