11.ª Entrega (octubre de 2021)
Versión del 29/10/2021
Equipo Real Academia Española
Familia Ver familia de palabras
tísico, a s., adj. (1250-)
tísico, phtisico, pthisico, ptisico, thísico, tisiquo, tíssico, tysico, tisicón, tisiquillo
Etim. Voz tomada del latín phthisicus 'que sufre de consunción' y esta, a su vez, del griego phthisikós 'consuntivo' (véase P. G. W. Glare, ed., OLD, s. v.).

Se documenta por primera vez, con la acepción 'que tiene tisis (| enfermedad caracterizada por consunción gradual y lenta, fiebre alta y ulceración en algún órgano)', en 1250, en el Libro de los animales que cazan (Moamín) , un tratado de cetrería traducido del árabe al castellano por A. Toledo en el scriptorium regio de Alfonso X el Sabio. En los repertorios lexicográficos se consigna, en 1495, en el Vocabulario español-latino de Nebrija. La Real Academia Española registra por vez primera este adjetivo en 1737, en el Diccionario de Autoridades . También en 1250, en el Libro de los animales que cazan (Moamín) , se atestigua como sustantivo con la acepción 'persona que tiene tisis (| enfermedad caracterizada por consunción gradual y lenta, fiebre alta y ulceración en algún órgano)'. En 1788, en el Diccionario castellano con las voces de ciencias y artes  de Terreros y Pando, se deja constancia de su empleo nominal. Como adjetivo relacional con el significado 'perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad caracterizada por consunción gradual y lenta, fiebre alta y ulceración en algún órgano)', se documenta por primera vez en 1719, con la variante thisica, en la quinta parte de la Chronica seraphica de E. González de Torres. En 1780, en el Diccionario de la lengua castellana de la Real Academia española, se da cuenta por primera vez en los repertorios lexicográficos de este comportamiento sintáctico. Con el valor 'que tiene tisis (| enfermedad infectocontagiosa de los humanos y de otras especies animales y, en particular, la causada por bacterias del complejo Mycobacterium tuberculosis , caracterizada por la formación de lesiones o tubérculos en los pulmones o en otros órganos)', se testimonia por vez primera, con la variante gráfica tysico, en 1750, en las Ordenanzas generales para el govierno político y economico de la ciudad de San Phelipe aprobadas por el rey N. Señor a Consulta del Real, y Supremo Consejo de Castilla , redactadas por P. Valdés León. En los diccionarios, se consigna por primera vez con esta acepción en el DRAE de 1884. Como 'persona que tiene tisis (| enfermedad infectocontagiosa de los humanos y de otras especies animales y, en particular, la causada por bacterias del complejo Mycobacterium tuberculosis , caracterizada por la formación de lesiones o tubérculos en los pulmones o en otros órganos)', significado adquirido tras un proceso de conversión, se atestigua también con la variante gráfica tysico en estas Ordenanzas generales de 1750 efectuadas por P. Valdés León. En la tradición lexicográfica, se da cuenta por primera vez de este uso nominal en 1853, en el Diccionario nacional o gran diccionario clásico de la lengua española de Domínguez. Con la acepción 'perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad infectocontagiosa de los humanos y de otras especies animales y, en particular, la causada por bacterias del complejo Mycobacterium tuberculosis , caracterizada por la formación de lesiones o tubérculos en los pulmones o en otros órganos)', se documenta en 1777, en la aportación científica de F. Salvá y Campillo titulada Respuesta a la primera pieza, que publicó contra la inoculación Antonio Haen.  Es en el Diccionario de la lengua castellana de la Real Academia Española de 1884 donde se recoge por vez primera su empleo como adjetivo relacional. Pese a que el hallazgo del agente patógeno causante de la tuberculosis no tiene lugar hasta 1882, todos los testimonios de finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX en los que la voz tísico , ya sea en la categoría nominal o adjetival, se relaciona con una enfermedad contagiosa, con el desarrollo de tubérculos en los pulmones o con alguno de los síntomas característicos de la tuberculosis (tos, fiebre, sudoración nocturna, pérdida de peso, etc.) se han incluido en las acepciones 4, 5 y 6; esto es, aquellas en las que el adjetivo o sustantivo tísico se vincula semánticamente con la tuberculosis. No obstante, hasta finales del siglo XIX, resulta complicado trazar una línea nítida entre las distintas acepciones, por las similitudes que existen entre los síntomas de las enfermedades consuntivas y la tuberculosis (para más información, consúltese tisis  en el  DHLE ). Con el valor  'que presenta una delgadez extrema o un aspecto vulnerable y enfermizo', se registra en las  Poesías  (1828-1870)  de M. Bretón de los Herreros. La adquisición de este nuevo significado tal vez pueda explicarse a través de un proceso metafórico, dado que la pérdida de peso y la apariencia demacrada son algunos de los efectos característicos de la tuberculosis; además, la coexistencia con sus sinónimos, sobre todo con tuberculoso y fímico , pudo motivar también el desarrollo de este nuevo valor semántico que, por otra parte, ha permitido la extensión del vocablo a todo tipo de textos y, por otro, su permanencia a lo largo de los siglos.

Por otro lado, oído de tísico, con la acepción 'oído muy fino', se atestigua en 1825, en el relato titulado "Mariana", incluido en una recopilación de Cuentos de duendes y aparecidos, traducidos del inglés al español por J. de Urcullu. A finales del siglo XX, en 1977, se consigna por vez primera en una obra lexicográfica, en el Diccionario de dominicanismos de Deive, en la que se indica la restricción de su empleo al ámbito familiar. Hasta el año 2014 el diccionario académico no dará cuenta de la existencia de esta forma compleja. 

    Acepción en desuso
  1. 2⟶conversión
    s. m. y f. Persona que tiene tisis. ⇨ Enfermedad caracterizada por consunción gradual y ...
    docs. (1250-2014) 86 ejemplos:
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] Esp (CDH )

      Et el qui la touier consigo; & obrare de physica; prestaran todas las melezinas que fiziere. Et lo que sal de su fregamiento; es pozon que mata. Empero si dan dello a beuer al ydropico o al tissico cada dia peso de un grano; sanara. Et si salliere su fregamiento con el agua amariello; sepas que fue obrada en la ora de la luna; & en la exaltation del sol. Et a en si atal uirtut que el qui la touiere consigo; sera muy bien recebido de los reyes. & de los altos sennores.

    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] Esp (CDH )

      Et el qui la touier consigo; & obrare de physica; prestaran todas las melezinas que fiziere. Et lo que sal de su fregamiento; es pozon que mata. Empero si dan dello a beuer al ydropico o al tissico cada dia peso de un grano; sanara. Et si salliere su fregamiento con el agua amariello; sepas que fue obrada en la ora de la luna; & en la exaltation del sol. Et a en si atal uirtut que el qui la touiere consigo; sera muy bien recebido de los reyes. & de los altos sennores.

    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] Esp (CDH )
      E los pollos de las gallinas fazen pro a las que an calentura e a las tísicas que tuellen uerde; e quando ge los dieren a comer, conuiene que les tuelgan los pies y las cabeças e las alas, e que los desfuellen quando ge los ouieren a dar, por tal que non se saborguen en ellos, e no querrién caçar otra caça; e denles plomadas de las piernas e de los pescueços, e tenerles a grand pro a los papos e fazerles a toller más claro, mayormient en el tiempo del estat, ca la pluma de los pollos ensánchales los estentinos, e enxúxales los limos e la umor que se les faze en las moliellas.
    • c1381-1418 Anónimo Sevillana Medicina [1995] fol. 95v Esp (CDH )
      [...] y si fuere como carne blanca demuestra en bien / y en salud / y si fuere prieta es el contrario / y esta / carne blanca si fuere dada a comer alos tisicos aprouechalos / y engordalos.
    • c1420 Anónimo Lapidario Marbodio [1880] Esp (CDH )

      El color dela qual es assi como yerua uerde, e la piedra es seguidora al jaspe. Aquesta guarda los mouimientos dela luna e los tiempos marauillosos del çielo, e, cresçiente la luna, cresçe, e, menguante la luna, es fecha menor. E assi es fecha cuydosa por los mouimientos del çielo, e por esto es de muchos llamada piedra santa. E dizese ser poderosa para reconçiliar el amor, e recobra assimesmo los flacos e tisicos, trayendola en todo el cresçimiento dela luna.

    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 134v Esp (CDH )
      E esta es la mas acostunbrada / entre el etico & tisico es deferençia que / el tisico es con mal de pechos & el etico / sin tose njn mal de pechos & quando / el tisico escupe materia que huele / mal entonçe conujene darle çumo / de llanten con mjel / o açucar & agua / de llanten sacado por alqujtara & con / açucar [...].
    • 1490 Palencia, A. VocLatRomance [1967] Esp (NTLLE)
      tisis, es enconamiento de llagas en el pulmón et hinchazón. O consunçión que suele interuenir mas deligero alos mancebos, dende los tísicos se consumen, aquexando les vna tosezilla com escopezinas llenas de espuma.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 29r Esp (CDH )
      Eso mesmo acaesçe quando el pulmon es rompido o foradado, que el resollo o aire atraido pasa de cada cabo & se esparze & no basta atemprar el calor natural, como pareçe en los tisiquos, no menos es el tal resollo impedido por la gran repleçion del cuerpo, quando es supitamente lleno, assi que no puede respirar, como claro veemos en los que son dentro del agua, que por la grande y supita repleçion del cuerpo por el agua que entra, pierde el resollo & se afoga el tal animal por ser los porros & venas sotiles traedores del tal espiritu vital empachados & llenos del agua traida.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      Las señales que demuestran que el ptísico sea cerca de la muerte es assí como quando se caen los cabellos, e se encorvan las uñas e se quita el apetito e difficultad del resuello e detenimiento de la escopetina e fluxo del vientre e finchazón de las piernas. E por lo más los ptísicos se despiden quando caen las fojas de los árboles.

    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 21r Esp (CDH )
      / De la orina que pareçe de tisico & leuantase de escalentamiento / de los liuianos & lança mucho venino por la garganta / este tal mande comer la rennonada bien cozida & lo gordo / del puerco & sopas con manteca de ganado & esto le refrescara / los liuianos / / Aqui comiença la conoçencia de los pulsos.
    • 1513 Herrera, G. A. Agricultura [1995] fol. 123v Esp (CDH )
      Si con ello lauan algunas llagas las alimpia: y hechas tostadas, y mojadas en este vino alegran mucho el coraçon, y esfuerçan la flaqueza, y si cuezen la flor en agua llouediza, y con ella aguaren aquel vino: y lo beuieren los tisicos, que son los que tienen muchas llagas enlos pulmones, y escupen sangre los sana, asi mismo es bueno el tal vino, alos que tienen fiebres quartanas: y alos que tienen puxo del vientre: y si en aquel vino echan vn poco de triaca terna mucha mas virtud: y sera bueno contra otras muchas ponçoñas que ayan comido y beuido, y para el temblor delas manos y cabeça.
    • 1541 Carbón, D. LArte comadres [1997] fol. 45v Esp (CDH )
      Es verdad que como queremos la virtud alteratiua / como para los ethicos y thisicos dize se tisana / y tiene tambien virtud nutritiua y haze se por cozer mucho.
    • 1557-1567 Jarava, J. Historia yerbas y plantas [1999] Esp (CDH )

      Las raýzes desta yerva o cardo dize Dioscórides que aprovechan para las quemaduras y, bevidas en algún brevaje, hazen orinar y costriñen el vientre. Son en gran manera útiles para los tísicos, rompidos y para los que le vienen la convulsión o pasmo. Hazen della muy buenos emplastros para la gota que viene por calor.

    • 1598 Santiago, D. Arte separatoria [1999] II, fol. 72r Esp (CDH )
      Y la otra es la que se sigue: que en los éthicos y thísicos, muchos d'ellos, sobrevienen las dichas enfermedades de una abundancia de humores gruessos y viscosos, los quales se dilatan por las túnicas nervosas y, con la assistencia del calor de la parte, se desecan en ellas y, con la parte gruessa que tienen, cierran las vías y poros de las dichas túnicas; y quando baxa la substancia, que avemos dicho, del celebro a dar húmedo radical a las dichas túnicas y a los huessos, para sustentar los tuétanos, halla las dichas vías y poros cerrados.
    • 1606 Alonso Ruyzes Fontecha, J. Diez Previlegios Esp (NTLLE)
      phthoe, consunción o disminución, nacida de llaga, como en los tísicos.
    • c1619 Cabrera Córdoba, L. HFelipe II [1998] Esp (CDH )
      El de Orange, conociendo estaba la importancia en señorear el mar, procuro ocupar los puertos y plaças más importantes de las marinas, cerrando la puerta a los socorros de España y tener la mano para meter los que esperaba de Inglaterra, Escocia, Francia, Alemania, con que iría la guerra a lo largo, como suelen las que no se han de acabar por ímpetu, obstinándose los hombres cada día más y enseñándose a guerrear para padecer y hacer mucho más que dellos se esperaba; como acaece en el que muere de tísico, que su vida se alarga fuera de la opinión de los médicos y esperança de los que los ministran.
    • 1624 Reyes, M. Curial del Parnaso [1909] Esp (CDH )
      Ni han sido con la agudeza que se ha visto en esta junta refutados, porque cumplidamente no hayan sido excelentes; mas porque el mal de forma se ha habituado en los ánimos y tanto se ha internado en los huesos, que la complexión del género humano se ha debilitado y depravado en tanto grado que la virtud vital cede á la gravedad del mal de los vicios, para que no se halle remedio en tan acertados pareceres; cosa que claramente se deja conocer que nuestra cura es tan imposible como la del tísico que escupe podredumbre y se le caen los cabellos de la cabeza.
    • 1629 Ruiz Alarcón, H. Trat supersticiones [2003] Mx (CDH )
      Para lo qual se note que como dixe arriba, los dolientes de enfermedades prolijas y de las que confirmadas tienen los medicos por incurables, como son eticos, tisicos, &c., viendo que con las medicinas ordinarias no mejoran, luego atribuyen su enfermedad y dolencia a hechizo, y juntamente tienen por cierto que jamás sanaran si el que los enhechiço no los cura o no quiere que sanen.
    • 1611-p1650 Anónimo LMedicinas caseras [1984] Fi (CDH )
      Los ajos comidos sean crudos, o cocidos quitan la tos nueva o antigua pero esto es malo para los eticos y thisicos quando la tos es de calor.
    • 1710 Montenegro, P. Materia médica [1942-1944] Ar (CDH )
      El cocimiento del Guayacán bebido por largo tiempo cura la llaga de los pulmones, mejor que otro remedio alguno, como lo tengo por esperiencia, asi en mi, como en otros muchos, qué de asistir á tisicos á visitarlos la contrajimos en el Colegio de Cordova, y viendome yá como desauciado, revolviendo libros, autores, para curarme, hallé en Riveiro, como Ascencio insigne Medico en Francia, curó á muchos con el cocimiento de Guayacán, bebido por largo tiempo.
    • 1711 Esteyneffer, J. Florilegio medicinal [1712] p. 99 Mx (BD)
      Para distinguir el esputo ó escupitina de tysico, con el de catarro contumàz, es: que la materia que escupe el tysico es de color ceniciento, y no tan blanca, como la pituita, ó esputo del catarro, y hechado en agua tibia, cae la materia al fondo, y la pituita nada encima.
    • 1742 Feijoo, B. J. Cartas eruditas, I [2004] Esp (CDH )
      Tómese el esputo purulento del enfermo en un lienzo, el qual se colgará a recibir el humo en una chimenea, y a proporción que el esputo se fuere secando, se irá consumiendo el humor morboso del tísico.
    • a1745 Lozano, P. HConquista Paraguay [1873] Py (CDH )
      [...] y aun á este palo escede en virtud su misma resina, como testifica de propia esperiencia, en un libro que compuso de las yerbas y árboles de esta provincia, el hermano Pedro de Montenegro, de nuestra compañía, sugeto muy perito en la medicina, quien dice que teniendo él mismo y otros sugetos, por haber asistido á unos tísicos en nuestro colegio de Córdoba, tan dañados los pulmones que se daban por desauciados, bebiendo el cocimiento del guayacan del Guaycurú, sanaron en breve perfectamente.
    • c1754 Delgado, J. J. HGral islas Poniente [1892] Fi (CDH )

      La carne de cocodrilo es muy semejante á la de la vaca gorda y colorada, y no tuviera yo recelo de comerla en caso de necesidad. El horror que la tienen es por comer á veces el animal carne humana; muchos indios la comen, y aseguran que es muy sabrosa y sana y de grande sustancia. Dándola á los éticos y tísicos les aprovecha y sana. Y si alguno quisiere hacer la experiencia, quizás me agradecerá el haberle mostrado este secreto natural.

    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] Esp (CDH )

      Et el qui la touier consigo; & obrare de physica; prestaran todas las melezinas que fiziere. Et lo que sal de su fregamiento; es pozon que mata. Empero si dan dello a beuer al ydropico o al tissico cada dia peso de un grano; sanara. Et si salliere su fregamiento con el agua amariello; sepas que fue obrada en la ora de la luna; & en la exaltation del sol. Et a en si atal uirtut que el qui la touiere consigo; sera muy bien recebido de los reyes. & de los altos sennores.

    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] Esp (CDH )
      E los pollos de las gallinas fazen pro a las que an calentura e a las tísicas que tuellen uerde; e quando ge los dieren a comer, conuiene que les tuelgan los pies y las cabeças e las alas, e que los desfuellen quando ge los ouieren a dar, por tal que non se saborguen en ellos, e no querrién caçar otra caça; e denles plomadas de las piernas e de los pescueços, e tenerles a grand pro a los papos e fazerles a toller más claro, mayormient en el tiempo del estat, ca la pluma de los pollos ensánchales los estentinos, e enxúxales los limos e la umor que se les faze en las moliellas.
    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] Esp (CDH )

      E la carne del búho es mala, pero fázeles pro a la uentosidad que les acaeçe por el mal del yesso. E la carne de las lechuzas es mala, sinon que presta a las tísicas.

    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] Esp (CDH )
      Mas la carne de los pollos de las golondrinas desfázeles el mal del yesso, e faze pro a las tísicas quando es lo que tuellen uerde; e otrosí fázeles pro al fastío que an de suso o de yuso.
    • c1381-1418 Anónimo Sevillana Medicina [1995] fol. 49v Esp (CDH )
      E alos tisicos con trigo remojado / en caldo con Galapagos cochos & alos que han / piedra con perexil macedonio y con simiente de apio.
    • c1381-1418 Anónimo Sevillana Medicina [1995] fol. 52v Esp (CDH )
      / El primer catamiento es segun el animalia / de que fuere / la leche dela muger de veynte años fasta / veynte & cinco: blanca & buena & gruessa delos pechos / & ancha : y las tetas blancas & de buenas condiciones: / y que sea la leche blanca & ygual de sustancia / non muy espessa ni muy delgada & de buen color: / & de buen olor y de buen sabor: esta es la mejor leche / que ay enel mundo: quier para criar: q(n)[u]ier para comer: / quier para melezina: para los tisicos.
    • c1381-1418 Anónimo Sevillana Medicina [1995] fol. 52v Esp (CDH )
      Y la que fuere ceuada con lantejas / & con ceuada es buena para los sanguinos: y la que / fuere ceuada de pasas & trigo es buena para los tisicos / & para las malencolias.
    • c1381-1418 Anónimo Sevillana Medicina [1995] fol. 95v Esp (CDH )
      [...] y si fuere como carne blanca demuestra en bien / y en salud / y si fuere prieta es el contrario / y esta / carne blanca si fuere dada a comer alos tisicos aprouechalos / y engordalos.
    • c1420 Anónimo Lapidario Marbodio [1880] Esp (CDH )

      El color dela qual es assi como yerua uerde, e la piedra es seguidora al jaspe. Aquesta guarda los mouimientos dela luna e los tiempos marauillosos del çielo, e, cresçiente la luna, cresçe, e, menguante la luna, es fecha menor. E assi es fecha cuydosa por los mouimientos del çielo, e por esto es de muchos llamada piedra santa. E dizese ser poderosa para reconçiliar el amor, e recobra assimesmo los flacos e tisicos, trayendola en todo el cresçimiento dela luna.

    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 134r Esp (CDH )
      [...] & el dia que comiere / leche que non coma carne njn otra / cosa saluo leche con pan o sin pan / o coma a yantar enla mañana leche / & ala noche carne & es a saber que el / mayor peligro es al tisico & al hetico / el fluxo del vientre por ende si / menester fuer sea la leche ferujda con / poca yerua / o sin ella & amaten en / la leche azero / o gijas linpias vnas / tres vezes ante que la coma [...].
    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 134v Esp (CDH )
      E esta es la mas acostunbrada / entre el etico & tisico es deferençia que / el tisico es con mal de pechos & el etico / sin tose njn mal de pechos & quando / el tisico escupe materia que huele / mal entonçe conujene darle çumo / de llanten con mjel / o açucar & agua / de llanten sacado por alqujtara & con / açucar [...].
    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 139r Esp (CDH )
      non / ha vianda que tanto le mantenga / commo leche de cabras fresca asi commo / la dan Al etico o tisico & beua & coma / della pero que la coma fasta medio / dia & non coma carne njn beua vjno / fasta la noche por çena que non conujene / comer carne fasta que sea deregida / la leche E sy le fizjere camaras / coma la cozjda con yerua / buena / o amatada con gijas / o con / azero.
    • c1430 Anónimo Floresta philósophos [1904] Esp (CDH )

      1899. Non esta bien a hombres mancebos conoscer de muchos vinos quales son mejores.

      1900. Fuye del tisico maguer sea sabidor, si sabes cierto que es beudo perdido.

      1901. Guardase del fisico aquel que en si quiere provar primeramente como a los otros de semejante enfermedad a de curar [...].

    • 1490 Palencia, A. VocLatRomance [1967] Esp (NTLLE)
      tisis, es enconamiento de llagas en el pulmón et hinchazón. O consunçión que suele interuenir mas deligero alos mancebos, dende los tísicos se consumen, aquexando les vna tosezilla com escopezinas llenas de espuma.
    • 1493 Anónimo Trad Cirugía Cauliaco (BNP Inc 177) f. 173v Esp (BD)
      e por ende valen tales cauterios ala mania. Epilencia e al dolor de cabeça al fluxo delos ojos alos ptisicos e a todos los reumatizados fazense tambien en los cuernos de la cabeça e en la postrimera parte dela cabeça los cauterios con el mesmo instrumento para escalentar e confrontar la cabeça en el paralisi tremor spasmo por la lepra palidera.
    • 1493 Anónimo Trad Cirugía Cauliaco (BNP Inc 177) f. 169v Esp (BD)
      Las que baxo e las que por las particulas del thorax a bien compañar alas purgaciones e segun aquella razon auientes las partes de arriba fuertes no son empecidos del vomito. E por esto se dezia en el iiij delos aphorismos que los ptisicos no traheras alas purgaciones superiores mas los magros siempre segund los miembros carniformes: o semejantes alas carnes, non empero segund los miembros radicales e espermaticos
    • 1493 Anónimo Trad Cirugía Cauliaco (BNP Inc 177) f. 148r Esp (BD)
      Alas vezes se mueue el diente por la causa primitiua del caimiento o del ferimiento e a las vezes de la humidad deleznare el neruio e ligamiento e alas vezes por la sequedad e carecimiento del nudrimento alas vezes por la corrosion e diminucion de la carne delas enzias, mas el movimiento: o debilitacion que se faze de la sequedad e priuacion del nudrimento assi como en los uiejos e tisicos non se cura.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 62r Esp (CDH )
      E algunas vezes aviene por el grand calor exçesivo que guasta el humor de las manos, como en los tisicos y ethicos que son las venas opiladas o enpachadas do despues se sigue la falta de humor y es enpachado pasando a los espiritus vitales.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 76r Esp (CDH )
      La medula es muy mediçinable, segund dize Diascorides, mayormente de las aves salvages, ca ella guareçe las desolladuras de los labros & las llagas dellos & las hendeduras que se hazen en ellos, sana el dolor de las orejas y emblandeçe las landrezillas, & cura las vexigas de los pies, & mitiga el dolor de la garganta & de las tetas, y es assi a los eticos como a los tisicos muy singular remedio, ca ha una virtud resuntiva por la qual el humor perdido & guastado recobra & restaura.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )
      Este tiempo es muy noçivo a los tisicos, ca por su frialdad & sequedad seca los pulmones & rompe como una hoja de viña de que los tisicos son muy gravados.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 147r Esp (CDH )
      Este quita la verdura a los arboles & seca los yervas & las umores dentro & fuera & por esto es el muy empeçiente a los tisicos, ca el restriñe el pulmon por su sequedad, segund dize Galieno.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )

      Esta piedra reluze de cada cabo & ha una mancha blanca al medio que reluze como la Luna & creçe esta mancha quando creçe la Luna & amengua quando mengua, segund dizen Isidoro & Diascoro. Esta piedra vale a reconsiliar los coraçones en amor & para guarir los tisicos & secas.

    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 29r Esp (CDH )
      Eso mesmo acaesçe quando el pulmon es rompido o foradado, que el resollo o aire atraido pasa de cada cabo & se esparze & no basta atemprar el calor natural, como pareçe en los tisiquos, no menos es el tal resollo impedido por la gran repleçion del cuerpo, quando es supitamente lleno, assi que no puede respirar, como claro veemos en los que son dentro del agua, que por la grande y supita repleçion del cuerpo por el agua que entra, pierde el resollo & se afoga el tal animal por ser los porros & venas sotiles traedores del tal espiritu vital empachados & llenos del agua traida.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Quando el esputo del ptísico cae sobre los carbones encendidos e fiede, desempachados son, que nunca andarán sobre tierra.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Las señales que demuestran que el ptísico sea cerca de la muerte es assí como quando se caen los cabellos, e se encorvan las uñas e se quita el apetito e difficultad del resuello e detenimiento de la escopetina e fluxo del vientre e finchazón de las piernas.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      La primera es mala complisión seca sin materia; la segunda, aspereza de la garganta e de la caña; la tercera, privación de la materia, assí como en los ptísicos e en los consumidos; la quarta, humor gruesso e viscos; la quinta, humor sotil que la natura non lo puede comprehender.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      El otoño descubre a los ptísicos que en el otoño se manifiestan, e esso mismo los que son ptísicos en el otoño mueren.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      E otras causas que son quasi sin cuenta que acontescen cerca esta materia, por quanto los ptísicos algunas vezes escupen tossiendo partes del pulmón, e algunas vezes partes de las venas, e algunas vezes parte de los ánulos, e algunas vezes piedras.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      Las señales que demuestran que el ptísico sea cerca de la muerte es assí como quando se caen los cabellos, e se encorvan las uñas e se quita el apetito e difficultad del resuello e detenimiento de la escopetina e fluxo del vientre e finchazón de las piernas. E por lo más los ptísicos se despiden quando caen las fojas de los árboles.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Pues devedes vos de guardar en la pronosticación de los ptísicos, que fablando mueren e moriendo fablan.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      E esso mismo devedes de entender que de aquellas cosas que aprovechan en la curación de ptísicos, unas son que tienen natura de comer e de bever e de medicina, e otras que tienen natura de cibo e otras que tienen natura de medicina, e otras ay que tienen parte de unas o de todas compuestas.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Esta materia de los ptísicos toca Galieno en el tercero De ingenio, e de los consumidos en el séptimo e en el décimo tractado por los éticos.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      E assí la leche a los ptísicos es cibo e bever e medicina. El segundo, que es esso mismo cibo e bever e medicina es el vino, que absterge e alimpia e govierna, e de ligero se convierte en calor e en espíritu. Pues sea el vino claro, blanco, flaco, en alguna manera dulce.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      E por esso Galieno traía los sus ptísicos a un monte que es fazia Cecilia adonde continuo está el fuego en la oquedad de los montes, e por la sequedad del aire que está a la medianería del monte, e por razón de los pastos de la leche.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      Los letuarios calientes que enxugan e alimpian son éstos: diacimino, diairis, diaisopo, diacalamento, diaprasium, diaesquila. Los letuarios fríos son éstos: açúcar rosado, açúcar violado, diagargante frío, eletuario resumptivo, diapenidión sin especies calientes. El que es caliente templado, o quasi templado, es assí como diarodón abatis, pues compóngalo e buélvalo a quien es dada la cabecera. Emplasto que aprovecha a los ptísicos.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      E si la asma fuere con reuma, cúrese primero la reuma, porque en otra manera no vale cosa quanto obraremos. Pues la cura de la reuma dicha es arriba. E si la difficultad del resuello fuere por sequedad, use viandas húmidas, assí como son borrazas e alcohela e espinacas e violaria e malvas, azeite de ajonjolí, azeite de almendras dulces, azeite violado, manteca. E use leche de muger o leche de asna o de cabra. E sean regidos assí como los éticos e los ptísicos e los consumidos

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      D'esta materia fabla Galieno en el quinto de ingenio para los ptísicos, e en el séptimo de ingenio para la sequedad del estómago.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] 22 Esp (CDH )
      E viene esso mismo por vicios del fígado e del coraçón e del pulmón e del pecho, assí como en los thísicos e en la empima.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      La leche aprovecha a los thísicos, segund lo dize Galieno en el noveno De ingenio, e esto si la fiebre putrida no fuesse buelta con la ética.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      E quando fallesce el vapor seco, luego fallecen los cabellos e se caen e no tornan a nascer, assí como en los tísicos e en los éticos e en los consumidos e en los viejos.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Todo caimiento de cabellos o privación de cabellos por privación de las causas naturales no se pueden restaurar, e por eso embalde trabajamos en la calva natural e en los caponados e en los omnes que no son barbados e en los viejos e en los tísicos e éticos e en los consumidos e en las cicatrices e en los lugares cauterizados.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      Otrosí use estos letuarios. Recepta: diapapáver onça i; diagargante frío, diapenidión sin canela, açúcar violado ana' onças iiii; diairis onça media. Sea todo buelto. E si fuere la sequedad añadida, use dieta húmida resumptiva e baños e sus semejantes, las quales son dichas en la ética. E usen ungüento resumptivo, el qual aprovecha a los tísicos e a los consumidos.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      El tal fluxo viene a los tísicos e a los éticos e en las fiebres agudas, e si la enfermedad fuere curable use este letuario.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Las de parte de dentro son muchas o vienen algunas vezes de la cabeça por vía de reumatismo, e algunas vezes del estómago, e algunas vezes de los intestinos de arriba, e algunas vezes de los de medio, e algunas vezes de los de baxo e algunas vezes de las venas miseráicas e algunas vezes del fígado e algunas vezes del baço, e algunas vezes de todo el cuerpo, e algunas vezes por vía de crisi e algunas vezes por vía de sinthómate, e algunas vezes en los rellenos, e algunas vezes en los vazíos así como en los tisícos, e algunas vezes en las fiebres pestilenciales.
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 21r Esp (CDH )
      / De la orina que pareçe de tisico & leuantase de escalentamiento / de los liuianos & lança mucho venino por la garganta / este tal mande comer la rennonada bien cozida & lo gordo / del puerco & sopas con manteca de ganado & esto le refrescara / los liuianos / / Aqui comiença la conoçencia de los pulsos.
    • a1500 Anónimo Tratado patología [1997] Esp (CDH )
      [...] asi como acaesçe a los gafos de ser bermejos & de espeso follejo, o la bermejura que se faz a los tisicos quando se açercan a la muerte, o la bermejura que caesçe por bever el vino e quema la carne aturado, o la bermejura que se faz por melezina aguda e alguna tintura que posieron en el rostro, asi como çebollas de narçisus e su semejante, o por estar al sol & al fuego.
    • a1500 Anónimo Tratado patología [1997] Esp (CDH )
      [...] e puna quanto podieres que non aya menazon, que los eticos & los tisicos quando menazon llegan a pelligro aina; e si la ovieren, ha menester que bevan el llegar del agua de la çevada & fresar de çevada cocha con mirto descortezado, torrado con un poco de goma araviga turrado & bolo armenico & espodio; e mente en su agua arrop de mirta sinple.
    • a1500 Anónimo Tratado patología [1997] Esp (CDH )
      E si non prestare al tisico con que dixiemos & vieres su cuerpo adelgazar e la dolençia çierta, usar & tomar la leche de asna & lleche de cabras cada dia, a la ora quel ordenaren; curelo asi quarenta dias; & sil prestar, aturelo otros cuarenta dias; e sil feziere menazon, dexelo; & cura la menazon fasta que se tire; & desi torne a ello; & tome de lo primero poco; & cure cada dia, fasta que llege al tornar una libra; e si quaja el estomago, tomalo con açucar o miel o con un poco de sal.
    • a1500 Anónimo Tratado patología [1997] Esp (CDH )
      puede guaresçer ante que se raiga la mala conplesion, cura los tisicos por la llaga del pulmon de umitar & esfriar con tenpla, con tal como lleche de asna o de camellos & su semejante de las viandas & los enplastos.
    • 1508 Ávila, F. Vida y muerte [2000] 159 Esp (CDH )
      / Matas los unos leprosos, / los otros matas hinchados, / unos gordos y flemosos, / otros tíssicos trechados; / a unos desatinados / con hiebre que desvaría, / a otros con frenesía / llevas, del seso privados.
    • 1513 Herrera, G. A. Agricultura [1995] fol. 14v Esp (CDH )

      El trigo candeal es bueno para las personasque son humidas como son los fleumaticos, por queello es seco y enxuga algo el demasiado humor. y es bueno para los quetienen vn romadizo quecorre mucho queotros llaman catarro. Hazele dello vn pan muy blanco y muy hermoso. Asi mesmo hazese vna cierta confeccionquecomunmente llaman amydon. La qual es singular menteprouechosa alos tisicos, por quetiene virtud de consolidar las llagas del pecho.

    • 1513 Herrera, G. A. Agricultura [1995] fol. 123v Esp (CDH )
      Si con ello lauan algunas llagas las alimpia: y hechas tostadas, y mojadas en este vino alegran mucho el coraçon, y esfuerçan la flaqueza, y si cuezen la flor en agua llouediza, y con ella aguaren aquel vino: y lo beuieren los tisicos, que son los que tienen muchas llagas enlos pulmones, y escupen sangre los sana, asi mismo es bueno el tal vino, alos que tienen fiebres quartanas: y alos que tienen puxo del vientre: y si en aquel vino echan vn poco de triaca terna mucha mas virtud: y sera bueno contra otras muchas ponçoñas que ayan comido y beuido, y para el temblor delas manos y cabeça.
    • a1518 Anónimo Macer. Granada 1518 [1995] fol. 36v Esp (CDH )
      E si alguno estouiere enfermo / de luengo tiempo & estouiere / flaco tome del pan & tuestelo al huego / & metalo enel vino o mosto & vse / lo a comer & darleha alegria enel coraçon / & esfuerço en todo el cuerpo & / en todos los miembros dibilitados / y aqueste vino sea aguado con agua / de luuia cocha conla flor del romero / & continuandolo a beuer guaresçe a / los tisicos: E este secreto medeçinal / es prouado çiertamente.
    • 1541 Carbón, D. LArte comadres [1997] fol. 45v Esp (CDH )
      Es verdad que como queremos la virtud alteratiua / como para los ethicos y thisicos dize se tisana / y tiene tambien virtud nutritiua y haze se por cozer mucho.
    • 1557-1567 Jarava, J. Historia yerbas y plantas [1999] Esp (CDH )

      Las raýzes desta yerva o cardo dize Dioscórides que aprovechan para las quemaduras y, bevidas en algún brevaje, hazen orinar y costriñen el vientre. Son en gran manera útiles para los tísicos, rompidos y para los que le vienen la convulsión o pasmo. Hazen della muy buenos emplastros para la gota que viene por calor.

    • a1577 Abril, P. S. Trad Ética Aristóteles [1918] Esp (CDH )
      Así compara Aristóteles a los incontinentes con los que tienen mal de corazón, que no les toma sino a tiempos, y a los disolutos con los hidrópicos o tísicos, que llevan el mal a la contina.
    • 1589 Pineda, J. Diálogos Agricultura cristiana [1963-1964] Esp (CDH )

      La de cabras es más proporcionada con nuestro estómago por se mantener con ramón más que con yerba, y la de vacas es más medicinal, como la de ovejas más crasa y nutritiva, sino que no es muy provechosa; y toda leche cocida es menos dañosa que cruda y no hincha el vientre, y la de vacas relaja el estómago, y aprovecha a los tísicos y sintéticos.

    • 1589 Pineda, J. Diálogos Agricultura cristiana [1963-1964] Esp (CDH )

      La leche comida de ordinario suele ser mala para los que padecen dolor de cabeza y enfermedad del hígado, o del bazo, o de los niervos, o de calenturas, o de tos, o de mal de ojos, aunque se tiene por buena para el pulmón y para el pecho; y la porcuna es provechosa para el tenasmo, que es querer y no poder hacer la diligencia del vientre, y para la disentería, que son cámaras de sangre con raeduras de las tripas, y también para los tísicos.

    • 1598 Santiago, D. Arte separatoria [1999] II, fol. 71v Esp (CDH )
      Ase dicho esto porque yo e visto aplicar la leche y el suero, como se a referido, en thísicos y en otras muchas enfermedades, en las quales convienen las cosas frías y húmedas.
    • 1598 Santiago, D. Arte separatoria [1999] II, fol. 72r Esp (CDH )
      Y la otra es la que se sigue: que en los éthicos y thísicos, muchos d'ellos, sobrevienen las dichas enfermedades de una abundancia de humores gruessos y viscosos, los quales se dilatan por las túnicas nervosas y, con la assistencia del calor de la parte, se desecan en ellas y, con la parte gruessa que tienen, cierran las vías y poros de las dichas túnicas; y quando baxa la substancia, que avemos dicho, del celebro a dar húmedo radical a las dichas túnicas y a los huessos, para sustentar los tuétanos, halla las dichas vías y poros cerrados.
    • 1598 Santiago, D. Arte separatoria [1999] II, fol. 73r Esp (CDH )
      Y para éstas se a de usar de las cosas que vayan caminando a esta calidad y que no ayan llegado a ella; las quales son las que están en frío y húmedo, de lo qual se transmuta a lo caliente y húmedo; y por el calor de la parte llegan a la calidad que conviene, que es refrescar y humedecer, lo qual piden los éthicos y thísicos, como se a referido.
    • 1598 Vega Carpio, F. L. Arcadia [1975] 405 Esp (CDH )
      [...] y si es de recién nacido, mezclada con nardo * es saludable unción a los pasmados; su estiércol sana la tiricia, como sea del primer parto; su leche es buena para los héticos, es contraveneno, cura la podagra y quiragra, adereza la tez del rostro, como es testigo la hermosa Popea, * mujer de Otón, y después del crudelísimo Nerón, que se lavaba con ella; sana también la enfermedad tenesmos; sus renes * en vino puro ayudan a una enfermedad secreta; su carne, a los tísicos; su hígado con pan, a los niños, y si les mezclan sus pelos, los hace animosos; tres gotas de la sangre de su oreja curan la calentura llamada de los médicos anfomerinón; la dureza de sus rodillas hace nacer la barba fácilmente. Pero ¿para qué me canso en encarecérosle? Dame, Polinesta, el libro, que estos pastores verán si por estas peñas pudiera servirme un caballo lo que él me sirve."
    • 1606 Alonso Ruyzes Fontecha, J. Diez Previlegios Esp (NTLLE)
      phthoe, consunción o disminución, nacida de llaga, como en los tísicos.
    • 1617 Valladares Valdelomar, J. Caballero [1902] I, 104 Esp (CDH )
      / Vos, Mayorinda, veneranda Brígida, / que volvistes invierno mi canícula, / pues mi fortuna se ha mostrado rígida, / y mi patria me echó de su matrícula, / Dios escalentará mi alma frígida / por que no sea al mundo más ridícula, / pues puede y suele de incurables tísicos / hacer que queden excelentes físicos.
    • c1619 Cabrera Córdoba, L. HFelipe II [1998] Esp (CDH )
      El de Orange, conociendo estaba la importancia en señorear el mar, procuro ocupar los puertos y plaças más importantes de las marinas, cerrando la puerta a los socorros de España y tener la mano para meter los que esperaba de Inglaterra, Escocia, Francia, Alemania, con que iría la guerra a lo largo, como suelen las que no se han de acabar por ímpetu, obstinándose los hombres cada día más y enseñándose a guerrear para padecer y hacer mucho más que dellos se esperaba; como acaece en el que muere de tísico, que su vida se alarga fuera de la opinión de los médicos y esperança de los que los ministran.
    • 1624 Reyes, M. Curial del Parnaso [1909] Esp (CDH )
      Ni han sido con la agudeza que se ha visto en esta junta refutados, porque cumplidamente no hayan sido excelentes; mas porque el mal de forma se ha habituado en los ánimos y tanto se ha internado en los huesos, que la complexión del género humano se ha debilitado y depravado en tanto grado que la virtud vital cede á la gravedad del mal de los vicios, para que no se halle remedio en tan acertados pareceres; cosa que claramente se deja conocer que nuestra cura es tan imposible como la del tísico que escupe podredumbre y se le caen los cabellos de la cabeza.
    • 1629 Corral, G. Cintia Aranjuez [1945] 178 Esp (CDH )
      Finalmente buscando mas agugeros que pulsos: y lastimado Apolo de su alma, que la consideraua aprensada entre dos çarços, de declaròle por hetico y tisico; y era assi, porque se auia desainado de consonantes, y padecia fluxo de sonetos, y colica de romances a cuyos achaques socorrio con esta receta.
    • 1629 Ruiz Alarcón, H. Trat supersticiones [2003] Mx (CDH )
      Para lo qual se note que como dixe arriba, los dolientes de enfermedades prolijas y de las que confirmadas tienen los medicos por incurables, como son eticos, tisicos, &c., viendo que con las medicinas ordinarias no mejoran, luego atribuyen su enfermedad y dolencia a hechizo, y juntamente tienen por cierto que jamás sanaran si el que los enhechiço no los cura o no quiere que sanen.
    • 1611-p1650 Anónimo LMedicinas caseras [1984] Fi (CDH )
      Los ajos comidos sean crudos, o cocidos quitan la tos nueva o antigua pero esto es malo para los eticos y thisicos quando la tos es de calor.
    • 1611-p1650 Anónimo LMedicinas caseras [1984] Fi (CDH )
      Tisicos bebida en cocimiento, les aprovecha por ser de su naturaleza fresca.
    • 1710 Montenegro, P. Materia médica [1942-1944] Ar (CDH )
      El cocimiento del Guayacán bebido por largo tiempo cura la llaga de los pulmones, mejor que otro remedio alguno, como lo tengo por esperiencia, asi en mi, como en otros muchos, qué de asistir á tisicos á visitarlos la contrajimos en el Colegio de Cordova, y viendome yá como desauciado, revolviendo libros, autores, para curarme, hallé en Riveiro, como Ascencio insigne Medico en Francia, curó á muchos con el cocimiento de Guayacán, bebido por largo tiempo.
    • 1710 Montenegro, P. Materia médica [1942-1944] Ar (CDH )
      [...] curó á diez y siete de los tales Tisicos, y asi digo, que el palo santo amarillo, ó aleonado aromatico excede con muchos quilates en virtud al Guayacán, en todas aquellas dotes y virtudes, que de él recitan todos los Autores antiguos y modernos, como se podrá ver por la experiencia: y á demás de esto, retiene todos los flujos de vientre, que proceden de relajacion, frialdad, y demaciada humedad, con solo tomar una dragma del polvo de su cecina en vino, que lá dá en sobrada abundancia, asi su corteza como su palo:– asi mismo se toma para las llagas internas, y externas su polvo.
    • 1710 Montenegro, P. Materia médica [1942-1944] XI, 93 Ar (CDH )
      Ayuda, y socorre soberanamente á los asmaticos, y tisicos, y á los que padecen catarros, y crudezas del tragadero, ó escoreaciones de reumas, á la traquearteria ó canal del pulmon.– Tomada la yerba machacada como una dragma y media con pulpa de higos y ojimiel, dandole punto á modo de conserba y tomada al acostarse, abre las ciegas obstrucciones, purga por abajo la flema y la colera.
    • 1710 Montenegro, P. Materia médica [1942-1944] Ar (CDH )
      Socorre á los asmaticos y tisicos, y á los de catarro, y mayormente si es por causa fria.
    • 1711 Esteyneffer, J. Florilegio medicinal [1712] p. 99 Mx (BD)
      Para distinguir el esputo ó escupitina de tysico, con el de catarro contumàz, es: que la materia que escupe el tysico es de color ceniciento, y no tan blanca, como la pituita, ó esputo del catarro, y hechado en agua tibia, cae la materia al fondo, y la pituita nada encima.
    • 1718 Anónimo Docs Mús Sigüenza (1714-1750) [01-01-1718] Esp (CDH )

      También se leyó una petición de Juan de Torena, padre de un infante de coro, en que pide se le socorra con lo que prudencialmente podía gastar su hijo en el colegio en el ínterin que se le () a dicho su hijo en su lugar por hallarse con principios de tísico y con más pocos medios para su asistencia y, atendiendo el Cabildo a su pobreza y que ha servido a la iglesia con muestras de ser de provecho, acordó que el rector del colegio previamente le socorra con lo que le pareciese suficiente para su alivio y alimento hasta fin de septiembre de este año que se le dé cuenta al Cabildo del estado de la enfermedad.

