15.ª Entrega (diciembre de 2023)
Versión del 31/12/2023
Equipo Real Academia Española
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dolmen s. (1816-)
dolmen, dolmin
Etim. Voz tomada del francés dolmen, atestiguada en esta lengua en 1796 bajo la forma dolmin como 'monumento megalítico constituido por una losa de piedra que descansa sobre pilares, empleada como altar o necrópolis en los cultos prehistóricos, celtas y druídicas', en Origines gauloises, celles des plus anciens peuples de l'Europe, de T. M. de La Tour d'Auvergne-Corret (p. 24, nota: "L'énorme pierre qui couvre ce monument de l'antiquité, s'appelle dans notre langue dolmin"), y esta, probale transcripción inexacta del córnico tolmen. (véase TLF s. v. dolmen).

Se documenta por primera vez, con la variante dolmin y la acepción 'monumento prehistórico de carácter funerario formado por una piedra horizontal colocada sobre varias piedras verticales', en en 1816, en el tomo primero de la traducción de Los mártires ó el triunfo de la religion cristiana, de F. A. de Chateaubriand. La forma dolmen empieza a atestiguarse en 1840, en el artículo titulado "Los Druidas Bretones" y publicado en El Panorama (Madrid), y desde entonces se impone en el uso. Se consigna por vez primera en 1884, en el DRAE, con una doble definición que se unifica en la edición de 1899.

Vid. también dolmen (Inéd. 1933-1936). 

  1. s. m. Monumento prehistórico de carácter funerario formado por una piedra horizontal colocada sobre varias piedras verticales.
    docs. (1816-2021) 46 ejemplos:
    • 1816 Anónimo Trad Mártires Chateaubriand, I p. 254 Esp (BD)
      En la extremidad de esta arena se levantaba una de aquellas rocas aisladas que los Galos llaman Dolmin, y señalan el sepulcro de algun guerrero.
    • 2021 Silva Romero, R. Zoológico Co (CORPES)
      A veces no podía vivir. Se iba a ver los dólmenes para recordar su pequeñez, su brevedad. Se iba al mercado del puerto a comprar tomates, mariscos, pastelitos, vinos, para despejarse la mente enfrascada en la escritura de algún libro.
    • 1816 Anónimo Trad Mártires Chateaubriand, I p. 254 Esp (BD)
      En la extremidad de esta arena se levantaba una de aquellas rocas aisladas que los Galos llaman Dolmin, y señalan el sepulcro de algun guerrero.
    • 1840 Anónimo "Druidas" [20-02-1840] El Panorama (Madrid) Esp (HD)
      Cuando querían hacer conocer á los pueblos la voluntad de Dios, reunían a sus oyentes en la inmediacion de alguno de los monumentos llamados Dolmens, que libertándose de las injurias del tiempo, han sobrevivido á tantas jeneraciones, y se encuentran todavía en buen número en la Bretaña Armoricana. Compónese de una piedra tableada, colocada sobre otras piedras, que en conjunto ofrecen la forma grosera de una mesa, tan rústicamente dispuesta, que parece haber tocado apénas en ella la mano del hombre.
    • 1861 Castelar, E. Discurso 13/05/1861 [1861] 237 Discursos Esp (CDH )
      Los señores, Malo, y Merry, y Colon, inteligencias clarisimas, profundísimas, novilísimas, que yo respeto y admiro, y contemplo con aquella religiosidad con que, suelo contemplar las estátuas yacentes que duermen sobre los sepulcros góticos de nuestras catedrales de la Edad-Media, han proclamado el progreso, aunque han creido que debia cumplirse bajo el ideal político y científico de nuestros padres; porque imaginan que aún ese ideal no ha muerto, como los antiguos druidas creían al pié del tosco dolmen, con sangre de víctimas humanas manchado, que nunca dejaría de resonar en las ráfagas del viento y en las ramas de las sagradas selvas el gemido del espiritu de sus progenitores.
    • a1870 Bécquer, G. A. Artículos [1923] Esp (CDH )

