carnero

Diccionario histórico de la lengua española (2013- )

También en esta página: DH (1933-1936)
carnero s., adj. (1121-)
carnero, carnerazo, carnerillo, carnerito
Etim. Del latín carnārius, a, um, usado para designar el animal de su especie que sólo se emplea para carne, a distinción de la oveja, útil por sus crías, y del morueco, necesario para la propagación de la especie (DECH, s. v.).

Esta voz se registra, en la acepción 'mamífero herbívoro macho de la familia de los bóvidos, doméstico, de hasta 80 centímetros de altura, con la cabeza pequeña y con la frente convexa, las orejas puntiagudas, los cuernos huecos, estriados y curvados hacia atrás y el cuerpo cubierto de lana; es gregario', ya desde los orígenes del español en documentación latinorromance, según se atestigua en el Léxico hispánico primitivo (siglos VIII al XII). Asimismo, se registran testimonios en un documento de la catedral de León fechado en 1042, tal como puede verse en Lexicon latinitatis Medii Aevi Regni Legionis (s. VIII-1230) imperfectum (s. v.), así como en un documento fechado en torno al año 1121 y editado por J. M. Ruiz Asencio, I. Ruiz Albi y M. Herrero Jiménez en la obra Los becerros gótico y galicano de Valpuesta. A partir de este momento se atestigua profusamente en todas las épocas y ámbitos geográficos, hecho que da cuenta de la utilidad de este animal en nuestra cultura. Se registra, en 1495, en el Vocabulario español-latino de Nebrija. Este hecho explica la diversidad de subacepciones que especifican características particulares del animal, relativas a sus posibilidades de aprovechamiento para el ser humano, como la edad, su capacidad reproductiva o la raza concreta a la que pertenece. Por otra parte, cabe señalar la distinción que realiza N. Casas de Mendoza en el tomo segundo de su Diccionario manual de agricultura y ganadería españolas (1857), en virtud de la cual la voz carnero en el léxico ganadero se refiere al macho castrado, frente al ejemplar entero, denominado morueco. No todas las autoridades avalan esta distinción. Por sinécdoque, la voz pasa asimismo a designar distintas partes de este bóvido; así 'carne de carnero' se atestigua en 1250, en Moamín. Libro de los animales que cazan, de A. de Toledo; 'piel de carnero', en 1285, en el Fuero de Úbeda y 'cuerno de carnero', en 1433, en la Traducción y glosas de la Biblia de Alba, de Mose Arragel de Guadalfajara. Metafóricamente, como 'máquina bélica de asedio usada para derribar murallas, consistente en una gran viga reforzada en uno de los extremos con una pieza, generalmente de hierro, que tiene la forma de la cabeza de un carnero' se registra desde 1270, en la Estoria de Espanna, de Alfonso X; y también con el valor 'en la tradición judeocristiana, ángel que se rebeló contra Dios, que representa el mal y habita el infierno' se documenta desde 1436, en la Comedieta de Ponça, del Marqués de Santillana. Como 'representación convencional del carnero' se atestigua desde 1600, en los Inventarios reales. Bienes muebles que pertenecieron a Felipe II. La voz carnero acoge también la denominación de otros mamíferos. Se denominó también así, de manera genérica, al 'mamífero camélido, doméstico o salvaje, propio de Sudamérica', como muestra, en 1548, un documento que se recoge en la Colección de documentos inéditos para la historia de Chile. Pedro Cieza de León enumera los motivos de esta denominación en Crónica del Perú (1553): "Su talle es que hay algunos carneros y ovejas tan grandes como pequeños asnillos, crecidos de piernas y anchos de barriga; tira su pescuezo y talle a camello, las cabezas son largas, parecen a las de las ovejas de España". Aunque los testimonios recogidos en esta acepción no permiten distinguir a qué auquénido se refieren estas fuentes (llama, alpaca, vicuña o guanaco), en otros sí hay constancia de que con esta denominación se menciona a la llama. Así, como 'mamífero de la familia de los camélidos, doméstico, originario de Sudamérica, de hasta 1,6 metros de altura, cabeza pequeña, cuello largo y orejas puntiagudas, cuerpo esbelto, pelaje de distintos colores, y patas largas y delgadas con pezuñas anchas; vive en grupo y tiene hábitos diurnos' se documenta por vez primera en 1736, en la Historia de la villa imperial de Potosí de B. Arzans de Orsúa y Vela. Esta