7.ª Entrega (agosto de 2019)
Versión del 31/08/2019
Equipo Real Academia Española
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pianomanía s. (1848-)
pianomanía, piano manía, piano-manía
Etim. Compuesto de piano1 y el tema -manía.

Se documenta por primera vez, con la acepción de 'afición desmedida por el piano', en 1848, en una crónica (en cuyo título ya se incluye la palabra piano-manía), publicada en El Clamor Público (Madrid); en los testimonios recientes se hace mención, con frecuencia, a la pasión por el piano que se vivió en el siglo XIX, especialmente entre las mujeres.

  1. piano+-manía
    s. f. Afición desmedida por el piano.
    docs. (1848-2010) 13 ejemplos:
    • 1848 Anónimo "Crónica capital. Piano-manía" [27-07-1848] El Clamor Público (Madrid) Esp (HD)
      Ha llegado a nuestras manos una copia de la exposición que varios hombres de letras y algunos vecinos de la calle de Atocha han dirigido al Excmo. Sr. gefe político, y la trasladamos a continuación, por creerla sumamente curiosa y de completa novedad en los fastos de este vecindario: Dice así: "Los que suscriben, Excmo. Sr., hombres de letras y vecinos de la casa número... de la calle de Atocha, a V. E. con el debido respeto exponen, que hace más de cinco años que son víctimas espiatorias de los furores musicales de unas vecinitas suyas, cuyo desordenado apetito de rascar el fuerte piano, se ha convertido de algún tiempo a estar parte en una verdadera piano-manía. Por más que sea cierto, Excmo. señor, que la música las fieras domestica, preciso es que en esta ocasión comprenda V. E. que ni las señoritas tecleadoras tienen la habilidad del Orfeo, ni los esponentes somos otros tantos leones, tigres y leopardos que, dóciles a la infernal algarabía de estas crueles verdugos de sus pacíficos convecinos, vayamos a deponer nuestra ferocidad de la manera que es fama lo hacían aquellos terribles habitantes de las selvas.
    • 2010 Sanz, L. "Silenciosa conquista espacio público" p. 91 Historia y pensamiento en torno al género Esp (BD)
      En cualquier caso, y a pesar de su carácter aparentemente privado, la actividad musical de las mujeres vivió durante el siglo XIX una progresiva apertura al exterior. Las vertientes más visibles de dicha proyección permanecieron al margen de las instituciones, y se desarrollaron en el ámbito privado: en los salones musicales, como mecenazgo de otros músicos o a través de la enseñanza. La "pianomanía" del XIX permitió la extensión de cierta educación musical entre las mujeres de la burguesía europea y americana, pero también en las de extracción más humilde -las clases trabajadoras especializadas, que podríamos considerar como "clase media".
    • 1848 Anónimo "Crónica capital. Piano-manía" [27-07-1848] El Clamor Público (Madrid) Esp (HD)
      Ha llegado a nuestras manos una copia de la exposición que varios hombres de letras y algunos vecinos de la calle de Atocha han dirigido al Excmo. Sr. gefe político, y la trasladamos a continuación, por creerla sumamente curiosa y de completa novedad en los fastos de este vecindario: Dice así: "Los que suscriben, Excmo. Sr., hombres de letras y vecinos de la casa número... de la calle de Atocha, a V. E. con el debido respeto exponen, que hace más de cinco años que son víctimas espiatorias de los furores musicales de unas vecinitas suyas, cuyo desordenado apetito de rascar el fuerte piano, se ha convertido de algún tiempo a estar parte en una verdadera piano-manía. Por más que sea cierto, Excmo. señor, que la música las fieras domestica, preciso es que en esta ocasión comprenda V. E. que ni las señoritas tecleadoras tienen la habilidad del Orfeo, ni los esponentes somos otros tantos leones, tigres y leopardos que, dóciles a la infernal algarabía de estas crueles verdugos de sus pacíficos convecinos, vayamos a deponer nuestra ferocidad de la manera que es fama lo hacían aquellos terribles habitantes de las selvas.
    • 1858 Anónimo "Variedades. Piano" [20-06-1858] El Instructor y Recreo de las Damas (Santa Cruz de Tenerife) Esp (HD)
      ―¡Pobre amigo mío. Y por qué no me has dicho que no te gustaba el piano! ¡Cuánto habrás padecido en todo el mes que acabamos de pasar juntos! Pero no tengas cuidado, lo que es este no cambiará nunca de destino. De todos modos has tenido una idea peregrina. Y ambos se echaron á reir formando el duo más armonioso que ha producido nunca una loca alegría. Una mujer abandona su piano por complacer a su esposo, es un caso raro de amor conyugal que ciertamente merece ser citado en los tiempos de piano manía en que vivimos.