      El estudio de los cráneos y osamentas recogidos allí; la descripción y clasificación de las armas de piedra, utensilios de madera y hueso, vasijas de barro, restos de vestiduras y objetos de esparto tejido, como gorros, túnicas, bolsas y escudos, al que se reúne el hallazgo de una diadema de oro puro groseramente batido; adornos y ofrendas, consistentes en caracolas, colmillos de jabalí y cabezas de adormideras, prestan a las páginas del mencionado libro un interés que contribuye a aumentar la reproducción de muestras de una escritura desconocida encontrada en la Cueva de los Letreros, y noticias de cavernas, sepulturas, túmulos, dólmenes y recintos sagrados de un período tal vez posterior, pero que se enlazan en cierto modo con ese más obscuro y lejano cuyas sombras trata de disipar la historia.

    • 1878 Pereda, J. M. Más reminiscencias Esbozos Esp (CDH )
      Levantáronse á una al vernos, los infelices, que me parecieron bestezuelas destinadas al sacrificio sobre el dólmen de aquel druida fanático, y tambien se levantó éste, no por mí, sino por mi padre. Me atreví á mirarle miéntras contestaba al saludo reverentísimo que le habíamos hecho. Me espantó aquella mueca que en él se llamaba sonrisa. Era de mediana estatura, tenía la frente angosta, bastante pelo, ojos pequeñitos, boca grande, labios apretados, pómulos salientes, largas orejas, color pálido, rugoso el cútis y muy afeitada la barba. Todo esto ocupaba poquísimo terreno, porque la cabeza era pequeña.
    • 1889 Martí, J. Edad Oro [1995] 65 Cuba (CDH )
      Otros ponían de punta en medio de un bosque tres piedras grandes, y una chata encima, como techo, con una cerca de piedras, pero estos dólmenes no eran para vivir, sino para enterrar sus muertos, o para ir a oír a los viejos y los sabios cuando cambiaba la estación, o había guerra, o tenían que elegir rey: y para recordar cada cosa de éstas clavaban en el suelo una piedra grande, como una columna, que llamaban «menhir» en Europa, y que los indios mayas llamaban «katún»; porque los mayas de Yucatán no sabían que del otro lado del mar viviera el pueblo galo, en donde está Francia ahora, pero hacían lo mismo que los galos, y que los germanos, que vivían donde está ahora Alemania.
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      Es evidente que en tiempos del supuesto don Teodosio, principios del siglo VIII, no había apellidos ni gentes cristianizadas en los campos de Vasconia, y también es evidente que el monte Aralar es un antiguo monte sagrado de época prehistórica, en el que hay varios dólmenes. Quién sabe de dónde procederá la leyenda de don Teodosio. Probablemente no es muy antigua. Esta leyenda es conocida en el país por una novela de Navarro Villoslada, titulada Amaya a los vascos en el siglo VIII , novela imitada de Walter Scott, que no tiene, ni mucho menos, la gracia ni el arte de las del maestro escocés.
    • 1965 Chueca Goitia, F. HArquitectura española [1965] Esp (CDH )
      Cuando el dolmen evoluciona, comienza por aparecer, tímidamente, un corredor que conduce a la entrada de la cámara y que se forma por unas paredes verticales de piedras hincadas en el suelo. Este corredor va poco a poco aumentando de importancia, hasta que la cámara llega a ser un simple apéndice suyo y de su misma anchura, dando lugar al tipo llamado de galería cubierta. Por último, en el estadio final, los dólmenes suelen tener una cámara circular, cubierta con falsa cúpula, que comunica con otra u otras más pequeñas.
    • 1989 Bassegoda Nonell, J. Atlas HArte [1989] Esp (CDH )
      La arquitectura mortuoria se ha perpetuado en los dólmenes (fig. 2) o simples estructuras porticadas, construidas con losas verticales que sostienen un techo formado por otra piedra horizontal. Las más de las veces estas estructuras se hallaban cubiertas de tierra, a modo de túmulos, que en época posterior se complicaron, formando cuevas compuestas de un largo pasillo porticado y de una sala funeraria circular, cubierta con formas abovedadas conseguidas con el sucesivo vuelo de las hiladas de piedra. Desde España hasta Rusia se hallan grandes dólmenes, mientras que en Portugal, así como en el sur de España, concretamente en Antequera, se encuentran los ejemplares más notables de cuevas.