    • 1727-1728 Torres Villarroel, D. Visiones [1991] Esp (CDH )

      Ya habíamos bajado a la calle del Carmen, cuando deteniendo la humanidad sobre un palo, vimos a un hombre enjuto y chupado como canilla de cementerio; tan pilongo y sucio, que su cara parecía escarpín sudado; los ojos hambreones, que se salían del casco a tragar cuanto miraban, y desde ellos a las papadas se les desmayaban unos pelos lacios, seguidos y mugrientos como cabellera de indio, tanto, que juzgué que tenía la cara con hábitos largos; las manos no eran manos, sino dos manojos de vides; y tan desigual de cuartos, que cada miembropredicabaser de otro hombre, como si le hubieran formado de retales de moribundos, héticos, tísicos y perláticos.

    • 1733 Feijoo, B. J. Theatro crítico universal, V [2003] Esp (CDH )

      Larga y mui delgada: Tímido.

      Hombros anchos, grandes, distantes: Fuerte.

      Laxos: Flaco, tímido, débil.

      Desiguales: Ptísico.

      Bien sueltos: Robusto, fuerte.

      Clavículas ágiles: Sentidos agudos.

    • 1742 Feijoo, B. J. Cartas eruditas, I [2004] Esp (CDH )
      Tómese el esputo purulento del enfermo en un lienzo, el qual se colgará a recibir el humo en una chimenea, y a proporción que el esputo se fuere secando, se irá consumiendo el humor morboso del tísico.
    • a1745 Lozano, P. HConquista Paraguay [1873] Py (CDH )
      [...] y aun á este palo escede en virtud su misma resina, como testifica de propia esperiencia, en un libro que compuso de las yerbas y árboles de esta provincia, el hermano Pedro de Montenegro, de nuestra compañía, sugeto muy perito en la medicina, quien dice que teniendo él mismo y otros sugetos, por haber asistido á unos tísicos en nuestro colegio de Córdoba, tan dañados los pulmones que se daban por desauciados, bebiendo el cocimiento del guayacan del Guaycurú, sanaron en breve perfectamente.
    • 1738-1752 Torres Villarroel, D. Anatomía visible e invisible [1794] Esp (CDH )

      El Sulfures la resina ó grasura mas pesada de la tierra, es cuerpo metálico que con facilidad lo consume el fuego: su llama es hedionda y cerulea. Tiene varias virtudes, y los Médicos lorecetan á los tísicos, asmáticos y calenturientos pestilentes.

    • c1754 Delgado, J. J. HGral islas Poniente [1892] Fi (CDH )

      Dos especies de ranas he visto en estas islas, las unas pequeñas que llaman los tagalos palacá, y los visayas pacla; *las otras grandes que los visayas llaman pocpoc, *por el modo de cantar; unas y otras son comestibles y de grande sustancia, muy á propósito para éticos y tísicos y aun para los sanos.

    • c1754 Delgado, J. J. HGral islas Poniente [1892] 893 Fi (CDH )
      De las culebras, en fin, se pudieran sacar muchas otras medicinas; de su gordura, unto, carne, y hiel para curar tísicos, éticos y asmáticos etc.
    • c1754 Delgado, J. J. HGral islas Poniente [1892] Fi (CDH )

      La carne de cocodrilo es muy semejante á la de la vaca gorda y colorada, y no tuviera yo recelo de comerla en caso de necesidad. El horror que la tienen es por comer á veces el animal carne humana; muchos indios la comen, y aseguran que es muy sabrosa y sana y de grande sustancia. Dándola á los éticos y tísicos les aprovecha y sana. Y si alguno quisiere hacer la experiencia, quizás me agradecerá el haberle mostrado este secreto natural.

    • 1788 Terreros Pando, E. DiccCastVocesCienciasArtes (NTLLE)
      Tísico, el que adolece de tísica (| término de Medicina en jeneral se dice de toda consuncion de cuerpo de cualquiera causa que provenga [...]. Pero en particular se toma por la consuncion que proviene de una úlcera, ó de otro vicio de pulmon, acompañado de una fiebre lenta, que enflaquece el cuerpo, y le extenúa y consume).
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
  2. Acepción en desuso
  3. ac. etim.
    adj. Que tiene tisis. ⇨ Enfermedad caracterizada por consunción gradual y ...
    docs. (1250-2014) 67 ejemplos:
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] fol. 23r Esp (CDH )

      Et presta mucho en el arte de fisica, ca si dieren della molida a beuer a qui se faze tissico, o al que a llagas en el pulmon sana. & esso mismo faz poniendo los poluos enxutos della. Et la estrella que es en el muslo del braço diestro de la figura de uryon a poder sobresta piedra & della recibe su uertud. Et quando es en medio cielo muestra esta piedra mas manifiestamiente sus obras.

    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] fol. 23r Esp (CDH )

      Et presta mucho en el arte de fisica, ca si dieren della molida a beuer a qui se faze tissico, o al que a llagas en el pulmon sana. & esso mismo faz poniendo los poluos enxutos della. Et la estrella que es en el muslo del braço diestro de la figura de uryon a poder sobresta piedra & della recibe su uertud. Et quando es en medio cielo muestra esta piedra mas manifiestamiente sus obras.

    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] fol. 27r Esp (CDH )
      E si tomaren de los palominos de las torcazas e los mataren, en guisa que no salga d'ellos sangre, e los remojaren en el agua un día e los lauaren de dentro, e si ge los dieren a comer otro día con su pluma e con quanto tienen en el uientre, fazerles á grand pro a la costribazón, e alimpiarlas á d'ello e de la flema que se les cría dentro en los cuerpos, e faze pro a las que son tísicas d'ellas.
    • a1300 Anónimo Gerardus falconarius Esc V-II-19 [2004] Esp (CDH )

      Quando quisieren guardar el açor que nunca se faga tisico. sinon por grandeza de rrostro quel dexan. dezimos assi que quandol dan la carne. & la grandez del rrostro traua en la carne que non ge la dexa tragar a de *sso rressollar por las narizes. & fazesseles vna espuma en ellas que deçende al cuerpo, & fazes tisico poco a poco. mas por esquiuar esto que non sea. Conuiene quel faga omne el rrostro a su sazon quandol ouiere meester.

    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 18r Esp (CDH )
      [...] Pero tengo / que a todo omne bien Regido conujene. / mucho aguar el vino & mas jnconujentes / puede traher lo poco aguado que lo / mucho aguado & los quelos non beuen. / saluo al su comer vsan de sanjdat & de / tenprança los buenos vjnos blancos son / para prouocar mucha orjna que es conujnjente / purgaçion a muchos & son bafosos / para las cabeças enla mayor parte / & dañosas mucho para los pechos & para la / tose & para los muy delgados que pareçen / tisicos & los vinos tintos son meiores para / los estomagos [...].
    • c1422-1433 Guadalfajara Trad Biblia Alba II [1920-1922] II, 668 Esp (CDH )

      E el psalmo esta muy claro e manifiesto; pero los notables que deste psalmo aceremos ganado son XII.

      I, que en las mayores tribulaçiones non deue el omne caer en desesperaçion, mas todo sienpre rogar a Dios. II, que las angustias e tribulaçiones fazen a los omnes dessecar la calentura e humidat radical e los torra secos e tissicos e ethicos. III, que las angustias fazen a los omnes que causen su misma muerte, segud faze el pelicano que el mismo se saca el coraçon; e sy segund los latinos se dize por el Mexias, es la intençion que el pelicano resçibe la muerte por saluar a su fijos [...].

    • a1450 Anónimo Arte complida cirugía Lanfranco (BNM 2165) [1993] fol. 69v Esp (CDH )
      Mas la virtud terrea / estiptjca con consoldatjua non puede / prouenjr al pulmon sy non / por las partes muchas sobre / dichas por lo qual non sanan las / llagas del pulmon Mas fazense / enpicos & despues mueren / tisicos E la diaflama / eso mismo non rresçibe / rrestauraçion por quanto sienpre / esta en moujmjento Ca es / estrumento fazjente viento / al coraçon asy commo la / fuelle delos ferreros las / quales en su abrimjento presçiben / al ayre [...].
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 58v Esp (CDH )
      E dize aun Galieno sobre los anforismos que aquellos que son thisicos tosen continuamente, & por causa de la superfluidad que han en el pulmon escupen & se descargan quanto pueden de la tal suçiedad escupiendo, & quando no escupen o no pueden, es señal que la muerte se açerca, ca reteniendo la saliva queda la tal superfluidad de dentro & los espiritus se afogan asi que la persona muy presto muere.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      El otoño descubre a los ptísicos que en el otoño se manifiestan, e esso mismo los que son ptísicos en el otoño mueren. Las señales manifiestas son fiebre ética mansa, e trabajan e se agravian más después del comer que non antes, e con aquesto tienen tos e graveza del pecho e esputo sanioso e bermejor de las maxillas.

    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 20v Esp (CDH )
      / Si vieres orina que fuere bien clara & faze gran espuma / & menuda este tal es etico tisico & ha dolor en los liuianos / e leuantase de afogamiento de grand secura & / rroncanle los pechos quando anda & quiere afogar e / a tal commo este guardado de las cosas secas & frias & de las / muy calientes & secas dale las cosas tenpradas calientes / & humedas e fazle tal xarope commo aqui dize/ toma vn / meollo de maluauisco e la rayz del cardo çucar & cardo / corredor.
    • 1576 Hurtado Toledo, L. Memorial cosas Toledo [1963] 558 Esp (CDH )
      En la capilla de Sant Pedro ay dos hospitales, el primero es el hospital que llaman del Rey, de muy antigua fundacion, porque primero se llamo de Corpus Christi y Nuesra Señora de la Paz, en el qual se haze el mas notable servicio a Nuestro Señor que en todos los demas hospitales a causa que los pobres que aqui son traydos, son de males yncurables ya sin remedio humano espelidos y reprovados de los otros hospitales, porque son tullidos, llagados, cancerados, tisicos, eticos hidropicos y finalmente de buuas, corrompidos y arruynados de tal manera que en los propios cuerpos que por ventura cometieron el delito, padecen en esta vida el purgatorio [...].
    • 1594 Schz Oropesa, A. Discurso mal de urina p. 61 Esp (BD)
      I asi en la chronicas, que tuvieren conocidas señales proprias, es bastante razón, para concluir, que uno no tiene tal enfermedad, averiguar que le faltan las señales propias della […] i así mismo afirmamos bien, que uno no es phthisico, porque se libra algunos ratos de calentura o porque de muy flaco va cobrando carnes.
    • 1598 Mondragón, J. de Censura locura [1953] 118 Esp (CDH )
      Estos hermanos, como sus padres les dexaron corta hacienda, jamás, se atrevieron a casar, sólo se sabe que el primero, que fué Nomehadefaltar, murió en un hospital con grandes esperanças de ser rico; el otro, que fué Acensotomaremos, dizen que aún vive, pero que cada año, por Navidad i San Juan, apellidan dél por cierta deuda, i sino paga, lo hechan en la cárcel: el tercero, que era Quientalpensó, tampoco es muerto, mas no puede vivir mucho, porque de tantos desgustos i enojos que toma, se ha vuelto tísico; i el último, que fué Sigoestaporfía, dizen que se va acabando de gastar ia [...].
    • 1599 Alemán, M. Guzmán Alfarache I [1992] 279 Esp (CDH )

      Haz honra de que esté proveído el hospital de lo que se pierde en tu botillería o despensa; que tus acémilas tienen sábanas y mantas y allí se muere Cristo de frío. Tus caballos de gordos revientan y se te caen los pobres muertos a la puerta de flacos. Esta es honra que se debe tener y buscar justamente; que lo que llamas honra, más propriamente se llama soberbia o loca estimación, *que trae los hombres éticos y tísicos, con hambre canina de alcanzarla, para luego perderla —y con el alma, que es lo que se debe sentir y llorar.»

    • c1605 Ocaña, D. Relación viaje América [1969] 284 Pe (CDH )
      Y así los indios, cuando van al cerro, dicen que van a morir, y se despiden de sus mujeres e hijos para no volverse más a ver, que es lastimosa cosa de ver; y otros llevan a sus mujeres consigo y a sus hijos, y todos mueren o la mayor parte, porque a los que andan en las minas, porque no hay respiradero por donde salga el polvo, aquel polvillo que sacude cuando barretea, éntraseles por las narices y por la boca y áseseles a la asadura, y luego les da una tosecilla como cuando uno está tísico; y así poco a poco se les va aumentando la tos hasta que vienen a echar a pedazos por la boca la asadura.
    • 1612 Vega Carpio, F. L. Pastores Belén [1991] Esp (CDH )
      Díganos Isaías su capítulo, / y verás con qué espíritu Profético / de Dios y Redentor le escribe el título.bato / El trujo a Adán salud, que enfermo y hético * / se halló con tantos males, y tan tísico, / que no los cuenta número Aritmético. rústicoNació en Belén su antídoto, y el físico / bien de su mal, de su veneno cáustico, / hablando con estilo Metafísico.
    • 1629 Ruiz Alarcón, H. Trat supersticiones [2003] Mx (CDH )

      Lo primero se aduierta (y es la primera parte de este capitulo) que las enfermedades y daños que se reduçen a este capitulo, son tres: la primera, de los niños que suelen asombrarse y dar gritos como que uiesen alguna cosa espantoça, lo mismo quando despiertan dando boçes y llorando como espantados, quando sin acçidente esterior suelen perder el sentido y quedar como muertos y otros hiriendo; y a estas enfermedades suelen llamar en castellano gota coral y alfereçia; la segunda, es quando alguno o por la mucha edad o por ser de suyo enfermizo o por flaqueza de estomago, o por estar etico y tísico, se va poco a poco enflaqueçiendo y consumiendo [...].

    • 1644 Enríquez Gmz, A. Siglo pitagórico [1991] 287 Esp (CDH )
      Usurero —le dije—, tan usado / que estás, de miserable, desainado; **vigilia abominable, / langosta * perdurable, / hidrópico de viento, / tísico sin comer, rico avariento, / esclavo de ti mismo, / hombre con silogismo, / Tántalo racional, / bruto sin ella / (pues la gula en tu boca fue doncella), * / ¿qué imaginas, qué intentas, qué pretendes, / si a Dios y al mundo ofendes / con un pecado vil cuya avaricia / carece de castigo y de justicia? /
    • 1654-1658 Barrionuevo, J. Avisos I, II, III y IV [1892-1893] Esp (CDH )
      Murió en Nápoles el Duque de Andria, por haberle hecho tísico la herida que le dieron, viniendo á ponerse como un palo quien llegó á apostárselas á Baco en lo corpulento.
    • 1728 Suárez Ribera, F. Remedios deplorados [1732] p. 50 Esp (BD)
      […] y aunque algunos juzgan, que el que padece empiema en el pulmon ya es pthisico in actu, debo dezir, que se engañan, porque aunque assi el empiema como la pthisis, consisten en vlcera, discrepan en que en la pthisis pulmonaria están los pulmones vlcerados, y en el empiema se halla el pus contenido en las membranas, y asi una vez roto, si con toda brevedad no se purga, mundifica.
    • 1730 Sanz Dios Guadalupe, F. Medicina Práctica Guadalupe p. 226 Esp (BD)
      […] si se viesse à un enfermo con palidez, debilidad, calentura lenta, molesta tós, y consumpcion del cuerpo, publiquese por pthisico.
    • 1737 RAE DiccAutoridades (NTLLE)
      Ptísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de ptísica, ó lo que toca ó pertenece a ella ( | Enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ò livianos, originada de humor acre y corrosivo que ha caído a ellos y causa al paciente tós acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1770 Piquer, A. Trad Obras Hippocrates, III p. 78 Esp (BD)
      Conocerán también los Médicos, que en esta casta de la phtisis hay calosfríos, intermisiones en la calentura y delirios; con lo qual esta enfermedad se suele equivocar con otras; pero si el Médico ve que el enfermo tiene la disposición natural de su cuerpo a la phtisis, y junto con esto padece una destilación como la que pinta aquí Hippocrates bastantes señales tendrá para conocerse que el enfermo va a hacerse phtisico.
    • 1787 Isla, J. F. Descripción máscara [1787] Esp (CDH )

      En fin llevaba la cara muy flaca y chupada, y en la mano una taza de leche de burra con este rótulo :

      Leche de burra me receta el Médico, / Por ver que soy la enjuta Metafísica, / Que de puro delgada pasé á Tisica.
    • 1825 Núñez Taboada, M. DiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca, adj. y s. El que padece la enfermedad de tisis (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos).
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • c1250 Alfonso X Lapidario [2003] fol. 23r Esp (CDH )

      Et presta mucho en el arte de fisica, ca si dieren della molida a beuer a qui se faze tissico, o al que a llagas en el pulmon sana. & esso mismo faz poniendo los poluos enxutos della. Et la estrella que es en el muslo del braço diestro de la figura de uryon a poder sobresta piedra & della recibe su uertud. Et quando es en medio cielo muestra esta piedra mas manifiestamiente sus obras.

    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] fol. 27r Esp (CDH )
      E si tomaren de los palominos de las torcazas e los mataren, en guisa que no salga d'ellos sangre, e los remojaren en el agua un día e los lauaren de dentro, e si ge los dieren a comer otro día con su pluma e con quanto tienen en el uientre, fazerles á grand pro a la costribazón, e alimpiarlas á d'ello e de la flema que se les cría dentro en los cuerpos, e faze pro a las que son tísicas d'ellas.
    • 1250 Toledo, A. Moamín [2003] Esp (CDH )

      La XI manera es que se sacuden e triemen, e cáense de sus perchas.

      La XII manera es que se les apolluengan sus enfermedades, e fázense tísicas. E las sennales d'esta enfermedad connocerlas an por las sennales que dixiemos de lo que tuellen en elcapítolo XIII, allí ó fabla de la enfermedad de la tísica

    • a1300 Anónimo Gerardus falconarius Esc V-II-19 [2004] Esp (CDH )

      Quando quisieren guardar el açor que nunca se faga tisico. sinon por grandeza de rrostro quel dexan. dezimos assi que quandol dan la carne. & la grandez del rrostro traua en la carne que non ge la dexa tragar a de *sso rressollar por las narizes. & fazesseles vna espuma en ellas que deçende al cuerpo [...].

    • a1300 Anónimo Gerardus falconarius Esc V-II-19 [2004] Esp (CDH )

      Quando quisieren guardar el açor que nunca se faga tisico. sinon por grandeza de rrostro quel dexan. dezimos assi que quandol dan la carne. & la grandez del rrostro traua en la carne que non ge la dexa tragar a de *sso rressollar por las narizes. & fazesseles vna espuma en ellas que deçende al cuerpo, & fazes tisico poco a poco. mas por esquiuar esto que non sea. Conuiene quel faga omne el rrostro a su sazon quandol ouiere meester.

    • a1300 Anónimo Gerardus falconarius Esc V-II-19 [2004] Esp (CDH )

      Conuiene quel faga omne el rrostro a su sazon quandol ouiere meester. Et por aquella espuma que acogecha. conujene quel de omne carne en que aya neuj neruios. & magen la en clara de hueuos & dengela. Et esto le guaresçe del espuma antes que sea tisico.

    • a1300 Anónimo Gerardus falconarius Esc V-II-19 [2004] Esp (CDH )

      Et si fuere fecho tisico. a meester que tomen la rruda. & las maluas & el apio. & magen lo bien. & saquen el çumo dello. & colen lo bien con vn panno de lino. Et tomen la grossura del puerco que ssea criado de pan & que non sea de monte njn verraco. & tomen aquella sayn. & rritan la en vna sarten linpia & colen lo. & despues que fuere colado. tomen las dos partes daquella ssayn. & la terçera del çumo de las yeruas que dixiemos. & mezclen lo bien. & metan lo en vna bostia. & yeles. & tomen el açor despues que ouiere comjdo a la noche. & tengan le çerca del fuego. & denle a comer daquel unguente.

    • a1429 Chirino, A. Medicina (Esc. b.IV.34) [1987] fol. 18r Esp (CDH )
      [...] Pero tengo / que a todo omne bien Regido conujene. / mucho aguar el vino & mas jnconujentes / puede traher lo poco aguado que lo / mucho aguado & los quelos non beuen. / saluo al su comer vsan de sanjdat & de / tenprança los buenos vjnos blancos son / para prouocar mucha orjna que es conujnjente / purgaçion a muchos & son bafosos / para las cabeças enla mayor parte / & dañosas mucho para los pechos & para la / tose & para los muy delgados que pareçen / tisicos & los vinos tintos son meiores para / los estomagos [...].
    • c1422-1433 Guadalfajara Trad Biblia Alba II [1920-1922] II, 668 Esp (CDH )

      E el psalmo esta muy claro e manifiesto; pero los notables que deste psalmo aceremos ganado son XII.

      I, que en las mayores tribulaçiones non deue el omne caer en desesperaçion, mas todo sienpre rogar a Dios. II, que las angustias e tribulaçiones fazen a los omnes dessecar la calentura e humidat radical e los torra secos e tissicos e ethicos. III, que las angustias fazen a los omnes que causen su misma muerte, segud faze el pelicano que el mismo se saca el coraçon; e sy segund los latinos se dize por el Mexias, es la intençion que el pelicano resçibe la muerte por saluar a su fijos [...].

    • a1450 Anónimo Arte complida cirugía Lanfranco (BNM 2165) [1993] fol. 69v Esp (CDH )
      Mas la virtud terrea / estiptjca con consoldatjua non puede / prouenjr al pulmon sy non / por las partes muchas sobre / dichas por lo qual non sanan las / llagas del pulmon Mas fazense / enpicos & despues mueren / tisicos E la diaflama / eso mismo non rresçibe / rrestauraçion por quanto sienpre / esta en moujmjento Ca es / estrumento fazjente viento / al coraçon asy commo la / fuelle delos ferreros las / quales en su abrimjento presçiben / al ayre [...].
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )

      Tisica eso mesmo viene alguna vez de sangre, ca quando alguna vena es rompida en el pulmon, la sangre se corrompe & torna en podre, segund dize Ipocras. E quando el pulmon es assi deguastado, todo el cuerpo se consume, ca el pulmon atrae el aire por todo el cuerpo para refrescar el coraçon. E quando es llagado o enfermo, el estriñe su movimiento & no se estiende segund su natura, por la qual cosa el calor cresçe y el aire frio no es atraido como solia, & assi, a causa del grand calor, el cuerpo es guastado. La fiebre etica es sienpre con tisica, ca toda persona etica es tisica, aunque alguna persona pueda ser tisica & no etica. Esta fiebre etica guasta el humor sustançial de la persona, do se sigue luego tisica. Etica es la que guasta todo el cuerpo de la persona.

    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )
      La fiebre etica es sienpre con tisica, ca toda persona etica es tisica, aunque alguna persona pueda ser tisica & no etica.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 58v Esp (CDH )
      E dize aun Galieno sobre los anforismos que aquellos que son thisicos tosen continuamente, & por causa de la superfluidad que han en el pulmon escupen & se descargan quanto pueden de la tal suçiedad escupiendo, & quando no escupen o no pueden, es señal que la muerte se açerca, ca reteniendo la saliva queda la tal superfluidad de dentro & los espiritus se afogan asi que la persona muy presto muere.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )
      E otras vezes lo mesmo aviene por muy grand calor & sequedad que guasta el humor & su sustançia & retira los nervios del pecho, como paresçe en aquellos que son tisicos o ethicos.
    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] fol. 102v Esp (CDH )

      [...] & dende deven untar el enfermo con unguentos frios & humidos & resolutivos, como de azeite de violetas con miel blanca, & leche de mugeres que crian hijos. El Plateario dize que la leche de las cabras vale mucho a los que son tisicos y eticos, mas que echen dentro guijarros calientes & que el enfermo lo tome en ayunas quando el estomago es vazio.

    • 1494 Burgos, V. Trad Proprietatibus Rerum Anglicus [1999] Esp (CDH )

      La carne de los galapagos de los montes es mediçinal. Ca es recuperativa de la virtud perdida por enfermedad & por esto es ella buena a los que son tisicos & ethicos.

    • 1495 Nebrija, A. VocEspLat Esp (NTLLE)
      Tísica, dolencia, phthisis, is. Tísico, doliente de ella, phthisicus, a, um.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      La ptísica antigua non recibe cura. Quando el esputo del ptísico cae sobre los carbones encendidos e fiede, desempachados son, que nunca andarán sobre tierra. Aquesto supósito, porque algunas vezes viene por causa de empima, e muchos se engañan en ello, salvo que el olor deve ser más grave assí como assadura de carne, quando viene del pulmón. E si la materia cayere al fondo de la agua, en la ptísica incurable es, salvo que alguna vez se buelve con la flema viscosa, e entonces nada encima, entonces engáñase el médico salvo si no la apartare e si fuere en medio ya se prepara para la confirmación. E dize Avicena, que si postilla aparesciere sobre las espaldas morrá en siete días. Dize esso mismo Avicena, que él vido muger ptísica de la qual su vida fue alongada xxiiiiaños.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      E d'esto dize Avicena, que la mortaja era aparejada a una muger ptísica, e curóla un su hermano con que comió muchedumbre de açúcar rosado, e fue tanta la quantidad que comió que no se puede creer, e bivió muchos años. E si por causa de las rosas aconteciere algund apretamiento, use axarope fecho de isopo. E si por causa del isopo aconteciere algund escalentamiento, use trociscos de cámphora, o use diagargante frío. El tercero son los figos secos e las fructas semejantes, así como son los piñones e las uvas pasas mondadas, almendras mondadas, jujubas, sebastianes e semejantes.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      El otoño descubre a los ptísicos que en el otoño se manifiestan, e esso mismo los que son ptísicos en el otoño mueren. Las señales manifiestas son fiebre ética mansa, e trabajan e se agravian más después del comer que non antes, e con aquesto tienen tos e graveza del pecho e esputo sanioso e bermejor de las maxillas.

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )

      Devedes esso mismo de entender que el venino en la oquedad del pecho estando, muchas vezes engañó al físico que por lo más los juzga por ptísicos e incurables. Pero alimpiado el venino escapan, que es vergonçoso al físico, pues considera las señales que son dichas capítulo de ptisi. Pues bueno es de parar mientes al pulso e si non muestra fiebre non paresce que sea de llaga del pulmón, pues si es ordenado e tardío, non ay ptísica nin ética segund yo pienso

    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      Devedes de entender que estos asmáticos muchas vezes son ptísicos e flacos, e algunas vezes adelgazados, e por esso en las tales ayamos miedo de las melezinas laxativas e vomitivas e todas las que son de fuerte virtud.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] 174 Esp (CDH )
      E por esso él que pierde la vula pierde estos cinco provechos, e por esso non pueden padecer nin calor nin frior ni sed, antes se dañan de ligero de qualquier causa ligera e por lo más mueren tísicos.
    • 1495 Anónimo Trad Med Gordonio [1991] Esp (CDH )
      E alguna vez es por mala crisi e sinthomática e la causa es que la natura alança el humor con apresuramiento porque la virtud contentiva non lo puede sofrir, o por grande flaqueza de la virtud contentiva así como los que se acercan a la muerte e a tísicos e en las fiebres mortales.
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 12r Esp (CDH )
      / Orina palida & espumosa & gruesa & cardena / & çenizienta & poca significa tissico & si le cayere / menazon es muerte / Orina subçitrina & tinta que semeia a la color de la / çidra significa muchas cosas porque es a oras clara / & a oras espesa / Orina subçitrina en mançebo flematico o en malenconia / significa doble terçiana.
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 18r Esp (CDH )
      E si la orina fuere bien clara & feziere grande espuma / & menuda. el tal es tisico & ha dolor en los livianos / & leuantase de afogamiento de gran secura / & roncanle los pechos quando anda & quierese afogar / Este tal guardese de las cosas secas & calientes & lleguese / a las tenpradas calientes & humedas. /
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 18v Esp (CDH )
      / / E si fuere la orina amarilla & bien clara & tirare / contra agua & feziere grande espuma & menuda demuestra / que es tisico & leuantase de escalentamiento / de los liuianos & lança mucho venino por la garganta / tan cozido que pareçe que echa los liuianos / A este tal dizen algunos que beua el sayn del puerco / & si fuere judio o moro beua la rennonada del carnero cozido / & con manteca de vacas / La orina que tirare a color verde leuantase de friura / del figado e esta tal trae dolor a la cabeça & faze / perder la vista de los ojos.
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 20v Esp (CDH )
      / Si vieres orina que fuere bien clara & faze gran espuma / & menuda este tal es etico tisico & ha dolor en los liuianos / e leuantase de afogamiento de grand secura & / rroncanle los pechos quando anda & quiere afogar e / a tal commo este guardado de las cosas secas & frias & de las / muy calientes & secas dale las cosas tenpradas calientes / & humedas e fazle tal xarope commo aqui dize/ toma vn / meollo de maluauisco e la rayz del cardo çucar & cardo / corredor.
    • a1500 Anónimo LRecetas [1997] fol. 21r Esp (CDH )
      Si fuere la orina blanca & bien clara & luzia & faze grand / espuma & menuda es tisico & leuantase de flema blanca / q tiene en los rennones & bueluese en los cannos de los liuianos / & lança mucha espuma blanca podrida por la garganta / & materia con ella & rroncanle los pechos este tal / a menester la cura sobre dicha. /
    • 1570 Casas, C. VocToscCast Esp (NTLLE)
      Tísico, tisiguzzo.
    • 1576 Hurtado Toledo, L. Memorial cosas Toledo [1963] 558 Esp (CDH )
      En la capilla de Sant Pedro ay dos hospitales, el primero es el hospital que llaman del Rey, de muy antigua fundacion, porque primero se llamo de Corpus Christi y Nuesra Señora de la Paz, en el qual se haze el mas notable servicio a Nuestro Señor que en todos los demas hospitales a causa que los pobres que aqui son traydos, son de males yncurables ya sin remedio humano espelidos y reprovados de los otros hospitales, porque son tullidos, llagados, cancerados, tisicos, eticos hidropicos y finalmente de buuas, corrompidos y arruynados de tal manera que en los propios cuerpos que por ventura cometieron el delito, padecen en esta vida el purgatorio [...].
    • 1594 Schz Oropesa, A. Discurso mal de urina p. 61 Esp (BD)
      I asi en la chronicas, que tuvieren conocidas señales proprias, es bastante razón, para concluir, que uno no tiene tal enfermedad, averiguar que le faltan las señales propias della […] i así mismo afirmamos bien, que uno no es phthisico, porque se libra algunos ratos de calentura o porque de muy flaco va cobrando carnes.
    • a1598 Cabrera, A. Consideraciones Evangelios Adviento [1906] Esp (CDH )

      Ya esta señal será muy en contrario de la de entonces; y así causará tanto miedo, tanto espanto en los que ni en mar, ni en tierra, ni en cielo hallan refugio, que de puro temor anden secos como éticos ó tísicos. Habiéndoseles ensangostado los pastos, no es mucho que se ensangosten ellos y se anflaquezcan y sequen, enflaquecidos y secos los lugares de la pastura. Atiendan á esto los que con tan sobrada demasía se extienden por términos ajenos. Los que, como dice Isaías, van siempre comprando y ajuntando á su casa la del vecino, y á su haza la que con ella parte linderos.

    • 1598 Mondragón, J. de Censura locura [1953] 118 Esp (CDH )
      Estos hermanos, como sus padres les dexaron corta hacienda, jamás, se atrevieron a casar, sólo se sabe que el primero, que fué Nomehadefaltar, murió en un hospital con grandes esperanças de ser rico; el otro, que fué Acensotomaremos, dizen que aún vive, pero que cada año, por Navidad i San Juan, apellidan dél por cierta deuda, i sino paga, lo hechan en la cárcel: el tercero, que era Quientalpensó, tampoco es muerto, mas no puede vivir mucho, porque de tantos desgustos i enojos que toma, se ha vuelto tísico; i el último, que fué Sigoestaporfía, dizen que se va acabando de gastar ia [...].
    • 1598 Vega Carpio, F. L. Arcadia [1975] Esp (CDH )
      LerianoEste es el sitio, Galafrón, discántalo / en estilo galán y metafísico, / y hasta la esfera del amor levántalo.GalafrónMal puede el corazón enfermo y tísico, / Lerïano, moverse a dulce cántico, / sino es Apolo en las tristezas físico. Leriano¡Quién fuera, como Circe, nigromántico, / y pudiera volar hasta las hélices, / y a brazos exceder el mar Atlántico! *
    • 1599 Alemán, M. Guzmán Alfarache I [1992] 279 Esp (CDH )

      Haz honra de que esté proveído el hospital de lo que se pierde en tu botillería o despensa; que tus acémilas tienen sábanas y mantas y allí se muere Cristo de frío. Tus caballos de gordos revientan y se te caen los pobres muertos a la puerta de flacos. Esta es honra que se debe tener y buscar justamente; que lo que llamas honra, más propriamente se llama soberbia o loca estimación, *que trae los hombres éticos y tísicos, con hambre canina de alcanzarla, para luego perderla —y con el alma, que es lo que se debe sentir y llorar.»

    • 1600 Sigüenza, J. HOrden SJerónimo II [1907] 227 Esp (CDH )
      Como se trataua tan asperamente (que nunca en esto hizo treguas con su cuerpo) vino a secarse mucho: juzgauanle por etico, aunque no era sino pura flaqueza de ayunos: y al fin dio en tisico.
    • 1605 Lpz Úbeda, F. Pícara Justina [1977] Esp (CDH )

      Mi tercer abuelo de parte de padre alcanzó buen siglo; fue de los primeros que trajeron el masicoral y tropelías a España. Casó con una volteadora, gran oficiala de todas vueltas y larga de tarea, la cual, con morir de más de cincuenta años, después un año tísica, murió volando.

    • c1605 Ocaña, D. Relación viaje América [1969] 284 Pe (CDH )
      Y así los indios, cuando van al cerro, dicen que van a morir, y se despiden de sus mujeres e hijos para no volverse más a ver, que es lastimosa cosa de ver; y otros llevan a sus mujeres consigo y a sus hijos, y todos mueren o la mayor parte, porque a los que andan en las minas, porque no hay respiradero por donde salga el polvo, aquel polvillo que sacude cuando barretea, éntraseles por las narices y por la boca y áseseles a la asadura, y luego les da una tosecilla como cuando uno está tísico; y así poco a poco se les va aumentando la tos hasta que vienen a echar a pedazos por la boca la asadura.
    • 1605 Sigüenza, J. HOrden San Jerónimo III [1909] 341 Esp (CDH )
      Era el sieruo de Dios de vn sugeto harto flaco, y el le auia gastado mucho con la aspereça de su vida y muchas penitencias, y ansi a la postre vino a estar tisico, y con solo los huesos y el pellejo.
    • 1605 Sigüenza, J. HOrden San Jerónimo III [1909] Esp (CDH )

      Viuio, como dixe, mucho tiempo tisico. Algunos años antes que muriesse tuuo vna larga enfermedad que poco menos estuuo en la cama vn año. Sentia mas el trabajo de los enfermeros que el suyo. Cobró alguna salud, y pedia cada dia a nuestro Señor con gran humildad que quando fuesse servido lleuarle desta vida, fuesse con vna enfermedad breue, porque no diesse pena a los que le seruian.

    • 1605 Sigüenza, J. HOrden San Jerónimo III [1909] 673 Esp (CDH )
      Murió como santo y de la enfermedad que mueren muchos de esta buena raza, que es de tisicos, por tratar mal su cuerpo, durmiendo poco, en el suelo ó en vna tabla, vestidos por no embaraçarse a la presteza de la obediencia, comiendo mal, enfriandose, resfriandose, sudando, haziendo muchas disciplinas, y al fin no teniendo ningun cuydado con el pobre asno deste cuerpo, y cae con tantas sobrecargas y lleuaselos Dios llenos de dias en pocos dias.
    • 1605 Sigüenza, J. HOrden San Jerónimo III [1909] 675 Esp (CDH )
      No le dio a el ninguna pena verse tisico, ni trataua de su mal que sino fuera suyo, tanta seguridad de su bien le auia Dios puesto en el alma.
    • 1606 Alonso Ruyzes Fontecha, J. Diez Previlegios Esp (NTLLE)
      ekpiticos, tísico, con materia en el pecho.
    • c1590-1610 Cairasco Figueroa, B. Obra poética [1857] Esp (CDH )
      Ambrosio, / El que humilló á Teodosio, / Esdras, Moisés, María, el rey profético / Gustó de ser poético, / Y á Salomon la celestial Salmántica / Poso en el alma Canticorum Cantica . / La Madre virginal del Unigénito, / Visitando la prima, hizo en viéndola, / Aquel divino canto en voz clarífica / De la sacra, Magnífica, / Escrito en su alma santa con la péndola / Del soberano Amor, que del Ingénito / Y de su Primogénito / Procede, dictador desta poética; / Y si alguna alma ética / De mortífero mal se siente tísica, / Use de la alta física / Desta poesía, y deje versos frívolos, / Que son malditos ídolos.
    • 1612 Vega Carpio, F. L. Pastores Belén [1991] Esp (CDH )
      Díganos Isaías su capítulo, / y verás con qué espíritu Profético / de Dios y Redentor le escribe el título.bato / El trujo a Adán salud, que enfermo y hético * / se halló con tantos males, y tan tísico, / que no los cuenta número Aritmético. rústicoNació en Belén su antídoto, y el físico / bien de su mal, de su veneno cáustico, / hablando con estilo Metafísico.
    • 1625 Castillo Solórzano, A. Donaires Parnaso II [1998] II, fol. 53v Esp (CDH )
      Libre de verse en el Profundo Piélago, / que a tantos sumergió el oluido trágico / por quien cobra renombre de Archipiélago. / Y a Zirce me escapé del rigor mágico, / donde en ser tu galán estaua Thísico, / y conuertido ya en monstruo seluágico. / Que el desengaño es vn esperto sísico, / y obligóme a dexar tu trato herético / persuadido por modo metafísico. /
    • 1629 Ruiz Alarcón, H. Trat supersticiones [2003] Mx (CDH )
      El llamado ololiuhqui es una semilla como lantejas o hieros, la qual bebida priua del juicio, y es de marauillar la fe que estos desdichados naturales tienen con esta semilla, pues bebiendo, como a oraculo la consultan, para todas quantas cosas desean saber, hasta aquellas a que el conocimiento humano no puede llegar, como para saber la causa de las enfermedades, porque casi quantos entre ellos estan eticos, tisicos, con camaras o con qualquiera otra enfermedad de las prolijas, luego lo atribuyen a hechiço [...].
    • 1629 Ruiz Alarcón, H. Trat supersticiones [2003] Mx (CDH )

      Lo primero se aduierta (y es la primera parte de este capitulo) que las enfermedades y daños que se reduçen a este capitulo, son tres: la primera, de los niños que suelen asombrarse y dar gritos como que uiesen alguna cosa espantoça, lo mismo quando despiertan dando boçes y llorando como espantados, quando sin acçidente esterior suelen perder el sentido y quedar como muertos y otros hiriendo; y a estas enfermedades suelen llamar en castellano gota coral y alfereçia; la segunda, es quando alguno o por la mucha edad o por ser de suyo enfermizo o por flaqueza de estomago, o por estar etico y tísico, se va poco a poco enflaqueçiendo y consumiendo [...].

    • 1644 Enríquez Gmz, A. Siglo pitagórico [1991] 287 Esp (CDH )
      Usurero —le dije—, tan usado / que estás, de miserable, desainado; **vigilia abominable, / langosta * perdurable, / hidrópico de viento, / tísico sin comer, rico avariento, / esclavo de ti mismo, / hombre con silogismo, / Tántalo racional, / bruto sin ella / (pues la gula en tu boca fue doncella), * / ¿qué imaginas, qué intentas, qué pretendes, / si a Dios y al mundo ofendes / con un pecado vil cuya avaricia / carece de castigo y de justicia? /
    • 1611-p1650 Anónimo LMedicinas caseras [1984] Fi (CDH )

      Pasmo, desleir su raiz oriental en vino y beberla, y causa buena efecto.

      Tisico, usar del cocimiento de algunos dias y el agua ordinaria de colasiman.

      Espinas saetas, plomo o hierro sus ojas majadas y aplicadas los sacan o facilitan [...].

    • 1654-1658 Barrionuevo, J. Avisos I, II, III y IV [1892-1893] Esp (CDH )
      Murió en Nápoles el Duque de Andria, por haberle hecho tísico la herida que le dieron, viniendo á ponerse como un palo quien llegó á apostárselas á Baco en lo corpulento.
    • 1675 Calle, F. Baile esdrújulos Vergel de entremeses Esp (CDH )
      Bern.Andújare.Isab.Esso es darse vn verde.

      Sale representando.

