viola

Diccionario histórico de la lengua española (2013- )

También en esta página: DHECan
viola s. (1613-)
viola
Etim. Voz tomada del italiano viola, atestiguada en esta lengua desde 1301-1399 con el valor de 'instrumento musical de cuerda y arco, a cuya familia pertenecen el violín, el violonchelo y el contrabajo, con un número de cuerdas variable'; y esta, a su vez, del occitano viula (M. Cortelazzo y P. Zolli, DELI, s. v. viola2).

Se documenta por primera vez, con la acepción de 'instrumento musical de cuerda y arco similar al violín, pero de mayor tamaño que este y afinado una quinta más grave, que representa la tesitura de contralto', en 1739, cuando se registra en el Diccionario de Autoridades, donde se define como "Instrumento de Música parecido en todo al violón, aunque mayor [...]", definición que se mantiene hasta la edición de 1803. Obsérvese en la definición académica la comparación de violín y violón. El hecho, que podría considerarse una errata, viene motivado, posiblemente, por influjo del término francés violon empleado para denominar al violín. A partir de la edición de 1817 del DRAE se sustituye violón por violín. En 1743 se localiza la voz en un documento publicado en la colección de Documentos sobre música en la Catedral de Sigüenza (1714-1750). Con el complemento de amor (para referirse a una 'viola con catorce cuerdas, de las cuales se tocan las siete de tripa, en tanto que las otras siete, metálicas, vibran por simpatía y producen así un efecto de resonancia') se atestigua en esa misma fecha (1739) en el Diccionario de Autoridades y en 1788 en un artículo publicado en el Diario de Madrid. En 1790 se registra con el complemento de gamba ('instrumento musical de cuerda y arco de la familia de las violas, de entre seis y siete cuerdas, formado por una caja de resonancia de espalda plana con un declive hacia el mástil, vertical, no angulado y con trastes; se toca situándolo entre las piernas o sobre ellas'), en el Quarto extracto de la Traducción de la Historia general de la música desde los tiempos mas remotos hasta el presente, de Burney, publicado en el Espíritu de los mejores diarios literarios que se publican en Europa (Madrid) y se consigna ya en 1855, en el Diccionario enciclopédico de la lengua española de la editorial Gaspar y Roig. Para referirse a la viola, en contraposición a la viola de gamba, se emplea también la denominación de viola de brazo ('instrumento musical de cuerda, precursor del violín, formado por una caja de resonancia y un mástil con tres o cuatro cuerdas, que se toca con arco y apoyándolo contra el pecho o el hombro del intérprete)', también conocida como vihuela sin trastes bastarda, para apuntar a la familia de los violines.  La variante v ihuela de brazo es una combinación muy poco frecuente, que únicamente parece testimoniarse en El Melopeo y el maestro de P. Cerone (1613), fórmula que retoma, a su vez, Pedrell en sus obras musicográficas. La obra de Cerone brinda, por tanto, una de las pocas ocasiones  en que se atestigua esta forma, frente a la común viola de brazo, como bien señala Pedrell. Viola de brazo es un calco del italiano viola da braccio, y en este sentido, parece que Cerone adapta la voz viola a la tradición terminológica española, en el intento también de poner este instrumento en paralelo y contraste con los otros instrumentos de naturalezas diversas, conocidos como vihuelas. En 1739 se consigna la acepción de 'persona que toca la viola' en el Diccionario de Autoridades, así como en un documento de este mismo año publicado en la colección de Documentos sobre música en la Catedral de Sigüenza (1714-1750). Del mismo modo se documentan las subacepciones de 'persona que toca la viola de gamba' al menos desde 1980 (en un artículo del diario El País); como 'persona que toca la viola brazo' se encuentra atestiguada ya en 1990 (en un artículo del diario ABC). El hecho de que estas subacepciones sean tardías se explica atendiendo al proceso la recuperación, llevado a cabo especialmente desde mediados del siglo XX, de los repertorios, los instrumentos y las tradiciones de las músicas pretéritas.