    • 1990 Lpz Azcona, J. M. Minería hispana HGeología Esp (CDH )
      Aparecen los célebres monumentos megalíticos funerarios denominados dólmenes, integrados por grandes bloques de piedra, colocados en posición vertical, con una o varias losas por cubierta, perfectamente talladas, resultado de un dominio del arte de cortar las piedras.
    • 1997 Calvo Serraller, F. HArte [1997] Esp (CDH )
      – El dolmen es una estructura constituida por piedras verticales plantadas en el suelo que sostienen una losa horizontal. Tiene carácter funerario y adopta diferentes grados de complicación.
    • 2001 Crespo Santiago, M. J. Arqueología paisaje depresión Ronda Odiseo Revista de Historia Esp (CORPES)
      Este periodo se caracteriza en la Depresión por la disminución de yacimientos y la aparición de enterramientos colectivos en dólmenes. Se produce un cambio en la forma de organizar el territorio con respecto a los grupos neolíticos. Ahora los grupos se van a dividir el territorio, para ello lo van a articular entorno a los dólmenes (Márquez 2000).
    • 2007 Gutiérrez, P. J. Corazón mestizo Cu (CORPES)
      Cerca de aquí, encontraron en el lecho de un río unas piedras con inscripciones rúnicas, que fueron descifradas. Y en Rodas, también cerca de Cienfuegos, se encontró una pulsera con inscripción legible ya descifrada y un dolmen cerca de una caverna, también con inscripciones.
    • 2013 Llop, J. C. Solsticio Esp (CORPES)
      Y frente al mar permanecían, desperdigados por el árido paisaje, sus pequeñas y fortificadas ciudadelas, cementerios y monumentos megalíticos: navetas, talaiots y dólmenes. Aquellas grandes lajas de piedra se dispersaban junto al telémetro de la Batería —como un fósil sobre una chimenea art-déco—, bajo frondosos acebuches que ahora sustituían su techumbre pétrea, o rodeadas de enormes matas de lentisco que eran, a su vez, refugio para el ganado.
    • 1816 Anónimo Trad Mártires Chateaubriand, I p. 254 Esp (BD)
      En la extremidad de esta arena se levantaba una de aquellas rocas aisladas que los Galos llaman Dolmin, y señalan el sepulcro de algun guerrero.
    • 1830 Anónimo Trad Estrangera Arlincourt, I p. 71 Esp (BD)
      En medio de la dilatada selva, cuyas sendas laberínticas recorre, distingue esparramados los restos de aquellos famosos dolmines donde iba antes á pronunciar sus oráculos el sacerdote de las Galias.
    • 1840 Anónimo "Druidas" [20-02-1840] El Panorama (Madrid) Esp (HD)
      Cuando querían hacer conocer á los pueblos la voluntad de Dios, reunían a sus oyentes en la inmediacion de alguno de los monumentos llamados Dolmens, que libertándose de las injurias del tiempo, han sobrevivido á tantas jeneraciones, y se encuentran todavía en buen número en la Bretaña Armoricana. Compónese de una piedra tableada, colocada sobre otras piedras, que en conjunto ofrecen la forma grosera de una mesa, tan rústicamente dispuesta, que parece haber tocado apénas en ella la mano del hombre.
    • 1861 Castelar, E. Discurso 13/05/1861 [1861] 237 Discursos Esp (CDH )
      Los señores, Malo, y Merry, y Colon, inteligencias clarisimas, profundísimas, novilísimas, que yo respeto y admiro, y contemplo con aquella religiosidad con que, suelo contemplar las estátuas yacentes que duermen sobre los sepulcros góticos de nuestras catedrales de la Edad-Media, han proclamado el progreso, aunque han creido que debia cumplirse bajo el ideal político y científico de nuestros padres; porque imaginan que aún ese ideal no ha muerto, como los antiguos druidas creían al pié del tosco dolmen, con sangre de víctimas humanas manchado, que nunca dejaría de resonar en las ráfagas del viento y en las ramas de las sagradas selvas el gemido del espiritu de sus progenitores.
    • a1870 Bécquer, G. A. Artículos [1923] Esp (CDH )