voz también designa otros bóvidos, domésticos o salvajes, pertenecientes a distintas especies. De este modo, como 'mamífero de la familia de los bóvidos, doméstico, de hasta 65 centímetros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas grandes y el pelaje generalmente de color blanco, liso y brillante, muy apreciado en la industria textil' y con el complemento de Angora, se registra en 1806, en la edición ampliada de la obra Varia comesuración de Juan de Arfe y Villafañe, realizada por Josef Assensio y Torres; como 'mamífero de la familia de los bóvidos, salvaje, de hasta 1,1 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, con el pelaje rojizo y densa barba', llamado también carnero africano, salvaje, con vuelos, de África, de Berbería o montés del norte de África, se atestigua en 1829, en el Diccionario de Veterinaria y sus ciencias auxiliares, de C. Risueño; también como 'mamífero de la familia de los bóvidos, salvaje, de hasta 75 centímetros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos y el pelaje marrón, salvo los ojos, la boca, el vientre y parte de las patas, de color blanco', conocido como carnero montés, montés de Córcega o salvaje, se consigna en 1852, en la Traducción de la Historia natural de las drogas simples de Guibourt, de R. Ruiz; como 'mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Norteamérica, salvaje, de hasta 1 metro de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuervos curvos, el pelaje marrón salvo parte de las patas, de color blanquecino y la cola corta' y con los complementos de América o de montaña, se documenta en 1865, en el segundo tomo del Curso de economía rural española de J. Hidalgo Tablada; como 'mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Asia, salvaje, de hasta 1,35 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, y con el pelaje marrón con manchas blancas', llamado carnero de Marco Polo, se registra en 1880, en la traducción de La vida de los animales. Mamíferos, de A. E. Brehm, realizada por C. Fernández de Castroverde; como 'mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Asia, salvaje, de hasta 1 metro de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos y con el pelaje de color marrón con zonas blancas', se atestigua en 1922, en el Manual de mastozoología de A. Cabrera Latorre; por último, como 'mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Norteamérica, salvaje, de hasta 1,1 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, y con el pelaje de color blanco o crema' se conoce al carnero de Dall, tal como muestra, en 2014, La vida del lobo, de F. Jordán Montés.

Por otro lado, carnero designa, en Chile, a una 'persona que acepta sobornos', como atestigua, en 1876, la obra El partido liberal democrático, de B. Vicuña Mackenna, y en Argentina se emplea como adjetivo para calificar a una '[persona] que carece de valentía', acepción documentada por primera vez en 1876, en un artículo publicado en El Negro Timoteo (Montevideo). Como '[persona] que tiene poco criterio o voluntad y se deja llevar fácilmente' se registra en 1882, en la obra de F. Piria titulada Mr. Henry Patrik en busca del pueblo oriental. Como 'ola alta y cubierta de espuma' se registra en 1891, en la obra Al primer vuelo, de J. M.ª de Pereda. Con el significado de 'persona que no secunda una huelga o que ocupa el puesto del trabajador que está en huelga' se documenta por primera vez en 1904, en un artículo publicado en el diario Caras y Caretas (Buenos Aires). También da nombre a una 'pieza movible de algunos tipos de máquinas limadoras provista de una herramienta cortante'; con este valor figura, en 1973, en la traducción realizada por C. Sáenz de Magarola de la obra Herramientas. Máquinas. Trabajo, de Bartsch. Y, a partir del nombre propio del signo del zodíaco se atestigua como 'persona nacida bajo el signo zodiacal de Aries', en 2004, en la obra Mariana y los comanches, de E. Quintero. En 2004 se documenta asimismo la acepción 'máquina hidráulica sin motor que aprovecha la energía potencial de una cantidad de fluido para elevar una parte de ese fluido a una altura superior a la inicial, gracias a la sobrepresión producida por el golpe de ariete', en el artículo "Los secretos del ariete hidráulico", publicado en Energía y tú (La Habana).