      Bern. Rábanos. / desta vez lo dexo tísico: / elose como carámbano. / Que quieres aqui Murciegalo? / Válgate el diablo por páxaro! Ant.Quién le ha hecho metafísico? / mire con que viene el fámulo.
    • 1722 Mtz, M. Medicina sceptica p. 136 Esp (BD)
      Y à nadie admire que aya comunicación de las primeras vias al cutis; pues Schneidero (A) afirma, vio un joven phthisico, que escupia sangre, y materia; y abierto el cadaver se hallaron los pulmones enteros, y el higado consumido.
    • 1726 La suma medicina o piedra filosofal [1997] Esp (CDH )
      Los alientos, que estaban tísicos, las fuerzas éticas, las respiraciones dificultosas, y todos los movimientos emplastados de la ociosidad, ya van cobrando su nativo valor con el nuevo ejercicio; a todos doy a beber los sabrosos cordiales del esparcimiento ya arrojando un canto, apedreando un cuerno (que esto se llama jugar a la calva), y esto lo ejercito pocas veces, que por acá hay pocas calvas con cuernos, al revés de otras poblaciones, que no hay calva, por estéril que sea, que no brote estos duros pelambres; ya burlando a un novillo, haciendo sudar a un caballo, y ya rodando un monte por asustar un pájaro, tareas todas, aunque reñidas con la seria política, gustosas y acomodadas a la vida natural [...].
    • 1728 Suárez Ribera, F. Remedios deplorados [1732] p. 50 Esp (BD)
      […] y aunque algunos juzgan, que el que padece empiema en el pulmon ya es pthisico in actu, debo dezir, que se engañan, porque aunque assi el empiema como la pthisis, consisten en vlcera, discrepan en que en la pthisis pulmonaria están los pulmones vlcerados, y en el empiema se halla el pus contenido en las membranas, y asi una vez roto, si con toda brevedad no se purga, mundifica.
    • 1730 Sanz Dios Guadalupe, F. Medicina Práctica Guadalupe p. 226 Esp (BD)
      […] si se viesse à un enfermo con palidez, debilidad, calentura lenta, molesta tós, y consumpcion del cuerpo, publiquese por pthisico.
    • 1737 Mayans Siscar, G. Orígenes [1984] Esp (CDH )

      PH

      PH, letra griega, quitada del principio

      Phtisicus, tísico.

      PH, quitada del medio

    • 1737 RAE DiccAutoridades (NTLLE)
      Ptísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de ptísica, ó lo que toca ó pertenece a ella ( | Enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ò livianos, originada de humor acre y corrosivo que ha caído a ellos y causa al paciente tós acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1725-1744 Torres Villarroel, D. Pronósticos Piscator [2006] Esp (CDH )

      Un Galopín de Caballeriza, romo, tuerto, denegrido, estercolado el rostro de moxicones de materia, berrugas de podre, y privadas de costras; tan desfarrapado y gritón, que parecía Ayudante de Verdugo y Peón de Pregonero, venía la otra mañana por la calle de Segovia aporreando a maldiciones, latigazos y gritos a quatro esqueletos de dos pares de mulas asmáticas en la tercera especie, y tísicas hasta la quarta generación.

    • 1768 Azara, J. N. Cartas I, 171 Cartas a D. Manuel de Roda Esp (CDH )

      Me ha enseñado el borrador de una Memoria, que queria enviar por sí al P. confesor, y que no se atrevia; con este motivo, yo le he dicho que me la dirija á mí, que yo se la enviaré: acaba de hacerlo; cosa mas borrosa no se puede leer, hace erizar los cabellos, como es toda de su puño, se la envío tal cual, en confianza: me pesa que por hacerme un poco la corte, me adule en tal cual paso; pero no lo puedo remediar, ni era razon borrarlo; ni por el poco tiempo me puedo quedar con copia: en suma, por la escritura de Pisani, era menester ahorcar á Azpuru. Si á alguno lo ha de fiar el P. confesor, será á vd.; y asi lo verá; sino, pierde vd. poco en no oír repetidas, tales miserias, pues vd. es el único que sabe de ellas; tanto como yo. A mí, libros y retiro, me han de sacar á puerto, y librarme de volverme tísico.

    • 1769 Piquer, A. Trad Obras Hippocrates I p. 244 Esp (BD)
      El hacerse ulcerillas en las fauces, si hay calentura, es muy malo; y si no hay calentura, no se debe temer mucho, porque todos los que tienen la cabeza débil, y son inclinados a catharros, suelen alguna vez experimentar llaguelas en la lengua, en el paladar y en las fauces, sin peligro. pero quando estos malecitos vienen con calentura son indicio de destilación ferina. Llaman así los médicos aquella destilación, que presto úlcera las fauces y lleva consigo calentura, y el enfermo brevemente va á thisico ó empiemático.
    • 1770 Piquer, A. Trad Obras Hippocrates, III p. 78 Esp (BD)
      Conocerán también los Médicos, que en esta casta de la phtisis hay calosfríos, intermisiones en la calentura y delirios; con lo qual esta enfermedad se suele equivocar con otras; pero si el Médico ve que el enfermo tiene la disposición natural de su cuerpo a la phtisis, y junto con esto padece una destilación como la que pinta aquí Hippocrates bastantes señales tendrá para conocerse que el enfermo va a hacerse phtisico.
    • 1772 Cadalso, J. Eruditos violeta [1818] 49 Esp (CDH )
      Otros habeis de tener aprehensiones de enfermedades; y si alguno os pregunta el estado de vuestra importante salud, quejaos de todos los males á que está expuesta la frágil máquina del cuerpo humano; y aunque tengais mas fuerza que un Hércules, y mas colores que un Baco, ensartad lo de tísico, ético, asmático, paralítico, escorbútico, &c. &c. &c. &c. de modo que se queden en ayunas de la respuesta, como no la escriban, y la lleven al Proto-Medicato.
    • 1787 Isla, J. F. Descripción máscara [1787] Esp (CDH )

      En fin llevaba la cara muy flaca y chupada, y en la mano una taza de leche de burra con este rótulo :

      Leche de burra me receta el Médico, / Por ver que soy la enjuta Metafísica, / Que de puro delgada pasé á Tisica.
    • 1825 Núñez Taboada, M. DiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca, adj. y s. El que padece la enfermedad de tisis (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos).
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
  4. Acepción en desuso
  5. adj. Perteneciente o relativo a la tisis. ⇨ Enfermedad caracterizada por consunción gradual y ...
    docs. (1719-2014) 22 ejemplos:
    • 1719 Glz Torres, E. Crón seraphica 5.ª parte [1719] p. 425 Esp (BD)
      En el Convento de Bolonia vna Religiosa se veia en terminos de morir, a causa de vna calentura thisica, que por espacio de dos años lentamente le avia consumido las carnes, y estaba tan en los huessos, que no parecia sino un esqueleto con alma. Llegabase à esto un tos tan violenta, y continua que no se podia oir sin mucho quebranto; teniendo por otra parte tan cerrado el pecho, que con mucha dificultad se le percivia el habla.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • 1719 Glz Torres, E. Crón seraphica 5.ª parte [1719] p. 425 Esp (BD)
      En el Convento de Bolonia vna Religiosa se veia en terminos de morir, a causa de vna calentura thisica, que por espacio de dos años lentamente le avia consumido las carnes, y estaba tan en los huessos, que no parecia sino un esqueleto con alma. Llegabase à esto un tos tan violenta, y continua que no se podia oir sin mucho quebranto; teniendo por otra parte tan cerrado el pecho, que con mucha dificultad se le percivia el habla.
    • 1721 Vidos Miro, J. Medicina, cirugia racional p. 248 Esp (BD)
      Esta voz thisica se puede tomar de dos significados; à saber es, por estenuacion de todo el cuerpo, ocasionada de vlcera en los pulmones, ò por la misma estenuacion, producida por qualquiera otra causa, que es la abundancia del catarro, ò destilacion catarral, ò rehuma catarral, ò por efusion grave de sangre, veneno, ò apretura del pecho, &, por cuya causa dañando à los pulmones, se introduce esta fiebre thisica, y sea de qualquiera de estos modos, siempre acompañada a esta fiebre, la fiebre ethica: empero con esta diferencia, que la fiebre thisica procede de las vlceras de los pulmones, y se tiene por incvrable.
    • 1726 Muñoz Cueva, J. Santa Iglesia Cathedral de Orense [1726] p. 133 Esp (BD)
      Una muger de tierra de Deza, consumida de calentura tisica, que no la avia dexado mas que la piel sobre los huessos, vino a encomendarse a esta Santa; y a sus Compañeros gloriosos; y como en breve se hallasse convalecida; y con fuerças robustas, no quiso bolver à su casa, sino que con vna devocion, en que seria bien que la imitassen otras, se quedó a servir, barrer, limpiar, y cuydar del asseo de la Iglesia.
    • 1755 Oviedo, J. A. Elogios hermanos coadjutores p. 506 Esp (BD)
      Los ultimos cinco años de su vida por el continuo trabajar, y velar todas las noches, estudiando los errores, y dogmas de las sectas del Japon, para convencer en las disputas à los Bonzos, y por la abstinencia que guardaba sustentandose solo de legumbres, y agua, contraxó una fiebre tísica, que lo puso en tal estado, que cada dia parecia aver de ser el ultimo de su vida, y con todo esto no dexaba de estar en continuo movimiento por la salud, y provecho espiritual de sus Proximos. Despues sientiendose muy agravado de la toz, y dolores del pecho, el dia veinte, y quatro de junio dedicado à San Juan Bautista se confessó y recibiò el Sagrado Viatico.
    • 1767 Ellerker. R/ Fdz Barea, M. Coleccion adelantamientos medicina p. 63 Esp (BD)
      Los sudores, critica evaquacion de toda fiebre putrida, son copiosos y nocturnos las mas veces en la calentura pthisica, à lo que contribuye el calor de la cama, la laxitud del crivo cutaneo, la disolucion de los humores, y el poco vigor de los pulmones, para inducir en estos la devida consistencia.
    • 1825 Núñez Taboada, M. DiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. y s. El que padece la enfermedad de tisis, ó que toca ó pertenece a ella (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos).
    • 1846 Salvá, V. NDiccLengCast (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tisis, ó lo que toca ó pertenece a ella (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, y ocasiona al paciente tos, acompañada de calentura lenta que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1855 [Gaspar y Roig] DiccEnciclLengEsp, II (NTLLE)
      Tísico: adj. el que padece la enfermedad de tisis lo que toca ó pertenece a ella (| lesion del pulmon que tiende a producir ulceras y una desorganización progresiva de dicha víscera).
    • 1869 RAE DRAE 11.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tisis, ó lo que toca ó pertenece a ella (| Consunción, demacración gradual y lenta, originada de varias causas. Dícese especialmente de la pulmonar).
    • 1899 RAE DRAE 13.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente á la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1901 Toro Gmz, M. NDiccEnciclLengCast (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Relativo á la tisis (| consunción gradual y lenta, con fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1917 Alemany Bolufer, J. DiccLengEsp (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración de algún órgano).
    • 1931 Pagés, A. GDiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración de algún órgano).
    • 1950 RAE DMILE 2.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1989 RAE DMILE 4.ª ed. (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 2001 RAE DRAE 22.ª ed. (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
    • 1719 Glz Torres, E. Crón seraphica 5.ª parte [1719] p. 425 Esp (BD)
      En el Convento de Bolonia vna Religiosa se veia en terminos de morir, a causa de vna calentura thisica, que por espacio de dos años lentamente le avia consumido las carnes, y estaba tan en los huessos, que no parecia sino un esqueleto con alma. Llegabase à esto un tos tan violenta, y continua que no se podia oir sin mucho quebranto; teniendo por otra parte tan cerrado el pecho, que con mucha dificultad se le percivia el habla.
    • 1721 Vidos Miro, J. Medicina, cirugia racional p. 248 Esp (BD)
      Esta voz thisica se puede tomar de dos significados; à saber es, por estenuacion de todo el cuerpo, ocasionada de vlcera en los pulmones, ò por la misma estenuacion, producida por qualquiera otra causa, que es la abundancia del catarro, ò destilacion catarral, ò rehuma catarral, ò por efusion grave de sangre, veneno, ò apretura del pecho, &, por cuya causa dañando à los pulmones, se introduce esta fiebre thisica, y sea de qualquiera de estos modos, siempre acompañada a esta fiebre, la fiebre ethica: empero con esta diferencia, que la fiebre thisica procede de las vlceras de los pulmones, y se tiene por incvrable.
    • 1726 Muñoz Cueva, J. Santa Iglesia Cathedral de Orense [1726] p. 133 Esp (BD)
      Una muger de tierra de Deza, consumida de calentura tisica, que no la avia dexado mas que la piel sobre los huessos, vino a encomendarse a esta Santa; y a sus Compañeros gloriosos; y como en breve se hallasse convalecida; y con fuerças robustas, no quiso bolver à su casa, sino que con vna devocion, en que seria bien que la imitassen otras, se quedó a servir, barrer, limpiar, y cuydar del asseo de la Iglesia.
    • 1750 Villalón, G. Nuevo thesoro medicina aforismos p. 345 Esp (BD)
      Receta para la calentura tysica. Re. Simiente de adormideras blancas, tres dragmas: goma de tragacanto, y arabiga, de cada cosa una dragma; simiente de verdolagas media onza: simiente de malvas, y membrillos, de cada cosa dragma y media.
    • 1755 Oviedo, J. A. Elogios hermanos coadjutores p. 506 Esp (BD)
      Los ultimos cinco años de su vida por el continuo trabajar, y velar todas las noches, estudiando los errores, y dogmas de las sectas del Japon, para convencer en las disputas à los Bonzos, y por la abstinencia que guardaba sustentandose solo de legumbres, y agua, contraxó una fiebre tísica, que lo puso en tal estado, que cada dia parecia aver de ser el ultimo de su vida, y con todo esto no dexaba de estar en continuo movimiento por la salud, y provecho espiritual de sus Proximos. Despues sientiendose muy agravado de la toz, y dolores del pecho, el dia veinte, y quatro de junio dedicado à San Juan Bautista se confessó y recibiò el Sagrado Viatico.
    • 1767 Ellerker. R/ Fdz Barea, M. Coleccion adelantamientos medicina p. 63 Esp (BD)
      Los sudores, critica evaquacion de toda fiebre putrida, son copiosos y nocturnos las mas veces en la calentura pthisica, à lo que contribuye el calor de la cama, la laxitud del crivo cutaneo, la disolucion de los humores, y el poco vigor de los pulmones, para inducir en estos la devida consistencia.
    • 1780 RAE DRAE 1.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tísica, ó lo que toca, ó pertenece a ella (|enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, originada de humor acre y corrosivo, que ha caido á ellos, y causa al paciente tos, acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1783 RAE DRAE 2.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tísica, ó lo que toca, ó pertenece a ella (|enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, originada de humor acre y corrosivo, que ha caido á ellos, y causa al paciente tos, acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1791 RAE DRAE 3.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tísica, ó lo que toca, ó pertenece a ella (|enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, originada de humor acre y corrosivo, que ha caido á ellos, y causa al paciente tos, acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1803 RAE DRAE 4.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tísica, ó lo que toca, ó pertenece á ella (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, y causa al paciente tos, acompañada de calentura lenta, que le va atenuando y consumiendo poco á poco).
    • 1825 Núñez Taboada, M. DiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. y s. El que padece la enfermedad de tisis, ó que toca ó pertenece a ella (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos).
    • 1846 Salvá, V. NDiccLengCast (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tisis, ó lo que toca ó pertenece a ella (| enfermedad causada por tener alguna llaga en los pulmones ó livianos, y ocasiona al paciente tos, acompañada de calentura lenta que le va atenuando y consumiendo poco à poco).
    • 1855 [Gaspar y Roig] DiccEnciclLengEsp, II (NTLLE)
      Tísico: adj. el que padece la enfermedad de tisis lo que toca ó pertenece a ella (| lesion del pulmon que tiende a producir ulceras y una desorganización progresiva de dicha víscera).
    • 1869 RAE DRAE 11.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. El que padece la enfermedad de tisis, ó lo que toca ó pertenece a ella (| Consunción, demacración gradual y lenta, originada de varias causas. Dícese especialmente de la pulmonar).
    • 1899 RAE DRAE 13.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente á la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1901 Toro Gmz, M. NDiccEnciclLengCast (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Relativo á la tisis (| consunción gradual y lenta, con fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1917 Alemany Bolufer, J. DiccLengEsp (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración de algún órgano).
    • 1931 Pagés, A. GDiccLengCastellana (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración de algún órgano).
    • 1950 RAE DMILE 2.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Med. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 1989 RAE DMILE 4.ª ed. (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 2001 RAE DRAE 22.ª ed. (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano).
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre y ulceración en algún órgano).
  6. 5⟶conversión
    s. m. y f. Persona que tiene tisis. ⇨ Enfermedad infectocontagiosa de los humanos y ...
    docs. (1750-2020) 190 ejemplos:
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      En consideracion à los daños à que està expuesta la salud publica, en la infeccion de los Hecticos, y Tysicos, y de los que padecen enfermedades contagiosas, que se difunde, y pegan à las habitaciones, en grave daño, y ruìna de las familias y casas; pues contaminadas de estos accidentes por no resguardarse, perecen sin remedio alguno.
    • 2020 Mendicutti, E. Vuelvas hoy Esp (CORPES)
      Cuando aquel día volví a la pensión, el encargado de noche me dijo: «Ha venido un hombre un poco raro, como con cara de tísico, fíjate que esa cara me suena de algo, y con un ramo de flores del tamaño del paso de la Macarena, y me ha dicho: “Esto, para Isabel Peñalber”. En tu cuarto lo tienes. Y ya sabes que en esta casa no está permitido traer a los clientes».
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      En consideracion à los daños à que està expuesta la salud publica, en la infeccion de los Hecticos, y Tysicos, y de los que padecen enfermedades contagiosas, que se difunde, y pegan à las habitaciones, en grave daño, y ruìna de las familias y casas; pues contaminadas de estos accidentes por no resguardarse, perecen sin remedio alguno.
    • 1757 Lpz Araujo Azcárraga, B. Respuesta enfermedad p. 77 Esp (BD)
      De todo lo qual resulta, que la definición que pone el Bachiller, es falsa: que los tubérculos del pulmón son verdadera phthisis pulmonal unas veces es crónica, y de larga duracion; pero otras muchas veces es aguda, y aun peraguda: y que en muchos phthisicos faltan los signos, que tiene puestos el Bachiller principiante; y por consiguiente que todos sus argumentos quedan del todo desvanecidos, y dados por el pié.
    • a1759 Casal Julián, G. HNatural Asturias [1762] p. 115 Esp (BD)
      […] y al mismo tiempo vèo muchisimos ptisicos, que comenzaron por catarrhos ferinos, y vinieron à parar en rompimiento de vasos, y haemotises. En un tiempo mismo vi en esta ciudad quatro funestos casos […] comenzaron a padecer toses molestas, y sin dudas ocasionadas de limphas acres; las que en todos quatro pararon en rompimiento de vasos mayores, pues tuvieron crecidos fluxos de sangre de los pulmones, que solian llegar à diez y mas onzas. Era en todos esta sangre rubia, floreciente, y expelida con tos […]. Repetian estas expulsiones de tiempo en tiempo, sin periodo cierto, y se sossegaban con sangrias, y remedios, de aquellos que traen los famosos prácticos. De este modo, caminando à la sepultura, se fueron extenuando, y perdiendo las fuerzas, y las ganas de comer, y llegaron à la perfecta tabe, con toses, expulsiones purulentas, calentura continua lenta, con sus crecimentillos por las tardes y algunas ligerillas horripilaciones, y murieron. No fallecieron estos por falta de medicinas.
    • 1787 Anónimo "Phthisis propagada contagio" p. 104 Diarios literarios Esp (BD)
      M. Pichler en su memoria sobre las enfermedades contagiosas dice con relación a la phthisis que no se comunica con tanta facilidad como pretenden muchos autores por las camisas, los vestidos, las camas, etc.; y sin duda debe haber algunas diferencias para el contagio, según los climas fríos o calientes, pues en España y en Italia es costumbre quemar todos los muebles, y vestidos de una persona que muera ethica ó phthisica; pero sea lo que fuere el caso siguiente manifiesta con quanta reserva se debe proceder, y que no debe emplearse para el uso de los vivos lo que sirvió a un pthisico.
    • 1789 Piñera Siles, B. Trad Elementos Medicina Práctica Cullen, II [1789] p. 307 Esp (BD)
      Ya hace más de veinte años que me he ocupado en recoger observaciones con cuidado, y que precisado por una gran parte de este tiempo en asistir a los pobres en muchas Parroquias de París, he tenido ocasión de ver quizá un millar de pthísicos; por más indagaciones que he podido hacer no me he podido asegurar que ninguno se ha vuelto phtísico por el contagio, ó que lo haya comunicado, aunque la mayor parte de estos enfermos habitasen y durmiesen con personas sanas en parages estrechos, sucios, poco ventilados, y en donde todas las causas capaces de dar actividad al contagio se encontraban reunidas.
    • 1828 Suárez Pantigó, P. Trad Flegmasias Broussais, II p. 10 Esp (BD)
      Es tal la repugnancia que inspiran los cadáveres de los tísicos, especialmente desde que los autores célebres han propagado la opinión de que esta enfermedad es contagiosa; es tan poco lo que se espera que gane la terapéutica examinándolos con más atención y, en general se cree tan agotada esta materia, que ya los restos de un tísico solo merecen una mirada superficial.
    • 1836 Larra, M. J. Nochebuena 1836 [2000] Fígaro Esp (CDH )

      ¡Qué de tísicos han muerto asesinados por una infiel, por un ingrato, por un calumniador! Los entierran; dicen que la cura no ha alcanzado y que los médicos no la entendieron.

    • 1876 Martín Pedro, E. Manual patología [1876] Esp (CDH )
      [...] igual cambio se observa en el esputo, que claro y de apariencia flúida en un principio, se hace despues verdaderamente nunmular, de suerte que reunidos en la escupidera con la serosidad de los anteriores, recuerdan los producidos por los pulmones de los tísicos y que tendremos ocasion de ver en qué consisten.
    • 1889 Podestá, M. T. Irresponsable [2003] Ar (CDH )
      Los tísicos eran los muertos apetecidos por su flacura, que permitía estudiar los distintos órganos, sin necesidad de una disección laboriosa.

      Repentinamente, la tarima de los muertos soportaba tres y más desgraciados, que estaban allí estirados, rígidos, descalzos, pobremente vestidos, con la cara vuelta al poniente, alineados uno al lado del otro, formando, muchas veces, un contraste lúgubre.

    • 1896 Lázaro Ibiza, B. Flora española [1896] Esp (CDH )
      En los esputos de los tísicos se encuentra este Bacillus por la reacción particular que presenta bajo la influencia de los colores de anilina, pues contra lo que generalmente sucede en otras bacteriáceas, se colorea lentamente y con dificultad; pero una vez coloreado no se decolora como las otras por la acción del ácido nítrico diluído á un tercio.
    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )

      — Al aire libre todo el día... Las ventanas de su aposento, que nunca se cierren... Que coma lo más posible, platos nutritivos... Si aumenta de peso, nos hemos salvado... Tísico que engorda, tísico que cura... La tisis es un fenómeno de desnutrición...

    • 1921 Unamuno, M. Tía Tula [1995] Esp (CDH )

      — Me temo por la pobre muchacha —vaticinó don Juan, el médico, un viudo que menudeaba sus visitas.

      — ¿Cree usted que corre peligro? —le preguntó Gertrudis.

      — Esta pobre chica está deshecha por dentro; es una tísica consumada y consumida. Resistirá, es lo más probable, hasta dar a luz, pues la Naturaleza, que es muy sabia...

    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] Esp (CDH )

      ¿Qué hemos conseguido? Criar una generación de tísicos o enfermizos. Este efecto desastroso han tenido que reconocerlo todos los médicos. Abatimiento e inercia de las funciones digestivas, trastornos del órgano de la vista, anemia, escrófulas, tisis, meningitis, locura: he aquí las terribles enfermedades que se ceban cada día con mayor frecuencia en esos niños y jóvenes a quienes se les obliga a estudiar tantas y tan contrarias asignaturas.

    • 1982 Allende, I. Casa espíritus [1995] Ch (CDH )
      El terror de la tuberculosis estaba presente en todos los hogares, porque no había familia que no tuviera un tísico que lamentar, de modo que Clara decidió ir a buscarla.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 104 Esp (CDH )

      Al ponerle el estetoscopio en el pecho, por ejemplo, los ojos de Susana quedaban repentinamente fijos en el vacío y desamparados, o buscaban espantados los de su madre o los míos; era una mirada que yo no podía soportar, pero el doctor Barjau la conocía muy bien y lo que hacía era darle a la tísica un suave coscorrón diciéndole: «Estás requetebién y la mar de guapetona.»

    • 2002 Fuentes, C. Creo [2002] Mx (CDH )

      Sin embargo, de nuestro concepto de la belleza depende nuestra elección de la belleza. ¿Por qué un cuerpo es bello y otro no? Nos gusta lo que se parece a nuestro ideal. Una maravillosa modelo de la moda actual pasaría por una tísica a los ojos del siglo xix.

    • 2014 Villoro, J. ¿Vida Tierra? Mx (CORPES)
      Unter den Linden sin desembocar en las torretas y las alambradas de la Volkspolizei. Entre los cambios menores, hubo uno singular: la Alemania unificada era una nación dispuesta a toser. Descubrí esto en una sala de conciertos donde cada pausa se llenaba con carraspeos, como si los músicos actuaran en beneficio de un hospital de tísicos.
    • 2020 Mendicutti, E. Vuelvas hoy Esp (CORPES)
      Cuando aquel día volví a la pensión, el encargado de noche me dijo: «Ha venido un hombre un poco raro, como con cara de tísico, fíjate que esa cara me suena de algo, y con un ramo de flores del tamaño del paso de la Macarena, y me ha dicho: “Esto, para Isabel Peñalber”. En tu cuarto lo tienes. Y ya sabes que en esta casa no está permitido traer a los clientes».
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      En consideracion à los daños à que està expuesta la salud publica, en la infeccion de los Hecticos, y Tysicos, y de los que padecen enfermedades contagiosas, que se difunde, y pegan à las habitaciones, en grave daño, y ruìna de las familias y casas; pues contaminadas de estos accidentes por no resguardarse, perecen sin remedio alguno.
    • 1757 Lpz Araujo Azcárraga, B. Respuesta enfermedad p. 77 Esp (BD)
      De todo lo qual resulta, que la definición que pone el Bachiller, es falsa: que los tubérculos del pulmón son verdadera phthisis pulmonal unas veces es crónica, y de larga duracion; pero otras muchas veces es aguda, y aun peraguda: y que en muchos phthisicos faltan los signos, que tiene puestos el Bachiller principiante; y por consiguiente que todos sus argumentos quedan del todo desvanecidos, y dados por el pié.
    • a1759 Casal Julián, G. HNatural Asturias [1762] p. 115 Esp (BD)
      […] y al mismo tiempo vèo muchisimos ptisicos, que comenzaron por catarrhos ferinos, y vinieron à parar en rompimiento de vasos, y haemotises. En un tiempo mismo vi en esta ciudad quatro funestos casos […] comenzaron a padecer toses molestas, y sin dudas ocasionadas de limphas acres; las que en todos quatro pararon en rompimiento de vasos mayores, pues tuvieron crecidos fluxos de sangre de los pulmones, que solian llegar à diez y mas onzas. Era en todos esta sangre rubia, floreciente, y expelida con tos […]. Repetian estas expulsiones de tiempo en tiempo, sin periodo cierto, y se sossegaban con sangrias, y remedios, de aquellos que traen los famosos prácticos. De este modo, caminando à la sepultura, se fueron extenuando, y perdiendo las fuerzas, y las ganas de comer, y llegaron à la perfecta tabe, con toses, expulsiones purulentas, calentura continua lenta, con sus crecimentillos por las tardes y algunas ligerillas horripilaciones, y murieron. No fallecieron estos por falta de medicinas.
    • c1780 Anónimo Verdades [1932] Tonadillas teatrales Esp (CDH )
      Abunda aquesta corte / de tanto objeto, / que la vista se turba / por conocerlos. / Todo es figuras ridículas. / Todo es gentes estrambóticas. / Todo son pobretes Lázaros. / Todo es mujeres indómitas. / Todo es mercaderes ásperos. / Todo son usías tísicos. / Todo está lleno de zánganos. / Nada se encuentra verídico. / A nadie se conoce / por la apariencia, / y el que parece gallo / sale culebra. /
    • 1787 Anónimo "Phthisis propagada contagio" p. 104 Diarios literarios Esp (BD)
      M. Pichler en su memoria sobre las enfermedades contagiosas dice con relación a la phthisis que no se comunica con tanta facilidad como pretenden muchos autores por las camisas, los vestidos, las camas, etc.; y sin duda debe haber algunas diferencias para el contagio, según los climas fríos o calientes, pues en España y en Italia es costumbre quemar todos los muebles, y vestidos de una persona que muera ethica ó phthisica; pero sea lo que fuere el caso siguiente manifiesta con quanta reserva se debe proceder, y que no debe emplearse para el uso de los vivos lo que sirvió a un pthisico.
    • 1789 Piñera Siles, B. Trad Elementos Medicina Práctica Cullen, II [1789] p. 307 Esp (BD)
      Ya hace más de veinte años que me he ocupado en recoger observaciones con cuidado, y que precisado por una gran parte de este tiempo en asistir a los pobres en muchas Parroquias de París, he tenido ocasión de ver quizá un millar de pthísicos; por más indagaciones que he podido hacer no me he podido asegurar que ninguno se ha vuelto phtísico por el contagio, ó que lo haya comunicado, aunque la mayor parte de estos enfermos habitasen y durmiesen con personas sanas en parages estrechos, sucios, poco ventilados, y en donde todas las causas capaces de dar actividad al contagio se encontraban reunidas.
    • 1807 Paz Rdz, J. M. Explicación farmacopea [1807] Esp (CDH )

      Esta Conserva es un agradable, útil y ligero adstringente. Recomiéndase como un leve tónico á la dósis de una ó dos dracmas mezcladas en una xícara de leche tibia para aliviar á los tísicos, calmar la tos, y fortificar el estómago.

    • 1828 Suárez Pantigó, P. Trad Flegmasias Broussais, II p. 10 Esp (BD)
      Es tal la repugnancia que inspiran los cadáveres de los tísicos, especialmente desde que los autores célebres han propagado la opinión de que esta enfermedad es contagiosa; es tan poco lo que se espera que gane la terapéutica examinándolos con más atención y, en general se cree tan agotada esta materia, que ya los restos de un tísico solo merecen una mirada superficial.
    • 1836 Larra, M. J. Nochebuena 1836 [2000] Fígaro Esp (CDH )

      ¡Qué de tísicos han muerto asesinados por una infiel, por un ingrato, por un calumniador! Los entierran; dicen que la cura no ha alcanzado y que los médicos no la entendieron.

    • 1853 Domínguez, R. J. DiccNacional (NTLLE)
      Tísico, ca. m. El que padece de tisis (| enfermedad ocasionada por el desarrollo de tubérculos en los pulmones, ocasionando tos, hemoptisis y otro síntomas hasta que sobreviene la muerte después de un tiempo más o menos largo en que el enfermo se va consumiendo).
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )
      La naturaleza, próxima ya a la muerte, y presintiéndola quizás, está sumergida en una somnolencia estática, semejante a la felicidad melancólica que experimenta una hermosa y enamorada tísica el último día que se levanta..., ¡el último día que ve la luz y el cielo, sentada cerca de un balcón, enfrente de un jardín que principia a perder sus hojas!...
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )
      Yo temo, pues, por mujer-poesía a aquella que corresponde a un sentimiento poético: v. g. la de anticuada figura, que se diría sacada de una hornacina gótica; la tétrica y sombría, que parece una lady Macbeth; una tísica en segundo grado, cuyos ojos reflejan ya la eternidad [...].
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )
      El clima de Pisa es uno de los más dulces de Europa, y está muy recomendado a los tísicos.

      El frío no baja nunca de los siete grados sobre cero, ni el calor sube de los veinte y cuatro.

      En el mismo coche que nosotros, iban tres elegantísimas inglesas, de las que dos eran jóvenes y hermosas y parecían hijas de la tercera. —¡Ay! ¡todas tres necesitaban respirar los aires benignos de los Montes-Pisanos!

    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )

      ¿Qué más? Las friolengas moscas revolaban, gozosamente en la templada atmósfera, olvidadas sin duda de que ya estábamos a doce de diciembre.

      — ¡Hermoso día para los tísicos! exclamé yo pensando en las inglesas que tanto había compadecido la víspera.
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )

      El yeso repitió fielmente la horrible demacración de las facciones del tísico... Y ¡cuán dolorosa es la expresión de aquellas mejillas hundidas, de aquella frente atormentada!

    • 1840-a1862 El Cucalambé Poesías [1974] 399 Cu (CDH )
      Al son de mi alegre cítara / Y de mis versos enfáticos / Las solteronas más frígidas / Suelen arder como pábilo. / Para las enfermas sílfides / Son mis canciones un bálsamo, / Y las desganadas tísicas / Comen más que un Heliogábalo. /
    • 1870 Mansilla, L. V. Indios Ranqueles [1957] Ar (CDH )

      Era un muchacho de trece años, no podía tener más. Y eso debía tener por la época en que me aseguraran había nacido. Su mérito consistía en tener mujer ya. Su cara no carecía de atractivos; tenía bastante expresión. Revelaba excesos prematuros, un tísico en perspectiva.

    • 1870 Mansilla, L. V. Indios Ranqueles [1957] Ar (CDH )
      Mi condiscípulo el Dr. Jorge Macías, que ha pasado dos años entre los Ranqueles, y que entre ellos estaría a no ser por mí, pretende que allí no hay tísicos, y lo atribuye al alimento de la carne de yegua.
    • 1870 Mansilla, L. V. Indios Ranqueles [1957] Ar (CDH )

      Si la observación fuese exacta y la causa la consignada, de hoy en adelante podríamos exclamar: no más tísicos.

      No me atrevo a decir si la cosa merece la pena de ser averiguada, aunque recuerdo que no hace mucho tiempo más de un galeno se reía cuando las curanderas recetaban buche de avestruz.

    • 1874 Selgas Carrasco, J. Rostro y alma [1888] Esp (CDH )

      Detúveme delante de él creyéndole dormido; mas sus ojos brillaron ante los míos con un fulgor extraño.

      — ¿En qué piensa V.? —le pregunté.

      — Pienso (me dijo) que los tísicos tenemos en ciertas ocasiones momentos de una lucidez extraordinaria.
    • 1874 Selgas Carrasco, J. Rostro y alma [1888] Esp (CDH )
      — ¡Los tísicos! —exclamé sorprendido.

      — Eso es, los tísicos (añadió). Es una enfermedad que, al devorar el cuerpo, parece que da más luz al espíritu. Si no padeciera esta dolencia que poco á poco va consumiendo mi vida, no habría descubierto el secreto que acabo de sorprender.

    • 1855-1875 Fuente, V. HEclesiástica España VI [1875] Esp (CDH )
      Faltando la enfermedad objeto de su asistencia en otro tiempo, pudieron dedicarse á la asistencia de los tísicos, á quienes apénas se admitía en los hospitales, y de quienes se huia, hasta hace poco tiempo, como de los antiguos leprosos.
    • 1875 Palma, R. Tradiciones peruanas III [1967] Pe (CDH )
      — ¡Si lo conociera yo, de la paliza que le arrimaba en los lomos, lo dejaba para el hospital de tísicos! —decía, con aire de matón, un jefe de club que en todo bochinche se colocaba en sitio donde no llegasen piedras—.
    • 1876 Martín Pedro, E. Manual patología [1876] 295 Esp (CDH )
      Raro es el profesor que hoy no le emplea en estas cuatro enfermedades: en general al administrarle, dada la division profunda que hay entre las ramas de la ciencia, supone que en cada enfermedad el arsénico obra de un modo específico para esta ó la otra, y a pesar de lo corriente de la doctrina, el arsénico cura las intermitentes, las enfermedades herpéticas, y alivia el cáncer ó los cancroides, y á los tísicos, por una accion opuesta á la específica, cura obrando sobre el enórmon y la célula: su primer efecto es aumentar la nutricion general, se excita el apetito y con estas condiciones se ponen todos los órganos en un estado mejor funcional.
    • 1876 Martín Pedro, E. Manual patología [1876] Esp (CDH )
      [...] igual cambio se observa en el esputo, que claro y de apariencia flúida en un principio, se hace despues verdaderamente nunmular, de suerte que reunidos en la escupidera con la serosidad de los anteriores, recuerdan los producidos por los pulmones de los tísicos y que tendremos ocasion de ver en qué consisten.
    • 1878 Pz Galdós, B. Familia León Roch [2002] Esp (CDH )
      También pasan precipitadas y saltonas las cabras y las meditabundas burras de leche, que al despuntar el sol llaman con su áspera esquila a la puerta del tísico.
    • 1878 Pz Galdós, B. Familia León Roch [2002] Esp (CDH )
      Mi enemigo no era un hombre, sino un ejército que, llamándose celestial, se hacía formidable, teniendo por colaboradores a los santos y a los tísicos que se creían santos.
    • 1878 Pz Galdós, B. Familia León Roch [2002] Esp (CDH )
      En el salón de tapices, llamado así porque contenía en sus paredes hermosa colección de aquellas obras de arte, cuyas gastadas tintas y pálidas figuras parecían representar una procesión de tísicos, había placentera tertulia.
    • 1879 Pereda, J. M. Don Gonzalo Glz [2003] Esp (CDH )
      Corrió el tiempo, y sólo vinieron, casi arrastrados por Barriluco y Facio, un tísico in extremis, bárbaramente arrancado del lecho, y un anciano octogenario, trémulo y encorvado, que hacía seis años no salía de la cama sino para tomar el sol en el portal de su casa.
    • 1881 Pardo Bazán, E. Viaje novios [2002] Esp (CDH )
      Lucía estaba sola con ella, y sosteníale la cabeza para toser, a tiempo que, doblando de pronto el cuello, la tísica entregó el alma.
    • 1881 Pardo Bazán, E. Viaje novios [2002] Esp (CDH )
      Poco tardó, no obstante, en volver a apoderarse de ella la pertinaz ilusión que dulcemente lleva de la mano a los tísicos, vendados los ojos, hasta la puertas de la muerte.
    • 1884 Ortega Munilla, J. Cleopatra [1993] Cu (CDH )
      Un viento huracanado que traía del Guadarrama muy malas noticias para los tísicos, agitaba sus vestidos y se empeñaba en arrancarla de la cabeza la toquilla de lana.
    • 1884 RAE DRAE 12.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. [...] adj. Med. Que padece de tisis. Ú. t. c. s. (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano. Se designa especialmente con este nombre la tuberculización pulmonar).
    • 1884-1885 Clarín Regenta [1990] Esp (CDH )

      Y añadía furioso el Rojo:

      — ¡Di: a la oreja!, tísica, ¡o te baldo!

      — ¡A la oreja! ¡a la oreja!

      El Ratónse vio acosado por todos sus colegas que se le colgaron de las orejas.

    • 1887 Cambaceres, E. Sangre [2003] Ar (CDH )
      Y en su calenturienta exaltación de tísica, como si idealizara su mal los sentimientos de su alma a medida que demacraba las carnes de su cuerpo, complacíase en forjar así un porvenir de grandezas para su hijo, en acariciar todo un mundo de visiones, entrevistas al través del velo mágico de sus ilusiones de madre.
    • 1887 Clarín Apolo Pafos [1989] 72 Esp (CDH )

      Es de los que más valen, de los que aman de veras la naturaleza y la sienten y la entienden; pero la transporta también, como la transportaba la poesía india, a una especie de pasmosa teogonía panteística, deslumbradora, grandiosa, sublime, pero triste al cabo... sí, triste. Y por ahí me viene a mí la muerte... es decir... la muerte no, porque soy inmortal; pero sí la agonía, una agonía eterna: ¿habrá mayor árboles, no sospechando que yo los espiaba, dijo hablando de mí: Esa chica está tísica...; y lo dijo sonriendo con desprecio. ¡Si vieras, pobre mortal, que tristeza sentí! ¡Una tísica inmortal! Tú no puedes comprender esto...

    • 1887 Clarín Apolo Pafos [1989] 72 Esp (CDH )
      Yo, a lo menos, te hablo con todos estos términos bárbaros y aborrecibles, de una abstracción helada, para que me comprendas... y me compadezcas... Soy una pobre tísica... ahí tienes, y una tísica que no puede morir. ¡No muero, agonizo eternamente!» [...].
    • 1887 Rabasa, E. Gran ciencia [1948] Mx (CDH )
      ¡Qué ojos, Juan!, ¡qué boca!, ¡qué hermoso color!, ¡qué cuerpo y qué garbo sobre todo! ¡Todas estas tísicas juntas no valen lo que un brazo de esa muchacha! Y dígame usted, ¿no es tonta? Yo no lo creo, porque eso se conoce a las tres palabras.
    • 1889 Matto Turner, C. Aves [2000] Pe (CDH )

      — ¡Y qué! ¿Me ha creído usted un tonto, don Sebastián? Yo sé que cuando se alquila una vaca lechera se devuelve bien exprimida. ¿Acaso han sido pocos mis empeños para conseguir esto?

      — Esa es mucha verdad, mi coronel; tantos tísicos, ¿no engordan aquí...? Pero, a todo esto, francamente, y eso del juicio de la tal asonada...

    • 1889 Podestá, M. T. Irresponsable [2003] Ar (CDH )

      Los días en que no había cadáver para disecar, estábamos descontentos, de mal humor, y cuando pasaba mucho tiempo sin que se abrieran las puertas derrengadas de la sala mortuoria, empezábamos a recorrer las salas de enfermos, para espiar a la víctima que debía caer en nuestras garras.

      ¡Ni un tísico! solían decir los más desalmados, con el desaliento del que tiene hambre y no encuentra en su cajón revuelto ni un mendrugo.
    • 1889 Podestá, M. T. Irresponsable [2003] Ar (CDH )
      Los tísicos eran los muertos apetecidos por su flacura, que permitía estudiar los distintos órganos, sin necesidad de una disección laboriosa.

      Repentinamente, la tarima de los muertos soportaba tres y más desgraciados, que estaban allí estirados, rígidos, descalzos, pobremente vestidos, con la cara vuelta al poniente, alineados uno al lado del otro, formando, muchas veces, un contraste lúgubre.