    • 1866 Lezama, E. "El violín y el piano" [23-12-1866] El Arte (Madrid) Esp (HD)
      Pero el piano es una plaga común á todos los países civilizados. Si no se ataja con tiempo este mal, dentro de poco va a ser irremediable. Y cuidado que bien merecen llamar la atención del legislador los males que causa este diablo de instrumento, que va tomando la proporciones de una calamidad social. El que no tenga vocación de padre del yermo, difícilmente logrará verse libre del martirio filarmónico á que la piano-manía nos tiene condenados.
    • 1888 Anónimo "Contra la pianomanía" [27-01-1888] La Palma (Cádiz) Esp (HD)
      Me sublevo contra la invasión progresiva de nuestras habitaciones por la pianomanía desde el entresuelo al quinto piso; siete veces he cambiado de residencia y siempre por el mismo motivo, por el piano, por ese vecino insoportable.
    • 1891 Anónimo "Clubs extravagantes" [21-08-1891] El Bien Público (Mahón) Esp (HD)
      El otro club reciente es el que podríamos llamar de los hombres "pianófobos". Sus miembros, poseidos de un santo horror por los progresos alarmantes del piano, se han comprometido formalmente: 1.º á no casarse con ninguna miss que cultivara tan nocivo instrumento: 2.º á no bailar ni "firtar" con ninguna que estuviese en el mismo caso; 3.º á reusar toda invitación á conciertos públicos ó caseros en que tomara parte ningún pianista; 4.º á romper toda relacion amistosa con profesores de piano y aficionados al mismo; 5.º á no prestar ningún auxilio personal en caso de incendio de una fábrica de susodichos artefactos; 6.º á hacer todos los esfuerzos que quepan dentro de la legalidad para desterrar la pianomanía, ejerciendo en tal sentido una propaganda tan activa como benéfica.
    • 1915 Gelabert, A. "Pro enseñanza musical (1)" [10-07-1915] Sóller. Semanario Independiente (Mallorca) Esp (HD)
      Mi propósito no es puntualizar, sino señalas en general los defectos que se notan en la enseñanza musical, debido al ambiente que nos rodea. Que la mayor parte de veces la música se toma como artículo de lujo, á título de inventario, esto es innegable. Dígalo la pianomanía que hace algunos años se infiltró en el bello sexo: ha dado ya sus desastrosos frutos: el couplet, lo chavacano, lo desabrido, ha llegado á todos los atriles del piano. Díganlo las casas editoriales.
    • 2003 Castro, D. Trad El piano Siepmann p. 140 Esp (BD)
      Es importante recordar que, a principios del siglo XX, la pianomanía, que había invadido a toda la población, empezaba a declinar. En las viviendas privadas había más pianos que bañeras. De hecho ningún establecimiento que vendiera bebidas podía permitirse carecer de uno de estos instrumentos. La alianza entre los pianos y la venta de alcohol tenía una larga tradición firmemente establecida.
    • 2010 Álvz Romero, M.ª A. "Educación musical mujeres" [30-10-2010] Andalucía Educa (Sevilla) Esp (HD)
      La instalación de las clases trabajadoras especializadas en este amplio marco de las llamadas clases medias contribuirá a extender entre el elemento femenino la práctica musical, aunque continúe siendo censurada en algunos manuales de ‘higiene moral’ y ‘educación femenina’, o en gacetas de opinión de los diarios. Aparece la ‘pianomanía’, que para Rengade consistía en que, a pesar de todas las dificultades inherentes en el medio social y en el tiempo en que vivimos, apenas hay mujer algo desocupada, desde la hija del portero hasta la más rica y noble heredera, que desde su infancia no se dedique a producir bajo sus dedos ese ruido llamado música que tan a menudo emite el piano.
    • 2010 Sanz, L. "Silenciosa conquista espacio público" p. 91 Historia y pensamiento en torno al género Esp (BD)
      En cualquier caso, y a pesar de su carácter aparentemente privado, la actividad musical de las mujeres vivió durante el siglo XIX una progresiva apertura al exterior. Las vertientes más visibles de dicha proyección permanecieron al margen de las instituciones, y se desarrollaron en el ámbito privado: en los salones musicales, como mecenazgo de otros músicos o a través de la enseñanza. La "pianomanía" del XIX permitió la extensión de cierta educación musical entre las mujeres de la burguesía europea y americana, pero también en las de extracción más humilde -las clases trabajadoras especializadas, que podríamos considerar como "clase media".