En diversos repertorios lexicográficos se consignan las siguientes acepciones: 'pecha, que bajo este nombre se pagaba al rey por el pasto de sus montes', en el Diccionario de las palabras anticuadas que contienen los documentos existentes en los archivos generales y municipales de Navarra, y de su correspondencia con el lenguage actual (1854), de Yanguas Miranda. En la acepción 'ave marina de hasta 1,3 metros de longitud, de plumaje blanco y alas con las remeras negras, el pico rosa pálido y largo y las patas cortas, con los dedos palmeados' se consigna por primera vez en 1852, en el Gran diccionario de la lengua española de Castro Rossi. Como 'persona que no tiene voluntad ni iniciativa propias' se registra en el Diccionario de chilenismos (1901-1908) de Román. Alemany Bolufer recoge, por su parte, la acepción 'celajes que en el Cabo de Buena Esperanza, bajan rodando por el monte de Tablas' en su Diccionario de la lengua española (1917). Se consigna también el valor 'cabrón, cornudo' en el Suplemento al Diccionario nacional (1869) de Domínguez. Como 'brote de la zarzamora que comen los niños' figura en las Voces alavesas (1958) de López Guereñu. En el Diccionario de provincialismos y barbarismos del Valle del Cauca (c1915-1921) de Tascón se recoge como 'fruto duro, redondo y aplastado de una leguminosa conocida con los nombres vulgares de ojo de buey y ojo de venado cuya denominación científica es Mucuna mutisiana'. En México se consigna como 'arbusto de hojas ovales, de la familia de las poligonáceas; sus flores son blancas, pequeñas y dispuestas en espigas. Es originario de tierras cálidas. Su madera se usa para fabricar ruedas de carretas' desde las Rectificaciones i adiciones al Diccionario de la Real Academia Española (1913-1933) de Becerra. Como 'morueco castrado' se localiza en el Nuevo diccionario etimológico aragonés (1938) de Pardo Asso. En México recoge Santamaría, en su Diccionario general de americanismos (1942), la acepción 'árbol grande de hasta 25 m de la familia de las moráceas, de follaje extendido, que se halla en las zonas húmedas y cálidas de Oaxaca a Veracruz. Tiene hojas ovado-redondeadas muy grandes; sus flores son pequeñas, dispuestas en cabezuelas apretadas y globosas; cuando madura, estas cabezuelas se vuelven suculentas y comestibles. Su fruto es semejante a una pequeña chirimoya'. En el Diccionario de regionalismos de Salta (1947) de Solá se consigna como 'sombrero' y, en el Diccionario enciclopédico (1953) de la editorial UTEHA, como 'símbolo del ardor entre los antiguos egipcios'. Figura en el Vocabulario sayambriego (c1941-1959) de Díaz y Díaz-Caneja como 'determinadas hierbas que nacen a veces en los huecos de las hayas y otros árboles, parecidas al trébol, de raíz comestible' y en el Atlas lingüístico y etnográfico de Andalucía (1961), dirigido por Alvar, como 'montón cónico de trigo'. En el área de Canarias se consignan las acepciones 'chuchanga (| caracol de tierra) grande' (en el Vocabulario de Fuerteventura, de Navarro Artiles y Calero Carreño) y 'cuco de las legumbres, oruga o larva de cierta mariposa (en el Atlas lingüístico y etnográfico de las Islas Canarias, en 1978); y, por su parte, en el Atlas lingüístico y etnográfico de Aragón, Navarra y La Rioja (1980) figura como 'parte de la taba' y 'piña'. En el Diccionario ejemplificado de chilenismos (1984) se recoge como 'cada uno de los neumáticos que se instalan en la roda de las embarcaciones menores para protegerlas de golpes o choques'. Como 'pájaro grande, nocturno, especie de buho' figura en el Diccionario aragonés (1992) de Andolz, y en el Diccionario de hablas leonesas (1993) de Miguélez Rodríguez como 'planta, posiblemente el mordisco de rana'. Figura, por primera vez, en el Nuevo diccionario de colombianismos (1993) de Haensch y Werner como 'pez siluro considerado peligroso por los lugareños. Ataca a sus víctimas penetrando por los agujeros oculares, nasales, anales, los oídos, etc.'. Como 'cena copiosa de los mozos en la fiesta de Todos los Santos' se recoge en el Diccionario de hablas leonesas (1993) de Miguélez Rodríguez. Como 'persona a la que su pareja le es infiel' se documenta en el Nuevo diccionario de argentinismos (1993) de Haensch y Werner. En Canarias se atestigua la acepción 'hombres que en la fiesta de Carnaval se disfrazan con pieles y cascabeles y embisten a los niños y jóvenes' en 1996, en el Diccionario diferencial del español de Canarias de Corrales Zumbado, Corbella Díaz y Álvarez Martínez y; por último, se consigna, en el Diccionario de americanismos (2010) de la ASALE, como salvadoreñismo y con la definición 'miembro del ejército que evade sus obligaciones'.