      El estudio de los cráneos y osamentas recogidos allí; la descripción y clasificación de las armas de piedra, utensilios de madera y hueso, vasijas de barro, restos de vestiduras y objetos de esparto tejido, como gorros, túnicas, bolsas y escudos, al que se reúne el hallazgo de una diadema de oro puro groseramente batido; adornos y ofrendas, consistentes en caracolas, colmillos de jabalí y cabezas de adormideras, prestan a las páginas del mencionado libro un interés que contribuye a aumentar la reproducción de muestras de una escritura desconocida encontrada en la Cueva de los Letreros, y noticias de cavernas, sepulturas, túmulos, dólmenes y recintos sagrados de un período tal vez posterior, pero que se enlazan en cierto modo con ese más obscuro y lejano cuyas sombras trata de disipar la historia.

    • 1871 Juan García (Amós de Escalante y Prieto) Costas y montañas p. 374 Esp (BD)
      En la vega que la dió apellido se mezclan el Saja y el Besaya; trae aquel sus venas madres de las sierras de Isar, de las altísimas cumbres de Sejos, donde saluda misteriosas piedras célticas, rudos menhires ó fantásticos dolmenes, y viene ya cansado de hacer bien, de regar los valles de Cabuérniga, Cabezon y Reocin [...].
    • 1878 Pereda, J. M. Más reminiscencias Esbozos Esp (CDH )
      Levantáronse á una al vernos, los infelices, que me parecieron bestezuelas destinadas al sacrificio sobre el dólmen de aquel druida fanático, y tambien se levantó éste, no por mí, sino por mi padre. Me atreví á mirarle miéntras contestaba al saludo reverentísimo que le habíamos hecho. Me espantó aquella mueca que en él se llamaba sonrisa. Era de mediana estatura, tenía la frente angosta, bastante pelo, ojos pequeñitos, boca grande, labios apretados, pómulos salientes, largas orejas, color pálido, rugoso el cútis y muy afeitada la barba. Todo esto ocupaba poquísimo terreno, porque la cabeza era pequeña.
    • 1880-1881 Menéndez Pelayo, M. HHeterodoxos [1946-1948] I, 114 Esp (CDH )

      El celticismno dejó huellas en toda esta zona septentrional. Quedan como reliquias de la lengua o de las lenguasalgunos nombres de localidades, especialmente en nuestra montaña de Santander; quedan en varias partes, como memorias del culto externo, dólmenesy semidólmenes, trilitosy menhires, túmuloso mámoas, no en gran número, pero bastantes a testificar el hecho [...].