Con la acepción de 'juego de tubos del órgano de la familia de la lengüetería que constituyen un medio registro bajo de mano izquierda que suena en la tesitura de tenor, en unísono a la octava' se documenta al menos desde 1780, en un documento que recoge el estado de conservación del órgano de la villa de Chinchilla (Albacete) y el proyecto de reparación pertinente; aparece también recogida por F. A. de Madrid en sus Cartas instructivas sobre los órganos, texto fechado en 1790. Esta voz se documenta escasamente, pues se utiliza como sinónimo ocasional de bajoncillo de ecos, término tradicional para este medio registro bajo de lengüetería. En 1811 se registra en otro contrato de las mismas características custodiado en el Archivo de la Catedral de Granada relativo a uno de los órganos de dicha catedral. El documento hace un repaso del estado del órgano construido en 1746 por Leonardo Fernández Dávila. Al comparar ambas descripciones, se observa que en el documento de 1811 se ha sustituido la voz bajoncillo por la de viola, lo que permite establecer su identificación.  Con la subacepción de 'juego de tubos tapados del órgano de la familia del flautado que imita la entonación, timbre y tesitura de la viola de gamba' se documenta muy raramente, debido a que se trata de una voz que no pertenece a la terminología tradicional de la organería española, sino que es más propia de la tradición organera alemana y holandesa. No obstante, según las descripciones de este registro (vid., por ejemplo, Tafall, 1873) se trata del equivalente al registro de violón español, tanto de 13 palmos como de 26. La primera documentación de esta voz se localiza en los Viajes de fray Gerundio de M. Lafuente, en 1842, precisamente, al describir uno de los órganos vistos en la ciudad holandesa de Haarlem.

Como 'arte o técnica de tocar la viola' se registra en 1889, en un artículo de A. Sánchez Pérez publicado en La Ilustración Ibérica (Barcelona), acepción que se documenta habitualmente hasta la actualidad en los contextos especializados. Como 'arte o técnica de tocar la viola de gamba' aparece ya modernamente (el primer testimonio remite a 2001, en un artículo del diario ABC), momento en que se produce la recuperación de la práctica instrumental de este instrumento y comienza a estudiarse de forma profesional y reglada en escuelas o conservatorios.

En diferentes repertorios lexicográficos se recogen una serie de acepciones geográficamente restringidas: según indica Santamaría en su Diccionario de mejicanismos (1959), en México, designa 'el violín del juego del billar' y, de acuerdo con el Diccionario del pensamiento popular hondureño (2006) de Saravia, y con el Diccionario de americanismos (2010) de la ASALE, en Honduras se refiere tanto a 'una canica nueva o muy bien cuidada', como al 'vientre de mujer embarazada', mientras que en Honduras y en El Salvador se emplea también esta voz con el valor de 'barriga, estómago prominente de alguien'.

El Diccionario de americanismos (2010) de la ASALE registra también el empleo en Honduras de la locución verbal echar la viola, con el valor de 'atacar, poner en aprietos a alguien'. En 1966, Malaret consigna en su Diccionario manual de americanismos la locución verbal hacerse la viola, usada en Colombia con la acepción de 'llevarse un chasco' y, en 1946, este mismo autor registra en su Diccionario de americanismos el empleo en Venezuela de la interjección ¡la viola! como 'exclamación grosera'. Por último, en 1929 se recoge tocar viola, circunscrita a Argentina, como sinónimo de tocar a retirada.