A carneros, con la acepción '(cielo) emborregado' se atestigua en 1983, en el Atlas lingüístico y etnográfico de Aragón, Navarra y La Rioja, X-XII. Carnero del Cabo, como 'ave marina de hasta 1,3 metros de longitud, de plumaje blanco y alas con las remeras negras, el pico rosa pálido y largo y las patas cortas, con los dedos palmeados' se registra en 1841, en la traducción anónima del Viaje pintoresco alrededor del mundo de D'Urville. Carnero marino, como 'animal marino de gran tamaño' se atestigua en 1616, en Medicina española de Sorapán Rieros. Se desconoce el animal marino que se encuentra detrás de este nombre; el Oxford Latin Dictionary define el término aries (utilizado por Plinio y que es la base de este término en español) como 'a large (unidentified) marine creature'. Carnero negro, con la acepción 'ave marina de hasta 93 centímetros de longitud, con el plumaje y las alas de color pardo grisáceo, el pico largo y las patas cortas y con los dedos palmeados' se atestigua en 1984, en el Diccionario ejemplificado de chilenismos y de otros usos diferenciales del español de Chile, de Morales Pettorino, Quiroz Mejías y Peña Álvarez. Carnero renil, como 'oveja castrada o estéril ' se registra en 1798, en la traducción de la obra Instrucción para pastores y ganaderos de C. Daubenton, realizada por F. González. Carnero verde, con el valor 'guiso hecho con trozos de carne de carnero y aderezado con distintas especias como el perejil' se atestigua en 1599, en la traducción anónima de la obra Diálogos de John Minsheu. No haber tales carneros, con la acepción 'no ser cierto lo que se ha afirmado', se atestigua en 1729, en el Diccionario de la lengua española. Volver a los carneros, como 'retomar el hilo del discurso', se documenta en la traducción anónima de la obra Gerónimo Paturot en busca de una posición social, de L. Reybaud.

