sáfiro

sáfiro. m. Saltamontes [= insecto ortóptero, de cabeza gruesa, ojos prominentes, antenas finas, alas membranosas, patas anteriores cortas y muy robustas y largas las posteriores, con las cuales da grandes saltos. Hay varias especies (Stauronotus maroccanus)].

                1912 (1991) Bethencourt Alfonso Historia i (p.283): Vocabulario guanche. Sáfiros, El Hierro, «El cigarrón» (Locusta saltatricula).

¨En El Hierro registra el aleican i (295 «Saltamontes») esta palabra, en un solo punto, La Frontera. Puede haber una discordancia entre el ejemplo de Bethencourt Alfonso y el atlas, ya que el primero parece referirse a la langosta africana mientras que el segundo hace alusión al saltamontes, lo cual tampoco es demasiado problemático por la proximidad que hay entre los dos insectos ortópteros y porque el término cigarrón se aplica en algunas islas a ambos. Para Llorente i (pp.72-73) sáfiro «evidentemente es una deformación de céfiro». La relación que establece este autor entre el viento y la langosta, para explicar el cambio, tiene el inconveniente de que hay que suponer que céfiro «ha significado en alguna época o en una determinada área, no 'viento del oeste' sino 'viento del este' aunque también cabe la posibilidad de que denominaran céfiro (o sáfiro) a cualquier viento con tal de que fuera lo suficiente fuerte como para arrastrar nubes de saltamontes y langostas». Frente a esta rebuscada explicación, cabe pensar que provenga directamente de zafiro, por algún tipo de relación desconocida entre el insecto y la palabra, lo cual no tiene más inconveniente que este, con ser mucho, porque el cambio de acentuación es justificable, si tenemos en cuenta que «el falso esdrujulismo es frecuentísimo en nuestra lengua, en todas las épocas, desde el vámpiro, el záfiro, el pápiro hasta el méndigo y el cólega» (Rosenblat Buenas y malas palabras iii, p.286).

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ISBN 978-84-88366-95-5 (o.c.)978-84-88366-93-1 (v.1) 978-84-88366-94-8 (v.2)