    • 1880-1881 Menéndez Pelayo, M. HHeterodoxos [1946-1948] Esp (CDH )
      Pero el culto que llaman druídico arraigó profundamente en Galicia, y de él son monumentos los altares naturales, dólmenes, túmulos (en gallego mámoas o medorras), menhires y piedras vacilantes. Estas últimas servían para la adivinación, en la cual fueron insignes los gallegos y sus vecinos los lusitanos, a lo que se deduce del texto de Strabón, que citaré luego.
    • 1880-1881 Menéndez Pelayo, M. HHeterodoxos [1946-1948] VIII, 15 Esp (CDH )
      Conocía Assas, por inspección propia, los monumentos llamados entonces célticos, de las Islas británicas y de la Bretaña francesa, y con ellos comparó los que hasta entonces se habían descubierto en España, fijando con precisión sus caracteres, y haciendo de ellos una clasificación que abarca los menhires, las piedras horadadas, las que llama "piedras con pila", las piedras vacilantes, trémulas u oscilatorias, los dólmenes que subdividió en cuatro especies, los alineamientos, los cromlechs o recintos sagrados, y los túmulos.
    • 1852-1882 Alarcón, P. A. Relatos [1994] Esp (CDH )
      En lo más bravo y erizado de aquella costa levántase un dolmen colosal, resto de los altares malditos en que los escandinavos daban a Odín sangriento culto.
    • 1852-1882 Alarcón, P. A. Relatos [1994] Esp (CDH )
      A su fulgor vióse a dos hombres, sentados el uno sobre el tronco de un pino roto por los hielos, y apoyado el otro en el antiguo dolmen.
    • 1884 Madrazo, P. Sevilla p. 47, nota 1 Esp (BD)
      Basta echar una ojeada sobre los monumentos clasificados con los nombres de men-hires, dólmenes, trilitos, piedras oscilantes, cromlechs, túmulos, etc., que tanto abundan en Europa y en muchas regiones del Asia Menor, y que tanto se distinguen por su rústica simplicidad, para reconocer desde luégo el punto de partida del arte de la construcción vertical de las enormes moles que emplea, de lo cual son célebre muestra las piedras alineadas de CARNAC [...].
    • 1884 RAE DRAE 12.ª ed (NTLLE)
      Dolmen. [...] m. Recinto cubierto formado en su techo y paredes con grandes lajas ó piedras colosales á medio desbastar; obra de antiguos pueblos, destinada ordinariamente á honrar y guardar humanos despojos. || Laja tosca y muy grande, artificialmente colocada y tendida sobre dos ó tres piedras verticales, formando mesa ó altar, y que se cree haberse erigido con este objeto.
    • 1889 Martí, J. Edad Oro [1995] 65 Cuba (CDH )
      Otros ponían de punta en medio de un bosque tres piedras grandes, y una chata encima, como techo, con una cerca de piedras, pero estos dólmenes no eran para vivir, sino para enterrar sus muertos, o para ir a oír a los viejos y los sabios cuando cambiaba la estación, o había guerra, o tenían que elegir rey: y para recordar cada cosa de éstas clavaban en el suelo una piedra grande, como una columna, que llamaban «menhir» en Europa, y que los indios mayas llamaban «katún»; porque los mayas de Yucatán no sabían que del otro lado del mar viviera el pueblo galo, en donde está Francia ahora, pero hacían lo mismo que los galos, y que los germanos, que vivían donde está ahora Alemania.
    • 1895 Zerolo, E. DiccEnciclLengCastellana (NTLLE)
      DOLMEN. [...] m. Recinto cubierto formado en su techo y paredes con grandes lajas ó piedras colosales á medio desbastar; obra de antiguos pueblos, destinada ordinariamente á honrar y guardar humanos despojos. [...] Laja tosca y muy grande, artificialmente colocada y tendida sobre dos ó tres piedras verticales, formando mesa ó altar. Se supone que tales piedras hicieron en otro tiempo este oficio.
    • 1899 RAE DRAE 13.ª ed (NTLLE)
      Dolmen. [...] m. Monumento megalítico en forma de mesa, compuesto de una ó más lajas colocadas de plano sobre dos ó más piedras verticales.
    • 1904-1905 Benejam, J. Escuela práctica [2003] Esp (CDH )

      En muchas localidades se encuentran curiosidades naturales y a veces monumentos o construcciones que acusan épocas remotísimas.

      Atalayas, grutas, dólmenes, piras, altares, etc.

      Si se sabe algo de los primitivos pobladores del país, es menester que los niños observen los objetos que recuerdan aquellas edades.