Bote de carnero (véase bote), como 'movimiento brusco que da el caballo para tirar al jinete consistente en bajar la cabeza y encorvar el lomo o bien en levantar de manera imprevista y violenta las patas traseras', se registra por primera vez en 1864, en un artículo publicado en La Libertad (Madrid). Ojos de carnero (véase ojos), con la acepción 'mirada que denota preocupación, tristeza o petición de misericordia' se documenta por primera vez en 1830, en un artículo publicado en El Correo: Periódico Literario y Mercantil (Madrid). Pájaro carnero (véase pájaro), como 'ave marina de hasta 1,3 metros de longitud de plumaje blanco y alas con las remeras negras, el pico rosa pálido y largo y las patas cortas, con los dedos palmeados', se atestigua en 1849, en la obra Viajes en Europa, África y América, de D. F. Sarmiento. Pez carnero (véase pez), en la acepción 'pez amazónico de hasta 75 centímetros, comprimido lateralmente, con el dorso y el vientre redondeados y el cuerpo con distintas tonalidades, frecuentemente de color amarillo, rayas negras y manchas de color azulado' se registra en 2011, en El faro por dentro de M. Gutiérrez. Pie de carnero (véase pie), como 'saliente de madera que refuerza la cubierta y por donde se puede bajar a la bodega' se consigna por vez primera en 1587, en el Vocabulario de los nombres que usa la gente de mar, en Instrución náuthica para el buen uso y regimiento de las naos, su traça y govierno conforme a la altura de México, de D. García de Palacio. Salto de carnero (véase salto), en la acepción 'movimiento brusco que da el caballo para tirar al jinete consistente en bajar la cabeza y encorvar el lomo o bien en levantar de manera imprevista y violenta las patas traseras', se registra en 1769, en las Cartas de Azara al ministro Roda en 1769, de J. N. de Azara. Como 'bifurcación de las vías del tren en la que uno de los ramales pasa por encima o debajo del otro' se documenta en 2011, en El Diario de Sevilla. Siesta del carnero (véase siesta), como 'sueño breve que se echa antes de comer', se documenta en 1871, en La Ilustración de Madrid. Vuelta de carnero, con la acepción 'vuelta que se da apoyando la cabeza y las manos en el suelo y dando impulso con las piernas para realizar el giro', se atestigua en 1782, en las Fábulas de T. de Iriarte.

Vid. también carnero (DH 1933-1936).

  1. ac. etim.
    s. m. Mamífero herbívoro macho de la familia de los bóvidos, doméstico, de hasta 80 centímetros de altura, con la cabeza pequeña y con la frente convexa, las orejas puntiagudas, los cuernos huecos, estriados y curvados hacia atrás y el cuerpo cubierto de lana; es gregario. Nombre científico: Ovis orientalis aries (subespecie).
    1. s. En ocasiones, en un complemento con de del sustantivo sebo.
    1. s. m. Con el complemento de dos dientes, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que tiene más de un año y no llega a tres.
    2. s. m. Con el modificador borro, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que tiene más de un año y no llega a dos.
    3. s. m. Con adalid en aposición, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que guía el rebaño.
    4. Acepción en desuso
    5. s. m. Con el modificador ciclán, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que tiene un solo testículo o los tiene ocultos.
    6. s. m. Con morueco en aposición o el complemento de simiente, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que se destina a la reproducción.
    7. s. m. Con los complementos de África, de ancas gruesas, de cinco cuartos o de cola ancha, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que presenta una gran acumulación de grasa en la cola o en los cuartos traseros.
    8. s. m. Con el modificador merino o el complemento de España, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos originario de España, con cuernos desarrollados y con lana por todo el cuerpo, muy densa y de estructura uniforme.
    9. s. m. Con el modificador churro, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos que tiene las patas y la cabeza cubiertas de pelo grueso, corto y rígido y una lana basta y larga.
    10. Acepción en desuso
    11. s. m. Con el complemento de Islandia, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos de color pardo con cuatro o seis cuernos y con lana gruesa.
    12. Acepción en desuso
    13. s. m. Con el modificador inglés o el complemento de Inglaterra, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos procedente de Inglaterra, sin cuernos y con lana fina y larga.
    14. Acepción en desuso
    15. s. m. Con los complementos de cuernos agudos o de Valaquia, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos de cuernos largos y en espiral y que posee una lana basta y larga.
    16. s. m. Con Lincoln en aposición, para referirse al mamífero macho de la familia de los bóvidos originario de Inglaterra, sin cuernos y con lana muy larga y pesada por todo el cuerpo.
  2. 1⟶sinécdoque
    s. m. Carne de carnero.
  3. 1⟶metáfora
    s. m. Máquina bélica de asedio usada para derribar murallas, consistente en una gran viga reforzada en uno de los extremos con una pieza, generalmente de hierro, que tiene la forma de la cabeza de un carnero.
  4. Acepción en desuso
  5. 1⟶sinécdoque
    s. m. Piel de carnero.
  6. Acepción en desuso
  7. 1⟶sinécdoque
    s. m. Cuerno de carnero.
  8. 1⟶metáfora
    s. m. Lit. En la tradición judeocristiana, ángel que se rebeló contra Dios, que representa el mal y habita el infierno.