    • 1889 Pz Galdós, B. Realidad [2003] 283 Esp (CDH )
      Pues dice que soy yo otra como la Traviatta, y que él me va a redimir y a volverme honrada... ¡qué risa! Parece que ahora va a venir su padre, para quitarle de mí y llevársele, y él pretende que, cuando su papá venga a verme, haga yo el papel de tísica arrepentida, tosiendo con sentimiento, y pintándome ojeras... vamos, como la Traviatta, para que el buen señor se ablande y nos eche su santa bendición... ¡qué risa! Con estas farsas, ello es que me está dejando por puertas.
    • 1891 Pardo Bazán, E. Piedra angular [2002] Esp (CDH )
      ¡Cuántos tísicos asistirá usted que a la primer hoja que caiga!... Lo cruel no es matar, sino martirizar lentamente con el miedo: la ley aquí, inspirada en el criterio de Cáñamo, premedita el asesinato y lo realiza con ensañamiento progresivo [...].
    • 1892 Fdz Medina, B. Charamuscas [1892] 83 Ur (CDH )
      Pues, el desgraciado ese parece que anda enamorado de la chinita, y la verdad es que vale la pena... Cuentan una punta de sonseras de él; pero que le importa á nadie que se consuma como tísico y que se pase las noches sin dormir mirando la ventana del cuarto de Guacziola?...
    • 1894 Icaza, F. A. Examen críticos [1894] Mx (CDH )
      Si al pintor y al escultor se les ha exigido siempre que conozcan la anatomía artística, no veo yo por qué al novelista que pretenda ser psicólogo, no puede pedírsele que sepa algo de psicología y de patología, y no mate á un apoplético con los mismos síntomas que á un anémico ó un tísico.
    • 1894 Rubén Darío Pesadilla [1950] Cuentos Ni (CDH )
      Entonces oyó distintamente una voz que le decía: "¡Aún no, sigue hasta el fin!" Y apareció la muchedumbre hormigueante de la vida banal de las ciudades, las caras que representan todos los estados, apetitos, expresiones, instintos, del ser llamado Hombre; la ancha calva del sabio de los espejuelos, la nariz ornada de rabiosa pedrería alcohólica que luce en la faz del banquero obeso; las bocas torpes y gruesas; las quijadas salientes y los pómulos de la bestialidad; las faces lívidas, el aspecto del rentista cacoquimio; la mirada del tísico, la risa dignamente estúpida del imbécil de salón, la expresión suplicante del mendigo; estas tres especialidades: el tribuno, el martillero y el charlatán, en las distintas partes de sus distintas arengas; "¡Socorro!" exclamó Honorio.
    • 1896 Carrasquilla, T. Frutos tierra [1952] Co (CDH )
      Apuesto que ai están echándoles ojo y haciéndoles cismas a todos los que ven... ¡porque esas sí son las tísicas que más gana tienen de casase!...
    • 1896 Carrasquilla, T. Frutos tierra [1952] Co (CDH )

      — ¿Y por qué no me avisates antes pa yo haber ido onde esas tísicas y acabarlas? ¡Pero la puerquita de ma Pacho Escandón sí no se me escapa!

    • 1896 Carrasquilla, T. Frutos tierra [1952] Co (CDH )
      ¡Y qué lástima que esas tísicas de las Palmas se hubieran ido de la calle, para verlas muertas de la envidia!
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )
      Con la precisión de enamorado en sus primeras citas, apareció Julio desde lejos, firme el andar y levantado el rostro, sin perder de vista la casita; conocíasele la prisa por llegar cuanto antes, y cerca ya, cuando ello fue posible viose que su cara de enfermo incurable, su angulosa cara de tísico, irradiaba contento y ventura.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )

      Magnífico, irían juntos hasta la esquina de la Santa Veracruz; y sin más ceremonia, el transpunte se le colgó de un brazo, conquistado súbitamente por el manso exterior de Julio, por su aspecto enfermizo y su tos de tísico.

    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )

      — "¡Callen a ese tísico o llévenselo a un hospital, para que reviente sin incomodar al prójimo!"¿Lo crees, Prieto, lo crees?

      Fue lo malo, que el diagnóstico aquel de un ebrio irresponsable Julio sentía que era cierto. Sí, estaba tísico, a dos pasos del sepulcro, sin más alientos que para adorar a Clotilde hasta el último suspiro; a Clotilde, que tan cruel como la vida, también principiaba a escapársele.

    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 451 Mx (CDH )
      Un instante, la luna misma se asomó dentro de la garita; dio de lleno en el velador dormido, y se marchó a tiempo que se marchaban las más acerbas quejas del tísico enamorado.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )
      Temblaba Julio en su inseguro catre de alquiler y en su más inseguro organismo de tísico; temblaba la mezquina flama de su vela: temblaban los prosaicos muebles de su cuarto y su casa por reconstruir, sus proyectos de honestidad y sus esperanzas de dicha, como si a su paso Clotilde lo aniquilara todo.
    • 1896 Lázaro Ibiza, B. Flora española [1896] Esp (CDH )
      En los esputos de los tísicos se encuentra este Bacillus por la reacción particular que presenta bajo la influencia de los colores de anilina, pues contra lo que generalmente sucede en otras bacteriáceas, se colorea lentamente y con dificultad; pero una vez coloreado no se decolora como las otras por la acción del ácido nítrico diluído á un tercio.
    • 1896 Magón Taquilla [1947] Cuentos CR (CDH )
      Ñor Muñoz se marchaba en compañía del maestro Molina y Chonela y Luna se quedaban jugando cabras a la ficha mayor hasta agotar la paciencia del tísico de don Serapio.
    • a1896 Silva, J. A. Sobremesa [1996] Co (CDH )
      Doctor: ¡sálvela usted y le serviré de rodillas toda mi vida; soy rico; disponga usted de mi fortuna, pero sálvela!, me decía, suplicante; y yo comprendía el paroxismo de dolor que lo crispaba al ver la figura ideal y la mirada de ternura sobrehumana conque lo envolvían los ojos azules de la tísica.
    • 1897 Pardo Bazán, E. Niño Guzmán [2002] Esp (CDH )
      Por contradicción aparente, pero que se explicaba conocidos los antecedentes y el carácter de aquellos dos hombres a quienes unía lazo tan estrecho, O'Neal, en los últimos meses de su vida, al sentir —como suele sucederles a los tísicos— que reverdecían sus ilusiones más ocultas, habló de España con redoblada efusión, y obedeciendo a un espejismo bastante frecuente en los extranjeros que nos admiran, olvidó por completo que hubiese una España actual, para no recordar sino la España romántica —la única que tiene existencia real, decía el pobre enfermo—.
    • 1897 Pz Galdós, B. Misericordia [1993] Esp (CDH )
      En lo bajo había un establecimiento de burras de leche, con borriquitas pintadas en la muestra, y dentro vivían, sin aire ni luz, las pacíficas nodrizas de tísicos, encanijados y catarrosos.
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )

      — ¡Lo ve usted! —exclamó Hillo, dándose un fuerte palmetazo en la rodilla—. ¿Ve usted cómo acertaba yo cuando hablé del torbellino romántico? En el romanticismo desempeñan siempre un papel culminante los jorobados, o siquiera cargados de espalda, los tuertos, patizambos, y en general toda persona que tenga alguna deformidad visible. También figuran en él los tísicos, los locos y los que padecen ictericia.

    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Aguardó Calpena a que el golpe de tos se calmase, y cuando hubo pasado, aún tuvo que esperar más tiempo, porque el infeliz tísico se quedó un rato sin respiración, los ojos inyectados, la frente sudorosa, las manos trémulas...
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Y como a cada nombre que el tísico decía agregaba comentarios injuriosos, pues para él no había mujer honrada, ni madre que no vendiese a sus hijas, ni esposa que no imitara la conducta aleve de la señora de Oliván, Calpena no quiso más tal compañía, ni aquella erudición tan mentirosa como terrible.
    • 1899 RAE DRAE 13.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Que padece de tisis. Ú. t. c. s. (| tuberculosis pulmonar).
    • 1902 Herrera Reissig, J. Maitines noche [1942] Ur (CDH )
      ¡Otoño amante de las tísicas! / Tiene el crepúsculo camelias rojas Vibraen el aire de metal sonoro / el desmayado adiós de un postrer beso / y el sol fallece como un ígneo Creso / en el misterio de su drama de oro. /
    • 1903 Bobadilla, E. Fuego [2003] Cu (CDH )
      El violín hipaba como un pollo al que se le retuerce el pescuezo; el sacabuche tosía como un tísico, y el violón sonaba con flatulencia gemebunda.
    • c1870-1905 Echegaray, J. Ciencia popular [1905] Esp (CDH )

      Ello es que Abel murió creyendo, según se dice, que se había perdido aquel trabajo en que tantas esperanzas fundaba. ¡Gran consuelo para la agonía del pobre tísico!

      Triste fué para el desdichado su estancia en París. ¡Desdén, indiferencia, miseria!

    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )

      — Al aire libre todo el día... Las ventanas de su aposento, que nunca se cierren... Que coma lo más posible, platos nutritivos... Si aumenta de peso, nos hemos salvado... Tísico que engorda, tísico que cura... La tisis es un fenómeno de desnutrición...

    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )

      — Al aire libre todo el día... Las ventanas de su aposento, que nunca se cierren... Que coma lo más posible, platos nutritivos... Si aumenta de peso, nos hemos salvado... Tísico que engorda, tísico que cura... La tisis es un fenómeno de desnutrición... Huevos, huevos, aves blancas...

    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )

      Minia había oídohablar mil veces del tenaz optimismo de los tísicos, pero lo creía una de tantas leyendas. Al comprobarla realidad del fenómeno se admiraba.

    • 1905 Sánchez, F. Barranca [1997] Ur (CDH )

      Robusta¡Dejemé!

      RudelindaAhora se te van a descubrir las hipocresías, ¡tísica!

      PrudenciaLas vas a pagar todas juntas, lengua larga.

      Robusta¡Jesús! ¡Se ha juntao la partida! Pero no les viá tener miedo. ¿Quieren que hable? Bueno... ¿Saben qué más? Que las tres son unas... ( Misia Dolores le tapa la boca de una bofetada)¡Ay... perra vida! (Enfurecida, alza la mano e intenta arrojarse sobre Dolores. )

    • 1905 Sánchez, F. Barranca [1997] Ur (CDH )

      Rudelinda¡Ah, no! ¡Qué esperanza! Si vos estás chocho con la gurisa, nosotras no, ¿me entendés? ¡Faltaba otra cosa! ¡Mándese mudar de aquí, tísica, lengua larga! ¡Ya!... (A Zoilo.)No, no me mirés con esos ojos, que no te tengo miedo. A ver ustedes, ¿qué hacen? ¿Vos, Dolores... Prudencia? Parece que tuvieran cola e paja... *¡Muévanse! Vengan a arrancarle el colmillo a esta víbora, pues. (A Robusta. )Contestá, ladiada. *¿Qué tenés que decir de malo de don Juan Luis?

    • 1905 Sánchez, F. Barranca [1997] Ur (CDH )

      Ña Martiniana(conduciéndola con Prudencia)Hay que cuidar, hija, esa tos. Así... empiezan todos los tísicos... Yo siempre le decía a la finadita hija de don Basilio Fuentes... «Cuidate, muchacha... Cuidate, muchacha», y ella... (Mutis)

    • 1905 Sánchez, F. Barranca [1997] Ur (CDH )

      Robusta¿Qué ha de merecerlas el pobre viejo? ¡Desalmadas! ¡Y parece que les estorba y quieren matarlo a disgustos!

      RudelindaCallate la boca, hipócrita. Buena jesuita sos vos... tisicona del diablo...

      RobustaVale más ser eso que unas perversas y unas... desorejadas *como ustedes.

      Rudelinda(airada, alzando una plancha)¡A ver, repetí lo que has dicho, insolente!

    • 1912 Pz Galdós, B. Cánovas [2002] Esp (CDH )

      — Damas son, querida; pero de esas que llaman de las Camelias.

      — Pues, según me han dicho, la dama de las Cameliasera tísica, y estas no están enfermas del pecho: chillaban como demonios.

      — Los tísicos son ellos.

      — Y dime otra cosa, Tito: los hombres de esas mujeres ¿son los que iban antes en coche, con plumachos y requilorios dorados?

    • 1914 Trigo, F. Jarrapellejos [1991] Esp (CDH )

      ¡Oh, oh, a Francia, a Inglaterra... a Nueva York!... ¡Sería igual! ¡Sería igual... por más iluminada que estuviese de arco voltaico la bárbara finura!... De Nueva York recordaba los linchamientos, los archimillonarios que no venían a ser sino los Jarrapellejos de los reyes, los que arruinaban al Brasil de un solo golpe de trustcontra el caucho, y los procesos policiacos y los presidentes de República que comprando votos con millones se sabían ganar la presidencia; de Londres, a Jack el destripador, a su ejército de noventa mil prostitutas y a su no menos numeroso ejército de hambrientos y de tísicos...

    • 1915 Herrera Reissig, J. Lunas oro [1999] Ur (CDH )
      Ella se puso muy pálida; yo me quedé taciturno; / Fue a suspirar a la luna mi vaguedad metafísica... / Se extenuaba en un sollozo la evocación del «Nocturno»... / Y ella engarzó su cabeza entre sus manos de tísica.
    • 1916 Jiménez, J. R. Platero [1987] Esp (CDH )

      Antonio Rivero... ¡Calla...! El tren de Riotinto que pasa por el puente... Sigue... La pobre Carmen, la tísica, tan bonita, Platero... Mira esa rosa con sol... Aquí está la niña, aquel nardo que no pudo con sus ojos negros... Y aquí, Platero, está mi padre...

    • 1916 Jiménez, J. R. Platero [1987] Esp (CDH )
      Y ahí está la burra, rascando su miseria en los hierros de la ventana, farmacia miserable, para todo otro invierno, de viejos fumadores, tísicos y borrachos.
    • 1918 Quiroga, H. Cuentos Amor [1993] Ur (CDH )

      Ella se sonrió, desdeñosa:

      — ¡No, no te creo tanto!

      — Ni yo, jamás, te hubiera creído tanto a ti... ¡tisiquilla!

      — ¡Qué! ¿qué dijiste?...

      — ¡Nada!

      — ¡Sí, te oí algo! Mira: ¡no sé lo que dijiste; pero te juro que prefiero cualquier cosa a tener un padre como el que has tenido tú!

    • 1921 Palacio Valdés, A. Novela Novelista [1922] Esp (CDH )

      En torno nuestro los caballeros se mostraban gravemente conmovidos, pero las señoras lloraban a lágrima viva. Claríny yo, más duros que el mármol, sentíamos unas ganas atroces de reír. Estas ganas estallaron al cabo en sonoras carcajadas cuando la tísica, después de un golpe de tos, viendo a su amante agitado, le dice con dulzura angelical: «¡No te alborotes!»

    • 1921 Unamuno, M. Tía Tula [1995] Esp (CDH )

      — Me temo por la pobre muchacha —vaticinó don Juan, el médico, un viudo que menudeaba sus visitas.

      — ¿Cree usted que corre peligro? —le preguntó Gertrudis.

      — Esta pobre chica está deshecha por dentro; es una tísica consumada y consumida. Resistirá, es lo más probable, hasta dar a luz, pues la Naturaleza, que es muy sabia...

    • 1921 Unamuno, M. Tía Tula [1995] Esp (CDH )

      — Parecen dos estanques quietos entre verdura... Los he estado mirando muchas veces y desde cerca. Y no sé de dónde ha sacado esos ojos... No son de su madre, que tenía ojos de tísica, turbios de fiebre..., ni son los de su padre, que eran...

    • 1925 Anónimo Mítin sanitario Sexualidad, 1 de febrero de 1925 Esp (CDH )
      Explica el proyecto del Profesor Wilhelm Kahl, para deducir que en España, más que en Alemania, se precisa espíritu de comprensión, a fin de evitar que, mientras se exigen relajaciones legales para que contraigan matrimonio parientes llenos de salud y de vida, se dejen sin obstáculo con sus alteraciones nerviosas, de los envenenados por la sífilis, de los organismos con infección bacilar, de los tísicos y de los escrofulosos, a fin de evitar que se realice entre viejos y jóvenes el llamado "escándalo fisiológico".
    • 1928 Bunge, C. O. Principios Psicología [1928] 29 Ar (CDH )
      La existencia de placeres patológicos, como la ilusión de los tísicos y la «euforia» de los moribundos, son anomalías que, por excepción, pueden menospreciarse al establecer principios generales; anómalo es también a pesar de su frecuencia, el placer del dolor , y algo más raro el dolor del placer .
    • 1930 Arconada, C. Turbina [1975] Esp (CDH )

      Dentro de la casa se oía la voz enfadada de Cachán. Flora fue corriendo hacia allí. Cachán estaba de pie, junto a la cocina, con los pelos crespos y los ojos abultados.

      — ¡Ese tisiquillo!... ¡Atreverse a insultarme en mi propia cara!... ¡Vamos, le voy a partir el hígado! ¡Si son unos golfos, unos chulos! ¡De dónde ha venido esta canalla? ¿Tú lo sabes? ¿Lo sabe alguno? Nadie lo sabe, porque no son de ningún sitio. Dicen que son de Levante. ¿Eso qué es? Eso no está en el mapa. ¡No tienen ni pueblo, ni padre, ni Dios, ni nada!

    • 1932 Domenchina, J. J. Dédalo [1995] Esp (CDH )
      [...] en el prurito didascálico, turbio, del jesuita; / en la ojeruda pusilanimidad del adolescente, / en la fiebre del tísico, / en la arrebatadora elocuencia del líder de / las democracias, / en la mano que empuña el cuchillo homicida, / en el pecho del déspota, creador de sicarios; / en el repiqueteo del tacón femenino, timbre de / urgencia de las faldas; / en el perjurio, / en la blasfemia, / en la piedad, / en la ternura, / en el odio... / ¿qué hay sino hambre y sed de dios, / insatisfechas?
    • 1936-1939 Marañón, G. Conde-Duque [1990] Esp (CDH )
      Es uno de esos galanes jóvenes que pasan por el escenario de la Historia vestidos con trajes pintorescos, de trotamundos, de enamorados, de capitán flamante, de tísico que paseaba la melancolía infinita del morir a la edad de Cristo, por aquellas lomas de Loeches, coronadas de un cementerio.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Pero hay determinadas infecciones, en las que los sudores son particularmente intensos y continuos, por lo que alcanzan un cierto valor diagnóstico: reumatismo cardioarticular agudo (el salicilato de sosa, con que generalmente suele tratarse, los aumenta); fiebre de Malta (en algunos casos, estas trasudaciones son de extraordinaria copiosidad); tuberculosis caquectizante (los clásicos sudores nocturnos de los tísicos).
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Son estas formas más frecuentes en tuberculosis con escasas localizaciones pulmonares, así como en las formas diarreicas aparecen principalmente en los tísicos avanzados.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      La fiebre hética es la fiebre accesional de los tísicos avanzados, con los típicos sudores nocturnos (v. pág. 981).
    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] Esp (CDH )

      ¿Qué hemos conseguido? Criar una generación de tísicos o enfermizos. Este efecto desastroso han tenido que reconocerlo todos los médicos. Abatimiento e inercia de las funciones digestivas, trastornos del órgano de la vista, anemia, escrófulas, tisis, meningitis, locura: he aquí las terribles enfermedades que se ceban cada día con mayor frecuencia en esos niños y jóvenes a quienes se les obliga a estudiar tantas y tan contrarias asignaturas.

    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] 370 Esp (CDH )

      Y como éstos pudiera aducir los testimonios de todos los médicos honrados de la Historia. Las novelas entusiasman, excitan y, al fin, corrompen y matan. Muchísimos neurasténicos y tísicos de hoy pudieran llevar sobre su frente, para público escarmiento, un letrero que dijera: "Frutos agusanados de las novelas."

    • 1947 Yáñez, A. Filo Agua [1992] Mx (CDH )

      ¿Quién era el arcángel o el hombre capaz de convertir unas tristes campanas en instrumento de música inaudita? Victoria —derrotada— lo imaginaba translúcido, hierático, las manos de sepulturero, las manos de mujer, las manos de cristal, sin ojos ni pies, puros brazos en cruz: al centro, lengua de fuego; las manos de tísico, traspasadas; ozono la cabeza, como un soplo lejanísimo, casi no visible, los brazos atados por una lengua de fósforo, por un resorte de alas incesantes.

    • 1947 Yáñez, A. Filo Agua [1992] Mx (CDH )

      [...] ella curaba a los enfermos, ella les hacía y les daba de comer, ella salía por las calles a pedir lo necesario para el sostenimiento de la casa; nadie le ayudaba en las faenas de aseo, en el cuidado del huerto, en sacar del pozo toda el agua indispensable para la pulcra limpieza de corredores y salones, ni le arredraba el acompañamiento de moribundos y muertos en las noches eternas; ayudaba serena y devotamente a bien morir, amortajaba los cuerpos, hilaba rosarios por el alma difunta y, cuando amanecía, bajaba al pueblo para disponer el entierro; tísicos, leprosos, palúdicos [...].

    • 1948 Gmz Serna, R. Automoribundia [1948] 802 Esp (CDH )
      La plata, a fuerza de ser manejada por los hombres, ha adquirido la palidez opaca de los tísicos; y el oro, de tanto permanecer encarcelado en las criptas de los bancos, da señales de locura.
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] 575 Esp (CDH )
      [...] Era un pueblo febril, que daba la impresión de un tísico que tiene la ilusión de sentirse fuerte. Y ahora, nada. Todo está apagado, gris. Se dice que todo es malo..., y es posible que tengan razón. [...]. /
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      Me dijo que al poco tiempo de llegar al hospital la trasladaron a una sala de tísicos, y allí adquirió la enfermedad y murió.
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      No dormía apenas, comía las sobras de los enfermos y cuidaba de los tísicos y variolosos sin miedo al contagio.
    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      — Eso, precisamente eso. Y lo que habrás hecho es un hipócrita o un desgraciado. Mi chico, Aquilino, que ya le gustan las mozas, está machacando hierro en la fragua y cuando pasa una le dice; "¡Güena estás!"Y si la otra se deja, lo más que pasa es que al otro día le pesa un poco más el macho. Pero luego trabaja con muchas más ganas y come como el diablo y va con la cabeza muy alta porque no tiene de qué avergonzarse. A éste —por mí—, afortunadamente, le pasará lo mismo. Pero será un señorito chupatintas que se casará con alguna tísica con sombrerito y rabiarán de hambre con treinta duros al mes.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      — Y si te mueres antes, ¿qué pasa? Porque tienes una cara de tísico que no hay por donde cogerte.

      — No tenga usted cuidado, que no me muero. Bicho malo nunca muere —agrega riéndose.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )
      Manzanares, con su cara de tísico y su cuerpecillo encogido, encontró un sitio fácilmente, pero yo me encontré incrustado entre otros dos viajeros que iban a Madrid y tenía que mantenerme derecho.
    • 1949-1953 Asturias, M. Á. Hombres maíz [1992] Gu (CDH )
      — ¡Robado * será tu cara, chino estornudo de tísico! *

      Recogió el chal del mostrador. Quería deshacerse de él por algo más que recobrar su dinero. A donde el chino entró temblando. Quería deshacerse de él porque materializaba, en seda de color de sangre, un agrado amoroso a quien menos lo merecía.

    • 1954 Asturias, M. Á. Papa Verde [1982] Gu (CDH )
      — ¡Ya se iba andar fijando mi hermana en vos, tísico, tísico, tísico! —le gritaba Plumilla Galicia insultándolo para quitarse la cólera que sentía por los golpes recibidos, el labio sangrante y los besuqueos al guantote en que las trenzas de su hermana formaban el colchón—.
    • 1954 Asturias, M. Á. Papa Verde [1982] Gu (CDH )

      —. ¡Tísico, tísico, tísico!...

      La paz fue costosa. Hubo que dejar que se pegaran de nuevo, pero con juez de campo y nada de manos desnudas; guantes de box era lo indicado. El ChitoMayen fue el encargado de ir volando en su ciclea traerlos a casa del Boby, quien no podía moverse del campo por ser al único que respetaban.

    • 1954 Asturias, M. Á. Papa Verde [1982] Gu (CDH )
      La verdad es que no tendríamos cómo agradecer al señor Cucho, mi padrino, que con su voz de dañado nos aconsejó bajar a la costa... «¡No seas animal, Bastiancito! —me decía el pobre que en gloria esté—. Estar trabajando aquí donde la tierra no da... El porvenir de ustedes está en la costa.» Y tuvo visión el hombre... Diz que los tísicos oyen más que nosotros, pero también deben tener aguzado el sentido de la vista...
    • 1954 Fraile, M. Cuentos amor [1991] Esp (CDH )

      Era un hombre con tipo de golondrina, lleno de recovecos para pasar por él. Un hombre que estaba y no estaba sobre la tierra. Las muchachas decían que era más largo que un día sin pan, y la frase tenía sentido para todas, porque sabían lo que era un día sin pan. Les parecía un hombre bueno que andaba mal de cuartos. A Milagros, más exactamente, le parecía un tísico sin posibles para ir al Guadarrama. A Etelvina, un pintor.

    • 1956 Villalonga, L. Bearn sala muñecas [1985] Esp (CDH )

      — ¿Cómo sabes que es un disparate? —preguntó.

      — ¿Es decir, que a un tísico todavía hay que darle sangre de caballo tísico? Eso sería como darle agua a un ahogado.

      — Pues *si yo tuviera diez mil duros, tía María Antonia... *

      — ¿Cómo se llama ese médico? —preguntó el señor.

    • 1958 Delibes, M. Diario emigrante [1958] 232 Esp (CDH )

      Me levanté por primera vez después de qué se yo el tiempo. Miedo me da el mirarme al espejo. Tengo las corvas que talmente parezco un tísico. ¡La madre que me echó y que apuradillo he andado! Decididamente esta tierra no me pinta. ¡A santo de qué voy a agarrar yo allá un catarro intestinal! Y antes la gripe. Si apenas he salido de una y ya ando metido en otra. Y no es porque yo lo diga, pero hasta llegar acá ni sabía lo que era estar enfermo.

    • 1941-a1961 Guerra Navarro, F. Cuentos Pepe Monagas [1976] Esp (CDH )

      Algo raro estaba sucediendo. El espiritado vecino del Bañadero debería pesar 49 kilos y 380 gramos, sobre la base de las ocho perras devueltas, y ocurría que los gramos eran 390. De entre el personal se levantó un rezongo. El compadre se abatató un poco, pero no estaba dispuesto a perder. Se diblusó sobre el expectante tísico y le dijo al oído:

      — Alije la perra grande que le di de más.

    • 1961 Martín-Santos, L. Tiempo silencio [1996] 239 Esp (CDH )
      En aquella tierra apenas modificada que ocupaba el hueco de su cráneo, aparecía ella misma llorando ante su hija, ella misma llorando ante su primitiva madre muerta, ella misma bailando delante de la procesión del Corpus en su pueblo, muy tiesa aunque chiquita, con una vara en la mano y un moño alto, ella misma rodeada de amigas que dicen pelo como el de la Encarna nadie, ella misma solicitada por el tísico de su marido que tiene sonrisa de ratón cuando todavía es joven y que abusa y la domina en una tapia de era, a la caída de la tarde, cuando ella misma se siente parte de la tierra caliente como un pan bajo el sol de julio [...].
    • 1962 Carpentier, A. Siglo luces [1979] Cu (CDH )
      Centenares de casas pobres quedaban reducidas a los horcones esquineros con tambaleantes pisos de madera alzados sobre fangales, como escenarios de miseria, donde familias resignadas hacían el recuento de las pocas cosas que les quedaban —con la abuela mal meciéndose en el sillón de Viena; la embarazada, temiendo que en tal desamparo se le presentaran los dolores; el tísico o el asmático envuelto en mantas, sentados en los ángulos del tablado, como actores de feria que ya hubiesen interpretado sus papeles.
    • 1962 Font Quer, P. Plantas medicinales [1962] Esp (CDH )

      Virtudes. La agaricina o ácido agaricínico produce irritación intensa por ingestión o aplicación local. Cuando se emplea en pequeñas dosis, paraliza las terminaciones nerviosas de las glándulas sudoríparas, por lo cual se hace uso de este hongo para combatir los sudores nocturnos de los tísicos, así como los sudores profusos, siempre que se considere conveniente evitarlos. En mayores dosis actúa como laxante o purgante. La agaricina puede producir intensos dolores de cabeza; mas, por lo general, el paciente acaba por habituarse a este remedio sin otros trastornos. Asociada con papaverina, teofilina, etc., se administra también contra el asma bronquial. Por sus propiedades irritantes del tubo digestivo, a veces se asocia a la agaricina algún medicamento opiado o el mismo opio, que contrarrestan sus actividades en aquel sentido.

    • 1962 Font Quer, P. Plantas medicinales [1962] Esp (CDH )

      Virtudes. Desde antiguo, se considera apropiado para combatir la tos y los catarros de las vías respiratorias. Más modernamente, por sus propiedades amargas, como tónico y estimulante. También se ha recomendado su empleo como reconstituyente, sobre todo para las personas depauperadas o débiles; sobre todo a los tísicos, por haber creído que a sus facultades nutricias une sus virtudes.

    • 1962 Font Quer, P. Plantas medicinales [1962] Esp (CDH )
      En consecuencia, y por sus virtudes paralizantes, se hace uso de la belladona, así como de los alcaloides de la misma, contra la incontinencia nocturna de la orina, la hidropesía, los sudores nocturnos de los tísicos, la secreción excesiva de ácido clorhídrico en el estómago (hiperclorhidria), la úlcera duodenal, para detener la secreción láctea, etc. Se usa asimismo contra el mareo, para combatir el asma (cigarrillos antiasmáticos de 1 gr. de picadura de la hoja en cada uno), la tos convulsiva, etc.; contra el estreñimiento, y, asociada la belladona a ciertos laxantes, como el acíbar, se emplea para prevenir los cólicos.
    • c1940-a1966 Amaya Amador, R. Cuentos [1997] Ho (CDH )
      María del Carmen, desfallecida, se desplomó en brazos de los más cercanos presa de un síncope; las mujeres con los ojos llenos de lágrimas estrangulaban los sollozos y los hombres se mordían los labios en silencio; la tísica agonizaba frente al Nacimiento; la fiesta tan alegre se había hecho triste.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      Hay gentes a las que divierte ver pasar calamidades a los demás; para verlas bien de cerca se dedican a visitar los barrios miserables, a hacer regalos viejos a los moribundos, a los tísicos arrumbados en una manta astrosa, a niños anémicos panzudos que tienen los huesos blandos, a las niñas que son madres a los once años, a las golfas cuarentonas comidas de bubas: las golfas que parecen caciques indios con sarna.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )

      Victorita, a la hora de la cena, riñó con la madre.

      — ¿Cuándo dejas a ese tísico? ¡Anda, que lo que vas a sacar tú de ahí!

      — Yo saco lo que me da la gana.

      — Sí, microbios y que un día te hinche el vientre.

    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      En su familia había una vena de tísicos; a un hermano suyo que se llamaba Paco lo habían devuelto del cuartel porque ya no podía ni con su alma.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      — ¿Cuándo dejas a ese tísico, niña?

      — Nunca lo dejaré, los tísicos dan más gusto que los borrachos.

      Victorita nunca se hubiera *atrevido a decirle a su madre nada semejante. Sólo si el novio se pudiera curar... Si el novio se pudiera curar, Victorita hubiera sido capaz de hacer cualquier cosa, todo lo que le hubieran pedido.

    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )

      — ¿Cuándo dejas a ese tísico, niña?

      — Nunca lo dejaré, los tísicos dan más gusto que los borrachos.

      Victorita nunca se hubiera *atrevido a decirle a su madre nada semejante. Sólo si el novio se pudiera curar... Si el novio se pudiera curar, Victorita hubiera sido capaz de hacer cualquier cosa, todo lo que le hubieran pedido.

    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )

      A vueltas en la cama, Victorita sigue llorando. Lo de su novio se arreglaba con unos duros. Ya es sabido: los tísicos pobres pringan; los tísicos ricos, si no se curan del todo, por lo menos se van bandeando, se van defendiendo.

    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      [...] el viejo que descansa su asma, el cura que lee su breviario, el mendigo que se despioja, el albañil que almuerza mano a mano con su mujer, el tísico que se fatiga, el loco de enormes ojos soñadores, el músico callejero que apoya su cornetín sobre las rodillas, cada uno con su pequeñito o grande afán, van dejando sobre las tablas del banco ese aroma cansado de las carnes que no llegan a entender del todo el misterio de circulación de la sangre.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      — ¿Cuándo dejas a ese tísico desgraciado? —le dice, algunas mañanas, la madre.

      A la muchacha, que es dulce como una flor y también capaz de dejarse abrir sin dar ni un solo grito, le entran entonces ganas de matar a la madre.

      — ¡Así reventases, mala víbora! —dice por lo bajo.

    • 1970 Bryce Echenique, A. Julius [1996] Pe (CDH )

      Los muchachos del barrio Marconi, con la peinada de después del almuerzo, fumaban controlando a cuanto bañista desconocido se arrojaba a la piscina. Ocupaban su banca de siempre, sentados unos, otros de pie a ambos lados, el resto también de pie detrás de la banca, apoyándose en el espaldar y, de vez en cuando, soltándole la ceniza del cigarrillo a uno de los sentados. «¡Me cago!», gritaba la víctima, incorporándose para devolver la broma con un escupitajo pequeño, compacto, perfecto que golpeaba certero la camisa del primer bromista. «¡Tísico de mierda!», gritaba éste, limpiándose con el pañuelo, mientras el otro extraía del bolsillo posterior del pantalón kaki o azul un peinecito tipo cholo, lo mejor para armarse nuevamente la montañita engominada que te da uno, dos y hasta tres centímetros más de estatura. Fumaban hasta quemarse los dedos, luego arrojaban las colillas encendidas al pie de la piscina, a ver si alguien viene descalzo y se quema la pata. Ya los habían descubierto y el administrador les había llamado la atención, pero ellos negaron profundamente, de todo nos acusan y, además, que no jodan, hombre. Continuaron divertiéndose cada vez que alguien se quemaba la planta del pie y se arrojaba desesperado al agua.

    • 1972 Torrente Ballester, G. Saga/Fuga [1995] 372 Esp (CDH )
      «¡Ya no tengo nada, dejarme pasar, ya lo di todo!» «¡E tantarantán, e nada nos dan!» El muñón llagado de un brazo, las cuencas vacías de unos ojos, caras comidas por la lepra, el tísico ciego de la boina a dos vertientes.
    • 1972 Torrente Ballester, G. Saga/Fuga [1995] 372 Esp (CDH )
      Coralina se quita el sombrero y cubre los ojos sin luces del tísico; se quita el abrigo y tapa la cara del leproso; se quita el corpiño y oculta el hombro hundido.
    • 1974 Sábato, E. Abaddón [1983] Ar (CDH )

      Luvi lo esplicaba todo con el librito y poniendo cosita en el suelo. Así y así: que esta piedrita é la fábrica, que este mate é la máquina, que esto porotito somo lo pione. Y te digo que esplicaba cómo no habería má enfermedá, ni tísico, ni miseria, ni esplotación. Todo el mundo tendría de trabajá.

    • 1976 Rdz-Méndez, J. M. Pingajo y Fandanga [1990] Esp (CDH )

      Pos estaría de ver que la hija el tío Petate se casara así como así con este héroe de la manigua, que pa mí como si fue general. Brazo fino tié pa general el gachó. Pues sus digo que ni la boda del Alfonso, que en gloria esté con la Tisiquita, va a ser tan soná como ésta.

    • 1978 Tisminetzky, M., ed. Salud [1978] Ar (CDH )

      La caída de la paletillasupone el desprendimiento de un hueso no identificado de la caja torácica que cae y se aloja a veces en la boca del estómago. El folklore español lo señala en tísicos y cardíacos.

    • 1980 Vergés, P. Cenizas [1981] 228 RD (CDH )
      Hasta tal punto, que la familia sobre la que caía una desgracia como ésa no tenía más remedio que quedarse sola, como si en vez de seres normales y corrientes se hubieran convertido en leprosos o tísicos.
    • 1981 Caballero Bonald, J. M. Toda la noche [1988] Esp (CDH )
      [...] un mástil oscilando en el agua como un puño ensangrentado, un ventanuco por el que salía a borbotones toda la risa del mundo, la ropa al viento despeñándose por un acantilado, la libélula con ojeras de tísica, una flor en forma de lengua adherida a la carne, el pájaro playero que clava en los espinos los ojos de los ahogados.
    • 1981 Caballero Bonald, J. M. Toda la noche [1988] Esp (CDH )
      La emoción pretérita de aquel gusto hipersensible de tísico por acariciar con su mano ensangrentada la piel lechosa de la madre, una contradicción relativa sustentando todas las restantes y absolutas contradicciones.
    • 1981 Ferrero, J. Bélver Yin [1993] Esp (CDH )

      — Eso no es nada, ven, yo te cubriré —dijo arropándolo con una manta de piel—. Duérmete...

      — ¡No quiero morir! —gritó, escupiendo las palabras como los tísicos la sangre—. ¡No quiero! Esto..., esto no es posible. ¿Qué has hecho?

    • 1982 Allende, I. Casa espíritus [1995] Ch (CDH )
      El terror de la tuberculosis estaba presente en todos los hogares, porque no había familia que no tuviera un tísico que lamentar, de modo que Clara decidió ir a buscarla.
    • 1982 Asenjo Sedano, J. Días largos [1982] Esp (CDH )

      Tísico. La palabra en los labios de mi madre me produjo pavor. Para mí tísico era sinónimo de monstruo bebedor de sangre humana. Los tísicos roban a los niños, los matan como a cerdos y les chupan la sangre para recuperar la salud perdida. En todos los caminos solitarios siempre hay un tísico escondido a la espera del paso de un niño perdido.

    • 1982 Asenjo Sedano, J. Días largos [1982] Esp (CDH )

      Tísicos eran los hombres famélicos de mirada procelosa que tantas veces había visto en la calle, sucios y sin afeitar. Sin decir una palabra, me eché a llorar negándome a convertirme en uno de esos seres horribles. Recordé que una vez alguien me había señalado a uno de esos seres oprobiosos blanco como la pared que vomitaba sangre en una esquina. A distancia le gritamos ¡tísico! ¡tísico!, corriendo para que no nos pusiera encima sus manos cadaverinas.

    • 1983 Cortázar, J. Reunión [1983] 33 Ar (CDH )

      Pero no quería acordarse ahora, la comedia había terminado con la blanda derrota de Nico, su melancólico refugio en una muerte de tísico. Lo raro era que Laura no lo nombrara nunca, y que por eso tampoco él lo nombrara, que Nico no fuera ni siquiera el difunto, ni siquiera el cuñado muerto, el hijo de mamá.

    • 1984 Berlanga, A. Gaznápira [1990] 104 Esp (CDH )
      En este año, señalado para el Cristóbal y la Cleo por su boda, tú sigues siendo una raraza, la chica del Ramiro, la tísica; ni aún pregonándolo se iban a creer muchos que eras maestra como don Salustio.
    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      Obán(salta, toma al tísico brutalmente)¡Fuera! (Lo lleva en vilo hacia la puerta, lo arroja. Al ama, furioso)¡Afuera también! (Ella obedece rápidamente, con una reverencia. Exasperado de dolor y resentimiento, a Suki)¿Cómo te atreviste? Que otro te toque... ¿No ves mi hermosura? ¿Cómo no dejaste que le quebrara el cuello? ¡Ni un dedo debías mover en su ayuda! Debías mirarme agradecida de que lo suprimiera de la tierra, debías rogarme que con mi cuchillo entrara en esa carne triste y la sangre empezara. Y te apiadaste. Venciste el asco. Misericordia. Me borraste a mí...

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      Suki(le toca la ropa)Cáscara.

      Obán'(le aparta la mano rudamente)¡Y fuerza! Mejor que un tísico, ¿no?

      SukiSoberbio. Prepotente. Guerrero.

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      ¡Oh señora, no lo recuerde! Ya está muerto. El tísico. Tuvo mala suerte, ni terminó de comer ni disfrutó. Se hubiera muerto igual. Estaba muy enfermo. ¿No vio cómo tosía? Arrojaba los pulmones. Olvídelo.

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      AmaEl... el tísico... ¡azuza su caballo!

      Obán(ríe)No sabés distinguir un pelagato de otro. (El caballo relincha, asustado)¿Cómo se atreve? (Galope)¿Qué pasa? (Toma su espada y sale)

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      SukiAma... ¿era... el tísico?

      Ama¡Era! ¡Lo vi con estos ojos!

      Suki¿Cómo?

      AmaNo sé cómo. ¡Pero era él!

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      Usted está loca. Yo vi con estos ojos que el señor se disgustó porque el tísico no secó bien el sudor de su caballo y...

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      Ama¡Junto al fuego! (Aparece Oscar, subrepticio, inmóvil. Las dos lo miran. Ama)¿Ve? El tísico... afuera... azuzando su caballo y él... acá...

      SukiTraé un quimono, ama. ¡Pronto!

      Ama¡Echelo!

      SukiObán regresará en seguida. Cuando se canse de correr tras su caballo. Creerá que no lo enterraste. Traé un quimono, ama.

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] Ar (CDH )

      Obán(la rechaza riendo)¿Desde cuándo las pequeñas cortesanas abren la boca delante de los guerreros? Aunque este guerrero te ame, no abuses. ¿Desde cuándo son heroínas las prostitutas? Está bien muerto, ¿no? ¡Ahora está bien muerto! ¡Y si no lo está, no importa! Les cuesta moverse. La resurrección es costosa, mi Suki. Que sigan arrastrándose y gimiendo. Que se junten con los tísicos y los hambrientos.

    • 1984 Gambaro, G. Sol naciente [1992] 160 Ar (CDH )

      Después vino y miró. Y caminó encima de la tierra apisonada. Por segunda vez. Y me palmeó la cabeza. Por segunda vez. (Suspira)Me promete, pero... se ve que no lo atraigo. ¡Oh, si no fuera tan hermoso! (Suki va hacia la puerta exterior, que está abierta, se queda en el umbral, mirando hacia afuera, con la escudilla en las manos. Ama)Ganas de tirar la plata. Lo vi. No era él, el tísico. Era un viejo, y se tragó el arroz en dos minutos.

    • 1985 García Márquez, G. Amor [1987] 299 Co (CDH )
      En cambio, nadie conoció nunca la visión de los que no regresaron, y entre éstos los más tristes: los que murieron desterrados en el pabellón de los tísicos, más por la tristeza de la lluvia que por las molestias de la enfermedad.
    • 1985 García Márquez, G. Amor [1987] Co (CDH )

      El infundio maligno del pabellón de tísicos le había estropeado el ensueño, porque le infundió la sospecha inconcebible de que Fermina Daza era mortal, y por tanto podía morir antes que el esposo.

    • 1986 Gironella, J. M. Hombres lloran [1987] 169 Esp (CDH )

      El doctor Chaos cerró con llave la puerta de su despacho, ordenando a las monjas que no le molestaran hasta nuevo aviso. Apenas si el doctor tuvo necesidad de demostrar sus amplios conocimientos del idioma inglés. El idioma común fue la pasión. Alvin Stevenson era como una mujer. Desde que llegó a España —llevaba en Gerona más de seis meses—, siempre le había sorprendido que sus inclinaciones fueran consideradas tabú por la población. A su ver, eran de lo más normal y, en épocas anteriores, sólo remontándose a Grecia, consideradas incluso de signo superior. El doctor Chaos casi enloqueció de placer. Las monjas, entretanto, atendían a los pacientes internos o rezaban el rosario; él desgranaba las jaculatorias de la más ortodoxa homosexualidad. Los jadeos de Alvin casi traspasaron las paredes. Fue una unión perfecta, como la de la Torre de Babely Paz, como la de Padrosa y Silvia. La palidez de Alvin intensificó los deseos del doctor Chaos. Una temporada le atrajeron los tísicos; tal vez Alvin lo fuera. Quedaron en verse en la clínica otra vez; aunque siempre con mucho tiento para que el cónsul, mister Collins, no se enterara y considerara aquello como una alianza bélica entre España e Inglaterra.