    • 1917 Miró, G. Figuras pasión II [1917] Esp (CDH )
      Montes rotos de Moab, paisaje de dólmenes, desierto de Judá... Mar de Asfaltite, sepulcro viscoso de ciudades maldecidas por el Señor. Una banda espumosa como una ola inmóvil, eterna, cruza las aguas rudas de sal. Los caminos tallados en piedra se recortan claramente hasta las últimas lejanías.
    • 1918 Blasco Ibáñez, V. Mare nostrum [1998] Esp (CDH )
      Como únicos rastros de su existencia quedaban los nuraghs de Cerdeña y los talayots de las Baleares, mesas gigantescas formadas con bloques, altares bárbaros de pedruscos enormes, que recordaban los menhires y los dólmenes celtas de las costas bretonas. Estos pueblos obscuros habían pasado de isla en isla, desde el fondo del Mediterráneo hasta el estrecho, que es su puerta.
    • 1932 Domenchina, J. J. Dédalo [1995] 277 Esp (CDH )
      [...] decidles que abreven sus ojos en los arbustos / laurifoliados, / porque el cielo comienza a encelajarse / y los mancebos dejan al pie de las murallas sus / evacuaciones alvinas / al soplo de un vasto terror druídico / que viene de los dólmenes / (pestilente quejumbre / del eléboro fétido y la cañaheja hedionda. /
    • 1946 Caro Baroja, J. Pueblos España [1981] Esp (CDH )
      Aunque en Andalucía hay cistas sencillas de época muy antigua, en otras regiones la construcción de sepulcros análogos, de pequeños dólmenes, se sigue llevando a cabo muy tardíamente y por pueblos de origen diverso.
    • 1944-1949 Baroja, P. Última vuelta [1978] Esp (CDH )
      Es evidente que en tiempos del supuesto don Teodosio, principios del siglo VIII, no había apellidos ni gentes cristianizadas en los campos de Vasconia, y también es evidente que el monte Aralar es un antiguo monte sagrado de época prehistórica, en el que hay varios dólmenes. Quién sabe de dónde procederá la leyenda de don Teodosio. Probablemente no es muy antigua. Esta leyenda es conocida en el país por una novela de Navarro Villoslada, titulada Amaya a los vascos en el siglo VIII , novela imitada de Walter Scott, que no tiene, ni mucho menos, la gracia ni el arte de las del maestro escocés.
    • c1928-a1952 Fernández, M. Museo Eterna [1993] Argentina (CDH )

      La contemplación de la naturaleza, la de la vida animal salvaje en su espontaneidad, y la de las moradas y obras de la humanidad más antigua con su sugestión del tiempo; las moradas del vivir humano, no tanto las pirámides y dólmenes; las pirámides quieren vivir para el futuro mientras las casas quieren vivir para el presente, vivir para morirse, para la actualidad de cada instante; he ahí los tres excitantes y sugestiones mentales sin lo cual nada, absolutamente nada puede entreverse del misterio.

