kalashnikov

Se documenta por primera vez, con la acepción de 'fusil de asalto, de fabricación rusa, caracterizado por un sistema de recarga que emplea la fuerza de los gases de combustión producidos por el disparo', en 1982, en un artículo de La Vanguardia (Barcelona), titulado "Un diplomático con kefia", que se refiere al líder palestino Yasser Arafat. Esta arma rusa, inventada en 1947 por Mijaíl Kaláshnikov, empezó a ser habitual en los conflictos que se estaban librando en los años sesenta tanto en África como en Oriente Medio, y también recibía el nombre de su acrónimo AK-47 (Avtomat Kalashnikov modelo 1947). Desde sus comienzos, seguramente debido a su origen ruso, ha tenido diferentes variantes ortográficas, que se han mantenido hasta la actualidad: kalasnikov, kalachnikov y kaláshnikov.

Notas filológicas:

En diversos artículos de prensa y en otro tipo de textos, al menos desde 1968, se atestigua frecuentemente Kalashnikov usado en aposición con otro sustantivo que designa un arma de fuego (ametralladora, fusil o rifle) y, en estos casos, se escribe por lo general con mayúscula, como como muestra un artículo publicado en Blanco y Negro (Madrid) en 1968, escrito por V. Gállego  (donde se lee lo siguiente: "En esos países ha hecho su aparición el fusil «Kalashnikov AK 47», famoso en el mundo porque los «marines» norteamericanos que capturaron algunos en Hue y en otros puntos del Vietnam, les dieron preferencia sobre su propia dotación de «M-16» considerado como el mejor fusil automático que se ha conocido, aunque con el terrible defecto de que se encasquilla").