    • 1988 Prensa El País, 01/10/1988 [1988] Esp (CDH )
      No es tan fácil excusar el hacer pasar a Sand por una mujer pasiva y sentimental, dando el final de la historia con el tísico por el final de una vida que acabó treinta años, quince amantes, dos revoluciones y 150 libros después.
    • 1989 Martínez, T. E. Perón [1989] 28 Ar (CDH )

      Aparecía embozada, con orejas de tísica. Sus tetas enormes se iban convirtiendo en peritas escuálidas. Arcángelo la esperaba con tanta compasión que le brotaba llanto de todo el cuerpo, hasta de la planta de los pies. Cierta vez, cuando la Virgen se acercó a consolarlo, él se atrevió a descorrerle el velo de la cara. Y si bien supo, sin la menor sombra de duda, que aquella era la Santísima Virgen de los altares, las facciones que vio en el sueño fueron las de Isabelita Martínez.

    • 1990 Uslar Pietri, A. Visita tiempo [1993] Ve (CDH )

      Juan de Soto pasó media noche razonando con él. No era fácil pero resultaba hacedero y hasta lógico. Sería el golpe maestro del rey Felipe, antiguo rey de Inglaterra; sería tan poderoso como Felipe y tanto como el de Francia, aquel tísico de Carlos IX.

    • 1993 Argüelles, F. Letanías [1993] 96 Esp (CDH )
      Laureano Bayón calcinó abstinencias hacinadas al lado de su mujer, Constantina del Pino, tísica de cuerpo y alma, sin sabor en la carne ni voluntad en los huesos.
    • 1993 Argüelles, F. Letanías [1993] Esp (CDH )

      A la partera le gustaba mucho soñar cosas imposibles mientras clasificaba las hierbas en tarros de cristal. El violín le hacía los sueños más blandos y, duraderos.

      Muy cerca de María Perpetua, Constantina del Pino, tísica de cuerpo y alma, también atendía a los sollozos del violín.
    • 1993 Argüelles, F. Letanías [1993] Esp (CDH )
      Constantina del Pino, tísica de cuerpo y alma, que contra todos los pronósticos habría de vivir más que nadie en Peñafonte (más incluso que Arcadio Berrina Galapán, quien acabó perdiendo la cuenta de sus años), comprendió entonces tanto impulso contenido por parte de su esposo y en sus ojos de azufre se dibujó el cataclismo del desengaño.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Poco antes de volverse completamente loco, el capitán Blay me pidió que fuera a dibujar a Susana en su lecho de tísica con mis lápices de colores.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )

      — ¡Y con grandes ojeras y la cara chupada y hecha una birria, vamos! —me cortó otra vez enfurruñada—. Una pobre tísica a punto de diñarla. ¡Pues no!

    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 93 Esp (CDH )
      Solicitó su firma para ayudar a respirar mejor a una pobre tísica indefensa, pero el lechero gruñó que eso era una estupidez y una pérdida de tiempo, qué coño piensa conseguir con cuatro firmas, y me hacía señas para que me llevara del establecimiento aquel pelma que no paraba de hablar.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 104 Esp (CDH )

      Al ponerle el estetoscopio en el pecho, por ejemplo, los ojos de Susana quedaban repentinamente fijos en el vacío y desamparados, o buscaban espantados los de su madre o los míos; era una mirada que yo no podía soportar, pero el doctor Barjau la conocía muy bien y lo que hacía era darle a la tísica un suave coscorrón diciéndole: «Estás requetebién y la mar de guapetona.»

    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 108 Esp (CDH )
      Bien o mal, podía tenerlo listo en un par de semanas, tirando largo, pero me gustaba estar con Susana cuanto más tiempo mejor, y por eso rompía mucho papel y repetía una y otra vez casi todo, la cama, las vidrieras, el gato de felpa, el humo negro y sobre todo ella, la pobre tísica respirando con dificultad en su lecho del dolor, según la quería ver el capitán.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Éste era el dibujo para el capitán Blay y que Susana llamaba burlonamente «el dibujo de la pobre tísica birriosa y la babosa chimenea».
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Catorce firmas era todo lo que habíamos conseguido hasta el momento, pero él confiaba en que el dibujo que representaba a la pobre tísica en su sufrimiento llegara al corazón de los ciudadanos apelando a su solidaridad.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Mientras me adentraba por el pequeño y descuidado jardín, donde las matas de adelfas languidecían a la sombra del sauce y las húmedas rinconadas de lirios se pudrían faltas de sol, me pregunté cómo estos dos charnegos muertos de hambre habían podido adquirir aquella extraña autoridad al hablar de la tísica.
    • 1993 Sarduy, S. Cantantes [1967] Cu (CDH )

      (Afuera, el Barrio abre: en la vitrina del burdel, preservativos con pico, espuelas y cresta, con cascabeles; dedales. El tísico del cine cambia la cartelera: hoy un puente lunado bajo unos pinos, una cara con franjas negras y amarillas como un pez indio.)

      Planeando en el astral, como estaba, el Director no pudo más y, bañado en una babita sulfurosa, cayó al suelo.

    • 1994 Muñoz Calvo, S. HFarmacia [1994] 159 Esp (CDH )
      Comer muchas liebres pone el rostro hermoso. La carne de conejo es mejor que la de liebre y de más fácil digestión. El pulmón de zorra es muy bueno para los tísicos. Los cuajos de la liebre son muy efectivos en el dolor de oídos. /
    • 1994 Muñoz Calvo, S. HFarmacia [1994] 159 Esp (CDH )
      También hay personas que comen ratones, pero no hay que tratar de un tan sucio animal engendrado de la podre, del estiércol y tierra carcomida; dícese del que dado a comer en un pastel o en cualquier guisado quita los hechizos y la furia de la melancolía, dicen también que desollado y asado o cocido sana a los tísicos, y que sacadas todas sus entrañas y cocidas con aceite y sal y dados a comer socorren a los que sin sentir se mean en la cama, especialmente los niños [...].
    • 1994 Regás, R. Azul [1994] Esp (CDH )
      Con la cabeza recostada en un gran almohadón sobresalían en el contraluz sus grandes ojos abiertos que ahora, sin gafas y con las ojeras oscuras que los envolvían, le devolvieron una mirada lánguida y acerada como la de los tísicos.
    • 1995 Pozo, R. Novia [1995] 77 Esp (CDH )
      En el pueblo no le quedaba más que su tío El Tísico, al que no llevaban a la cárcel aunque era rojo, dejaban que se muriera, había vuelto del frente andando por toda España y llegó con piojos y escupiendo sangre.
    • 1995 Pozo, R. Novia [1995] Esp (CDH )

      — Allí iré a la escuela.

      — ¿Por qué te vas?

      — Lo ha dicho mi tío el tísico: porque nos acusan de rojos.

    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Los tísicos y tísicas salían por las mañanas, en pijamas y camisones, a asolearse al corredor, solos y tristes, sentados en las mecedoras o acodados en el barandal, y casi ni se pasaban palabra entre ellos cuando, tras el llamado de la campana, se sentaban a comer una sopa transparente de verse en ella y su ración de verduras cocidas.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Su madre, Clotilde viuda de Mantilla, había llegado años atrás desde Granada a temperar porque enferma como andaba de los pulmones, la envió su médico a Masatepe en busca de clima benigno; y tanto le asentó el clima que se quedó a regentar una pensión para tísicos forasteros, pensión que estaba precisamente en la esquina frente a la tienda del beduino.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Los tísicos y tísicas salían por las mañanas, en pijamas y camisones, a asolearse al corredor, solos y tristes, sentados en las mecedoras o acodados en el barandal, y casi ni se pasaban palabra entre ellos cuando, tras el llamado de la campana, se sentaban a comer una sopa transparente de verse en ella y su ración de verduras cocidas.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Sucedió aquel accidente cuando uno de los tísicos pensionistas, el general salvadoreño Paulino Chica, se levantó a aliviar el vientre a medianoche, y al explorar con su foco Winchester la caseta del excusado, en previsión de que ya sentado en el banco no fuera a morderlo cualquier alimaña, descubrió adentro a la gorda más gorda Adelina Mantilla en brazos de Saulo Regidor el teñidor de trapos; o, viceversa, mejor, él en brazos de ella.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Llegó la dueña Clotilde viuda de Mantilla atraída por las voces de alarma que dio el general Paulino Chica, y llegaron tras ella los tísicos que por primera vez reían, y animados opinaban, entre toses, sobre la forma más apropiada de proceder, hasta que no hubo más y llamaron a Josías el carpintero que vino con sus herramientas a sacar los clavos y despegar las tablas de la caseta; y mientras sonaban los martillazos y caían las tablas, el general Paulino Chica iba transmitiéndole al hechor, sin dejarlo de apuntar con el revólver Colt de cañón largo, los requerimientos de la dueña Clotilde viuda de Mantilla: ¿se va a casar? Sí.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      Y sólo faltó que llamaran al padre Misael Lorenzano y ya desnudo de tablas el excusado les diera allí mismo la bendición nupcial, que a un tiro de piedra estaba la casa cural, patio de por medio con la pensión de los tísicos.
    • 1995 Schz-Ostiz, M. Infierno jardín [1995] Esp (CDH )
      En el mundo familiar de Martín Eguren, en el que había ido viviendo hasta la treintena, a los poetas se les veía como una banda de tísicos o de muertos de hambre que morían en la miseria: «¡Morirás en el arroyo!» Eguren veía a su padre en la puerta del Ultramarinos Eguren, de toda la vida, flanqueado, de toda la vida, por una carpintería rojigualda, con su mandil grisáceo y su aspecto de dar mucho la razón a quien había que dársela: la gente de orden, es decir, los curas, los policías, los ricos.
    • 1996 Farro, H. Industria pesquera [1996] Pe (CDH )

      La forma de atacar es increíble, se acerca al tiburón y se introduce por el orificio anal y sigue su inmundo trayecto hasta llegar al hígado donde principia succionarlo con la ventosa de su boca. El tiburón no puede hacer nada contra el insignificante pero inatacable adversario y se convierte en un "tísico"carcomido por el sanguinario parásito, el devorador ha sido devorado.

    • 1996 Pitol, S. Arte fuga [1997] Mx (CDH )
      Se esboza minuciosamente un amplio fondo, ante el cual se ventila el destino de Hans Castorp y el debate ideológico de dos tísicos: Settembrini y Naphta, el primero masón, demócrata; el otro jesuita, autócrata, los dos enfermos incurables.
    • 1997 Prensa Revista Hoy, 14-20/07/1997 [1997] Ch (CDH )
      González Vera habitaba en ese mundo, lo contemplaba desde su interior y lo supo reproducir magistralmente con un lenguaje desprovisto tanto de la retórica como de las imágenes que pudieran convertir en "poesía" el drama solapado que diariamente protagonizan sus oscuros e insignificantes actores: un pescadero, un zapatero, una mayordoma de conventillo, una tísica, una pareja de ladrones, un viejo cachurero, anarquistas, cesantes del puerto y asesinos de los cerros de Valparaíso.
    • 1998 Ronald Morales, A. Frutoterapia [1998] Co (CDH )
      [...] con el zumo exprimido de la papaya madura, después de cocida en el horno y endulzada con miel, se prepara un jarabe que calma la tos, aun la de los tísicos avanzados (tuberculosis pulmonar) administrándoles cucharadas, dos o tres veces al día.
    • 1999 González, E. Quién como Dios [1999] 342 Mx (CDH )
      Qué amarga es la vida, tu tío Pancho se burlaba de mí porque asegún me creía yo la dama de las camelias, y mírame ahora, soy una tísica de a de veras, todo el pueblo lo comenta a «sottovoce»..., una tuberculosa en toda la extensión de la palabra, y Pancho paseándose en España deseando que, a su regreso me halle muerta.
    • 1999 González, E. Quién como Dios [1999] Mx (CDH )
      Vamos caminando despacio; dice usté que mi tío Francisco ya está viejo y mire namás usted cómo anda de descuidada, oiga namás la tos de tísico que tiene, debe cuidarse ese resfrío.
    • 1999 González, E. Quién como Dios [1999] Mx (CDH )

      ¿Sería todo ese argüende producto de la enfermedad que estaba matando a su tía? La tuberculosis llevaba a la gente a crisis de locura. Los tísicos se volvían muy sicalípticos, decían. Mentira o verdad, la tía Lola, desde aquel día, le había removido instintos que no creía poseer, deseos que se desataban a pesar suyo.

    • 2001 Obando Bolaños, A. Violento paraíso [2001] 303 CR (CDH )
      El Tirso o Eunice o Carmen pueden construir para otros estos parajes y llenarlos de faunos y ninfas, meter a la madre de Gilbert Grape, tan obesa como un tanque, en el guante de una tísica, pero no pueden vivir su propio sueño sino en un solo instante: en el momento de su creación.
    • 2002 Fuentes, C. Creo [2002] Mx (CDH )

      Sin embargo, de nuestro concepto de la belleza depende nuestra elección de la belleza. ¿Por qué un cuerpo es bello y otro no? Nos gusta lo que se parece a nuestro ideal. Una maravillosa modelo de la moda actual pasaría por una tísica a los ojos del siglo xix.

    • 2002 García Márquez, G. Vivir [2002] Co (CDH )
      — Dile a Luisa Márquez —me dijo— que piense en lo que dirían sus padres si vieran a su nieto preferido repartiendo propaganda para tísicos en el mercado.

      No transmití el mensaje para ahorrarle disgustos a mi madre, pero lloré de rabia y de vergüenza en mi almohada durante varias noches. El final del drama fue que no volví a repartir los volantes, sino que los echaba en los caños del mercado sin prever que eran de aguas mansas y el papel satinado se quedaba flotando hasta formar en la superficie una colcha de hermosos colores que se convirtió en un espectáculo insólito desde el puente.

    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|tuberculosis pulmonar).
    • 2014 Villoro, J. ¿Vida Tierra? Mx (CORPES)
      Unter den Linden sin desembocar en las torretas y las alambradas de la Volkspolizei. Entre los cambios menores, hubo uno singular: la Alemania unificada era una nación dispuesta a toser. Descubrí esto en una sala de conciertos donde cada pausa se llenaba con carraspeos, como si los músicos actuaran en beneficio de un hospital de tísicos.
    • 2020 Mendicutti, E. Vuelvas hoy Esp (CORPES)
      Cuando aquel día volví a la pensión, el encargado de noche me dijo: «Ha venido un hombre un poco raro, como con cara de tísico, fíjate que esa cara me suena de algo, y con un ramo de flores del tamaño del paso de la Macarena, y me ha dicho: “Esto, para Isabel Peñalber”. En tu cuarto lo tienes. Y ya sabes que en esta casa no está permitido traer a los clientes».
  7. 2⟶restricción significado
    adj. Que tiene tisis. ⇨ Enfermedad infectocontagiosa de los humanos y ...
    docs. (1750-2021) 194 ejemplos:
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      Todos los Médicos de esta Ciudad tengan especial cuidado, con los que padecen los accidentes de Hectiquèz ò Tysiquèz, ò de otra especie contagiosa; y siempre que adviertan los Hecticos, que passan de segundo à tercero grado (que es el peligroso) ò Tysico declarado ó enfermo contagioso, darán con prudencia orden en la casa para que vivan con precaucion.
    • 2021 Santiesteban, A. "Escándalo barco" [21-02-2021] OnCubaNews (La Habana): oncubanews.com Cu (HD)
      Según La Biblia: muchos serán los llamados, mas pocos los escogidos. Entre tantas jóvenes pretendientes, Faber inició su noviazgo con Juana de León, huérfana y tísica, que vivía bajo el amparo de una viejecilla lavandera.
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      Todos los Médicos de esta Ciudad tengan especial cuidado, con los que padecen los accidentes de Hectiquèz ò Tysiquèz, ò de otra especie contagiosa; y siempre que adviertan los Hecticos, que passan de segundo à tercero grado (que es el peligroso) ò Tysico declarado ó enfermo contagioso, darán con prudencia orden en la casa para que vivan con precaucion.
    • 1783 Pons, G. Clave mercurial, II p. 54 Esp (BD)
      Don Manuel Escudero, Teniente Coronel de Infantería de edad de 32 años, temperamento colérico adusto, en el año de 1706, recogiéndose de la Campaña le acometió una tos con esputos de sangre, los que con el tiempo fueron purulentos, y lo hicieron thisico pulmonar. Despues que muchos medicos lo curaron inutilmente se fue extremadamente secando, creciendo la abundancia de los esputos purulentos; y hallándose con las piernas hinchadas, y las manos, dexado de los medicos por thisico incurable, acudió a mí para que lo librase de la muerte.
    • 1787 Anónimo "Phthisis propagada contagio" p. 104 Diarios literarios Esp (BD)
      M. Pichler en su memoria sobre las enfermedades contagiosas dice con relación a la phthisis que no se comunica con tanta facilidad como pretenden muchos autores por las camisas, los vestidos, las camas, etc.; y sin duda debe haber algunas diferencias para el contagio, segun los climas frios o calientes, pues en España y en Italia es costumbre quemar todos los muebles, y vestidos de una persona que muera ethica ó phthisica; pero sea lo que fuere el caso siguiente manifiesta con quanta reserva se debe proceder, y que no debe emplearse para el uso de los vivos lo que sirvió a un pthisico.
    • 1789 Piñera Siles, B. Trad Elementos Medicina Práctica Cullen, II [1789] p. 307 Esp (BD)
      Ya hace más de veinte años que me he ocupado en recoger observaciones con cuidado, y que precisado por una gran parte de este tiempo en asistir a los pobres en muchas Parroquias de París, he tenido ocasión de ver quizá un millar de pthísicos; por más indagaciones que he podido hacer no me he podido asegurar que ninguno se ha vuelto phtísico por el contagio, ó que lo haya comunicado, aunque la mayor parte de estos enfermos habitasen y durmiesen con personas sanas en parages estrechos, sucios, poco ventilados, y en donde todas las causas capaces de dar actividad al contagio se encontraban reunidas.
    • 1798 Larruga, E. Pueblos pesca [24] p. 62 Memorias Esp (BD)
      […] el humo del tabaco (con las condiciones supuestas) es tratado ya por muchas gentes, yá por medicina, yá por vicio; unos y otros le usan en pequeñas porciones […] pues si tal humo tocase freqüentemente la substancia interior del pulmón, induciria en él irritacion, con las repetidas impresiones le crisparia, no podria dilatarse ni comprimirse facilmente, seria anelosa la respiracion, y por termino vendrian a hacerse ptisicos; cuyas señales son las referidas: la tós continua, reyectaciones sanguineas, purulentas, etc.
    • 1828 Suárez Pantigó, P. Trad Flegmasias Broussais, II p. 290 Esp (BD)
      El segundo, alto, delgado, con pecho contraido y las megillas coloradas, acababa de curarse de una afección venérea por medio del muriato sobre-oxigenado de mercurio, cuando se sintió con una dispnea considerable. No tardó luego à pesar del uso de los pectorales, de los calmantes y de los vejigatorios en verse reducido à pasar la mayor parte de las noches tosiendo, sin que ya le abandonasen un movimiento febril que se aumentaba por las tardes, y sudores de pecho. Espectoraba muchas materias mucosas ya opacas; perdia las carnes y las fuerzas: muy poco le habia aprovechado el haber permanecido algunas semanas en el campo; y en una palabra ya se consideraba tísico confirmado, cuando tomé la resolución de substituir la leche à todo alimento y medicamento.
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )

      Esta joven, que ha sido algunos años el mejor adorno de los mas aristocráticos salones, se ha visto obligada últimamente, por graves desgracias de familia, a dedicarse al teatro. —Es bella y elegante; pero se dice que esta tísica. Todas estas circunstancias, unidas a la inspiración y al gusto con que canta, hacían que el público la escuchase con respetuoso entusiasmo, con afectuosa consideración, con piedad y con cariño.

    • 1840-a1862 El Cucalambé Poesías [1974] 375 Cu (CDH )
      En estas fatales épocas, / He sido la triste víctima, / De varios amigos pérfidos / Y muchas comadres pícaras. / Más enfermizo y más pálido / Que una doncelluela tísica, / Me tienes aquí curándome / Con agua de cañafístolas. / Y no llamo ningún médico / Porque esas gentes perínclitas / Cuando no hay unto de Méjico / Mandan de barro las píldoras. /
    • 1884 Gutiérrez "Consecuencias prolongación úvula" El Dictamen, 1884 Esp (CDH )

      Hace más de un mes se presentó en nuestra consulta una joven planchadora, de veintisiete años, soltera, y cuya salud no se había resentido hasta 1882. En esta época comenzó á notar cosquilleo á la garganta acceso de tos seca, bastante pertinaz algo más tarde dolor en ambos vértice pulmonares y en la región precordial, cansancio, ligeros escalofríos, debilidad general. Sus reglas, antes normales, se hicieron tardías y escasas, luego faltaron algunos meses, y han continuado trastornadas en grado relativo á las modificaciones que su estado general ha venido experimentado, haciendo creer á la familia que esta enferma está tísica.

    • a1896 Silva, J. A. Sobremesa [1996] Co (CDH )

      En el silencio grave del salón de consultas el esculapio la ausculta lentamente, golpea, con blandos golpecitos de las yemas de los dedos, las espaldas gráciles, aplica atento el oído sobre la piel tersa como el raso, del busto delicado, y tras del minucioso examen prescribe cáusticos que queman el seno, aplicaciones de yodo que manchan y desfiguran, drogas odiosas, un viaje al Mediodía que equivale a abandonarlo todo, arte, sociedad, placeres y para justificar las prescripciones rígidas y con su frialdad de hombre de ciencia, acostumbrado al dolor ajeno, suelta las frases brutales. Está tísica... el pulmón derecho destrozado por los tubérculos, el izquierdo invadido ya, esa sordera que la atormenta desde hace meses irá aumentando; la tos que la sacude y la lastima, los insomnios atroces que la agotan, todo eso va a crecer, a tomar fuerza, y a dilatarse como las llamaradas de un incendio, a acabar con ella...

    • 1907 Pz Galdós, B. Tristes destinos [2002] Esp (CDH )

      — ¡No, no! —gritó Santiago, dejando caer con estruendo sobre la mesa la palma de su mano—. Teresa no está tísica... no está tísica ni de los pulmones ni la voluntad. Es mujer fuerte, mujer valerosa... Ni del corazón ni del cerebro flaquea; no y no.

    • 1922 Insúa, A. Negro alma blanca [1998] Esp (CDH )

      Pedro consultó al médico de a bordo. Nonell estaba tísico pasado, y lo mismo podía durar un mes que un año. Dependía del clima. Había sido un disparate embarcarlo. Que, al menos, se cuidase, evitando el aire demasiado vivo de la cubierta.

    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] Esp (CDH )

      Se heredan las enfermedades. Mirad ese joven de pálidas mejillas, de ojos hundidos, de mirada lánguida. Da dos pasos, sube ligera pendiente, y ...no puede más, se ahoga. Tose, y a cada tos va arrojando pedazos sanguinolentos de sus pulmones, y con ellos la esperanza de la vida, las ilusiones de la juventud. ¡Está tísico! ¡Caerá con las primeras hojas del otoño! ¡Así murieron también sus padres! ¡Triste herencia de su familia!

    • 1987 Martín Gaite, C. Usos amorosos posguerra [1994] 172 Esp (CDH )

      Era, en una palabra, una enfermedad de pobres, pero que sólo conseguían curársela los ricos. Tal vez por eso, aunque menos vergonzante que las venéreas, también se aludía a ella con eufemismos. Llamar «tísico»a alguien era casi un insulto, era como llamarle «desgraciado»o «muerto de hambre». Resultaba menos crudo decir que «estaba del pecho». Como era una enfermedad muy contagiosa y pesada de curar, a los que estaban del pecho se trataba de aislarlos, como primera medida, de las personas de su edad. Rara era la familia donde no hubiera algún caso de conocidos o parientes que viajaban periódicamente a un sanatorio antituberculoso. Lo hacían para llevarle embutido y algunos libros a un joven pálido y triste, que muchas veces aprovechaba aquella etapa de reposo forzado para escribir poemas dedicados a una novia imposible. Las sospechas de tuberculosis suponían un grave impedimento para el amor.

    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      No mostraba ojeras ni las mejillas chupadas ni el pecho hundido, no estaba excesivamente pálida ni respiraba con la boca abierta ni nada de eso; no se parecía en absoluto a la muchacha tísica que había imaginado y que nada más verla, sólo con respirar a su lado, podía contagiarme sus humores envenenados y su febril ensoñación en torno a la muerte.
    • 2012 Muñoz Rengel, J. J. Asesino hipocondríaco Esp (CORPES)
      El padre de Edgar Allan Poe, tuberculoso y alcohólico, abandonó a su familia cuando el poeta gótico tenía dos años, para morir más tarde víctima de su enfermedad en paradero desconocido. La madre, también tísica y embarazada entonces de su tercer hijo, murió cuando el señor Poe aún no había alcanzado los cuatro años de edad ni los noventa centímetros de altura, a pesar de su gran cabeza.
    • 2016 Aira, C. "En el café" El cerebro musical Ar (CORPES)
      [...] revista, la compré cuando salió, en el puesto que había en Lavalleja y Bulnes, en la esquina del conventillo. La compré porque la esperaba todas las semanas, no porque fuera un imbécil coleccionista esnob sino porque era mi único escape de la realidad sórdida de la pobreza, de mi padre preso y mi madre tísica.
    • 2021 Santiesteban, A. "Escándalo barco" [21-02-2021] OnCubaNews (La Habana): oncubanews.com Cu (HD)
      Según La Biblia: muchos serán los llamados, mas pocos los escogidos. Entre tantas jóvenes pretendientes, Faber inició su noviazgo con Juana de León, huérfana y tísica, que vivía bajo el amparo de una viejecilla lavandera.
    • 1750 Valdés León, P. Ordenanzas generales govierno político ciudad San Phelipe p. 259 Esp (BD)
      Todos los Médicos de esta Ciudad tengan especial cuidado, con los que padecen los accidentes de Hectiquèz ò Tysiquèz, ò de otra especie contagiosa; y siempre que adviertan los Hecticos, que passan de segundo à tercero grado (que es el peligroso) ò Tysico declarado ó enfermo contagioso, darán con prudencia orden en la casa para que vivan con precaucion.
    • 1783 Pons, G. Clave mercurial, II p. 54 Esp (BD)
      Don Manuel Escudero, Teniente Coronel de Infantería de edad de 32 años, temperamento colérico adusto, en el año de 1706, recogiéndose de la Campaña le acometió una tos con esputos de sangre, los que con el tiempo fueron purulentos, y lo hicieron thisico pulmonar. Despues que muchos medicos lo curaron inutilmente se fue extremadamente secando, creciendo la abundancia de los esputos purulentos; y hallándose con las piernas hinchadas, y las manos, dexado de los medicos por thisico incurable, acudió a mí para que lo librase de la muerte.
    • 1787 Anónimo "Phthisis propagada contagio" p. 104 Diarios literarios Esp (BD)
      M. Pichler en su memoria sobre las enfermedades contagiosas dice con relación a la phthisis que no se comunica con tanta facilidad como pretenden muchos autores por las camisas, los vestidos, las camas, etc.; y sin duda debe haber algunas diferencias para el contagio, segun los climas frios o calientes, pues en España y en Italia es costumbre quemar todos los muebles, y vestidos de una persona que muera ethica ó phthisica; pero sea lo que fuere el caso siguiente manifiesta con quanta reserva se debe proceder, y que no debe emplearse para el uso de los vivos lo que sirvió a un pthisico.
    • 1789 Piñera Siles, B. Trad Elementos Medicina Práctica Cullen, II [1789] p. 307 Esp (BD)
      Ya hace más de veinte años que me he ocupado en recoger observaciones con cuidado, y que precisado por una gran parte de este tiempo en asistir a los pobres en muchas Parroquias de París, he tenido ocasión de ver quizá un millar de pthísicos; por más indagaciones que he podido hacer no me he podido asegurar que ninguno se ha vuelto phtísico por el contagio, ó que lo haya comunicado, aunque la mayor parte de estos enfermos habitasen y durmiesen con personas sanas en parages estrechos, sucios, poco ventilados, y en donde todas las causas capaces de dar actividad al contagio se encontraban reunidas.
    • 1798 Larruga, E. Pueblos pesca [24] p. 62 Memorias Esp (BD)
      […] el humo del tabaco (con las condiciones supuestas) es tratado ya por muchas gentes, yá por medicina, yá por vicio; unos y otros le usan en pequeñas porciones […] pues si tal humo tocase freqüentemente la substancia interior del pulmón, induciria en él irritacion, con las repetidas impresiones le crisparia, no podria dilatarse ni comprimirse facilmente, seria anelosa la respiracion, y por termino vendrian a hacerse ptisicos; cuyas señales son las referidas: la tós continua, reyectaciones sanguineas, purulentas, etc.
    • 1828 Suárez Pantigó, P. Trad Flegmasias Broussais, II p. 290 Esp (BD)
      El segundo, alto, delgado, con pecho contraido y las megillas coloradas, acababa de curarse de una afección venérea por medio del muriato sobre-oxigenado de mercurio, cuando se sintió con una dispnea considerable. No tardó luego à pesar del uso de los pectorales, de los calmantes y de los vejigatorios en verse reducido à pasar la mayor parte de las noches tosiendo, sin que ya le abandonasen un movimiento febril que se aumentaba por las tardes, y sudores de pecho. Espectoraba muchas materias mucosas ya opacas; perdia las carnes y las fuerzas: muy poco le habia aprovechado el haber permanecido algunas semanas en el campo; y en una palabra ya se consideraba tísico confirmado, cuando tomé la resolución de substituir la leche à todo alimento y medicamento.
    • 1844 Zorrilla, J. Recuerdos fantasías [1852] Esp (CDH )
      Y para hacerme satíricoMe amenazas con lo de ético, / Seguiré tu plan diabólico; / Desde hoy agrio, amargo y ácidoMi zumbido melancólicoSerá son alegre y plácidoAunque me cueste un buen cólico. / ¿Temes que mis fuerzas bélicasCedan, y me quede exánime? / Dudas tienes bien angélicas; / Verdades oye evangélicas, / Que contigo voy unánime. / Quien no sea hoy un estólicoGran dosis de metafísicoHa de llevar en su físico; / Que no es de moda lo sólidoYa: lo elegante es lo tísico. /
    • 1861 Alarcón, P. A. De Madrid a Nápoles [1861] Esp (CDH )

      Esta joven, que ha sido algunos años el mejor adorno de los mas aristocráticos salones, se ha visto obligada últimamente, por graves desgracias de familia, a dedicarse al teatro. —Es bella y elegante; pero se dice que esta tísica. Todas estas circunstancias, unidas a la inspiración y al gusto con que canta, hacían que el público la escuchase con respetuoso entusiasmo, con afectuosa consideración, con piedad y con cariño.

    • 1840-a1862 El Cucalambé Poesías [1974] 375 Cu (CDH )
      En estas fatales épocas, / He sido la triste víctima, / De varios amigos pérfidos / Y muchas comadres pícaras. / Más enfermizo y más pálido / Que una doncelluela tísica, / Me tienes aquí curándome / Con agua de cañafístolas. / Y no llamo ningún médico / Porque esas gentes perínclitas / Cuando no hay unto de Méjico / Mandan de barro las píldoras. /
    • 1840-a1862 El Cucalambé Poesías [1974] 377 Cu (CDH )
      Es hoy un embrión diabólico / De enfermedades pestíferas. / Hay ya viruelas y cámaras, / Tifus, «guagua», y... ¡Santa Brígida! / Hay otras pestes maléficas, / Cuya explicación no es lícita... / Y en tanto, amigo carísimo, / No hay una doncella tímida, / Que quiera darme sus sábanas / Para algunas noches frígidas. / Ni en el otoño poético, / Ni en la abrasante canícula / Consigo mis labios cárdenos / Unir a una fuente nítida. / Sólo me persiguen pécoras / Y torpes viejas cernícalas, / Que con sus uñas faláricas / Desgarran mis carnes tísicas. /
    • c1872 Pz Galdós, B. Rosalía [1984] 193 Esp (CDH )
      ¡Qué admirable artificio! Una mujer, que, después de hacer en el mundo lo que le dio la gana, y de ser tan buena pieza como fue Margarita Gautier (o María Duplessis, que es lo mismo), se enamora de un joven simpático, se hace buena y honrada; luego se separa de él por exigencias del padre, y, por último, se muere tísica, queriendo tanto a aquel hombre —era la más encantadora invención que podía ocurrírsele a un novelista.
    • c1872 Pz Galdós, B. Rosalía [1984] Esp (CDH )
      Regenerarse con el amor de Mariano, tener una conferencia con el padre de éste; separarse de él; volverse tísica y entrar a la muerte, para que luego el idolatrado amante tomara a su lado y ella se pusiera mejor y se fuera curando, curando, hasta quedarse buena y sana, con dinero y sin tisis... ¡Oh! esto era más de lo que podría ambicionar un simple mortal.
    • c1872 Pz Galdós, B. Rosalía [1984] Esp (CDH )

      ¿Qué?

      — Que yo tengo una enfermedad de muerte... ¡Ah! y ni siquiera se me deja morir tranquila... Yo estoy tísica, Sr. D. Juan.

      — ¿Tísica? —dijo Gibralfaro, movido repentinamente a compasión, porque la tos, los gestos y la palidez de la muchacha parecían atestiguar ser verdad lo que decía.

    • c1872 Pz Galdós, B. Rosalía [1984] Esp (CDH )
      — ¿Tísica? —dijo Gibralfaro, movido repentinamente a compasión, porque la tos, los gestos y la palidez de la muchacha parecían atestiguar ser verdad lo que decía.

      — Sí señor: y me moriré sin remedio si se me quita el único consuelo de mi existencia. Yo quiero vivir, Sr. D. Juan: yo quiero vivir

    • c1872 Pz Galdós, B. Rosalía [1984] Esp (CDH )

      — Yo siento mucho que Ud. esté tísica, señora D.ª Rosario, pero lo único que le digo a Ud. es que antes que consentir que mi hijo... vamos: le mataría primero.

      — Bien —dijo Charito, llevándose el pañuelo a los ojos—, yo me sacrificaré por él; yo sufriré en silencio; yo le dejaré libre para que sea feliz y se case con una mujer pura, que pueda llevar su nombre y... ¡Ah! pero yo me muero de dolor... Sr. D. Juan: bendígame Ud., yo se lo pido de rodillas.

    • 1855-1874 Fuente, V. HEclesiástica Esp, V [1874] Esp (CDH )

      A fines del año 1501 había casado con el Príncipe Arturo de Inglaterra, que estaba tísico, y murió á 2 de Abril de 1502. Con dispensa del Papa se casó en 1509 con Enrique VIII, que á la sazon estaba muy enamorado de su bellísima cuñada. De los varios hijos que tuvo, solamente sobrevivió su hija María Tudor, que sucedió en el trono.

    • 1876 Martín Pedro, E. Manual patología [1876] 85 Esp (CDH )

      No se crea que hemos aventurado la hipótesis de considerar las lesiones orgánicas congénitas como las enfermedades del embrion. Hoy para nosotros no es ciertamente más que una hipótesis, pero con muchos visos de verdad absoluta. Más adelante consignarémos observaciones de embriones deformes, hermanos de adultos epilépticos, tísicos, etc.

    • 1876 Pz Galdós, B. De Oñate a Granja [2003] Esp (CDH )

      — Ya sé quién es: bajito, la ceja corrida; mira un poco torcido. Trae consigo una vieja y una señorita que parece tísica.

      — ¡Tísica! No puede ser, a menos que... —dijo Fernando en la mayor confusión—. A ver, denme las señas de esa enferma. Puede una salud robusta desmejorarse rápidamente con los malos tratos.

    • 1876 Pz Galdós, B. De Oñate a Granja [2003] Esp (CDH )

      »Me han dicho que en los pasillos no se hablaba más que del drama, y de los alientos que se trae este chico. Todo era elogios, congratulaciones, calor de simpatía, y esperanzas risueñas de días luminosos para la literatura. Pero no faltaban ratoncillos que entre los grupos se deslizaran, hincando el envidioso diente. Para que fuese completo y redondo el éxito de El trovador, los roedores, mordiendo el laurel, lo hicieron más fragante. Uno de los que morían, sotto voce, era ese amigo tuyo y compañero de oficina, que está tísico pasado.

    • 1876 Pz Galdós, B. De Oñate a Granja [2003] Esp (CDH )

      Uno de los que morían, sotto voce, era ese amigo tuyo y compañero de oficina, que está tísico pasado. Para él no hay nada bello, como nada hay puro ni honrado. Quisieran estos que el Universo se volviese tísico, como ellos; que el sol enflaqueciera, y escupiese con horribles toses la pálida luna. Ahora me acuerdo: se llama Serrano. ¿No sabes? De ti cuenta horrores. Tan pronto dice que eres pariente del verdugo, como que desciendes del moro Muza, y que fue tu nodriza una princesa del Congo.

    • 1876 Pz Galdós, B. De Oñate a Granja [2003] 127 Esp (CDH )
      Asistían al sacro colegio, entre otros puntos, Eleuterio Fonsagrada, un amigote suyo sargento de la Guardia Real, cuyo nombre no hace al caso, y el tísico Serrano, que amenazado de cesantía, llamaba a Cachán con dos tejas.
    • 1872-1878 Coello, C. Cuentos inverosímiles [1878] Esp (CDH )

      Decididamente William resulta un perro feísimo y James un hombre sumamente original. A mí me hace gracia; pero tengo cierto temor de que á la generalidad de las gentes que sólo juzga por impresiones, le parezca ridículo. Ambos disfrutan de perfecta salud. William, demasiado obeso por la falta de ejercicio (aún no sabe moverse) y por su intemperancia para la comida. La primera de sus nodrizas, la preciosísima perra Sara, ha muerto tísica, fumadapor los voraces labios del terrible mamoncillo.

    • 1880-1881 Menéndez Pelayo, M. HHeterodoxos [1946-1948] Esp (CDH )

      Matamoros, sintiéndose próximo a la muerte, emprendió nuevo viaje a Suiza, se hizo consagrarpor el Sínodo de la Iglesia Libre del cantón de Vaud; y murió tísico el 31 de julio de 1866, en una quinta de las cercanías de Lausana. Greene ha contado pesadísimamente todos los detalles de su muerte, como si fuera la de un santo. Los jóvenes renegados españoles del seminario de Lausana acompañaron el cadáver, entonando himnos y recitando versículos de la Escritura.

    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas V [2003] Pe (CDH )

      Margarita perdía colores y carnes, se desmejoraba a vista de ojos, hablaba de meterse monja, y no hacía nada en concierto. «¡O de Luis o de Dios!» gritaba cada vez que los nervios se le sublevaban, lo que acontecía una hora sí y otra también. Alarmose el caballero santiagués, llamó físicos y curanderas, y todos declararon que la niña tiraba a tísica, y que la única melecina salvadora no se vendía en la botica.

    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas V [2003] Pe (CDH )

      En esos tiempos era costumbre dejar las sábanas a la hora en que cacarean las gallinas, causa por la que entonces no había tanta muchacha tísica o clorótica como en nuestros días, De nervios no se hable. Todavía no se habían inventado las pataletas, que hoy son la desesperación de padres y novios; y a lo sumo, si había alguna prójima atacada de gota coral, con impedirla comer chancaca o casarla con un pulpero catalán, se curaba como con la mano; pues parece que un marido robusto era santo remedio para femeniles dolamas.

    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas VI [2003] Pe (CDH )
      La mujer declaraba que habiéndose arrodillado ante el altar y pedido a la Santísima Virgen que aliviase su miseria (pues era viuda con un celemín de hijos y sin fuerzas para trabajar en la costura, que no le cundía por estar medio tísica), compadecido el Niño extendió el piececito y dejó caer el chapín.
    • 1884 Berrueco, J. "Cómo se evita la tuberculosis" El Dictamen Esp (CDH )
      La cama y las ropas de los que mueren tísicos serán desinfectadas y las paredes de las habitaciones deben blanquearse ó empapelarse de nuevo y dejarlas que se ventilen por algún tiempo.

      Por falta de todas estas precauciones, y á veces á pesar de ellas, hace su aparición la tuberculosis. ¿Cómo se cura? En otro artículo nos ocuparemos de este importante asunto.

    • 1884 Cambaceres, E. Música sentimental [2003] Ar (CDH )
      Somos lo que somos, porque el terciopelo y la seda cuestan menos que el percal, porque es más barato vivir en un hôtel que en las bohardillas, porque, para pagar tres sueldos en la imperial de un ómnibus, tiene una que comer lo que los otros tiran, quemándose las pestañas sin perjuicio de quedarse ciega o tísica, mientras que, para arrastrar coche y caballos, basta abrir la boca y decir sí, y, últimamente, porque, para eso hemos nacido y esa es nuestra inclinación.
    • 1861-1884 Castro, Rosalía de Cartas [1993] Esp (CDH )
      Te confieso que lo mismo me da, y que si en realidad llegase a ponerme tísica, lo único que querría es acabar pronto, porque moriría medio desesperada al verme envuelta en gargajos, y cuanto más durase el negocio, peor.
    • 1884 Gutiérrez "Consecuencias prolongación úvula" El Dictamen, 1884 Esp (CDH )

      Hace más de un mes se presentó en nuestra consulta una joven planchadora, de veintisiete años, soltera, y cuya salud no se había resentido hasta 1882. En esta época comenzó á notar cosquilleo á la garganta acceso de tos seca, bastante pertinaz algo más tarde dolor en ambos vértice pulmonares y en la región precordial, cansancio, ligeros escalofríos, debilidad general. Sus reglas, antes normales, se hicieron tardías y escasas, luego faltaron algunos meses, y han continuado trastornadas en grado relativo á las modificaciones que su estado general ha venido experimentado, haciendo creer á la familia que esta enferma está tísica.

    • 1884 Pz Galdós, B. Tormento [2002] 196 Esp (CDH )
      En los teatros ves damas que parecen duquesas, y resulta que son esposas de tristes empleados que no ganan ni para zapatos. Mujeres guapas hay; pero muchas se blanquean con cualquier droga, comen mal y están todas pálidas y medio tísicas; mas antes de ir al baile se dan bofetadas para que les salgan los colores...
    • 1884 RAE DRAE 12.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. [...] adj. Med. Que padece de tisis. Ú. t. c. s. (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano. Se designa especialmente con este nombre la tuberculización pulmonar).
    • 1884-1885 Clarín Regenta [1990] Esp (CDH )

      De las tres hijas de los marqueses, dos, Pilar y Lola, se habían casado y vivían en Madrid; Emma, la segunda, había muerto tísica. Aquella escasa vigilancia a que la Marquesa se creía obligada cuando sus hijas vivían con ella, había desaparecido. Era el único consuelo de tanta soledad.