    • 1953 Carpentier, A. Pasos [1985] 199 Cuba (CDH )
      De trecho en trecho había amontonamientos basálticos, monolitos casi rectangulares, derribados entre matojos escasos y esparcidos, que parecían las ruinas de templos muy arcaicos, de menhires y dólmenes — restos de una necrópolis perdida, donde todo era silencio e inmovilidad.
    • 1961 Caro Baroja, J. Brujas [1966] Esp (CDH )
      Los dólmenes, como el de Arrizala (Alava), fuentes como una de Narbaja también en Alava, peñas como la de Osquia, en el valle de Iza (Navarra), y otros accidentes o puntos señalados se consideran también lugares de cita. Al pasar por ellos se tomaban y toman precauciones. Así, por ejemplo, al pasar junto a la Peña de Osquia o Arkaitz se cogían guijarros y con ellos se trazaba una cruz sobre la misma para conjurarlas. *
    • 1961 Caro Baroja, J. Brujas [1966] Esp (CDH )
      Pero mucho más significativa que esta conexión con viejos lugares de culto pagano, como cuevas, fuentes y dólmenes es el que en parte de Vizcaya y Guipúzcoa se crea y repita que las brujas tienen su directora o presidenta en Mari, una especie de numen de las montañas, que se cree vive en los riscos más altos de sierras como la de Amboto, Aizkorri, Muru, etc., y a la que se le llama la «Dama» y la «Señora».
    • 1965 Chueca Goitia, F. HArquitectura española [1965] Esp (CDH )
      Cuando el dolmen evoluciona, comienza por aparecer, tímidamente, un corredor que conduce a la entrada de la cámara y que se forma por unas paredes verticales de piedras hincadas en el suelo. Este corredor va poco a poco aumentando de importancia, hasta que la cámara llega a ser un simple apéndice suyo y de su misma anchura, dando lugar al tipo llamado de galería cubierta. Por último, en el estadio final, los dólmenes suelen tener una cámara circular, cubierta con falsa cúpula, que comunica con otra u otras más pequeñas.
    • 1972 Torrente Ballester, G. Saga/Fuga [1995] 160 Esp (CDH )
      [...] la posterior de cierta tribu ártabra disidente y fugitiva, y la primera destrucción de Castroforte por Celso Emilio el Romano: tres acontecimientos que un ara marmórea, el dolmen que la cobija y las huellas de un incendio formidable pueden probar a quien esté dispuesto a admitirlos como prueba.
    • 1972 Torrente Ballester, G. Saga/Fuga [1995] 228 Esp (CDH )
      Si no huyeron al apoderarse de la ciudad (o lo que fuese entonces) los ártabros, fue porque éstos, no sólo no destruyeron el santuario, sino que lo protegieron con un dolmen, hoy enterrado y sirviendo de cimentación a la Basílica del Santo Cuerpo.
    • 1975 Mendoza, E. Caso Savolta [1994] Esp (CDH )
      ¿Qué hacía aquel ser de rudeza esteparia y garbo de dolmen, chato, cejijunto, dentón y bigotudo en un salón donde todos y cada uno de los objetos rivalizaban entre sí en finura y delicadeza? ¿Y quién le habría puesto aquella cofia almidonada, aquellos guantes blancos, aquel delantal ribeteado de puntillas encañonadas?, se preguntaba la señora. Y la pobre Matilde, como si siguiera el curso de los pensamientos de su ama, bajaba los ojos y entrelazaba los dedos huesudos, esperando una reprimenda, elaborando una precipitada disculpa. Pero la señora estaba de buen humor y rompió a reír con una carcajada ligera como un trino.
    • 1982 Morales Marín, J. L. Dicc Términos artísticos [1982] Esp (FG)
      dolmen [...] m. s. XIX y XX. Monumento, generalmente funerario, de época neolítica y de la edad del bronce. Su forma responde a la de la mesa construida con tres o más piedras de gran tamaño.
    • 1984 Leyva, D. Piñata [1984] 132 México (CDH )
      [...] en el cuadro de un cuarteto cuaternario que da cuartelazo cada cuarto de hora y es ahora que tres treces triangulares trepan trepanando treponemas trepidantes que se trasplantan y se trasponen cual trapecio sobre dos doses dosificados con dulces dosis donadas por dedos draconianos con gran dolo y dolor de los dragones dromedarios dormidos bajo un dolmen al lado de un dominico que sodomisa doradas doncellas. /
    • 1986 Cohen, M. Insomnio [1986] 66 Argentina (CDH )
      A doscientos metros se abría una plazoleta circular de grava desnuda, con una especie de dolmen en el centro y un laberinto de callejones ciñéndole la retaguardia. En esas calles, apretadas como muelas, se multiplicaban unas construcciones prolijas, de dos pisos, ventanitas con cortinas americanas y paredes de estuco.
    • 1989 Bassegoda Nonell, J. Atlas HArte [1989] Esp (CDH )
      La arquitectura mortuoria se ha perpetuado en los dólmenes (fig. 2) o simples estructuras porticadas, construidas con losas verticales que sostienen un techo formado por otra piedra horizontal. Las más de las veces estas estructuras se hallaban cubiertas de tierra, a modo de túmulos, que en época posterior se complicaron, formando cuevas compuestas de un largo pasillo porticado y de una sala funeraria circular, cubierta con formas abovedadas conseguidas con el sucesivo vuelo de las hiladas de piedra. Desde España hasta Rusia se hallan grandes dólmenes, mientras que en Portugal, así como en el sur de España, concretamente en Antequera, se encuentran los ejemplares más notables de cuevas.
    • 1990 Lpz Azcona, J. M. Minería hispana HGeología Esp (CDH )
      Aparecen los célebres monumentos megalíticos funerarios denominados dólmenes, integrados por grandes bloques de piedra, colocados en posición vertical, con una o varias losas por cubierta, perfectamente talladas, resultado de un dominio del arte de cortar las piedras.
    • 1996 Prensa ABC Cultural, 26/07/1996 [1996] Esp (CDH )
      Con su equipo a cuestas, haciendo camino durante horas, el fotógrafo, como un arqueólogo casi, se adentra en latitudes insólitas, recorre parajes desiertos en busca de monumentos ocultos, de formas latentes —zoomórficas, antropomórficas—, tras las huellas de dólmenes y rocas en pos de lo imperecedero, de lo arcano, de lo imprevisible. "Supongamos —escribe Lee Fontanella— que es lícito concebir el fenómeno dolmen como un poema, y la fotografía como el instrumento mediante el cuál el poema-dolmen se revela ante nosotros". No podría expresarse de manera más lúcida la génesis de estas imágenes.
    • 1997 Calvo Serraller, F. HArte [1997] Esp (CDH )