  9. 1⟶metáfora
    s. m. Pe Bo Ar Ur Mamífero camélido, doméstico o salvaje, propio de Sudamérica.
    1. s. Frecuentemente, con los complementos de carga, de Indias, de las Indias, del monte, del Perú, de la sierra o de la tierra.
  10. s. m. Pe Bo Ar Ur Mamífero de la familia de los camélidos, doméstico, originario de Sudamérica, de hasta 1,6 metros de altura, cabeza pequeña, cuello largo y orejas puntiagudas, cuerpo esbelto, pelaje de distintos colores, y patas largas y delgadas con pezuñas anchas; vive en grupo y tiene hábitos diurnos. Nombre científico: Lama glama .
    1. s. Frecuentemente, con el complemento de las Indias o de la tierra.
  11. 1⟶metáfora
    s. m. Representación convencional del carnero.
  12. Acepción en desuso
  13. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, doméstico, de hasta 65 centímetros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas grandes y el pelaje generalmente de color blanco, liso y brillante, muy apreciado en la industria textil. Nombre científico: Capra hircus angorensis. Con el complemento de Angora.
  14. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, salvaje, de hasta 1,1 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, con el pelaje rojizo y densa barba. Nombre científico: Ammotragus lervia. Con los modificadores africano o salvaje o los complementos con vuelos, de Berbería o montés del norte de África.
  15. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, salvaje, de hasta 75 centímetros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos y el pelaje marrón, salvo los ojos, la boca, el vientre y parte de las patas, de color blanco; es gregario. Nombre científico: Ovis musimon . Con los modificadores montés, montés de Córcega o salvaje.
  16. Acepción en desuso
  17. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Norteamérica, salvaje, de hasta 1 metro de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuervos curvos, el pelaje marrón, salvo parte de las patas, de color blanquecino, y la cola corta. Nombre científico: Ovis canadensis. Con los complementos de América o de montaña.
  18. adj. Ar [Persona] Que carece de valentía.
  19. Acepción en desuso
  20. s. m. y f. Ch Persona que acepta sobornos.
  21. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Asia, salvaje, de hasta 1,35 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, y con el pelaje marrón con manchas blancas. Nombre científico: Ovis ammom polii. Con el complemento de Marco Polo.
  22. Acepción en desuso
  23. adj. [Persona] Que tiene poco criterio o voluntad y se deja llevar fácilmente.
  24. s. m. Ola alta y cubierta de espuma.
  25. s. m. y f. Ár. rioplat. Persona que no secunda una huelga o que ocupa el puesto del trabajador que está en huelga.
  26. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Asia, salvaje, de hasta 1 metro de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos y con el pelaje de color marrón con zonas blancas. Nombre científico: Ovis vignei .
  27. s. m. Pieza movible de algunos tipos de máquinas limadoras provista de una herramienta cortante.
  28. s. m. Máquina hidráulica sin motor que aprovecha la energía potencial de una cantidad de fluido para elevar una parte de ese fluido a una altura superior a la inicial, gracias a la sobrepresión producida por el golpe de ariete.
  29. s. m. y f. Persona nacida bajo el signo zodiacal de Aries.
  30. s. m. Mamífero de la familia de los bóvidos, originario de Norteamérica, salvaje, de hasta 1,1 metros de altura, con la cabeza pequeña, las orejas puntiagudas, los cuernos curvos, y con el pelaje de color blanco o crema. Nombre científico: Ovis dalli. Con el complemento de Dall.
  31. Acepción lexicográfica
  32. s. m. "Ave marina (Diomeda exulans) de pico grande, fuerte y cortante, que termina en un gran gancho. Abunda desde la costa central al sur" (Carrasco, Terminología pesquera-1956-57).
  33. Acepción lexicográfica
  34. s. m. "Pecha, que bajo este nombre se pagaba al rey por el pasto de sus montes" (Yanguas Miranda, DiccAntigüedades Navarra I-1840).
  35. Acepción lexicográfica
  36. s. m. pl. Mar. "Celajes que en el Cabo de Buena Esperanza, bajan rodando por el monte de Tablas" (Alemany Bolufer, DiccLengEsp-1917).