    • 1884-1885 Clarín Regenta [1990] Esp (CDH )
      Tú —vuelta a contar por los dedos, pero además con pataditas en el suelo, como llevando el compás— tienes fanatizado a medio pueblo; las de Carraspique se han metido monjas por culpa tuya, y una de ellas está muriendo tísica por culpa tuya también, como si tú fueras la humedad y la inmundicia de aquella pocilga; tú tienes la culpa de que no se case la de Páez, la primera millonaria de Vetusta, que no encuentra novio que le agrade... por culpa tuya.
    • 1884-1885 Clarín Regenta [1990] Esp (CDH )

      — ¿Que se come?

      — Pues claro... siendo muy rica...

      — ¿Dónde la hay?

      — La comen los señores...

      — Eso no vale, ¡so tísica! ¿qué sé yo lo que comen los señores?
    • 1884-1885 Clarín Regenta [1990] Esp (CDH )

      Cuando se sintió más sereno, tocó un timbre. Entró un joven alto, tonsurado, pálido y triste, tísico probablemente. Era un primo del Magistral que hacía allí veces de secretario.

    • 1887 Clarín Apolo Pafos [1989] 72 Esp (CDH )
      Y por ahí me viene a mí la muerte... es decir... la muerte no, porque soy inmortal; pero sí la agonía, una agonía eterna: ¿habrá mayor árboles, no sospechando que yo los espiaba, dijo hablando de mí: Esa chica está tísica...; y lo dijo sonriendo con desprecio.
    • 1885-1887 Pz Galdós, B. Fortunata [1993] Esp (CDH )

      Olimpia era la menor de las hijas de Samaniego, y hubiera causado gran admiración en la época en que era moda ser tísico, o al menos parecerlo. Delgada, espiritual, ojerosa, con un corte de cara fino y de expresión romántica, la niña aquella habría sido perfecta beldad cincuenta años ha, en tiempo de los tirabuzones y de los talles de sílfide.

    • 1888 Rubén Darío Año [1950] Cuentos Ni (CDH )

      Pero Dios dispone unas tristezas tan hondas, que hacen meditar en su infinito amor de abuelo para con los hombres, a veces incomprensible.

      La dulce niña se volvió tísica.

      De su opulencia, en medio de riqueza y lujo, de sedas, oro mármol, se la llevó la muerte, como quien arranca una flor de un macetero.

    • 1889 Palma, R. Tradiciones peruanas VII [1969] Pe (CDH )

      Las funciones de alférez real, en general, eran las, del actual portaestandarte, si bien aquél era alto personaje. El alférez real era el que llevaba en la guerra la bandera real, y los de las órdenes militares las de estas corporaciones. Por consiguiente, se elegían para el cargo los más nobles, valientes y robustos guerreros. Hoy se confía el estandarte al último cadete, siquier sea tísico y enclenque.

    • 1891 Clarín (Leopoldo Alas) Hijo [1990] 198 Esp (CDH )

      Y ¡quién lo dijera! también había muerto tísica, después de un mal parto. ¡La Tiplona! El que más y el que menos de aquellos señores la había amado en secreto o paladinamente, y el mismo Bonifacio, muy joven entonces, tenía que confesarse que su afición a la ópera seria había crecido escuchando a aquella real moza, que enseñaba aquella blanquísima pechuga, un pie pequeño, primorosamente calzado, y unos dientes de perlas.

    • 1891 Clarín (Leopoldo Alas) Hijo [1990] 197 Esp (CDH )
      Antonio Castrillo había sido el mejor jugador de tresillo de la provincia, después se había ido a jugar a Madrid, y allí se agenció de modo, siempre jugando al tresillo, que se hizo un nombre en la política y fue subsecretario en tiempo de Istúriz. Pero éste y los demás Castrillos habían muerto tísicos.
    • 1891 Clarín (Leopoldo Alas) Hijo [1990] Esp (CDH )

      Bonis también creía que aquella vida no era para llegar a viejo; pero, a pesar de cierto vago temor a ponerse tísico, estaba muy satisfecho de sus hazañas. Se comparaba con los héroes de las novelas que leía al acostarse, y en el cuarto de su mujer, mientras velaba; y veía con gran orgullo que ya podía hombrearse con los autores que inventaban aquellas maravillas.

    • 1892 Pz Galdós, B. Tristana [1892] 159 Esp (CDH )

      ¿Pensarás que estoy tísica pasada, como la Dama de las camelias? No, hijo mío. Es que D. Lope me ha pegado su reuma. Hombre, no te asustes; D. Lope no puede pegarme nada, porque... ya sabes... No hay caso. Pero se dan contagios intencionales. Quiero decir que mi tirano se ha vengado de mis desdenes comunicándome por arte gitanesco ó de mal de ojo la endiablada enfermedad que padece. Hace dos días, al levantarme de la cama, sentí un dolor tan agudo, pero tan agudo, hijo...

    • 1895 Lpz Bago, E. Separatista [1997] 266 Esp (CDH )
      Y aquella otra historia, la de un matrimonio, los dos muy jóvenes, y ella tísica, insaciable en las caricias, apresurando la muerte en ellas y por ellas.
    • 1880-1895 Silva, J. A. Poesías [1996] Co (CDH )
      / Enamorado luego de la histérica Luisa, / rubia sentimental, / se enflaqueció, se fue poniendo tísico / y al año y medio o más / se curó con bromuro y con las cápsulas / de éter de Clertán.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )

      — ¿Se ha sacado usted la lotería?, llegó a preguntarle el secretario.

      Sólo Ernesto Gomar, el médico-legista, insistía en que Ortegal estaba tísico, aunque sin decírselo a él. Lo aseguraba a los demás porque llevaba tiempo de estudiarlo, de seguir los progresos del mal, palpando la lenta destrucción inapreciable para los ojos profanos y muy elocuente para los de un clínico.

    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )

      Consultado Gomar, el médico-legista, diagnosticó en el acto; Ortegal estaba tísico, era un caso que venía estudiando.

      — No obstante mis presunciones, lo reconoceré con esmero la tarde del próximo turno en que podamos desnudarlo en el cuarto del juez sin riesgo de que nos interrumpan.

    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] Mx (CDH )

      Fue lo malo, que el diagnóstico aquel de un ebrio irresponsable Julio sentía que era cierto. Sí, estaba tísico, a dos pasos del sepulcro, sin más alientos que para adorar a Clotilde hasta el último suspiro; a Clotilde, que tan cruel como la vida, también principiaba a escapársele.

    • a1896 Silva, J. A. Sobremesa [1996] Co (CDH )

      En el silencio grave del salón de consultas el esculapio la ausculta lentamente, golpea, con blandos golpecitos de las yemas de los dedos, las espaldas gráciles, aplica atento el oído sobre la piel tersa como el raso, del busto delicado, y tras del minucioso examen prescribe cáusticos que queman el seno, aplicaciones de yodo que manchan y desfiguran, drogas odiosas, un viaje al Mediodía que equivale a abandonarlo todo, arte, sociedad, placeres y para justificar las prescripciones rígidas y con su frialdad de hombre de ciencia, acostumbrado al dolor ajeno, suelta las frases brutales. Está tísica... el pulmón derecho destrozado por los tubérculos, el izquierdo invadido ya, esa sordera que la atormenta desde hace meses irá aumentando; la tos que la sacude y la lastima, los insomnios atroces que la agotan, todo eso va a crecer, a tomar fuerza, y a dilatarse como las llamaradas de un incendio, a acabar con ella...

    • a1896 Silva, J. A. Sobremesa [1996] Co (CDH )

      ¡Que está tísica! Sí, lo siente, lo sabe. Hubo un momento en que al salir de la casa del sabio se abandonó al desaliento y se sintió cerca de la muerte, pero hace dos horas ha olvidado su mal...

    • a1896 Silva, J. A. Sobremesa [1996] Co (CDH )
      Morir, Dios mío, morir así tísica a los veintitrés años, al comenzar a vivir, sin haber conocido el amor, única cosa que hace digna a la vida de vivirla, morir sin haber realizado la obra soñada, que salvará el nombre del olvido;
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      «Con esta maldita tos —dijo cuando se fue sosegando, y se limpiaba de babas, mocos y lágrimas el encendido rostro—, ¿cómo quiere usted que sea uno político y orador?... Mi naturaleza es émula de mi bolsillo en el agotamiento, en la extenuación... No me forjo ilusiones de vivir el año que viene: estoy tísico pasado».
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Sepa ella que yo quiero ser también su misterioso vigía, y que ninguno habrá más diligente ni más desinteresado que yo... Procuraré además el trato y conocimiento de todos los amigos de Calpena: ese empleado tísico, ese Larra, ese Ros de Olano, ese Pezuela, ese Veguita...
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Al día siguiente, el anónimo corresponsal mostró detallado conocimiento de cuanto al señorito le había ocurrido en la oficina: le reprendió por la compañía del tísico Serrano; le incitaba a frecuentar menos los cafés y más la sociedad, pues en aquellos adquiriría hábito de grosería y desparpajo, y aprendería en ésta la finura y distinción de un perfecto caballero.
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Por aquellos días ya no iba Fernandito a los cafés, y esquivaba todo lo posible la sociedad del tísico Serrano, cuyo pesimismo había llegado a serle odioso.
    • 1898 Pz Galdós, B. Mendizábal [2002] Esp (CDH )
      Acudió después mi hombre al tísico Serrano, que llenándole la cabeza de mentiras y encaminándole por una pista falsa, le hizo perder el tiempo y la paciencia; y tantea aquí, tantea allá, se refugió en la amistad y en los grandes conocimientos sociales de su compañero de casa, Nicomedes Iglesias.
    • 1899 Pz Galdós, B. Estafeta romántica [2002] Esp (CDH )
      El hijo mayor de Maltrana murió tísico en Madrid hace tres años, contando diez y siete, y aquí tienes explicado el aborrecimiento de Valvanera a esa Villa y Corte.
    • 1899 Pz Galdós, B. Estafeta romántica [2002] Esp (CDH )
      Pues sabrás que eres el mayor tonto del mundo en apurarte tanto y ponerte melancólico y medio tísico porque tu novia se a casado con otro.
    • 1899 RAE DRAE 13.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. adj. Que padece de tisis. Ú. t. c. s. (| tuberculosis pulmonar).
    • 1900 Blasco Ibáñez, V. Entre naranjos [1997] Esp (CDH )
      Pero un día Keller la abandonó como ella había abandonado a otros; se fue arrastrado por el marchito encanto de una contralto tísica y lánguida, que tenía el enfermizo perfume, la malsana delicadeza de una flor de estufa.
    • 1902 Valle-Inclán, R. M. Sonata otoño [1996] Esp (CDH )
      Hablaban de las tías devotas, viejas y achacosas, de las primas pálidas y sin novio, de aquella pobre Condesa de Cela, enamorada locamente de un estudiante, de Amelia Camarasa, que se moría tísica, del Marqués de Tor, que tenía reconocidos veintisiete bastardos.
    • 1905 Blasco Ibáñez, V. La bodega [1998] Esp (CDH )
      La asfixia le hacía abrir, con temblores de angustia, su andrajoso corpiño, mostrando un pecho de niño tísico, de una blancura de papel mascado, sin más señales del sexo que dos granos morenos hundidos entre las costillas.
    • c1870-1905 Echegaray, J. Ciencia popular [1905] Esp (CDH )
      El horizonte de su pobre cuerpo, en aquellas muchas heladas de la Noruega, era la tosca tela de un jergón, que estaría probablemente tan tísico y tan extenuado como su dueño.
    • 1903-1905 Echeverría, A. J. Romances [1953] 59 Concherías CR (CDH )
      Hoy mísero discurres, / de ti mismo sediento / por entre peñas calvas / y tísicos potreros, / ya no claro como antes / ni como enantes fresco, / sonoro, arrebatado, / alegre, bullanguero; / sino, cual corresponde / al triste ministerio / que agora desempeñas, / cuando achacoso, viejo, / la ingratitud humana / te torna en basurero / pagando tus mercedes / con tan ingrato premio. /
    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )
      Una voz mofadora me susurra: «¿Cuándo has podido pensar que cabía belleza en una labriega de pies descalzos, maculados de negruzca tierra? ¿En el tiznado minero? ¿En la muchacha tísica, moribunda en el hospital? /
    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )
      ¿Por qué mejor? No lo sé explicar; pero me gustaría tener un modo mío de sentir el natural, y me gustarían esas rarezas de sátiras y de delirios, el infierno y el cielo, el amor, la muerte, la horca, el fanatismo, los asnos dómines, las duquesas histéricas y tísicas, con colorete, las familias reales retratadas hasta el alma, hasta la misma médula de sus huesos, enseñando la sensualidad de la reina y la inepcia bonachona del rey.
    • 1905 Pardo Bazán, E. Quimera [1991] Esp (CDH )

      Cada peseta representa una gota de sangre; cada duro es un nervio; cada millar de duros, un pulmón.

      Estaba anémico, neurasténico y tísico, sin dinero.
    • 1905 Sánchez, F. Barranca [1997] Ur (CDH )

      RudelindaEso es; pa esa guacha *tísica todos los cuidaos; los demás que revienten. Andá no más... Anda no más, que poco te va durar el contento. (A Aniceto. )¿Y a usted lo han dejao de cuidador? Bonito papel, ¿no? ¡Jua!... ¡Jua!... El maizal con espantajo. (Mutis.)

    • 1905 Valle-Inclán, R. M. Sonata invierno [1996] Esp (CDH )
      Desde hace algún tiempo la encuentro triste y temo que tenga la enfermedad de sus hermanas: Las dos murieron tísicas...
    • 1907 Pz Galdós, B. Tristes destinos [2002] Esp (CDH )
      Teresa no está tísica... no está tísica ni de los pulmones ni la voluntad.
    • 1907 Pz Galdós, B. Tristes destinos [2002] Esp (CDH )

      — ¡No, no! —gritó Santiago, dejando caer con estruendo sobre la mesa la palma de su mano—. Teresa no está tísica... no está tísica ni de los pulmones ni la voluntad. Es mujer fuerte, mujer valerosa... Ni del corazón ni del cerebro flaquea; no y no.

    • 1909 Barrett, R. Lo que son yerbales [1909] Py (CDH )
      La tercera parte se vuelven tísicos bajo la carga de mulo que les echan encima.
    • 1912 Pz Galdós, B. Cánovas [2002] Esp (CDH )

      — Damas son, querida; pero de esas que llaman de las Camelias.

      — Pues, según me han dicho, la dama de las Cameliasera tísica, y estas no están enfermas del pecho: chillaban como demonios.

    • c1916 Blasco Ibáñez, V. Trad Mil noches [2003] Esp (CDH )

      "¿Se ha visto nunca a nadie pararse en casa del carnicero para pedir la carne tísica? ¿Y no da el carnicero a sus mejores parroquianos los pedazos más carnosos?

    • 1918 Quiroga, H. Cuentos Amor [1993] Ur (CDH )

      — ¡Víbora tísica! ¡eso es lo que te dije, lo que te quiero decir! ¡Pregúntale, pregúntale al médico quién tiene la mayor culpa de la meningitis de tus *hijos: mi padre o tu pulmón picado, víbora!

    • 1922 Insúa, A. Negro alma blanca [1998] Esp (CDH )

      Pedro consultó al médico de a bordo. Nonell estaba tísico pasado, y lo mismo podía durar un mes que un año. Dependía del clima. Había sido un disparate embarcarlo. Que, al menos, se cuidase, evitando el aire demasiado vivo de la cubierta.

    • 1922 Insúa, A. Negro alma blanca [1998] Esp (CDH )

      — Ya no es posible. ¿No has sentido el sudor caliente de mis manos? ¿No te has fijado en mi cara? Estoy tísico, deshecho; vivo con la mitad de un pulmón, con permiso de la funeraria...

    • 1922 Jiménez, R. E. Informe habitantes Comunes Informes Sto Domingo RD (CDH )

      Otro solecismo muy corriente, no sólo en estas regiones, sino en todo el país, es dar impropiamente valor de adjetivo a los substantivos tisis, sífiles, parálisis y otros con que se designan enfermedades. Ejemplo: "Juan esta tisis ""Pedro está sífiles ""María está parálisis ", en vez de tísico, sifilítico, paralítico.

    • 1922 Ortega, A. Apuntes PsicolPueblo Dominicano Informes y artículos Santo Domingo RD (CDH )

      Truján (corrupc.) Truhan

      Tésico tísico

      Topar (castizo) encontrar

      Terina jofaina o palangana

    • 1924 Rivera, J. E. Vorágine [1995] Co (CDH )

      Yo soy el doctor y éste que les hablaba es un simple escribiente.

      El tísico rostro del señor juez era bilioso como sus espejuelos de celuloide y repulsivo como sus dientes llenos de sarro.

    • 1926 Arlt, R. Juguete rabioso [1993] Ar (CDH )

      Lo registraron y no llevaba armas. Un cabo le pone la cadena y se lo lleva. Antes de llegar a Bogotá, en lo oscuro, Arévalo saca una faca que tenía escondida en el pecho bajo la camiseta y envuelta en papel de seda, y se la enterró hasta el mango en el corazón. El otro cayó seco, y Arévalo rajó: fue a esconderse en la casa de una hermana que era planchadora, Pero al otro día lo "cacharon".

      Dicen que murió tísico de la paliza que le dieron con la "goma".
    • 1926 Pz Ayala, R. Tigre Juan [1991] Esp (CDH )

      Hacía meses que Tigre Juan no había visto a Carmona, llamada así, en aumentativo, por corpulenta y colorada. Al pronto, no la reconoció. Estaba reducida a los huesos, y en la cara no le quedaban sino ojos; dos bolas de azabache brillador, con una como gota de sangre, allí donde se reflejaba la lumbre roja de la vela. Había oído Tigre Juan que estaba tísica; mal sin remedio en los pobres. No esperaba hallarla agonizando.

    • 1926 Romero, F. / Fdz Shaw, G. El caserío [1926] Esp (CDH )

      CHOMINAparte.

      ¡Y tiene esta Inosensia unos alrededores...!

      Tose.

      INOSENSIA¡Desía que no tosía! Tísico está.

      Se vuelve sin dar cara a Chomin, hacia la puerta de la derecha. Chomin vuelve a toser.

      En cambio, el otro... ¡Ese sí que es un pichón rico, rico!

    • 1926 Villalón, F. Andalucía la Baja [1998] 160 Esp (CDH )
      La musa enferma de la Bulería / anda en la calle a caza de despojos / de heteras y rufianes, y los rojos / cuchillos besa de la matonía. / Con gestos burdelescos de alegría / la joven canta. Sólo tiene ojos. / Y sus pestañas son negros abrojos / florecidos en gracia y picardía. / Tuerce su cuerpo la mocita tísica / y en espasmos de amor muerde su pelo. / Las caderas ondula con lascivia; / contra todas las leyes de la Física / lucha su gravedad. Su ardor se entibia / y abatida y febril rueda en el suelo.
    • 1929 Glz Anaya, S. Oración tarde [1944] 34 Esp (CDH )
      Una, rubiales, medio tísica, con el pelito muy cortado, a la que llamaban la Cebollera, se le montó a horcajadas en las rodillas Los últimos jirones de su conciencia, en aquel antro de la Lata, eran los versos iniciales de otra clásica granadina, que le cantó la Cebollera, con la voz ronca, de aguardiente y entornando los ojos con languidez:
    • 1929 Mejía Nieto, A. Relatos nativos [1929] Ho (CDH )
      Mas ahora, cuando más feliz se creía, Edgardo le dice que su novia está tísica, que es lo mismo que le dijera que ha muerto.
    • 1935 Loynaz, D. M. Jardín [1992] Cu (CDH )
      Ya propicies la prolongación de un dulce encuentro, ya frustres la cita amorosa, ya colmes los graneros y las arcas del codicioso labrador o te lleves la modistilla tísica que sorprendiste en la calle, huidora, apresurándose hacia el taller, para quien te ame serás siempre la misma...
    • 1940 Cabral, M. Compadre Mon [2003] RD (CDH )
      Pero, la emoción, es una muchacha simple, / tan sencilla, tan pura, / que su pudor es estar desnuda... / y hoy me llega a los brazos quitándose / golondrinas, cisnes, pelucas, y hasta / lo de todos los días: / su trago de vinagre para ponerse la piel / color de tecla usada; / y tener (con permiso de Bécquer) / una tísica voz para sus rimas... /
    • 1941 Alegría, C. Mundo [1978] 274 Pe (CDH )
      — Muchas cosas —respondió Alberto—, pero las principales son que den máscaras protectoras a los que trabajan en los hornos, pues ahora se vuelven tísicos; que den botas impermeables a los que trabajan en zonas inundadas; aumento de salario mínimo a un sol cincuenta, pues un sol no alcanza para nada.
    • 1942 Cela, C. J. Pascual Duarte [1995] 37 Esp (CDH )
      [...] era larga y chupada y no tenía aspecto de buena salud sino que, por el contrario, tenía la tez cetrina y las mejillas hondas y toda la presencia o de estar tísica o de no andarle muy lejos; era también desabrida y violenta, tenía un humor que se daba a todos los diablos y un lenguaje en la boca que Dios le haya perdonado, porque blasfemaba las peores cosas a cada momento y por los más débiles motivos.
    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] Esp (CDH )

      En primer lugar, no lleve a las tertulias a las niñas pequeñas, y cuanto más tarde, mejor. El respirar aire viciado es siempre dañoso, sobre todo cuando el cuerpo aún no está desarrollado. Lo mismo pasa a las almas. ¿Respiran, sus hijas desde muy jóvenes la atmósfera más o menos deletérea de las reuniones o tertulias? Bien pronto se desarrollarán en ellas la pasión del lujo, de la coquetería y de la vanidad. A los dieciséis años serán almas tísicas, víctimas ahora del mundo y más tarde de la justicia de Dios, y después de la vida, brasas de infierno.

    • 1945 Sarabia, R. Pedagogía familiar [1945] Esp (CDH )

      Se heredan las enfermedades. Mirad ese joven de pálidas mejillas, de ojos hundidos, de mirada lánguida. Da dos pasos, sube ligera pendiente, y ...no puede más, se ahoga. Tose, y a cada tos va arrojando pedazos sanguinolentos de sus pulmones, y con ellos la esperanza de la vida, las ilusiones de la juventud. ¡Está tísico! ¡Caerá con las primeras hojas del otoño! ¡Así murieron también sus padres! ¡Triste herencia de su familia!

    • 1948 Mihura, M. Memorias [1981] 217 Esp (CDH )

      Desde entonces no había verbena, ni reunión, ni cachupinada, adonde no fuera invitada mi osa Alicia que bailaba con su vestido blanco, y su mantón de Manila puesto, y la más amable de sus sonrisas en la cabeza gris. Las señoritas la envidiaban con su envidia pequeña de señoritas. Todas las miradas eran para ella. El ingeniero fué su novio. Y el ingeniero, como hacen siempre los ingenieros con las osas, al poco tiempo la abandonó. Alicia, amargada, se metió a tanguista. Al principio chocó un poco aquella tanguista con bozal que en vez de Pippermint tomaba acelgas. Después ya no. Mi pobre Alicia, con sus bailes, era la reina del cabaret. Pero no dejaba de pensar en el ingeniero... En las noches que había pasado con el ingeniero... Tomó cocaína. Y murió tísica en un hospital de Ceuta.

    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      El diario de esta rusa, ambiciosa de gloria, neurasténica, de una ansiedad patológica, y al último tísica, es curioso, por su anhelo, por su angustia; pero sus apreciaciones son falsas.
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      Julio César, homosexual; el canciller Bacon, chanchullero; Pope, débil y jorobado; Spinoza, tuberculoso; lord Byron, cojo; Shelley, medio tísico; Edgar Poe, borracho; Dostoyevski, epiléptico; Kant, encanijado; Nietzsche, loco; Leopardi, jorobado y tísico; Larra, suicida.
    • 1949 Urabayen, L. Tierra humanizada [1949] Esp (CDH )

      Y si escapan a todos estos peligros, a este régimen continuo de inmersiones, suele remontárseles a la superficie tirando de la cuerda y atendiendo a su llamada al cabo de los dos o tres minutos. Es frecuente entonces verles perder sangre por la nariz y los oídos, con los ojos quemados por la sal y el tímpano reventado. Las enfermedades hacen el resto y pronto la resistencia del buceador queda vencida. A los treinta y cinco años son ya viejos, tísicos, cardíacos, sordos, ciegos, sin otro recurso, después de haber sacado quizá millones del agua, que la mendicidad.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      Cuando se murió mi padre, que era el último vivo de los 25 hijos que había tenido, y mi madre se quedó en casa de mis tíos, la abuela se fué de ama de gobierno de un propietario de Navalcarnero, el señor Molina, que se había quedado viudo con cuatro chicos. Como ella también estaba viuda hacía muchos años, allí se quedó. Y cuando se murió el viudo, la nombró en el testamento tutora de los chicos. Los cuatro son una calamidad. El mayor, Fernando, tiene veinte años y no sale en todo el día del Casino. Tiene una querida en el pueblo y está medio tísico.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      Llegamos al sexto mandamiento. Todos los padres preguntan si hacemos cosas feas o no. Como todos sabemos lo que son cosas feas, decimos sí o no, casi siempre sí, porque todos las hacemos o creemos hacerlas.

      — Mira hijo, eso no se hace. Es un pecado y además es muy malo. Los niños se vuelven tísicos y se mueren.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      A este chico lo que le hace falta es menos colegio y más jugar. Se va a quedar tísico y entonces veremos para qué sirve tanto estudio y tanta leche.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      Arnulfo, que tiene diecisiete años, está loco con las mujeres. Cuando nos vamos a acostar, me cuenta todas sus aventuras con las golfas del barrio y luego la mayoría de las noches se masturba. Tiene la cara amarilla y una tosecilla seca, y don Arsenio, algunas veces, le mira cuando tose y le dice que se va a quedar tísico de tanto "tocar a misa".

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] Esp (CDH )

      — Bueno, verá usted: cuando un pueblo es muy pequeño y hay en él pocos mozos, que no son bastantes para mandar un sondado, pues juntan este pueblo con otro y entre los dos pueblos, pues, siempre hay bastante para dar un soldado al cuartel. Y esto es lo que pasó en mi pueblo. En el pueblo de al lado, al que le tocaba ser soldado era el hijo del cacique y en mi pueblo yo. Debíamos de haber sorteado a ver cuál iba, pero como yo soy sordo, el hijo del cacique tenía que ir de todas maneras. Así que vino el médico y dijo que yo no era sordo y que el hijo del cacique estaba tísico. Y aquí me trajeron. Y aquí, pues, me hicieron sanitario, porque como soy sordo... pues, usted comprende.

    • 1951 Barea, A. Forja rebelde [1958] III, 139 Esp (CDH )

      — Entonces tienes que admitir que no era ningún crimen esconderle. Y ahora voy a contarte yo otra cosa que ese hombre, a quien vais a dar el paseo, ha hecho. —Y le conté la historia de don Pedro y el muchacho tísico—. Como ves, sería un crimen fusilar a un hombre semejante —terminé.

    • 1952 Cáceres Lara, V. Humus [1995] Cuentos Ho (CDH )

      Y ella no podía explicarse el porqué del abandono que sufría... Fue ella siempre buena con el prójimo. Fue siempre caritativa y dadivosa. Por sus vecinas hizo siempre lo que pudo. A los niños los adoró siempre, quizá porque no pudo tenerlos. Pero era posible que la vieran muy delgada y muy amarilla. Quizás la oían toser y pensaban que estaba tísica. Ella sabía que la mataba el paludismo.

    • 1956 Cela, C. J. Judíos moros cristianos [1989] Esp (CDH )

      Una horquilla puesta sobre la señal, advierte que habrá que trabajar a cambio; esta letra no es de las mejores. El vagabundo, por Lanzahita, no vió ninguna; se conoce que no hubieran podido resistir la competencia. Dos rayas que se encuentran por abajo, indican vecinos sentimentales a los que conviene contar tristezas y amargas aventuras.

      — Un socorro, por amor de Dios, a un desdichado padre de nueve hijos mudos, que tiene la mujer tísica y sin curación.
    • 1956 Cela, C. J. Judíos moros cristianos [1989] Esp (CDH )
      — Un socorro, hermanita, por amor de Dios Todopoderoso, a un desdichado padre de familia, enfermo del corazón y de la próstata, que tiene nueve hijos mudos y tres tontos, los pobrecitos, y la esposa tísica pasada y echando sangre por la boca a borbotones, sin curación posible...
    • 1956 Cela, C. J. Judíos moros cristianos [1989] Esp (CDH )
      En Arenas, las señoritas de la colonia toman baños de sol y enseñan las piernas y los hombros; antes, los mozos les tiraban piedras y les llamaban tísicas y otras cosas peores; ahora, ya no: ahora miran y procuran venderles helados y gaseosas y fotografías de rincones o de trajes típicos.
    • 1956 Villalonga, L. Bearn sala muñecas [1985] Esp (CDH )

      El señor escuchaba con atención.

      — ¿Cómo sabes que es un disparate? —preguntó.

      — ¿Es decir, que a un tísico todavía hay que darle sangre de caballo tísico? Eso sería como darle agua a un ahogado.

      — Pues *si yo tuviera diez mil duros, tía María Antonia... *

    • 1956 Villalonga, L. Bearn sala muñecas [1985] Esp (CDH )

      — ¿Cómo se llama ese médico? —preguntó el señor.

      — Bueno —repuso doña Xima—, yo creo que no es médico, pero es un individuo que entiende mucho...

      — Criar caballos tísicos —proseguía doña María Antonia—, unas bestias tan nobles y que son tan necesarias...

      — Pero es para curar personas, tía. *

      — Mira, eso no me gusta —decretó mi bienhechor—. ¿No se te ocurre otra cosa?

    • 1957 Laín Entralgo, P. Espera [1984] Esp (CDH )
      Y no un "creer pragmático", como el del médico que sin razón suficiente "cree" que un enfermo es tísico, ni un "creer doctrinal", como el de quien con buenas razones "cree" que hay habitantes en otro planeta, sino el "creer moral" a que nos obliga lo que, siendo para nosotros absolutamente necesario, no es susceptible del humano conocimiento.
    • 1957 Palés Matos, L. Poesía 1915-1956 [1968] 122 PR (CDH )
      Insomnio de murciélago de esa poetería / que lleva sobre el pecho una llaga encendida. / Los horas caen aisladas, como gotas letíferas / de filtros que levantan viscosas pesadillas. / Noches de bandoleros y prostitutas tísicas. / Sangra el pulmón enfermo y los pechos se inflan. / Sobre el viento oleoso de las calles sombrías, / la tos se abre como una doliente margarita. /
    • 1942-a1958 Jiménez, J. R. Españoles [1987] Esp (CDH )
      Parecías un Chopin adolescente y elegante, fresco y mustio a un tiempo; tu sonreír mustio y caído revolaba alrededor de todo tu rostro como una pálida mariposa amable revuela alrededor de ese rostro inefable de la mujer tísica de Goya; un poco ajado como tú, me parecías un joven ciprés abatido levemente por yo no sé qué viento.
    • 1958 Viñas, D. Dios cotidiano [1978] Ar (CDH )

      Ya no sería más para mí ese solícito y viril compañero de mi padre que me había imaginado. No. A partir de ese descubrimiento yo pasaba a ser a medias espía y a medias un ejemplo que había que mostrar, un converso que había comprendido la Verdad. Y nada más que eso. Pero todo en relación a mi padre. A partir de ese momento iba a ser: «El hijo de Ferré, del liberal, claro; que está con nosotros». Algo como haber sido tísico alguna vez hasta curarse. O, mejor, enfermo de algo vergonzoso.

    • 1961 Aub, M. Calle Valverde [1985] Esp (CDH )
      Ahora * compartía uno estrecho con un escultor murciano y un pintor de Sevilla, tísico, que les daba mucho que hacer por su desmedida afición a los caldos de su tierra.
    • 1961 Aub, M. Calle Valverde [1985] Esp (CDH )

      Tentábale el teatro por los rumbos de Rostand y Marquina; *veníale de su padre que, además de dulcero, no dejó de ser apuntador cuando recalaban compañías «de verso»en Toledo. Así anduvo, desde niño, entre bastidores y aun debajo de ellos: en el foso, alma oscura y misteriosa del teatro. Al morir, tísico, el buen progenitor, Agustín Morales, sin darse cuenta, se alejó de los escenarios.

    • 1934-1961 Icaza, J. Huasipungo [1994] Ec (CDH )
      Tísico también creo que era el pobre.
    • 1961 Sábato, E. Héroes [1986] Ar (CDH )

      — De qué familia m'está hablando, pibe. Estamo el viejo y yo. Mi vieja murió hace tre año. Mi hermano Américo está a Mendoza, trabaja de pintor, como yo. Otro, Bachicha, está casado a Matadero. Mi hermano Argentino, que le decíamo Tino, era anarquista y lo mataron en Avellaneda, el año 30. Un hermano que se llamaba Chiquín, bah que le decíamos, murió tísico.

    • 1962 Vargas Llosa, M. Ciudad perros [1997] 124 Pe (CDH )
      "Y ahora comenzará el olor, y la botella se vaciará en unos segundos y cantaremos, y alguien contará chistes, y el injerto se pondrá triste, y sentiré la boca seca y los cigarrillos me darán ganas de vomitar y querré dormir, y la cabeza y algún día me volveré tísico, el doctor Guerra dijo que es como si uno se acostara siete veces seguidas con una mujer."
    • 1965 Quiroga, E. Tu nombre [1993] Esp (CDH )

      Teresa Alzola, apoyándose en la ventana, cuchicheando. Dije:

      — Claro.

      Se volvió un poco.

      — Está tísica.

      La nieve caía sucia, sin peso, al patio.

    • c1940-a1966 Amaya Amador, R. Cuentos [1997] Ho (CDH )

      Un día el patrón la despidió. No la necesitaba. No daba el rendimiento obligatorio; además, estaba tísica. Quedó en la calle con sus dos niñas y no hubo otro recurso que retornar al hogar abandonado.

    • 1966 Marsé, J. Teresa [1996] 120 Esp (CDH )
      ¡Qué mentira, qué insoportable mentira estas noches suyas de la costa, estas vacaciones de señorita tísica, ese aburrido castillo feudal que era la villa!
    • 1966 Marsé, J. Teresa [1996] 303 Esp (CDH )

      Sediento y cansado, con los huesos molidos, decidió que lo mejor era regresar a Barcelona y esperar noticias. No le importó hacer ruido con la moto al ponerla en marcha (que Teresa supiera, por lo menos, lo cerca que él había estado) y poco después salía a la carretera. Los pequeños y medrosos 600 circulaban estrictamente por su derecha. No pudo alcanzar los cien. Expirando, tísica, con todos sus huesos crujiendo, la Rieju le depositó en Barcelona casi dos horas más tarde y él la abandonó, ya cadáver, detrás del Hospital de San Pablo, para continuar a pie remontando la calle Cartagena.

    • 1964-1967 Cabrera Infante, G. Tristes Tigres [1967] Cu (CDH )
      ¿Linda, verdad, esa saga arquitectónica? Le recordé que parecía el comienzo de La Montaña Mágica, en que Hans Castorp entra en escena con lo que Cué llamó «el ímpetu confiado de la vida», llega al sanatorio, petulante, seguro de su salud evidente, de alegre visita de vacaciones al infierno blanco —para saber días más tarde que él también está tísico.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      Al padre lo fusilaron, por esas cosas que pasan, y la madre murió, tísica y desnutrida, el año 41.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      El marquesito, que se llamaba Santiago y era grande de España, murió tísico en el Escorial, muy joven todavía, y el reló quedó posado sobre el mostrador del café, como para servir de recuerdo de unas horas que pasaron sin traer el hombre para doña Rosa y el comer caliente todos los días, para el muerto.
    • 1951-1969 Cela, C. J. Colmena [1986] Esp (CDH )
      Si mi novio está malo, bastante desgracia tiene para que estés todo el día llamándole tísico.
    • 1969 Pinillos, J. L. Mente humana [1969] 153 Esp (CDH )
      En los escritos hipocráticos (siglo v a.C.), se sabía ya que el hábito corporal de los que padecían la tisis (el hábito tísico) poseía características típicas;
    • 1969 Pinillos, J. L. Mente humana [1969] Esp (CDH )
      En otras palabras, a los hipocráticos no les había pasado inadvertida la propensión que ciertos hábitos corporales —tísico y apoplético, concretamente— manifestaban hacia determinadas formas de enfermar.
    • 1969 Vargas Llosa, M. Conversación [1996] 26 Pe (CDH )

      Santiago ve sus zapatones enormes: enfangados, retorcidos, jodidos por el tiempo. Su voz le llega titubeante, temerosa, se pierde, cautelosa, implorante, vuelve, respetuosa o ansiosa o compungida, siempre vencida: no treinta, cuarenta, cien más. No sólo se había desmoronado, envejecido, embrutecido; a lo mejor andaba tísico también.

    • 1970 Donoso, J. Obsceno pájaro [1990] Ch (CDH )
      Sí, ridículo pero serio: esa cursilería era lo mío, no necesitaba saltos ni puentes para darme cuenta que eran lo mío mis nuevos compinches de la universidad, esos poetas tísicos que se reunían en el bar Hércules [...].
    • 1970 Donoso, J. Obsceno pájaro [1990] Ch (CDH )
      Mis compinches universitarios se fueron dispersando hacia otras tertulias en otros bares, pero yo me quedé en éste, me acomodaba porque la Rosita me sonreía desde detrás de la máquina para hacer café... no los echaba de menos, el poeta tísico murió como debía morir, en un tugurio [...].
    • 1975 Umbral, F. Mortal y rosa [1995] 46 Esp (CDH )
      El hombre de la pensión estaba en la cocina, haciendo los crucigramas del periódico, dando de comer al canario, yendo a mear de vez en cuando, hablando por teléfono con la tienda de comestibles, porque era un solterón haragán, y las mujeres de la pensión, sus hermanas, andaban azacaneando por la casa, también solteronas, habladoras y menudas, con batas de flores sobre sus rebecas negras, y en una habitación había un pianista tísico que tocaba en una boite afrocubana [...].
    • 1976 Revilla, B. Guatemala: Terremoto pobres [1976] Gu (CDH )

      La peste apareció de un día para otro. Murieron muchos especialmente jóvenes. Y los que no murieron se quedaron tísicos —recuerda un anciano.

    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] 43 Ch (CDH )
      Y cuando el viento cayó vengativo sobre la llanura y la marea de voces vegetales fue como una inundación, la tos de la pobre Cordelia —a quien, durante el día, se le prohibía fingir esa absurda tos de heroína tísica— despertó con sus desgarros a quien hubiera logrado conciliar el sueño, y los pasos borrachos de Juvenal resonaron por los corredores alfombrados de la casa buscando un compañero que lo ayudara a aplacar el miedo hasta que la llegada del alba hiciera callar a la llanura.
    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] Ch (CDH )

      — ¿Tú también, estúpida, tísica, propagando rumores? Cállate. ¿Qué sabes tú, que ni siquiera los antropófagos querrán comerse tu cuerpo agusanado?

    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] Ch (CDH )
      [...] puta, la llamaban, degenerada, tísica, encubridora de un bandido como Wenceslao, antropófaga, que había permitido que le quitaran a sus hijos que estarían flotando muertos en este momento junto con otros cadáveres en el laghetto, madre desalmada, todas las niñas transformadas en putas por la influencia desmoralizadora de Adriano, corrompidas, todas llenas de quién sabe qué lacras morales, de qué inmundas corrupciones físicas, y todos, los niños eran asesinos, maricones, crédulos, imbéciles, ladrones.... y de los nativos mejor ni hablar...
    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] 95 Ch (CDH )
      Y Cordelia, tendida en una mecedora para toser a su regalado gusto ahora que los grandes no estaban prohibiéndoselo —"No seas tonta, Cordelia, no tosas para imitar a las heroínas tísicas de esos novelones que lees"— intentó tocar la guitarra entre los accesos que le desgarraban el pecho, pero sólo logró hacer sonar una que otra cuerda destemplada.
    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] Ch (CDH )
      El Chef, al limpiarse el escupitajo tísico de Cordelia, iba a propinarle un bofetón, pero al tomar impulso para hacerlo se dio cuenta que sus ojos verdes, de pronto secos, se habían alzado hasta la balaustrada de bronce rematada en lo alto de la escala por una farola, y vio que Wenceslao desnudo, llevando una lanza, el rostro feroz dispuesto a todo, iba a comenzar a descender.
    • 1979 Longares, M. Novela corsé [1988] 211 Esp (CDH )
      Colérico y enternecido, Felipe Trigo reclama apasionadamente una sociedad en la que no sean bestias las mujeres, que sean bellas, inteligentes, dignas, fuertes... que no haya prostitutas, ni cloróticas, ni histéricas, ni tísicas... que no sean los hombres esclavos del trabajo para tener tiempo de ser nobles, de ser hombres, de querer, de sentir, de pensar, una sociedad no corrompida por la civilización y la norma [...].
    • 1981 Ferrero, J. Bélver Yin [1993] Esp (CDH )

      Voy a devolvérselo, será una buena forma de presentarme a él, ¿no crees?

      Yin escupió en el suelo como si estuviera tísico.

      — ¿Qué haces, Yin?

      — ¡No soporto lo que dices, Nitya! —exclamóél.

    • 1981 Moreno-Durán, R. H. Toque Diana [1988] 179 Co (CDH )
      Augusto Jota —quien ya había dado pruebas de su frenesí erótico la noche del banquete— prefería exaltarse ante el mórbido encanto de su enfermedad como si fuera un héroe clorótico poseído de febris amatorius, de ese morbus alba virginica que ahora lo ponía a la altura de los amantes tísicos de siempre.
    • 1982 Asenjo Sedano, J. Días largos [1982] Esp (CDH )

      — A los niños, —decía mi madre guardándose la teta mamada por mi hermana— no se les puede dar basura para comer. Los niños son como las plantas.

      Lo peor fue que le oí decir confidencial a mi tía que de seguir las cosas así, el niño (yo) acabaría tísico.
    • 1983 Pombo, Á. Héroe Mansardas [1990] Esp (CDH )

      —¡Y los canarios, no te fastidia! Ruidos, ruidos, hay muchos diferentes; dice mi padre que hasta las pulgas cuando brincan hacen ruido; mi padre dice que hasta un pelo que se cae hace ruido, un pelo del pelo, ¡o sea que fíjate...!

      —Será que está tísico tu padre; eso se llama oído de tísico.

      —Tísico, no creo. Lo que tiene, joder, es una úlcera que le salió en el frente de comer tanta rata y tanta mierda...