      Por otra parte, los ritos funerarios, que ya eran habituales en el Paleolítico, presagian en cierto modo la que será la nueva gran creación arquitectónica: el dolmen, cámara sepulcral cubierta con un túmulo, cuyo uso se extenderá durante el Calcolítico y la Edad del Bronce.

    • 1997 Calvo Serraller, F. HArte [1997] Esp (CDH )
      – El dolmen es una estructura constituida por piedras verticales plantadas en el suelo que sostienen una losa horizontal. Tiene carácter funerario y adopta diferentes grados de complicación.
    • 2001 Crespo Santiago, M. J. Arqueología paisaje depresión Ronda Odiseo Revista de Historia Esp (CORPES)
      Este periodo se caracteriza en la Depresión por la disminución de yacimientos y la aparición de enterramientos colectivos en dólmenes. Se produce un cambio en la forma de organizar el territorio con respecto a los grupos neolíticos. Ahora los grupos se van a dividir el territorio, para ello lo van a articular entorno a los dólmenes (Márquez 2000).
    • 2006 Kozak Rovero, G. Latidos Caracas [2006] Ve (CORPES)
      Amor de ojo y de oído... quién los manda a hablar tonterías por el teléfono. Matilde y Alba lo sacan de sus meditaciones y le preguntan acerca de un video en el que aparecen desde dólmenes y menhires de la prehistoria, pasando por ídolos aztecas, hasta imágenes de la Segunda Guerra y templos hindúes que se desvanecen y funden para convertirse en ciudades contemporáneas y extrañísimas.
    • 2007 Gutiérrez, P. J. Corazón mestizo Cu (CORPES)
      Cerca de aquí, encontraron en el lecho de un río unas piedras con inscripciones rúnicas, que fueron descifradas. Y en Rodas, también cerca de Cienfuegos, se encontró una pulsera con inscripción legible ya descifrada y un dolmen cerca de una caverna, también con inscripciones.
    • 2007 Naumis Peña, C. Tesauros documentales Mx (CORPES)
      Los videos, las películas, el sonido, los textos y los gráficos son sustancias digitales expresadas en datos. Pues bien, esta característica de la información digital nos remonta a muchos menhires y dólmenes de la Edad de Piedra utilizados por los druidas de la cultura celta para registrar sus fórmulas y encantamientos (se dice que se utilizaron las piedras provenientes de la Edad de Piedra, pero la tendencia más aceptada es que las inscripciones son de la Era Cristiana) para hacer las anotaciones en el alfabeto conocido como Ogham [...].
    • 2013 Llop, J. C. Solsticio Esp (CORPES)
      Y frente al mar permanecían, desperdigados por el árido paisaje, sus pequeñas y fortificadas ciudadelas, cementerios y monumentos megalíticos: navetas, talaiots y dólmenes. Aquellas grandes lajas de piedra se dispersaban junto al telémetro de la Batería —como un fósil sobre una chimenea art-déco—, bajo frondosos acebuches que ahora sustituían su techumbre pétrea, o rodeadas de enormes matas de lentisco que eran, a su vez, refugio para el ganado.
    • 2014 RAE DLE (NTLLE)
      dolmen. [...] m. Monumento megalítico compuesto de una o más lajas colocadas de plano sobre dos o más piedras verticales.
    • 2021 Silva Romero, R. Zoológico Co (CORPES)
      A veces no podía vivir. Se iba a ver los dólmenes para recordar su pequeñez, su brevedad. Se iba al mercado del puerto a comprar tomates, mariscos, pastelitos, vinos, para despejarse la mente enfrascada en la escritura de algún libro.

Diccionario histórico de la lengua española
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