  37. Acepción lexicográfica
  38. adj. "Cabron, cornudo" (Domínguez, DiccNacional (S)-1869).
  39. Acepción lexicográfica
  40. s. m. "Persona que no tiene voluntad ni iniciativa propias" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
  41. Acepción lexicográfica
  42. s. m. "Brote de la zarzamora que comen los niños" (Lpz Guereñu, Voces alavesas-1958).
  43. Acepción lexicográfica
  44. s. m. Co "Fruto duro, redondo y aplastado de una leguminosa conocida con los nombres vulgares de ojo de buey y ojo de venado cuya denominación científica es Mucuna mutisiana"(Alario di Filippo, LexColombianismos-1983).
  45. Acepción lexicográfica
  46. s. m. Mx "Arbusto de hojas ovales, de la familia de las poligonáceas; sus flores son blancas, pequeñas y dispuestas en espigas. Es originario de tierras cálidas. Su madera se usa para fabricar ruedas de carretas" (Lara, DiccEsp México-2010).
  47. Acepción lexicográfica
  48. s. m. Esp: Or "Morueco castrado" (Iribarren, VocNavarro-1984).
  49. Acepción lexicográfica
  50. s. m. Mx "Árbol grande de hasta 25 m de la familia de las moráceas, de follaje extendido, que se halla en las zonas húmedas y cálidas de Oaxaca a Veracruz. Tiene hojas ovado-redondeadas muy grandes; sus flores son pequeñas, dispuestas en cabezuelas apretadas y globosas; cuando madura, estas cabezuelas se vuelven suculentas y comestibles. Su fruto es semejante a una pequeña chirimoya" (Lara, DiccEsp México-2010).
  51. Acepción lexicográfica
  52. s. m. Ar "Sombrero" (Neves, DiccAmericanismos-1975).
  53. Acepción lexicográfica
  54. s. m. "Símbolo del ardor entre los antiguos egipcios" (VV. AA., DiccEnciclop UTEHA-1953).
  55. Acepción lexicográfica
  56. s. m. Esp: Occ "Determinadas hierbas que nacen a veces en los huecos de las hayas y otros árboles, parecidas al trébol, de raíz comestible" (Díaz Díaz-Caneja, VocSayambriego-c1941-1959).
  57. Acepción lexicográfica
  58. s. m. Esp: Merid (And) "Montón cónico de trigo" (Alvar, ALEA I-1961).
  59. Acepción lexicográfica
  60. s. m. Esp: Merid (Can) "Chuchanga ( | caracol de tierra) grande" (Corrales Zumbado / Corbella Díaz / Álvz Mtz, DiccDiferencial Canarias-1996).
  61. Acepción lexicográfica
  62. s. m. Esp: Merid (Can) "Cuco de las legumbres, oruga o larva de cierta mariposa" (Corrales Zumbado / Corbella Díaz / Álvz Mtz, DiccDiferencial Canarias-1996).
  63. Acepción lexicográfica
  64. s. m. Esp: Or "Parte de la taba" (Alvar, ALEANR III-IV-1980).
  65. Acepción lexicográfica
  66. s. m. Esp: Or "Piña" (Alvar, ALEANR III-IV-1980).
  67. Acepción lexicográfica
  68. s. m. Ch "Cada uno de los neumáticos que se instalan en la roda de las embarcaciones menores para protegerlas de golpes o choques" (Morales Pettorino / Quiroz Mejías / Peña Álvz, DiccChilenismos-1984).
  69. Acepción lexicográfica
  70. s. m. Esp: Or "Pájaro grande, nocturno, especie de buho" (Andolz, DiccAragonés-1992).
  71. Acepción lexicográfica
  72. s. m. Esp: Occ "Cena copiosa de los mozos en la fiesta de Todos los Santos" (Miguélez Rdz, DiccHablasLeonesas-1993).
  73. Acepción lexicográfica
  74. s. m. y f. Ar coloq. "Persona a la que su pareja le es infiel" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
  75. Acepción lexicográfica
  76. s. m. Co "Pez siluro considerado peligroso por los lugareños. Ataca a sus víctimas penetrando por los agujeros oculares, nasales, anales, los oídos, etc." (Aragón Farkas, DicFolkColomb-2018).