    • 1983 Pombo, Á. Héroe Mansardas [1990] 8 Esp (CDH )

      Lo cual, en opinión de la gobernanta, ni con la dispensa del Papa, ni sin ella, tanta sangre toda junta, toda igual, no podía ser bueno para el niño. Lo primero y principal, el niño. En lo del niño insistió mucho. Ahí estaban los faraones egipcios —llegó a decir—, que no dejarían mentir a la gobernanta, todos tísicos por culpa de lo mismo.

    • 1983 Pombo, Á. Héroe Mansardas [1990] Esp (CDH )

      Y los canarios, no te fastidia! Ruidos, ruidos, hay muchos diferentes; dice mi padre que hasta las pulgas cuando brincan hacen ruido; mi padre dice que hasta un pelo que se cae hace ruido, un pelo del pelo, ¡o sea que fíjate...!

      —Será que está tísico tu padre; eso se llama oído de tísico.

      Tísico, no creo. Lo que tiene, joder, es una úlcera que le salió en el frente de comer tanta rata y tanta mierda...

    • 1984 Gándara, A. Media distancia [1990] Esp (CDH )

      Durante esos cinco minutos en que observaba cómo revolvía las sopas en el tazón de leche, Caguego fraguó una vocación atlética indeleble, de taciturnos perfiles, en la que yo figuraba como un astro de luminosa ejemplaridad. Caguego era pequeño y tísico, andaba corvado y a cierto ritmo le jadeaban las palabras. A mí me daba lástima cuando Caguego me admiraba, la boca descolgada, la barbilla casi en el pecho, y sus enormes ojos de enfermo, enormes y negros que eran toda la cara, todo Caguego.

    • 1984 Gándara, A. Media distancia [1990] Esp (CDH )

      Dos del Tajamar aparte del caucasiano: gemelos tísicos. Sobra camiseta por todas partes, abanico de su piel blancuzca. Uno con un grano berrinchón. Contumaces. Secos. En su recogimiento. Nariz más grande que la cara. Cara hundida secreta de no querérsela ver. Tipos que dan pavor. En competición. Y fuera. No sudan, no sufren, pierden, ganan, sin reflejo, sin gesto. Los demás babeamos al tercer kilómetro. Resoplamos sin. Sin vergüenza. La manivela de los brazos hasta para empujar. Sube rabia asesina contra los androides. Corran aparte

    • 1985 Arel Monegal, N. Jardín otoño [1985] Ur (CDH )

      Pasmada, inmovilizada, enfrente de sus ojos el rostro de un hombre. Los bigotes y la barba abundante le esconden la mitad de la cara, mientras que el pelo corto y crespo le descubre las orejas pequeñas. Sus ojos castaños grandes son dulces. La nariz aguileña y las cejas muy negras que se unen rebeldes sobre ella le dan un aspecto semita. Los labios gruesos se separan iniciando una sonrisa.

      Ema deja caer la foto sobre la mesa.

      Gritos de gaviotas. Aleteos. La marea se vuelve alarmante. Gemidos graves de barcos que parten. Sobre la hojarasca una niña salta y canta. Crepitaciones de hojas. ¿Qué quiere decir tísico? ¿Por qué papá no se queda con nosotros? Sobre la claraboya el alboroto de la lluvia.

      En la foto sobre la mesa el grupo de alumnos y profesores ha reaparecido.

    • 1986 Cabrera Infante, G. Habana [1993] 27 Cu (CDH )
      Pero sucedió que un día otra vecina, llamada Victoria, habanera, una mulata clara, delgada, que padecía según ella misma decía de «debilidad pulmonar», sin admitir nunca la tuberculosis evidente en su tos y aspecto tísico, le dijo a mi madre que quería enseñarle algo y la llevó a la cocina —pero no fue para darle una lección de cómo cocinar.
    • 1986 Chávez Jr., G. Batallador [1986] 33 Mx (CDH )

      Andrés llega y se sienta en el ala de la bolería con el fin de guardar aquel espacio a María, una costurera alta, apacible, de angostos y estirados ojos de chinita. María es joven, de pecho frágil; Andrés se imagina que bien puede ella estar tísica. No bien aparece María, Andrés la llama y le deja el lugar. Callada, con su estrecha espalda levemente encorvada, María se sienta [...].

    • 1986 Gironella, J. M. Hombres lloran [1987] Esp (CDH )

      A Ana María le fascinó el Greco, a Ignacio, Goya. Eran dos concepciones del mundo. El primero rezaba, el segundo blasfemó. Podía pintarse con arrobo o con furia iconoclasta. El Greco debía de ser tísico, Goya, un chorro de humanidad, tal vez a causa de la sordera. «A Goya le hubiera gustado pintar el espectáculo de los retretes del tren.»

    • 1987 Martín Gaite, C. Usos amorosos posguerra [1994] 172 Esp (CDH )

      Era, en una palabra, una enfermedad de pobres, pero que sólo conseguían curársela los ricos. Tal vez por eso, aunque menos vergonzante que las venéreas, también se aludía a ella con eufemismos. Llamar «tísico»a alguien era casi un insulto, era como llamarle «desgraciado»o «muerto de hambre». Resultaba menos crudo decir que «estaba del pecho». Como era una enfermedad muy contagiosa y pesada de curar, a los que estaban del pecho se trataba de aislarlos, como primera medida, de las personas de su edad. Rara era la familia donde no hubiera algún caso de conocidos o parientes que viajaban periódicamente a un sanatorio antituberculoso. Lo hacían para llevarle embutido y algunos libros a un joven pálido y triste, que muchas veces aprovechaba aquella etapa de reposo forzado para escribir poemas dedicados a una novia imposible. Las sospechas de tuberculosis suponían un grave impedimento para el amor.

    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 155 Esp (CDH )
      [...] los tres sucesos que más me impresionaron en la niñez fueron la matanza de un cerdo en casa de mis abuelos y eso que le tenía rabia porque se había comido una camada entera de gazapos, el entierro de Maggle Cedarvale, una niña de la vecindad que me tocaba el pipí, la pobre murió tísica, fue algo que me apenó mucho porque tuve la sensación de que también a mí me enterraban un poco [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 174 Esp (CDH )
      [...] Periwinkle es muy sentimental y se acuerda casi a diario de Maggie Cedarvale la vecinita que de niño le tocaba el pipí, se lo acariciaba con mucha delicadeza y también se lo chupaba, después murió tísica, es doloroso este juego de la vida y la muerte [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 187 Esp (CDH )
      [...] la niña Maggie Cedarvale murió tísica y no pudo tocarle el pipí a Adoro Frog Allamoore todo lo que hubiera querido [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 196 Esp (CDH )
      [...] cuando murió la niña Maggie, murió tísica y consumida, parecía un pajarito sin plumas [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 246 Esp (CDH )
      [...] tampoco es lo mismo matar a una mujer a disgustos o a golpes que ver cómo se muere tísica y mansa y suave o borracha y de un cólico en caliente [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 253 Esp (CDH )
      [...] mi amigo Adoro Frog Allamoore notó un vacío inmenso cuando murió tísica la niña Maggie Cedarvale [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 99 Esp (CDH )
      [...] John Doc Holliday murió tísico en 1887 en el sanatorio de Glenwood Springs [...].
    • 1988 Cela, C. J. Cristo [1993] 237 Esp (CDH )
      [...] y todos acatamos la fatalidad porque es la ley de Dios, el saguaro enfermo, el indio loco, el noruego jiboso, el turco tísico, el mejicano tuerto, el francés ladrón [...].
    • 1988 Jiménez Lozano, J. Grano maíz [1989] 145 Esp (CDH )
      [...] y estos matones que aquí venían y queríamos que viniesen ni cuenta se dieron de ello; porque ya habíamos preparado nosotras el asunto con que si iban a venir unas nuevas chicas de paso o a curarse en el pinarillo, aunque no estaban tísicas, eso no, que descuidasen, sino con purgaciones y desarreglos de mujeres [...].
    • 1988 Pz-Reverte, A. Maestro esgrima [1995] Esp (CDH )

      Romero era insignificante, tísico, sensible y melancólico. Sus esperanzas de granjearse un nombre en el campo de la música habían quedado reducidas hacía tiempo a enseñar a una veintena de jovencitas de la buena sociedad cómo aporrear razonablemente un piano.

    • 1988 Pz-Reverte, A. Maestro esgrima [1995] Esp (CDH )
      Me tiene sin cuidado que ustedes sean fuertes o débiles, elegantes o desmañados, que estén tísicos o perfectamente sanos... Lo que importa es que, con florete o sable en la mano, puedan sentirse iguales o superiores a cualquier otro hombre del mundo.
    • 1988 Saer, J. J. Ocasión [1989] 90 Ar (CDH )
      Así que a fines de marzo remonta el río en un vaporcito que avanza lento, tembloroso, cargado de bultos y de pasajeros —italianos, vascos cuyo oficio es cavar la tierra, irlandeses, un francés tísico— y dos días más tarde desembarca en la ciudad.
    • 1989 Rdz-Martos, A. Manual alcoholismo [1989] Esp (CDH )

      Los adolescentes que tienen problemas con el alcohol u otras drogas, puede considerarse que sufren una detención del desarrollo(MacDonald, 1984: citado por Rogers y cols., 1987), que debe entenderse tanto en un sentido tísico como psicosocial. En la adolescencia sobrevienen unos cambios que pueden favorecer el desarrollo de una conducta problemática [...].

    • 1991 Mtz Mediero, M. Niño Belén [1991] Esp (CDH )

      SOR CLAVELLINA¿Que no es para tanto? Le digo a usted que se nos va a poner tísico como un poeta... Y todo por culpa de ese empresario mal nacido que no lo contrata, y que le voy a pedir a Dios que le mande dos ojos de carnero, y unos cuernos de aquí te espero... ¿Será tío malo ese tal Garrorena...?

    • 1991 Umbral, F. César [1995] Esp (CDH )

      Francesillo tiene de golpe la intuición de todo, pero también la contraintuición de que Félix, el ebanista de Falange, quiere darse importancia, como otrasveces. Félix está sentado a la mesa del comedor (en verano se cena en la terraza, que está más fresca), entre astuto y solemne, y hasta pícaro (es de los que guiñan un ojo para fumar). Félix, el ebanista tísico y falangista, tiene delante el paquete de las cartas.

    • 1993 Hayen, J. E. Calle anhelos [1993] Mx (CDH )
      "Pareces tísico, mira qué ojeras, la cara se te transparenta, estás todo ñango, escuálido, se te ve tristón, enclenque, de al tiro furris, y para acabarla... de un tiempo acá hasta medio cojo. Yo no atino a adivinar qué es lo que te pasa. Voy a llevarte a la Clínica de Salud Pública. Ya le conté al doctor que caminas tullido y dice que seguramente algo se te ha desconchinflado en las corvas. O a la mejor nos habrás heredado algún daño"
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 36 Esp (CDH )
      La habíamos tratado poco, sabíamos que durante algún tiempo frecuentó Las Ánimas haciendo amistad con las chicas de la Casa de Familia, y cuando nos enteramos que había tenido vómitos de sangre y estaba tísica, no podíamos creerlo: precisamente ella, que parecía una chica tan saludable y tan alegre, y viviendo en aquella bonita torre con jardín, y con el dinero que dicen que su padre había tenido.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Un atardecer inhóspito que pasé por la calle de las Camelias cuando los Chacón ya se habían ido, seguramente atosigados por el frío y la neblina que invadía la calle y desdibujaba el jardín y la torre, me pareció ver una mancha rosada girando como una peonza detrás de la vidriera, junto a la cama y era la niña tísica que bailaba abrazada a su almohada.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      ¡Hay que actuar con astucia! Tú me pintas a la niña tísica muy pálida y demacrada, muy triste, con esa frente suya que parece de porcelana, estirada en la cama y con los ojitos cerrados y la mano en el pecho, respirando con dificultad, así, mira...
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Aquella noche no dormí pensando en la muchacha tísica y toda clase de temores y aprensiones me asaltaron.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      Me sorprendió encontrar a la niña tísica sentada al borde de la cama con la espalda muy erguida, las piernas cruzadas y el camisón subido hasta las rodillas, descalza y con una margarita de trapo en el pelo, los brazos en jarras y la toquilla sobre los hombros.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      No mostraba ojeras ni las mejillas chupadas ni el pecho hundido, no estaba excesivamente pálida ni respiraba con la boca abierta ni nada de eso; no se parecía en absoluto a la muchacha tísica que había imaginado y que nada más verla, sólo con respirar a su lado, podía contagiarme sus humores envenenados y su febril ensoñación en torno a la muerte.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      [...] pues que entonces reanuda su amistad con Nandu Forcat y su camarilla de soñadores de paraísos, en el frente de Aragón primero y después aquí en Barcelona, y que esa amistad lo decanta rápidamente hacia la utopía ácrata, hacia ese ideal libertario que había de cambiar el mundo y su propia vida, la de su amada Anita y la de esta desdichada niña tísica.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 89 Esp (CDH )
      ¿Por qué no sale nunca de la torre, qué hace todo el día metido allí con una muchacha tísica de quince años y con este chico...?
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 181 Esp (CDH )
      [...] el humo verdinegro suspendido sobre la cabeza yacente de Susana parecía ciertamente amenazar los sueños de lejanías y de sedas orientales que sugerían la postura de la muchacha tísica y su vestido.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] Esp (CDH )
      [...] si el daño que iba a causar fue premeditado, juraría que lo fue en este plácido rincón del jardín mientras velaba el reposo de la muchacha tísica, en un soleado mediodía como éste.
    • 1993 Marsé, J. Embrujo Shangai [1996] 239 Esp (CDH )
      [...] y qué alivio que me importen un huevo las expectativas de entonces, mis prometedoras y al cabo frustradas dotes de dibujante, aquellos delirios del capitán Blay reclamando solidaridad para una niña tísica que acabaría prostituyéndose y su cólera y su pena al no conseguir ni una veintena de firmas [...].
    • 1993 Vega, A. H. Marcelina [1993] Mx (CDH )
      Le llegaban por la boca del estómago, una especie de aletear sin ruido, un zafarrancho de tripas que se convertían en víboras retorciéndose en sus entrañas, arrebatándole la calma y obligándolo a respirar como tísico, por eso se salió de las vueltas, recorrió cada casa llamando a cada niño por su nombre, ninguno le contestó.
    • 1994 Picó, F. Día [1994] PR (CDH )
      Poco a poco va esbozándose la presencia de un delincuente que regresa una y otra vez a cumplir sentencias de dos, tres años, usualmente por raterías o hurtos, y que acaba muriendo tísico o anémico en el hospital militar.
    • 1995 Cabrera Infante, G. Delito bailar [1995] 91 Cu (CDH )
      Porque además de la historia de la pederastía convivían en mi interlocutor otras historias: (se decía que) era o había sido un estudiante brillante y valiente y dedicado, un comunista esforzado, tísico a fuerza de luchar por la Causa del Proletariado [...].
    • 1995 Carrión, I. Cruzar Danubio [1995] Esp (CDH )
      Cuando le abrió la primera vez la puerta de la academia Juan creyó que ese hombre no podía ser el maestro Friedrich sino un militar retirado y tísico.
    • 1995 Donoso, J. Morir elefantes [1995] Ch (CDH )

      — Cuando la Ruby vino a dejar sábanas para la cama, porque además de conserje es dueña de casaen el hotel, estuvo mirándola en el vidrio para preguntarme cosas sobre su enfermedad... ya sabes lo aficionado a los médicos que soy yo.

      — ¿Está tísica la pobre?

      Gustavo se rió:

      — Tú me dirás si te parece tísica cuando la conozcas. Despégala para devolvérsela. Se me había olvidado.

    • 1995 Martínez, T. E. StaEvita [1995] Ar (CDH )
      Los indios, los negros candomberos, los crotos, los malevos, los cafishios de Arlt, los gauchos cimarrones, las putas tísicas contrabandeadas en los barcos polacos, las milonguitas de provincias: ya todos habían sido exterminados o confinados a sus sótanos de tiniebla.
    • 1995 Mendicutti, E. Fuego marzo [1995] 70 Esp (CDH )

      Cenábamos muy temprano y nos acostaban enseguida, pero aquella noche yo le pedí a Antonia que dejase abierta la puerta del pasillo porque me ahogaba. Antonia le dijo a mi madre que yo, o iba para tísico, o me estaba volviendo cada vez más maniático, pero dejó abierta la puerta del pasillo.

    • 1995 Pozo, R. Novia [1995] Esp (CDH )
      Su nariz penetraba los profundos olores, traspasaba la cáscara de los perfumes e Isabel, la de Eldorado, era otra vez Amparito, la que le dio la chalina y le dijo que se cuidara del frío de la escarcha cuando dejó a su tío tísico y se fue a buscar al otro tío, el que siempre bebía y pintaba monstruos en el barro de los toros ibéricos, y en el fondo de los platos.
    • 1995 Ramírez, S. Baile máscaras [1995] Ni (CDH )
      [...] a una Margarita Gautier le dieron el premio sólo por toser aunque al año siguiente, de todos modos, murió tísica, al que se disfrazó de Sandino lo iba a echar preso el teniente Sócrates Chocano [...].
    • 1996 Prensa El Mundo, 15/12/1996 [1997] Esp (CDH )

      Victoria Vera vuelve a los escenarios para representar a Octavia, una mujer adúltera y tísica, hija de una devota y un pintor. La actriz, musa erótica de los años de la Transición, cree que la obra de Valle-Inclán sigue interesando hoy en día porque «todavía hay valores superiores inamovibles: el arte, la cultura y, sobre todo, el teatro vivo, irrepetible, compartido, directo». Fueron muchas las personalidades que asistieron ayer alestreno de El yermo de las almas —estará en cartel hasta el próximo 16 de febrero—, que inaugura la temporada en el Teatro María Guerrero y está producida por el Centro Dramático Nacional.

    • 1996 Prensa ABC Cultural, 24/05/1996 [1996] Esp (CDH )

      "Capital del dolor"lleva un prólogo de tres páginas que son las únicas en las que Paulo habla en primera persona, para contarnos uno de los primeros días en que Pepe, el líder de la pandilla adolescente, vino al escenario ruinoso de sus encuentros con la camisa azul de la Falange. Muy pronto su protagonismo enunciativo será sustituido por el de otra voz anónima y cómplice, muy de tarde en tarde presente en el relato, que ve a Paulo "con admiración, respeto y distancia"(pág. 35) pese a ser el único de los amigos que no se hace fascista. Porque este muchacho acomodado y sensible, tísico y creacionista, es enemigo de la Falange por puro buen sentido de las cosas, temiendo sin embargo, como teme, la verdadera Revolución.

    • 2012 Muñoz Rengel, J. J. Asesino hipocondríaco Esp (CORPES)
      El padre de Edgar Allan Poe, tuberculoso y alcohólico, abandonó a su familia cuando el poeta gótico tenía dos años, para morir más tarde víctima de su enfermedad en paradero desconocido. La madre, también tísica y embarazada entonces de su tercer hijo, murió cuando el señor Poe aún no había alcanzado los cuatro años de edad ni los noventa centímetros de altura, a pesar de su gran cabeza.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Que padece de tisis. U. t. c. s. (|tuberculosis pulmonar).
    • 2016 Aira, C. "En el café" El cerebro musical Ar (CORPES)
      [...] revista, la compré cuando salió, en el puesto que había en Lavalleja y Bulnes, en la esquina del conventillo. La compré porque la esperaba todas las semanas, no porque fuera un imbécil coleccionista esnob sino porque era mi único escape de la realidad sórdida de la pobreza, de mi padre preso y mi madre tísica.
    • 2021 Santiesteban, A. "Escándalo barco" [21-02-2021] OnCubaNews (La Habana): oncubanews.com Cu (HD)
      Según La Biblia: muchos serán los llamados, mas pocos los escogidos. Entre tantas jóvenes pretendientes, Faber inició su noviazgo con Juana de León, huérfana y tísica, que vivía bajo el amparo de una viejecilla lavandera.
  8. adj. Perteneciente o relativo a la tisis. ⇨ Enfermedad infectocontagiosa de los humanos y ...
    docs. (1777-2014) 25 ejemplos:
    • 1777 Salvá Campillo, F. Respuesta contra inoculacion p. 23 Esp (BD)
      Siempre se hallará una multitud de hombres mal sanos, ó con disposición escorbutica, tisica, artritica ó veneréa. Negandose pues la insercion á todos estos, quedarán millones de hombres expuestos á contagiarse por el camino natural (47); y si á todos esos se les reúsa la insercion, por no juzgarse dispuestos para ella; ¡que destrozo no haria de ellos la viruela natural, si llegase á pillarlos, supuesto que los inoculadores la juzgan tan peligrosa!
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| tuberculosis pulmonar).
    • 1777 Salvá Campillo, F. Respuesta contra inoculacion p. 23 Esp (BD)
      Siempre se hallará una multitud de hombres mal sanos, ó con disposición escorbutica, tisica, artritica ó veneréa. Negandose pues la insercion á todos estos, quedarán millones de hombres expuestos á contagiarse por el camino natural (47); y si á todos esos se les reúsa la insercion, por no juzgarse dispuestos para ella; ¡que destrozo no haria de ellos la viruela natural, si llegase á pillarlos, supuesto que los inoculadores la juzgan tan peligrosa!
    • 1797 Gmz Ortega, C. Trad Farmacopea Londres, White p. 158 Esp (BD)
      Emplasto de Pez de Borgoña ó Cefálico: se experimenta tambien provechoso quando se aplica á la boca del estómago en la flatulencia histérica, afectos nerviosos, y para avocar los humores erisipelatosos, y escorbúticos de las partes internas á la cutis; igualmente se aplica al pecho ó entre los hombros, para aliviar la tos tísica y rebelde.
    • 1803 Mitjavila Fisonell, V. Supl Semestre Medico [1803] p. 25 Esp (BD)
      Pero no me parece enteramente fundado el asegurar Portal, que la tisica no es contagiosa, porque disecando los cadaveres sobre dichos, no se contagiaron ni él ni sus discípulos. Primeramente sabemos que el contagio tisico permanece ó puede permanecer quieto, y sin accion en el cuerpo humano por mucho tiempo, y por lo mismo Portal no nos puede asegurar, que sus discípulos no se contagiaron por haber visto, que no contraxeron esta enfermedad desde luego […], y no es menos cierto, que todos los hombres no tienen disposición à la tisis. Esta falta de disposición preserva á muchos Medicos, á varios enfermos, etc.; del contagio tisico.
    • 1821 Llanos, B. "Memoria nulidad contagio tisis" p. 163 Décadas Médico Quirúrgicas, I Esp (BD)
      Por lo que respecta á España no tengo noticias de que se hayan promovido hasta de ahora reclamaciones por los medicos para derogar la ordinacion que á mitad del siglo pasado aprobó el Señor Don Fernando VI; pero sí me consta que hace ya más de cuarenta años que los verdaderos medicos estan persuadidos de la nulidad del contagio tísico, y que posteriormente lo han probado y demostrado, manifestando los grandes perjuicios que el error ha causado á los tísicos, á sus familias y al Estado.
    • 1839 Vidal, I. Trad Manual Medicina Practica Hufeland, IV p. 142 Esp (BD)
      Dos especies de predisposicion tísica se conocen; la atónica, y la florida ó inflamatoria. En la primera se nota la relajacion de los pulmones y la falta de tono de todo su sistema, y va caracterizada por tos frecuente con espectoracion copiosa de mucosidades. Para impedir que semejante dolencia tome cuerpo y se presente la tisis pulmonal, es preciso administrar por mucho tiempo los fortificantes, como el liquen de Islandia, la quina y demás de aquella especie, pues las emisiones sanguineas son muy perjudiciales, y promoverian el mal que se desea atajar. Pero en la segunda predisposicion se encuentran los pulmones en un estado flogístico verdadero, están irritados y muchas vezes tuberculosos.
    • 1844 Ameller Ros, I. Afectos internos II p. 429 Esp (BD)
      Se duda si es o no contagiosa. Parece que no lo es tanto como las demás fiebres de contagio; pero con todo llegando la tisis al tercer grado es muy prudente tomar algunas precauciones para que no se rocen mucho ó por largo tiempo con el enfermo aquellos mayormente que tienen la salud quebrantada; pues que en en efecto hemos visto en nuestra práctica diferentes casos que hacen sospechar con algun fundamento el carácter contagioso de la tisis […]. En los casos de sospechar la existencia de esta enfermedad, hemos de examinar á los principios de ella con todo cuidado los síntomas y las causas cotejando aquellos con estas, para no equivocar la predisposición tísica con una clorosis, hipocondría, afección espasmódica vaga, etc. La percusion en el pecho para distinguir la tisis tuberculosa no deja de dar alguna luz, produciéndose por ella un sonido oscuro ó mate distinto del natural.
    • 1877 Simancas Larsé, E. Trad Lecciones clínica médica, Jaccoud (2.ª ed.) p. 324 Esp (BD)
      Las irritaciones accidentales comunes de cualquier género, que atacan la laringe, los bronquios ó los pulmones, ejercen sobre la tuberculosis y las lesiones tísicas una fatal influencia bajo tres distintos puntos de vista: en los individuos sanos todavía, pero predispuestos, favorecen la explosión de los tubérculos ó de las alteraciones pneumónicas tisiógenas; ―en los individuos ya enfermos provocan nuevos brotes;―agravan y precipitan la marcha de los desórdenes preexistentes.
    • 1905 Valle-Inclán, R. M. Sonata invierno [1996] Esp (CDH )

      Algunos mocetones flacos, envueltos en mantas y con las frentes vendadas, se perfilaban en la sombra de uno y de otro muro, arrodillados sobre las tarimas. En el ámbito oscuro resonaban las toses cavadas y tísicas, apagando el murmullo del latín litúrgico.

    • 1912 Ferrán Clúa, J. "Nueva bacteriología tuberculosis" [10-12-1912] La España Médica (Madrid) Esp (HD)
      Habiendo quedado este pulmón abandonado toda una noche de verano (temperatura de 28°) en una mesa del Laboratorio, al día siguiente noté que el ambiente de la sala olía á esperma; y como ya había llamado mi atención el olor á esperma que exhalan los esputos tísicos, y, por otra parte, sabía también que antiguos tratadistas consignaban este detalle en sus obras, sospeché que podía ser debido á una fermentación bacteriana especial. Sometí mis sospechas á prueba, procurando aislar en cultivo puro las bacterias de los puntos del pulmón tuberculoso que olían á esperma, y aparecieron en el agar colonias de una sola especie.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      El interés clínico de estas afecciones estriba en que el cuadro sintomático puede ser idéntico al de las tuberculosis, con su iniciación de tipo gripal o insidioso, seguida la larga fiebre tísica, con sudores, adelgazamiento, etc.; esputos hemorrágicos e imágenes radiográficas muy semejantes a las tuberculosas.
    • 1993 Crea, P. Propóleo [1993] Ar (CDH )

      De 20 de los pacientes que se les administró solución hidroalcohólica, sólo en 2 se verificó un cierre completo de las cavernas, aunque en los demás se redujeron notablemente. En todos ellos, sin excepción, se disolvieron las capas infiltrativas que rodeaban la caverna, desaparecieron los síntomas de intoxicación tísica y mejoró el estado general.

    • 1995 Cabouli, J. L. Terapia [1995] Ar (CDH )

      En su trabajo de investigación, Rochas encontró detalles que hoy son la base del trabajo terapéutico. Por ejemplo, al experimentar con la señorita May, encontró que en tres encarnaciones sucesivas murió con trastornos respiratorios. La primera fue una muerte tísica, la segunda una muerte por enfriamiento con tos quintosa, y la tercera una asfixia por inmersión. En cada caso la mujer revivió esas muertes por asfixia, experimentando la falta de aire y la sofocación.

    • 2005 Carmona, J. I. Enfermedad y sociedad p. 133 Esp (BD)
      A lo largo del siglo XIX se había logrado avanzar bastante en el conocimiento de la infección tísica, en su caracterización, etiología y diagnosis. En los comienzos de la centuria, los trabajos de los médicos franceses Gaspart Laurent Bayle y René Laënec (ambos fallecerían por su causa) determiban las formas y estadios de la tuberculosis como enfermedad.
    • 2005 Pascual, J. Cantar Gamyl Esp (CORPES)
      Los guerreros gustaban de rememorar las hazañas pasadas, menos si remotas. Nombraban los años según los fastos: el año de la muerte de Beibel, padre de Fadug, atravesado por cinco saetas, el año de la victoria sobre los tidrariníes, el año de la batalla del estrecho de Doug, el año del eclipse, el año de la horma sobre los zenega del norte, el año de los muertos de hambre, el año de la batalla en la hamada de Tinduf, el año de la tos tísica, el año de la invasión de los Ergueibat, el año de la emigración al Tmart, el año de la caravana de los diez mil hombres, el año de la guerra de los Fukaras con los Ulad Delim, el año del exterminio de los Motlog Querubian, el año de las plagas de los insectos [...].
    • 2012 Núñez, M. Trad Aimar, Colfer Esp (BD)
      Dos de los presos accionaban la manivela. Uno de ellos sufría continuos ataques de tos tísica y el otro se detenía a intervalos regulares para escupir sobre las rocas esputos de tabaco. Por descontado, no era el dúo ideal para la tarea.
    • 1777 Salvá Campillo, F. Respuesta contra inoculacion p. 23 Esp (BD)
      Siempre se hallará una multitud de hombres mal sanos, ó con disposición escorbutica, tisica, artritica ó veneréa. Negandose pues la insercion á todos estos, quedarán millones de hombres expuestos á contagiarse por el camino natural (47); y si á todos esos se les reúsa la insercion, por no juzgarse dispuestos para ella; ¡que destrozo no haria de ellos la viruela natural, si llegase á pillarlos, supuesto que los inoculadores la juzgan tan peligrosa!
    • 1797 Gmz Ortega, C. Trad Farmacopea Londres, White p. 158 Esp (BD)
      Emplasto de Pez de Borgoña ó Cefálico: se experimenta tambien provechoso quando se aplica á la boca del estómago en la flatulencia histérica, afectos nerviosos, y para avocar los humores erisipelatosos, y escorbúticos de las partes internas á la cutis; igualmente se aplica al pecho ó entre los hombros, para aliviar la tos tísica y rebelde.
    • 1803 Mitjavila Fisonell, V. Supl Semestre Medico [1803] p. 25 Esp (BD)
      Pero no me parece enteramente fundado el asegurar Portal, que la tisica no es contagiosa, porque disecando los cadaveres sobre dichos, no se contagiaron ni él ni sus discípulos. Primeramente sabemos que el contagio tisico permanece ó puede permanecer quieto, y sin accion en el cuerpo humano por mucho tiempo, y por lo mismo Portal no nos puede asegurar, que sus discípulos no se contagiaron por haber visto, que no contraxeron esta enfermedad desde luego […], y no es menos cierto, que todos los hombres no tienen disposición à la tisis. Esta falta de disposición preserva á muchos Medicos, á varios enfermos, etc.; del contagio tisico.
    • 1821 Llanos, B. "Memoria nulidad contagio tisis" p. 163 Décadas Médico Quirúrgicas, I Esp (BD)
      Por lo que respecta á España no tengo noticias de que se hayan promovido hasta de ahora reclamaciones por los medicos para derogar la ordinacion que á mitad del siglo pasado aprobó el Señor Don Fernando VI; pero sí me consta que hace ya más de cuarenta años que los verdaderos medicos estan persuadidos de la nulidad del contagio tísico, y que posteriormente lo han probado y demostrado, manifestando los grandes perjuicios que el error ha causado á los tísicos, á sus familias y al Estado.
    • 1839 Vidal, I. Trad Manual Medicina Practica Hufeland, IV p. 142 Esp (BD)
      Dos especies de predisposicion tísica se conocen; la atónica, y la florida ó inflamatoria. En la primera se nota la relajacion de los pulmones y la falta de tono de todo su sistema, y va caracterizada por tos frecuente con espectoracion copiosa de mucosidades. Para impedir que semejante dolencia tome cuerpo y se presente la tisis pulmonal, es preciso administrar por mucho tiempo los fortificantes, como el liquen de Islandia, la quina y demás de aquella especie, pues las emisiones sanguineas son muy perjudiciales, y promoverian el mal que se desea atajar. Pero en la segunda predisposicion se encuentran los pulmones en un estado flogístico verdadero, están irritados y muchas vezes tuberculosos.
    • 1844 Ameller Ros, I. Afectos internos II p. 429 Esp (BD)
      Se duda si es o no contagiosa. Parece que no lo es tanto como las demás fiebres de contagio; pero con todo llegando la tisis al tercer grado es muy prudente tomar algunas precauciones para que no se rocen mucho ó por largo tiempo con el enfermo aquellos mayormente que tienen la salud quebrantada; pues que en en efecto hemos visto en nuestra práctica diferentes casos que hacen sospechar con algun fundamento el carácter contagioso de la tisis […]. En los casos de sospechar la existencia de esta enfermedad, hemos de examinar á los principios de ella con todo cuidado los síntomas y las causas cotejando aquellos con estas, para no equivocar la predisposición tísica con una clorosis, hipocondría, afección espasmódica vaga, etc. La percusion en el pecho para distinguir la tisis tuberculosa no deja de dar alguna luz, produciéndose por ella un sonido oscuro ó mate distinto del natural.
    • 1877 Simancas Larsé, E. Trad Lecciones clínica médica, Jaccoud (2.ª ed.) p. 324 Esp (BD)
      Las irritaciones accidentales comunes de cualquier género, que atacan la laringe, los bronquios ó los pulmones, ejercen sobre la tuberculosis y las lesiones tísicas una fatal influencia bajo tres distintos puntos de vista: en los individuos sanos todavía, pero predispuestos, favorecen la explosión de los tubérculos ó de las alteraciones pneumónicas tisiógenas; ―en los individuos ya enfermos provocan nuevos brotes;―agravan y precipitan la marcha de los desórdenes preexistentes.
    • 1884 RAE DRAE 12.ª ed. (NTLLE)
      Tísico, ca. [...] adj. Med. Perteneciente á la tisis (| enfermedad en que hay consunción gradual y lenta, fiebre héctica y ulceración en algún órgano. Se designa especialmente con este nombre la tuberculización pulmonar).
    • 1892 Fdz Medina, B. Charamuscas [1892] Ur (CDH )
      En el patio, alumbrado por la mísera luz de una lámpara de kerosene, estaba sentado delante de una mesa de fierro, —que sostenía un plato con una copa, una botella de limonada y un sifon mediado de líquido efervescente —un otro Rodriguez por la estampa, echado á la nuca el gacho, desabrochado el saco y risueña la cara de flacura tísica.
    • 1905 Valle-Inclán, R. M. Sonata invierno [1996] Esp (CDH )

      Algunos mocetones flacos, envueltos en mantas y con las frentes vendadas, se perfilaban en la sombra de uno y de otro muro, arrodillados sobre las tarimas. En el ámbito oscuro resonaban las toses cavadas y tísicas, apagando el murmullo del latín litúrgico.

    • 1912 Ferrán Clúa, J. "Nueva bacteriología tuberculosis" [10-12-1912] La España Médica (Madrid) Esp (HD)
      Habiendo quedado este pulmón abandonado toda una noche de verano (temperatura de 28°) en una mesa del Laboratorio, al día siguiente noté que el ambiente de la sala olía á esperma; y como ya había llamado mi atención el olor á esperma que exhalan los esputos tísicos, y, por otra parte, sabía también que antiguos tratadistas consignaban este detalle en sus obras, sospeché que podía ser debido á una fermentación bacteriana especial. Sometí mis sospechas á prueba, procurando aislar en cultivo puro las bacterias de los puntos del pulmón tuberculoso que olían á esperma, y aparecieron en el agar colonias de una sola especie.
    • 1936-1939 Marañón, G. Conde-Duque [1990] Esp (CDH )
      Respecto de la infección, en los papeles de la época se habla de tabardillo, nombre que entonces no tenía significación precisa, aplicándose principalmente a los estados tísicos intensos; pero se llamaban también así, indistintamente, todas las fiebres graves, con embargo del cerebro, modorra o delirio, cualquiera que fuese su causa; causa que era por aquellos años imposible de diferenciar.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      A) Laringitis tuberculosa, que aparece en los portadores de lesiones tuberculosas pulmonares, generalmente en la fase tísica, final; pero es preciso no olvidar estos dos hechos: que la laringitis puede ser una manifestación precoz de la tuberculosis; y que en la tuberculosis pulmonar se pueden presentar laringitis no tuberculosas.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      El interés clínico de estas afecciones estriba en que el cuadro sintomático puede ser idéntico al de las tuberculosis, con su iniciación de tipo gripal o insidioso, seguida la larga fiebre tísica, con sudores, adelgazamiento, etc.; esputos hemorrágicos e imágenes radiográficas muy semejantes a las tuberculosas.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Generalmente coinciden con una historia clínica larga y típica de tuberculosis, con el aspecto tísico del paciente, con el esputo numular (v. pág. 899) y con el hallazgo, en éste, de los bacilos de Koch.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] 916 Esp (CDH )
      El sensorio suele estar íntegro, aun cuando la temperatura sea muy alta; hay palidez, sudores, aspecto intoxicado, tísico; dispnea más intensa que en la neumonía lobar; pérdida rápida de peso y estado general rápidamente descendente; en lugar del aspecto erético del pulmoníaco habitual; es éste un gran dato clínico para el diagnóstico diferencial; también son importantes la discreción o la falta de dolor de costado y la ausencia de herpes.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      Así como el tórax asténico es un preludio fisiológico del tórax tísico que luego describiremos, el tórax pícnico es un preludio fisiológico del tórax enfisematoso.
    • 1943 Marañón, G. Manual diagnóstico etiológico [1943] Esp (CDH )
      A) Tórax tísico: es un tórax asténico muy acentuado, y, además, aplastado de adelante a atrás; a causa de la delgadez coexistente, los relieves óseos están muy marcados; el hueco epigástrico, muy agudo, está muy deprimido; están también muy deprimidos los huecos supra e infraclaviculares.
    • 1961 Grosso, A. Zanja [1984] Esp (CDH )

      Toma otra vez el libro, lo abre por una página cualquiera, y comienza a leer mecánicamente sin darse cuenta siquiera de lo que está leyendo, mientras la imaginación le cabalga por los vericuetos lejanos y difíciles del deseo insatisfecho de la pubertad, espoleado por la febrícula tísica de su infiltrado sobre el vértice clavicular izquierdo.

    • 1993 Crea, P. Propóleo [1993] Ar (CDH )

      De 20 de los pacientes que se les administró solución hidroalcohólica, sólo en 2 se verificó un cierre completo de las cavernas, aunque en los demás se redujeron notablemente. En todos ellos, sin excepción, se disolvieron las capas infiltrativas que rodeaban la caverna, desaparecieron los síntomas de intoxicación tísica y mejoró el estado general.

    • 1995 Cabouli, J. L. Terapia [1995] Ar (CDH )

      En su trabajo de investigación, Rochas encontró detalles que hoy son la base del trabajo terapéutico. Por ejemplo, al experimentar con la señorita May, encontró que en tres encarnaciones sucesivas murió con trastornos respiratorios. La primera fue una muerte tísica, la segunda una muerte por enfriamiento con tos quintosa, y la tercera una asfixia por inmersión. En cada caso la mujer revivió esas muertes por asfixia, experimentando la falta de aire y la sofocación.

    • 2005 Carmona, J. I. Enfermedad y sociedad p. 133 Esp (BD)
      A lo largo del siglo XIX se había logrado avanzar bastante en el conocimiento de la infección tísica, en su caracterización, etiología y diagnosis. En los comienzos de la centuria, los trabajos de los médicos franceses Gaspart Laurent Bayle y René Laënec (ambos fallecerían por su causa) determiban las formas y estadios de la tuberculosis como enfermedad.
    • 2005 Pascual, J. Cantar Gamyl Esp (CORPES)
      Los guerreros gustaban de rememorar las hazañas pasadas, menos si remotas. Nombraban los años según los fastos: el año de la muerte de Beibel, padre de Fadug, atravesado por cinco saetas, el año de la victoria sobre los tidrariníes, el año de la batalla del estrecho de Doug, el año del eclipse, el año de la horma sobre los zenega del norte, el año de los muertos de hambre, el año de la batalla en la hamada de Tinduf, el año de la tos tísica, el año de la invasión de los Ergueibat, el año de la emigración al Tmart, el año de la caravana de los diez mil hombres, el año de la guerra de los Fukaras con los Ulad Delim, el año del exterminio de los Motlog Querubian, el año de las plagas de los insectos [...].
    • 2012 Núñez, M. Trad Aimar, Colfer Esp (BD)
      Dos de los presos accionaban la manivela. Uno de ellos sufría continuos ataques de tos tísica y el otro se detenía a intervalos regulares para escupir sobre las rocas esputos de tabaco. Por descontado, no era el dúo ideal para la tarea.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      tísico, ca. adj. Perteneciente o relativo a la tisis (| tuberculosis pulmonar).
  9. 5⟶metáfora
    adj. Que presenta una delgadez extrema o un aspecto vulnerable y enfermizo.
    docs. (1870-2019) 47 ejemplos:
    • 1828-1870 Bretón Herreros, M. Poesías [1884] Esp (CDH )
      Resta saber si la sonora octava / Ántes que auxilio insuperable escollo / Fué para que á la cria que incubaba / Diese mi llueca musa desarrollo, / Cuando era fuerza que, áun sin esa traba, / Tísico le saliera más de un pollo. / Lo ignoro. Que lo digan los del arte. / Yo no he de ser á un tiempo juez y parte.
    • 2019 Calle, P. "Entrevista Alberto Contador" [04-02-2019] El Mundo (Madrid) Esp (HD)
      Disfrutaba porque me preparaba para el objetivo que perseguía: estar en plenitud para el Tour. Estar concentrado me permitía rendir al máximo, comer poco y estar súper fino. Yo, al inicio de la temporada, después de estar concentrado en el Teide y de pasar un hambre tremenda, llegaba tísico.
    • 1828-1870 Bretón Herreros, M. Poesías [1884] Esp (CDH )
      Resta saber si la sonora octava / Ántes que auxilio insuperable escollo / Fué para que á la cria que incubaba / Diese mi llueca musa desarrollo, / Cuando era fuerza que, áun sin esa traba, / Tísico le saliera más de un pollo. / Lo ignoro. Que lo digan los del arte. / Yo no he de ser á un tiempo juez y parte.
    • 1874 Palma, R. Tradiciones peruanas II [2003] Pe (CDH )
      La certidumbre de que su ilustrísima acababa de almorzar, en presencia de legos y eclesiásticos, una tísica o robusta polla en estofado, que tanto no se cuidó de averiguar el cronista, con su correspondiente apéndice de bollos y chocolate de las monjas.
    • 1876 Pz Galdós, B. Doña Perfecta [1993] Esp (CDH )
      Si el tiempo era bueno, aquellas eminentes lumbreras de la cultura urbsaugustense se dirigían, siempre con la indispensable capita, al titulado paseo de las Descalzas, el cual se componía de dos hileras de tísicos olmos y algunas retamas descoloridas.
    • 1889 Pereda, J. M. Puchera [1980] 91 Esp (CDH )
      Porque en la persona del Lebrato hay algo más de lo que aparentan su pellejo arrugado, su delgadez sarmentosa, su carita risueña y aniñada, y especialmente aquel sobrar de calzones, de chaleco y de camisa por todas partes, como si estas prendas no llevaran dentro más que las ramas torcidas del tísico cerojal * en que el viento las zarandea para secarlas cada vez que la cellisca de la ría las empapa sobre el cuerpo de su dueño.
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 342 Mx (CDH )
      En la puerta del cuarto de la casera al lado de un Divino Rostro, un loro charlaba estúpidamente, aplaudiéndose con carcajadas y contorsiones de manicomio; un gallo viejo, en unión de cinco o seis gallinas tísicas, sin erotismos ellas ni él, picoteaban las inmundicias hacinadas en un rincón, y dos perros de tamaño diferente ensordecían con sus ladridos, sus mordiscos y sus carreras.
    • 1930 Arconada, C. Turbina [1975] 81 Esp (CDH )

      Las murmuraciones llegaban, como es natural, a oídos de doña Patro, porque no hay en los pueblos nada más natural que las murmuraciones lleguen a los oídos de quien se murmura. Doña Patro contestaba, también por medio de sus vecinas: «No hagáis caso de esa usurera. Es una mala víbora. Mucho dinero, mucho dinero... ¿Y para qué lo quiere si está tísica por no comer?»