  1. ac. etim.
    s. f. Instrumento musical de cuerda y arco de la familia del violín, de mayor tamaño que este y afinado una quinta más grave, que representa la tesitura de contralto.
    1. s. f. Con el complemento de amor, para referirse a una viola con catorce cuerdas, de las cuales se tocan las siete de tripa, en tanto que las otras siete, metálicas, vibran por simpatía y producen así un efecto de resonancia.
    2. s. f. Con el complemento de gamba, para referirse a un instrumento musical de cuerda y arco de la familia de las violas, de entre seis y siete cuerdas, formado por una caja de resonancia de espalda plana con un declive hacia el mástil, vertical, no angulado y con trastes; se toca situándolo entre las piernas o sobre ellas.
    3. s. f. Con el complemento de brazo, para referirse a un instrumento musical de cuerda, precursor del violín, formado por una caja de resonancia y un mástil con tres o cuatro cuerdas, que se toca con arco y apoyándolo contra el pecho o el hombro del intérprete.
  2. 1⟶metonimia
    s. m. y f. Persona que toca la viola.
    1. s. m. y f. Con el complemento de gamba, para referirse a la persona que toca la viola de gamba.
    2. s. m. y f. Con el complemento de brazo, para referirse a la persona que toca la viola de brazo.
  3. 1⟶metonimia
    s. f. Mús. Juego de tubos del órgano de la familia de la lengüetería que constituye un medio registro bajo de mano izquierda que suena en la tesitura de tenor, en unísono a la octava.
      Acepción en desuso
    1. s. f. Mús. Juego de tubos tapados del órgano de la familia del flautado que imita la entonación, timbre y tesitura de la viola de gamba.
  4. s. f. Arte o técnica de tocar la viola.
    1. s. f. Con el modificador de gamba, para referirse al arte o técnica de tocar la viola de gamba.
  5. Acepción lexicográfica
  6. s. f. Mx "El violín del juego de billar" (Santamaría, DiccMejicanismos-1959).
  7. Acepción lexicográfica
  8. s. f. Ho "Vientre de mujer embarazada" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
  9. Acepción lexicográfica
  10. s. f. Ho ES "Barriga, estómago prominente de alguien" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
  11. Acepción lexicográfica
  12. s. f. Ho "Canica nueva o muy bien cuidada" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
echar la viola
    Acepción lexicográfica
  1. loc. verb. Ho "Atacar, poner en aprietos a alguien" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
hacerse la viola
    Acepción lexicográfica
  1. loc. verb. Co "Llevarse un chasco" (Morínigo, DiccAmericanismos-1966).
¡la viola!
    Acepción lexicográfica
  1. interj. Ve "Exclamación grosera" (Morínigo, DiccAmericanismos-1966).
tocar viola
    Acepción lexicográfica
  1. loc. verb. Ar “Equivale a la frase española Tocar a retirada" (Vergara Martín, DiccFrases-1929).
viola2 s. (1883-)
viola
Etim. Voz tomada del portugués viola.

Se documenta por vez primera en 1883, en Cantalicio Quirós y Miterio Castro, de A. D. Lussich, como sinónimo de guitarra (es decir, con el valor de 'instrumento musical de cuerda pulsada compuesto por una caja de resonancia en forma de ocho, un mástil largo con trastes y cuerdas, generalmente seis, que se tocan con los dedos, y un clavijero'). Posteriormente, en 1968, Guarnieri consigna esta voz en su Diccionario del lenguaje campesino rioplatense como sinónimo de guitarra. Hacia 1778 se documentan dos ejemplos de viola con el valor 'guitarra' en El amor de la estanciera, obra anónima fundacional del teatro argentino, donde la voz se pone en boca de un pirata portugués (Marcos) que habla su idioma (o más bien una imitación de este), para referirse a un instrumento que el autor, en una acotación, llama guitarra: "Aquí istá, pois, a viola, / muy disposta, y encurdada; / tein uas voces galañas / e fica muitu ben temprada". Este hecho contribuye a afianzar la hipótesis del origen portugués del vocablo.

  1. s. f. Ár. rioplat. Instrumento musical de cuerda pulsada compuesto por una caja de resonancia en forma de ocho, un mástil largo con trastes y cuerdas, generalmente seis, que se tocan con los dedos, y un clavijero.

Diccionario histórico del español de Canarias

También en esta página: DHLE (2013- )
viola

 

viola. f.

~ del pico. loc. sust. violeta del Teide.

                1840 Webb/Berthelot Phytographia (sect. 1ª/1, pp.113-114): Mnemion cheiranthifolium. Nob. [...] Viola del Pico Nivariensium.

¨Es el único ejemplo encontrado. Kunkel la registra con el nombre de viola del pico o del Teide.

 

Diccionario Histórico del Español de Canarias © Todos los derechos reservados

ISBN 978-84-88366-95-5 (o.c.)978-84-88366-93-1 (v.1) 978-84-88366-94-8 (v.2)

Tesoro de los diccionarios históricos de la lengua española 2021
Real Academia Española © Todos los derechos reservados

Con el apoyo de Inditex

Sobre el TDHLE

Rueda de palabras

cerrar

Buscador general de la RAE