  77. Acepción lexicográfica
  78. s. m. Esp: Occ "Planta, posiblemente el mordisco de rana" (Miguélez Rdz, DiccHablasLeonesas-1993).
  79. Acepción lexicográfica
  80. s. m. pl. Esp: Merid (Can) "Hombres que en la fiesta de Carnaval se disfrazan con pieles y cascabeles y embisten a los niños y jóvenes" (Corrales Zumbado / Corbella Díaz / Álvz Mtz, DiccDiferencial Canarias-1996).
  81. Acepción lexicográfica
  82. s. m. ES "Miembro del ejército que evade sus obligaciones" (ASALE, DiccAmericanismos-2010).
a carneros
    Acepción lexicográfica
  1. loc. adj. "(Cielo) emborregado" (Alvar, ALEANR X-XII-1983).
carnero del Cabo
  1. s. m. Ave marina de hasta 1,3 metros de longitud, de plumaje blanco y alas con las remeras negras, el pico rosa pálido y largo y las patas cortas, con los dedos palmeados. Nombre científico: Diomedea exulans .
carnero marino
  1. s. m. Animal marino de gran tamaño.
carnero negro
  1. s. m. Ch Ave marina de hasta 93 centímetros de longitud, con el plumaje y las alas de color pardo grisáceo, el pico largo y las patas cortas y con los dedos palmeados. Nombre científico: Macronectes giganteus .
carnero renil
    Acepción en desuso
  1. s. m. Oveja castrada o estéril.
carnero verde
  1. s. m. Guiso hecho con trozos de carne de carnero y aderezado con distintas especias como el perejil.
no haber tales carneros
  1. loc. verb. No ser cierto lo que se ha afirmado.
volver a los carneros
  1. loc. verb. Retomar el hilo del discurso.
bote de carnero
  • s. m. Movimiento brusco que da el caballo para tirar al jinete consistente en bajar la cabeza y encorvar el lomo o bien en levantar de manera imprevista y violenta las patas traseras.
ojos (u ojo) de carnero (a medio morir, degollado, moribundo o muerto)
  • s. m. pl. Mirada que denota preocupación, tristeza o petición de misericordia.
pez carnero
  • s. m. Pez amazónico de hasta 75 centímetros, comprimido lateralmente, con el dorso y el vientre redondeados y el cuerpo con distintas tonalidades, frecuentemente de color amarillo, rayas negras y manchas de color azulado. Nombre científico: Microgeophagus ramirezi .
pie de carnero
    Acepción en desuso
  • s. m. Mar. Saliente de madera que refuerza la cubierta y por donde se puede bajar a la bodega.
pájaro carnero
  • s. m. Ave marina de hasta 1,3 metros de largo de plumaje blanco y alas con las remeras negras, el pico rosa pálido y largo y las patas cortas, con los dedos palmeados. Nombre científico: Diomedea exulans .
salto de carnero
  • s. m. Bifurcación de las vías del tren en la que uno de los ramales pasa por encima o debajo del otro.
salto de carnero
  • s. m. Movimiento brusco que da el caballo para tirar al jinete consistente en bajar la cabeza y encorvar el lomo o bien en levantar de manera imprevista y violenta las patas traseras.
siesta del carnero
  • s. f. Sueño breve que se echa antes de comer.
vuelta de carnero
  • s. m. Vuelta que se da apoyando la cabeza y las manos en el suelo y dando impulso con las piernas para realizar el giro.
carnero, a adj. (1919)
carnero
Etim. De carnero1.

Se documenta, por primera y única vez, en la acepción 'típico o característico de un carnero' ( | persona que no secunda una huelga o que ocupa el puesto del trabajador que está en huelga), en 1919, en la obra Carteles, de R. González Pacheco.

  1. >carnero
    adj. Típico o característico de un carnero.

Diccionario histórico de la lengua española (1933-1936)

También en esta página: DHLE (2013- )

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