    • 1950 Fdz-Flórez, D. Lola [1950] Esp (CDH )
      Pero en cuanto al dinero no puedo quejarme, pues Ricardo anda todavía con el riñón bien cubierto y yo me he propuesto dejárselo más desnudo que una molleja de gallina tísica, de esas que no tienen ni una pizquita de grasa y ya han olvidado lo que es poner un huevo.
    • 1985 Prensa ABC, 29/01/1985 [1985] Esp (CDH )

      OS lo tengo dicho, hermanos. Estos tíos nos dejan con una mano atrás, otra delante y la rosa donde caiga. Nos dejan en pelota con la «rují», tapándonos el ombligo. Nos llevan al paraíso socialista por el camino de la pobreza. Desde don Fernando el Católico a don Miguel el Recaudador, la bolsa de los españoles va enflaqueciendo y se nos está quedando tísica. O sea, que estos tíos no venían con la ética, sino con la hética. Se conoce que en los discursos electorales decían que nos iban a meter en la «hética», y nosotros, confiados pardillos, no nos dimos cuenta de que para ellos la «ética»se escribe con hache.

    • 1987 Brusco, O. J. Comer [1987] Ar (CDH )
      Pero debemos reconocer que existen individuos flacos, algunos muy flacos, que constituyen un prototipo, aquel a quien los familiares llaman en forma ocasional, y casi siempre equivocada, "tísico", "raquítico", "anémico", o simple y cariñosamente "flaco".
    • 1996 Casares, C. Dios sillón azul [1996] 101 Esp (CDH )
      Era una sonrisa entregada, quizá también pícara y cariñosa en algunos momentos, como cuando él dijo de sí mismo, animado por el alcohol, que se sentía un espíritu robusto y gordo envuelto en una carne tísica y flaca.
    • 2014 Ramírez, N. "Actrices sin maquillaje" [10-11-2014] El País (Madrid) Esp (HD)
      Quedarse tísica como lo hizo Anne Hathaway en Los Miserables, Angelina Jolie en Inocencia Interrumpida o Natalie Portman en El cisne negro. Estar irreconocible y engordar los 13 kilos que se echó encima Charlize Theron en Monster. Afearse como Halle Berry en Monster's Ball. Cambiar de cara como Nicole Kidman en Las Horas. En los últimos años, dos estrategias allanaban el camino a las actrices que soñaban hacerse con el Oscar: podían cambiar drásticamente de peso o podían convertirse en otra persona (y si encima era un personaje histórico, muchísimo mejor).
    • 2018 Anónimo (A. I.) "Calvario de Mario Casas" [23-10-2018] La Voz de Galicia (A Coruña) Esp (HD)
      Demacrado, ojeroso pero sobre todo escuálido, Mario Casas tuvo que perder 12 kilos en cuatro meses para adecuarse al papel que le tocaba interpretar. Para ello tuvo que realizar una estricta dieta que «supuso pasar muchísima hambre, no comer casi y verte en el espejo tísico. Ver a la gente comer es lo más difícil de todo. Ver a tus amigos que salen a comer y tú no puedes... la sociedad te excluye. Me encerré en casa, en mi mundo. No podía salir ni a tomarme una copa».
    • 2019 Calle, P. "Entrevista Alberto Contador" [04-02-2019] El Mundo (Madrid) Esp (HD)
      Disfrutaba porque me preparaba para el objetivo que perseguía: estar en plenitud para el Tour. Estar concentrado me permitía rendir al máximo, comer poco y estar súper fino. Yo, al inicio de la temporada, después de estar concentrado en el Teide y de pasar un hambre tremenda, llegaba tísico.
    • 1828-1870 Bretón Herreros, M. Poesías [1884] Esp (CDH )
      Resta saber si la sonora octava / Ántes que auxilio insuperable escollo / Fué para que á la cria que incubaba / Diese mi llueca musa desarrollo, / Cuando era fuerza que, áun sin esa traba, / Tísico le saliera más de un pollo. / Lo ignoro. Que lo digan los del arte. / Yo no he de ser á un tiempo juez y parte.
    • 1871 Pereda, J. M. Tipos y paisajes [1989] Esp (CDH )
      Los tesoros que guarda este cercado son una parra achacosa, verde de un solo miembro, dos manzanos tísicos y algunos posarmos, o berza arbórea, diseminados por el huerto, que apenas mide medio carro de tierra.
    • 1874 Palma, R. Tradiciones peruanas II [2003] Pe (CDH )
      La certidumbre de que su ilustrísima acababa de almorzar, en presencia de legos y eclesiásticos, una tísica o robusta polla en estofado, que tanto no se cuidó de averiguar el cronista, con su correspondiente apéndice de bollos y chocolate de las monjas.
    • 1876 Pz Galdós, B. Doña Perfecta [1993] Esp (CDH )
      Si el tiempo era bueno, aquellas eminentes lumbreras de la cultura urbsaugustense se dirigían, siempre con la indispensable capita, al titulado paseo de las Descalzas, el cual se componía de dos hileras de tísicos olmos y algunas retamas descoloridas.
    • 1879 Pereda, J. M. Don Gonzalo Glz [2003] Esp (CDH )
      [...] hay un cajón que sirve de tiesto a algunas mortecinas matas de claveles, y en el mezquino huerto contiguo a la casa, mal cerrado por un muro ruinoso que tumba sus achaques sobre un lecho de ortigas y se envuelve en un viejo manto de tupida hiedra, sólo se ven tres manzanos tísicos, dos rosales viciosos, una mata de ruda y algunos pies de berzas y posarnos.
    • 1879 Pereda, J. M. Don Gonzalo Glz [2003] Esp (CDH )

      Y pasó un día, y pasaron dos; y ni por asomarse al balcón con gorro de terciopelo bordado, en la cabeza, y en mangas de camisa para que brillara más el áureo culebreo de su cadena despilfarrada sobre su chaleco; ni por tirar a la calleja, cuando alguien pasaba por ella, colillas de medio puro, acudían las doncellas del lugar a ofrecerle canastillos de flores y velludos piescos, ni los señores a brindarle su alianza y su respeto. Alguna vieja pedigüeña se le presentó con un par de pollos tísicos en son de memorial plañidero, para alivio de añejos ayunos o de histéricos pertinaces.

    • 1883 Moya Jiménez, F. J. Filipinas 1882 [1883] Fi (CDH )
      [...] figúrese el lector un hombre siempre feo, con un sombrero ó salacot mugriento, una súcia camisa y un pantalon indefinible, que á trote largo, pues siempre llega tarde, sale del palenque (mercado) con su pinga al hombro, llevando delante un pollo tísico que cacarea frenético, y detrás una cesta ó pañuelo súcio con la carne, el pescado y las verduras, y tendrá el vivo retrato de nuestro héroe.
    • 1883 Palma, R. Tradiciones peruanas V [2003] Pe (CDH )

      Hasta 1835 había el padre Abregú acostumbrado, como todos los sacerdotes cuando viajan, usar un jipijapa más o menos guarapón; pero desde aquel año adoptó el sombrero de teja y la mula tísica para sus excursiones al Barranco. Imagínense ustedes la ridícula figura que haría el sant o señor. El lápiz de Pancho Fierro, el espiritual caricaturista limeño, ha inmortalizado la vera efigies del padre filipense.

    • 1887 Morales, E. Flores [2003] 78 Co (CDH )
      Después, tendido en su tísico jergón, se durmió creyendo ver la resplandeciente y bella figura de la Madre de Dios que le miraba sonriendo.
    • 1888 Pz Galdós, B. Miau [2003] Esp (CDH )
      La robustez de la mandíbula, el grandor de la boca, la combinación de los tres colores negro, blanco y amarillo, dispuestos en rayas, la ferocidad de los ojos negros, inducían a comparar tal cara con la de un tigre viejo y tísico, que después de haberse lucido en las exhibiciones ambulantes de fieras, no conserva ya de su antigua belleza más que la pintorreada piel.
    • 1889 Pereda, J. M. Puchera [1980] 91 Esp (CDH )
      Porque en la persona del Lebrato hay algo más de lo que aparentan su pellejo arrugado, su delgadez sarmentosa, su carita risueña y aniñada, y especialmente aquel sobrar de calzones, de chaleco y de camisa por todas partes, como si estas prendas no llevaran dentro más que las ramas torcidas del tísico cerojal * en que el viento las zarandea para secarlas cada vez que la cellisca de la ría las empapa sobre el cuerpo de su dueño.
    • 1890 Acevedo Díaz, E. Nativa [2002] 287 Ur (CDH )
      «No me degüeyes, porque todos somos hermanos. Tengo una madrecita vieja y una novia que va a ser mi mujer, que me aguardan las pobres rezando a la virgen santísima porque yo salga en la guerra sin lisiadura nenguna. Con la que me ha dao ese guapo me sobra para escarmiento, y no preciso de tu incómodo para dirme en sangre. Si querés que la viejita viva y la muchacha no se quede en un desmayo como pájaro tísico, envainá el chafarote y guardate estas patacas para tabaco y yerba, con más las botas y las espuelas.»
    • 1896 Gamboa, F. Suprema Ley [1965] 342 Mx (CDH )
      En la puerta del cuarto de la casera al lado de un Divino Rostro, un loro charlaba estúpidamente, aplaudiéndose con carcajadas y contorsiones de manicomio; un gallo viejo, en unión de cinco o seis gallinas tísicas, sin erotismos ellas ni él, picoteaban las inmundicias hacinadas en un rincón, y dos perros de tamaño diferente ensordecían con sus ladridos, sus mordiscos y sus carreras.
    • 1898 Blasco Ibáñez, V. Barraca [1997] Esp (CDH )
      Tísicos colchones, jergones rellenos de escandalosa hoja de maíz, sillas de esparto, sartenes, calderas, platos, cestas, verdes banquillos de cama, todo se amontonaba sobre el carro, sucio, gastado, miserable, oliendo a hambre, a fuga desesperada, como si la desgracia marchase tras de la familia pisándole los talones.
    • 1901 Fdz Guardia, R. Cuentos ticos [1901] CR (CDH )
      En facha lamentable se le veía trajinar por los caminos, espoleando sin piedad una yegua tísica, montado en un albardón del tiempo de la conquista, con las pantorrillas desnudas y los pantalones arrollados para librarlos del roce de las aciones.
    • 1902 Valle-Inclán, R. M. Sonata otoño [1996] 116 Esp (CDH )
      Todavía hoy el recuerdo de la muerta es para mí de una tristeza depravada y sutil: Me araña el corazón como un gato tísico de ojos lucientes.
    • 1909 Lugones, L. Lunario sentimental [1988] Ar (CDH )
      La luna en cuyo lapso / Por Europa y América, / Cobra una luz histérica / Tu espíritu relapso. / La platitud plebeya, / Con imbécil apodo, / Clasifica el gran modo / De tu prosopopeya; / Pero a tus pies, la faja / Del arco-iris es trocha, / Y la luna es tu brocha / Y el viento tu navaja. / Por esto con la luna, / Tu faz rapada y tísica, / Un problema de física / Recreativa, aduna; / Cual si armara a tu flaco / Desgaire de palote, / Su disco mondo el bote / Que junta al mingo el taco. /
    • 1909 Pz Galdós, B. Caballero encantado [1977] Esp (CDH )
      En lo físico, Mary ostentaba un seno enteramente plano, tabla rasa por la cual resbalaban con desconsuelo las miradas del amor; un rostro afilado, sin otro encanto que la dentadura de ideal perfección y limpieza, ojos claros y mudos, cabello bermejo, gentileza de palo vestido o de palmera tísica, y de añadidura un habla impertinente arrastrando las erres.
    • 1911 Magón Autoridad [1947] Cuentos CR (CDH )
      ¡Y luego el tamaño de la carretada!... En una carretilla enclenque y tísica, una armazón a guisa de techumbre de doble caedizo, dejando en el centro una cueva en donde cómodamente pudieran caber más palos de leña que los visibles, el astuto leñador edifica algo así como una portada de iglesia, con cincuenta o sesenta palos mezquinos, dándole apariencia de carreta recargada y can tal arte y tal destreza aparejados, que el ojo más escudiñador no percibe el engaño.
    • 1914 Cestero, T. M. Sangre [2003] RD (CDH )

      Es la querida del consueta, el hombre desaseado que suda y grita dentro de la concha. No es bonita; sin embargo, las miradas de los machos la acarician desde la sala. Las frases rimbombantes de las crónicas le son casi indiferentes, apenas si lee el ejemplar del periódico que él le ofrece. Los amigos, enterados del embullo creciente, bromean: «Pero si es una gata tísica». «No digas, a ti siempre te han gustado las feas». El director le previene: «no vale nada, va con cualquiera que la pague, y la carne de teatro, ya lo sabes, cara y mala». No obstante, se siente atraído.

    • 1918 Blasco Ibáñez, V. Mare nostrum [1998] 440 Esp (CDH )
      Otros, negros y sucios, con pegotes de apresurada reparación y una chimenea tísica sobre su casco enorme, avanzaban tosiendo humo, escupiendo ceniza, jadeando con ruidos de hierro viejo.
    • 1918 Vallejo, C. Heraldos [1985] 50 Pe (CDH )
      / Todos saben... Y no saben / que la Luz es tísica, / y la Sombra gorda... / Y no saben que el Misterio sintetiza... / que él es la joroba / musical y triste que a distancia denuncia / el paso meridiano de las lindes a las Lindes.
    • 1921 Monclús, M. A. Informes Informes Lengua Folklore Santo Domingo RD (CDH )

      [...] regular

      salir

      descomponerse o entusiasmarse, como les acontece a los campesinos cuando juegan a la brisca, juego harto frecuente y socorrido entre ellos.

      estribarse para dar golpe recio

      chisme o confabulación.

      tísico, (esto es, como reducido a su esencia, aniquilado)

      flaco por hambre brusca.

    • 1930 Arconada, C. Turbina [1975] 81 Esp (CDH )

      Las murmuraciones llegaban, como es natural, a oídos de doña Patro, porque no hay en los pueblos nada más natural que las murmuraciones lleguen a los oídos de quien se murmura. Doña Patro contestaba, también por medio de sus vecinas: «No hagáis caso de esa usurera. Es una mala víbora. Mucho dinero, mucho dinero... ¿Y para qué lo quiere si está tísica por no comer?»

    • 1938 Baroja, P. Susana [1978] Esp (CDH )
      La casa pobre, con su corral y sus gallinas tísicas, la tienda de comestibles sin gente, la taberna con tipos poco tranquilizadores, me parecían casi las mismas.
    • 1940 Cabral, M. Compadre Mon [2003] RD (CDH )
      / Que escupe cosas raras... / Que no escupe saliva... / Que tiene.. / ¡Tiene tísica el alma! / Si con lo que escupiste se fué también aquéllo... / Aquí tienes, Jonás, para ti, prestamista, / para ti este regalo, / igual que tus monedas, guárdatelo en el cráneo.
    • 1950 Fdz-Flórez, D. Lola [1950] Esp (CDH )
      Pero en cuanto al dinero no puedo quejarme, pues Ricardo anda todavía con el riñón bien cubierto y yo me he propuesto dejárselo más desnudo que una molleja de gallina tísica, de esas que no tienen ni una pizquita de grasa y ya han olvidado lo que es poner un huevo.
    • 1954 Salarrué Trasmallo [1954] ES (CDH )

      Las buenas gentes corrieron a ver de espantar al acridio golpeando cuanta cosa venía a mano para asustarlo. Aquello era como cuando un chucho tísico de rancho sale a ladrarle al tren. Mas, ¿qué es ese ruido que viene por' allí?... Las cuarenta matracas del padre Domingo, con él, a la cabeza, llegaban atronando los ámbitos con tal furia que la mancha entera se alzó vacilante en aterrorizadas ondulaciones y se perdió a lo lejos detrás de los cerros.

    • 1961 Grosso, A. Zanja [1984] Esp (CDH )
      Carlos, desde su duermevela tísica, tarda unos minutos en percibir el grito que llega del corral se levanta y asoma medio cuerpo por el ventanilla apartando a un lado la cortina.
    • 1961 Grosso, A. Zanja [1984] Esp (CDH )

      Tosiópor dos veces, débilmente, con una tosecilla seca. Luego, escupió. El salivazo cruzó el caballo de frisa y fue a estrellarse sobre el montón de arena que impide el tránsito rodado por la calzada en obra. Para desenganchar el farolillo rojo tuvo que empinarse. Lo alcanzó difícilmente, de puntillas sobre las alpargatas de suela de cáñamo. No le fue necesario apagarlo. La llama se había consumido ya sola por falta de aceite. Sin embargo, levantó el cerrojo, hurgó en el pabilo y volcó la cazoletilla de latón. Hizo con la cintura un quiebro inútil para aminorar el dolor desgarrado de los bronquios. Por el vértice de los hombros le corría la cosquilla suave del amanecer, la agridulce cosquilla tísica.

    • 1961 Grosso, A. Zanja [1984] Esp (CDH )

      La fiebre de su atardecer tísico ha descendido de un golpe. El pulso le late despacio en las sienes y en las muñecas. Sólo al extremo de los dedos parece llegar el latido de su corazón.

    • 1961 Martín-Santos, L. Tiempo silencio [1996] Esp (CDH )
      Llegaba la hora de cerrar y obedeciendo a regulaciones que no podían ser municipales, porque eran de fatiga cotidiana, el hombre fue colocando las diez botellas, seis vasos y una copa del negocio en el cajón de madera que hacía de mostrador y anunció que iba a apagar la bombilla tísica: «Porque la ganancia se me va en fluido.» Cartucho serenamente: «Déjala estar», sin que hubiera súplica sino certidumbre en sus palabras y escrutando por la puerta-ventana en la que pintado con rojo sangre decía TABERNA.
    • 1961 Onetti, J. C. Astillero [1995] Ur (CDH )
      La caminata por la larga calle arbolada, que no era ahora otra cosa que un esfuerzo tísico y durante el cual se cuidaba de pensar, como de meter un zapato en el agua parda de los baches [...].
    • 1979 Longares, M. Novela corsé [1988] Esp (CDH )
      [...] semen ramificado por la vasta península ibérica que, con la misma indiferencia con que atendíais el concierto musical, eyaculabais en testimonio de vuestro dominio indisputado ejecutando al mismo tiempo, con inaudita desvergüenza, el cometido de policías del recato, cumplíais sentencia embarazando, enlodando de venérea mugre el tísico blasón de castidad que la clase media aireaba al rendiros visita [...].
    • 1984 Olmo, L. Pablo Iglesias [1986] Esp (CDH )
      ¡Pobre país! Si hubiéramos de pintar el estado moral y tísico de otras clases nuestras, no resultaría el cuadro con tintas menos oscuras, porque hay pobres de levita sumidos en miseria parecida a la de muchos de blusa.
    • 1985 Prensa ABC, 29/01/1985 [1985] Esp (CDH )

      OS lo tengo dicho, hermanos. Estos tíos nos dejan con una mano atrás, otra delante y la rosa donde caiga. Nos dejan en pelota con la «rují», tapándonos el ombligo. Nos llevan al paraíso socialista por el camino de la pobreza. Desde don Fernando el Católico a don Miguel el Recaudador, la bolsa de los españoles va enflaqueciendo y se nos está quedando tísica. O sea, que estos tíos no venían con la ética, sino con la hética. Se conoce que en los discursos electorales decían que nos iban a meter en la «hética», y nosotros, confiados pardillos, no nos dimos cuenta de que para ellos la «ética»se escribe con hache.

    • 1987 Brusco, O. J. Comer [1987] Ar (CDH )
      Pero debemos reconocer que existen individuos flacos, algunos muy flacos, que constituyen un prototipo, aquel a quien los familiares llaman en forma ocasional, y casi siempre equivocada, "tísico", "raquítico", "anémico", o simple y cariñosamente "flaco".
    • 1989 Sepúlveda, L. Viejo [1996] Ch (CDH )
      El barco, antigua caja flotante movida por la decisión de su patrón mecánico, por el esfuerzo de dos hombres fornidos que componían la tripulación y por la voluntad tísica de un viejo motor diésel, no regresaría hasta pasada la estación de las lluvias que se anunciaba en el cielo encapotado.
    • 1993 Sarduy, S. Cantantes [1967] Cu (CDH )
      Las vacas gordas se acabaron, están tísicas, deshidratadas, viudas de toro, hechas tierra.
    • 1993 Sarduy, S. Cantantes [1967] Cu (CDH )

      Por encima de las telas húmedas se les asomaban los vellos en espirales minuciosas; otros, como bozo, les sombreaban el pecho. Eran robustos y dorados y de barbas y cabellos de iguales mechas. Se sonrojaron al verlas tan cubiertas: una cretona floreada las apretaba como una mortaja; de ella emergían las manos, garzas disecas, las cabezas rapadas; un lazo blanco, prendido de la última mecha, las remataba como una giralda. Bajo esas mariposas tísicas las Corzas sonrieron.

    • 1994 Muñoz Calvo, S. HFarmacia [1994] Esp (CDH )
      "... Y así hacía unas ollas tísicas de puro flacas, unos caldos que al estar cuajados se podían hacer sartas de cristal de las dos pascuas. Por diferenciar, para que estuviese gorda la olla solía echar unos cabos de vela de sebo..."
    • 1994 Prensa La Vanguardia, 02/09/1994 [1994] Esp (CDH )
      El caso es que los veranos son cada vez menos azules, y esa es una verdad constatable también en la pantalla: a cada emisión de "Verano azul", los azules son más pálidos, los rojos más desteñidos, el mar más translúcido, la piel de los actores más tísica y la arena más blanca.
    • 1996 Casares, C. Dios sillón azul [1996] 101 Esp (CDH )
      Era una sonrisa entregada, quizá también pícara y cariñosa en algunos momentos, como cuando él dijo de sí mismo, animado por el alcohol, que se sentía un espíritu robusto y gordo envuelto en una carne tísica y flaca.
    • 2002 Bryce Echenique, A. Huerto Amada [2002] Pe (CDH )
      Y como al octavo minuto el gemidillo se adelgazó, agónico y tristísimo, casi tísico, o, en todo caso, de un romanticismo entre alarmante, por real, porque golpazo sí que había habido [...].
    • 2014 Ramírez, N. "Actrices sin maquillaje" [10-11-2014] El País (Madrid) Esp (HD)
      Quedarse tísica como lo hizo Anne Hathaway en Los Miserables, Angelina Jolie en Inocencia Interrumpida o Natalie Portman en El cisne negro. Estar irreconocible y engordar los 13 kilos que se echó encima Charlize Theron en Monster. Afearse como Halle Berry en Monster's Ball. Cambiar de cara como Nicole Kidman en Las Horas. En los últimos años, dos estrategias allanaban el camino a las actrices que soñaban hacerse con el Oscar: podían cambiar drásticamente de peso o podían convertirse en otra persona (y si encima era un personaje histórico, muchísimo mejor).
    • 2018 Anónimo (A. I.) "Calvario de Mario Casas" [23-10-2018] La Voz de Galicia (A Coruña) Esp (HD)
      Demacrado, ojeroso pero sobre todo escuálido, Mario Casas tuvo que perder 12 kilos en cuatro meses para adecuarse al papel que le tocaba interpretar. Para ello tuvo que realizar una estricta dieta que «supuso pasar muchísima hambre, no comer casi y verte en el espejo tísico. Ver a la gente comer es lo más difícil de todo. Ver a tus amigos que salen a comer y tú no puedes... la sociedad te excluye. Me encerré en casa, en mi mundo. No podía salir ni a tomarme una copa».
    • 2019 Calle, P. "Entrevista Alberto Contador" [04-02-2019] El Mundo (Madrid) Esp (HD)
      Disfrutaba porque me preparaba para el objetivo que perseguía: estar en plenitud para el Tour. Estar concentrado me permitía rendir al máximo, comer poco y estar súper fino. Yo, al inicio de la temporada, después de estar concentrado en el Teide y de pasar un hambre tremenda, llegaba tísico.
oído de tísico
  1. s. m. Oído muy fino.
    docs. (1825-2020) 29 ejemplos:
    • 1825 Urcullu, J. "Mariana" p. 259 Trad Cuentos duendes Esp (BD)
      “¿Mariana?” dijo él con voz muy baja, mas no tuvo respuesta. “¿Mariana, no me conoces?” ― La pálida figura aérea movió silenciosamente la cabeza. ― ¿Mariana, no te acuerdas de mí? ¡Soy José, tu querdio José!” ― “¡José! ¡Mi querido José!” gritó la figura estendiendo sus brazos. ― Folmar cayó sin sentido en ellos, despidiendo un ¡ay! lastimoso. El cirujano que estaba espiando el menor ruido con oído de tísico, salió corriendo del cuarto teniendo el candelero en su mano izquierda y una pistola en la derecha. Al ver á los dos abrazados dio un grito, ¡Dios mío! ¡Teresa Lenz!”.
    • 2020 Carmona, J. "Tino Casal" [12-12-2020] El Público (Madrid) Esp (HD)
      Casal, que también había trabajado de productor para grupos como Obús, nunca estaba satisfecho y siempre pensaba que la siguiente sería su mejor versión: "Me comía muchos presupuestos de otros discos porque no terminaba nunca la voz. La voz de Eloise tardó una semana en grabarla. Era muy perfeccionista, me terminaba aburriendo. Además, tenía un oído de tísico, magnífico, pero, claro, había que traducirle [...]".
    • 1825 Urcullu, J. "Mariana" p. 259 Trad Cuentos duendes Esp (BD)
      “¿Mariana?” dijo él con voz muy baja, mas no tuvo respuesta. “¿Mariana, no me conoces?” ― La pálida figura aérea movió silenciosamente la cabeza. ― ¿Mariana, no te acuerdas de mí? ¡Soy José, tu querdio José!” ― “¡José! ¡Mi querido José!” gritó la figura estendiendo sus brazos. ― Folmar cayó sin sentido en ellos, despidiendo un ¡ay! lastimoso. El cirujano que estaba espiando el menor ruido con oído de tísico, salió corriendo del cuarto teniendo el candelero en su mano izquierda y una pistola en la derecha. Al ver á los dos abrazados dio un grito, ¡Dios mío! ¡Teresa Lenz!”.
    • 1843 Lafuente, M. "Cuquito Strangis" [30-10-1843] Fray Gerundio: Periódico Satírico (Madrid) Esp (HD)
      [...] si no viera que mientras los españoles callamos como muertos, el cuquito canta por strangis á rabiar, y no cierra boca, sin que por acá despierte á nadie un canto que si hasta ahora por sonar lejos no se deja oír más que de Fr. Gerundio, que tiene oído de tísico para estas cosas, algún día puede que suene para todos más cerca de lo que fuera menester, y en términos que hasta los sordos lo hayan de oir.
    • 1861 Pythágoras Magia Siglo XIX p. 8 Esp (BD)
      Hacía que dormía tranquilamente algunas horas, cuyo sueño no faltó quien supo aprovecharle para introducir géneros de contrabando; pero como el viento había corrido en otra dirección, no pudo apercibirse de tal cosa, pues era hombre muy práctico y como los órganos que más desarrollo adquieren son los que más se trabajan, tenía un oído de tísico y un olfato de perdiguero.
    • 1886 Mobellán, S./ Hidalgo Mobellán, A. Pedro Alvarado p. 917 Esp (BD)
      Que ese pillete de paje nos ha estado oyendo y ha ido a comunicar nuestro ascenso a la gente. Tiene oído de tísico, ¡vive Dios!
    • 1887 Frontaura, C. Galería matrimonios, II p. 270 Esp (BD)
      Casta, que tiene oído de tísica, oyó lo del adulterio, y se alarmó grandemente, recordando que en Zamora, su padre no la llevaba al teatro, por temor de que hubiera en la comedia amor adúltero.
    • 1907 Illas Fabra, L. M. "Muerte Civil" [16-11-1907] El Bien Público (Mahón) Esp (HD)
      Mi salud, á Dios gracias, es tan buena como deseo que la goces al recibo de la presente. Conservo todavía, como en mis verdes años, ojos de lince, olfato de perdiguero, tacto de ciego, oído de tísico y paladar de catador de vinos [...]
    • 1953 Casas, B. Antoñita [1953] Esp (CDH )
      — Me parece que nuestro padre nos embala a los tres con la abuela a Mendigorriaga —me avisó Pepito, que tiene un oído de tísico que se entera de todo...— A lo mejor «nos las piramos» en avión a Bilbao... —volvió misterioso, con los ojos brillantes, al cabo de un rato, mientras yo, a pesar de la estupenda noticia, me notaba decaída y sin alegría, escuchando el llanto angustiado y sin vida de Titerris al otro lado de la puerta.
    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] Ch (CDH )
      En el silencio del salón de baile —un oído de tísico hubiera podido percibir la inefable caricia de los pinceles sobre la piel de un cuello adolescente para mancharlo de pústulas o sobre la silueta encorsetada de una cintura para restarle flexibilidad— restallaron como groseras respuestas a los planes del Mayordomo los ruidos intestinales del Chef.
    • 1991 Mendicutti, E. Palomo [1995] Esp (CDH )
      Menos mal que tía Victoria, que tenía un oído de tísica, como ella decía siempre, en seguida escuchó que José Joaquín estaba en mi habitación y entró como una pandereta, qué alegría, mi médico favorito, el hombre con la mejor sicología de toda España, anda, pasa, y lo cogió del brazo y se lo llevó al gabinete con un montón de zalamerías.
    • 1995 Marsillach, A. Se vende ático [1995] Esp (CDH )
      Julia le confesó a Marisa en un susurro, porque los recepcionistas acostumbran a tener un oído de tísico:

      — La primera vez que me acosté con Germán fue en este hotel.

    • 2005 Triviño Anzola, C. "Puerta cerrada" La casa imposible Co (CORPES)
      Su madre iba cobrando la forma vegetal en las grietas de su manos y en la rigidez de su porte, inmune a los hedores de su cuerpo machacado por las llagas. A eso había que añadir el silencio, la prohibición de poner la radio porque su oído de tísico se percataba y empezaba a quejarse como una bestia herida.
    • 2008 Sanz, M. Lección anatomía Esp (CORPES)
      Como si en el bolsillo de la chaqueta, doña Antonia escondiese las llaves de los sótanos y de los cuartos oscuros, como si su mano fuera tan dura como una prótesis y nada escapara al control de sus ojos de lechuza y de su oído de tísica. Nadie sabía qué pudo pasar, cuál era el germen de la leyenda que gravitaba sobre doña Antonia, pero algo se había quedado ahí, prendido en la atmósfera del colegio. Doña Antonia nos intimidaba, pero también la admirábamos, porque era la profesora con la que aprenderíamos a dividir.
    • 2010 Bertete Gallo, A. Perro llamas Ur (CORPES)
      Así, a espaldas del mundo y de los otros maestros, así solucionaba el maestro Senji los problemas en el monasterio. Abusador, murmuró Masato una tarde. Dos de sus compañeros se golpeaban en una lucha que no tenía fin. Pero Senji, que solía advertirles que tenía oído de tísico, captó en el aire la protesta y, además, identificó el origen exacto de la misma. Basta, dijo, es hora de arreglar otro asunto, les gritó a los que peleaban y luego señaló al joven Masato para decirle usted acerqúese, y con la otra mano le lanzó cuatro trozos [...].
    • 1825 Urcullu, J. "Mariana" p. 259 Trad Cuentos duendes Esp (BD)
      “¿Mariana?” dijo él con voz muy baja, mas no tuvo respuesta. “¿Mariana, no me conoces?” ― La pálida figura aérea movió silenciosamente la cabeza. ― ¿Mariana, no te acuerdas de mí? ¡Soy José, tu querdio José!” ― “¡José! ¡Mi querido José!” gritó la figura estendiendo sus brazos. ― Folmar cayó sin sentido en ellos, despidiendo un ¡ay! lastimoso. El cirujano que estaba espiando el menor ruido con oído de tísico, salió corriendo del cuarto teniendo el candelero en su mano izquierda y una pistola en la derecha. Al ver á los dos abrazados dio un grito, ¡Dios mío! ¡Teresa Lenz!”.
    • 1843 Lafuente, M. "Cuquito Strangis" [30-10-1843] Fray Gerundio: Periódico Satírico (Madrid) Esp (HD)
      [...] si no viera que mientras los españoles callamos como muertos, el cuquito canta por strangis á rabiar, y no cierra boca, sin que por acá despierte á nadie un canto que si hasta ahora por sonar lejos no se deja oír más que de Fr. Gerundio, que tiene oído de tísico para estas cosas, algún día puede que suene para todos más cerca de lo que fuera menester, y en términos que hasta los sordos lo hayan de oir.
    • 1861 Pythágoras Magia Siglo XIX p. 8 Esp (BD)
      Hacía que dormía tranquilamente algunas horas, cuyo sueño no faltó quien supo aprovecharle para introducir géneros de contrabando; pero como el viento había corrido en otra dirección, no pudo apercibirse de tal cosa, pues era hombre muy práctico y como los órganos que más desarrollo adquieren son los que más se trabajan, tenía un oído de tísico y un olfato de perdiguero.
    • 1870 Mansilla, L. V. Indios Ranqueles [1957] Ar (CDH )

      — ¿Y en qué conoces, hombre?

      — Si se oyen ya hasta los rebencazos que le da; oiga, señor, oiga.

      Mi oído no era de tísico como el suyo.

      — ¡Macías! ¡Macías! —grité.

      — ¡Lucio! ¡Lucio! —me contestaron.

    • 1881 Valera, J. Misticismo poesía española 1154 Discursos académicos Esp (CDH )
      El pintor necesita buena vista, y el músico buen oído; pero hay hombres que tienen vista de lince, y no pintan, o pintan mal, lo que es peor; otros que tienen oídos de tísico, y no cantan ni componen óperas ni sinfonías; y de la propia suerte he conocido y conozco gran número de personas que tienen muchísima más memoria que el señor Menéndez y Pelayo, y que ni llaman la atención, ni escriben hermosos libros y mejores discursos.
    • 1886 Mobellán, S./ Hidalgo Mobellán, A. Pedro Alvarado p. 917 Esp (BD)
      Que ese pillete de paje nos ha estado oyendo y ha ido a comunicar nuestro ascenso a la gente. Tiene oído de tísico, ¡vive Dios!
    • 1887 Frontaura, C. Galería matrimonios, II p. 270 Esp (BD)
      Casta, que tiene oído de tísica, oyó lo del adulterio, y se alarmó grandemente, recordando que en Zamora, su padre no la llevaba al teatro, por temor de que hubiera en la comedia amor adúltero.
    • 1894 Balsa Vega, R. "Crónica Arte" [25-10-1894] La Ilustración Artística (Barcelona) Esp (HD)
      Brillan los ojos de la mártir con fulgores de extravío mental; quizá llegué hasta su oído de tísica el murmullo apagado del Sena.
    • 1907 Illas Fabra, L. M. "Muerte Civil" [16-11-1907] El Bien Público (Mahón) Esp (HD)
      Mi salud, á Dios gracias, es tan buena como deseo que la goces al recibo de la presente. Conservo todavía, como en mis verdes años, ojos de lince, olfato de perdiguero, tacto de ciego, oído de tísico y paladar de catador de vinos [...]
    • 1929 Espina, A. Luna copas [1929] Esp (CDH )
      Con su fino oído de tísica, pudo escuchar la consigna salvadora que las estaciones de radio germánicas lanzaban, día por día, a los negociantes españoles.
    • 1953 Casas, B. Antoñita [1953] Esp (CDH )
      — Me parece que nuestro padre nos embala a los tres con la abuela a Mendigorriaga —me avisó Pepito, que tiene un oído de tísico que se entera de todo...— A lo mejor «nos las piramos» en avión a Bilbao... —volvió misterioso, con los ojos brillantes, al cabo de un rato, mientras yo, a pesar de la estupenda noticia, me notaba decaída y sin alegría, escuchando el llanto angustiado y sin vida de Titerris al otro lado de la puerta.
    • 1961 Asturias, M. Á. Alhajadito [1977] Gu (CDH )

      — No he hablado... —le respondí, decidiéndome a que me penetrara por boca y nariz el olor de la ruda, y sí había hablado—. De modo que ellas... —había dicho en voz baja, tan baja que apenas me oí yo, por eso dicen que los ciegos tienen oído de tísico—. ¡De modo que ellas... de modo que yo...

    • 1977 Deive, C. E. DiccDominicanismos RD (NTLLE)
      Oído.- Tener uno oído de tísico. fr. fig. y fam. Tenerlo muy aguzado.
    • 1978 Donoso, J. Casa campo [1989] Ch (CDH )
      En el silencio del salón de baile —un oído de tísico hubiera podido percibir la inefable caricia de los pinceles sobre la piel de un cuello adolescente para mancharlo de pústulas o sobre la silueta encorsetada de una cintura para restarle flexibilidad— restallaron como groseras respuestas a los planes del Mayordomo los ruidos intestinales del Chef.
    • 1983 Pombo, Á. Héroe Mansardas [1990] Esp (CDH )

      [...] mi padre dice que hasta un pelo que se cae hace ruido, un pelo del pelo, ¡o sea que fíjate...!

      —Será que está tísico tu padre; eso se llama oído de tísico.

      —Tísico, no creo. Lo que tiene, joder, es una úlcera que le salió en el frente de comer tanta rata y tanta mierda... [...].

    • 1991 Mendicutti, E. Palomo [1995] Esp (CDH )
      Menos mal que tía Victoria, que tenía un oído de tísica, como ella decía siempre, en seguida escuchó que José Joaquín estaba en mi habitación y entró como una pandereta, qué alegría, mi médico favorito, el hombre con la mejor sicología de toda España, anda, pasa, y lo cogió del brazo y se lo llevó al gabinete con un montón de zalamerías.
    • 1991 Mendicutti, E. Palomo [1995] 238 Esp (CDH )
      Mi madre decía que en la familia Calderón todo el mundo tenía oído de tísico y que se veía a las claras que yo había salido a su gente.
    • 1993 Haensch, G. / Werner, R. (dirs.) NDiccArgentinismos Ar (NTLLE)
      oído […] tener ~ de tísico. coloq. Tener una percepción auditiva muy aguda.
    • 1995 Marsillach, A. Se vende ático [1995] 27 Esp (CDH )

      — No quiero ir a la cocina, detesto la cocina. Huele a frito. ¡Siempre huele a frito!

      Pero doña Eulalia, que presumía de tener un envidiable oído de tísica a pesar de los años, intervino a cierta distancia:

      — ¿Qué dice?

      — Nada, mamá, nada.

    • 1995 Marsillach, A. Se vende ático [1995] Esp (CDH )
      Julia le confesó a Marisa en un susurro, porque los recepcionistas acostumbran a tener un oído de tísico:

      — La primera vez que me acosté con Germán fue en este hotel.

    • 1998 Santos Silva, L. Este ojo mira p. 64 PR (BD)
      Sólo yo, cara quieta, quietita con el oído de tísica pendiente a las ondas del mínimo sonido, oído surrealista en proyecciones infinitas para agarrar al vuelo lo que la prieta dice.
    • 2001 Oviedo, J. L. "Escurridizo" El Cazabrujas y otros personajes Ho (CORPES)
      Tiene oído de tísico y mirada de tuerto.
    • 2005 Triviño Anzola, C. "Puerta cerrada" La casa imposible Co (CORPES)
      Su madre iba cobrando la forma vegetal en las grietas de su manos y en la rigidez de su porte, inmune a los hedores de su cuerpo machacado por las llagas. A eso había que añadir el silencio, la prohibición de poner la radio porque su oído de tísico se percataba y empezaba a quejarse como una bestia herida.
    • 2008 Sanz, M. Lección anatomía Esp (CORPES)
      Como si en el bolsillo de la chaqueta, doña Antonia escondiese las llaves de los sótanos y de los cuartos oscuros, como si su mano fuera tan dura como una prótesis y nada escapara al control de sus ojos de lechuza y de su oído de tísica. Nadie sabía qué pudo pasar, cuál era el germen de la leyenda que gravitaba sobre doña Antonia, pero algo se había quedado ahí, prendido en la atmósfera del colegio. Doña Antonia nos intimidaba, pero también la admirábamos, porque era la profesora con la que aprenderíamos a dividir.
    • 2008 Sanz, M. Lección anatomía Esp (CORPES)
      Los conozco bien y trato de complacerlos uno a uno. A veces no puedo. Mi oído de tísica me permite captar cada comentario.
    • 2010 Bertete Gallo, A. Perro llamas Ur (CORPES)
      Así, a espaldas del mundo y de los otros maestros, así solucionaba el maestro Senji los problemas en el monasterio. Abusador, murmuró Masato una tarde. Dos de sus compañeros se golpeaban en una lucha que no tenía fin. Pero Senji, que solía advertirles que tenía oído de tísico, captó en el aire la protesta y, además, identificó el origen exacto de la misma. Basta, dijo, es hora de arreglar otro asunto, les gritó a los que peleaban y luego señaló al joven Masato para decirle usted acerqúese, y con la otra mano le lanzó cuatro trozos [...].
    • 2014 Ampuero, F. "Loreto" Cuarteto de Lima Pe (CORPES)
      "El ruido viene de adentro", señaló Silverio hacia el pasillo en tinieblas. Oído de tísico, pensó Chito, y levantándose ágilmente de un salto, gritó.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      Oído de tísico. m. Oído muy fino.
    • 2020 Carmona, J. "Tino Casal" [12-12-2020] El Público (Madrid) Esp (HD)
      Casal, que también había trabajado de productor para grupos como Obús, nunca estaba satisfecho y siempre pensaba que la siguiente sería su mejor versión: "Me comía muchos presupuestos de otros discos porque no terminaba nunca la voz. La voz de Eloise tardó una semana en grabarla. Era muy perfeccionista, me terminaba aburriendo. Además, tenía un oído de tísico, magnífico, pero, claro, había que traducirle [...]".

Diccionario histórico de la lengua española
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