    • 1848 Anónimo "Crónica capital. Piano-manía" [27-07-1848] El Clamor Público (Madrid) Esp (HD)
      Ha llegado a nuestras manos una copia de la exposición que varios hombres de letras y algunos vecinos de la calle de Atocha han dirigido al Excmo. Sr. gefe político, y la trasladamos a continuación, por creerla sumamente curiosa y de completa novedad en los fastos de este vecindario: Dice así: "Los que suscriben, Excmo. Sr., hombres de letras y vecinos de la casa número... de la calle de Atocha, a V. E. con el debido respeto exponen, que hace más de cinco años que son víctimas espiatorias de los furores musicales de unas vecinitas suyas, cuyo desordenado apetito de rascar el fuerte piano, se ha convertido de algún tiempo a estar parte en una verdadera piano-manía. Por más que sea cierto, Excmo. señor, que la música las fieras domestica, preciso es que en esta ocasión comprenda V. E. que ni las señoritas tecleadoras tienen la habilidad del Orfeo, ni los esponentes somos otros tantos leones, tigres y leopardos que, dóciles a la infernal algarabía de estas crueles verdugos de sus pacíficos convecinos, vayamos a deponer nuestra ferocidad de la manera que es fama lo hacían aquellos terribles habitantes de las selvas.
    • 1858 Anónimo "Variedades. Piano" [20-06-1858] El Instructor y Recreo de las Damas (Santa Cruz de Tenerife) Esp (HD)
      ―¡Pobre amigo mío. Y por qué no me has dicho que no te gustaba el piano! ¡Cuánto habrás padecido en todo el mes que acabamos de pasar juntos! Pero no tengas cuidado, lo que es este no cambiará nunca de destino. De todos modos has tenido una idea peregrina. Y ambos se echaron á reir formando el duo más armonioso que ha producido nunca una loca alegría. Una mujer abandona su piano por complacer a su esposo, es un caso raro de amor conyugal que ciertamente merece ser citado en los tiempos de piano manía en que vivimos.
    • 1866 Lezama, E. "El violín y el piano" [23-12-1866] El Arte (Madrid) Esp (HD)
      Pero el piano es una plaga común á todos los países civilizados. Si no se ataja con tiempo este mal, dentro de poco va a ser irremediable. Y cuidado que bien merecen llamar la atención del legislador los males que causa este diablo de instrumento, que va tomando la proporciones de una calamidad social. El que no tenga vocación de padre del yermo, difícilmente logrará verse libre del martirio filarmónico á que la piano-manía nos tiene condenados.
    • 1883 Vázquez, M. "Carta III. Maguncia 3 de noviembre de 1883" p. 52 Cartas a un amigo sobre la música en Alemania Esp (BD)
      Es verdad que hay plaga de pianistas y de pianos, y quien dice plaga lo ha dicho todo, por cuya razón los Conservatorios debían poner coto á la pianomanía que se desarrolla continuamente, pues para cada discípulo ó discípula que presente felices disposiciones, hay cincuenta que insultan y desdoran el noble instrumento, y que por más que se afanen ni consiguen tocar á compás, ni con sentido, ni en regla [...].
    • 1886 Baños, G. M. Gramática musical razonada IX Esp (BD)
      ¿Y cuáles serían los resultados de un Solfeo más lógico que el actual, más breve, más sencillo y purgado, en fin, de tantas rutinas inexplicables y tantas antiguallas inútiles? [...] la multitud de los que no desisten, pero, sin embargo, no logran dominar debidamente ni aun la parte elemental, recogerían frutos más abundantes y mejor sazonados en los estudios sucesivos. Considérense á este propósito los estériles resultados que viene produciendo la piano-manía del bello sexo. Verdad es que en la mayor parte de estos casos se toma á beneficio de inventario el estudio de la música considerándolo como un artículo de lujo; y que con tal vocación artística, nunca se habrían grandes cosas aun suponiendo que en música pudiera hacerse algo sin el solfeo previo; pero es indudable que si este estudio fuese distinto de lo que es hoy, diversos serían también los resultados aun en esas condiciones anómalas en que se emprende por esa inmensa mayoría.
    • 1888 Anónimo "Contra la pianomanía" [27-01-1888] La Palma (Cádiz) Esp (HD)
      Me sublevo contra la invasión progresiva de nuestras habitaciones por la pianomanía desde el entresuelo al quinto piso; siete veces he cambiado de residencia y siempre por el mismo motivo, por el piano, por ese vecino insoportable.
    • 1888 Anónimo "Contra la pianomanía" [27-01-1888] La Palma (Cádiz) Esp (HD)
      El croniqueur francés pido un luis siquiera de contribución por cada piano, y verdaderamente no es mucho para extinguir la molesta pianomanía que ha invadido casi Europa.
    • 1888 Anónimo "Ecos telefónicos" [23-02-1888] La Defensa Católica (Ciudad de México) Mx (HD)
      Un bienhechor de la humanidad, como con razón le llama una ilustrada revista francesa, acaba de hacer una invención que no dudo calificarán conmigo de caritativa cuantos se ven perseguidos por la mala sombra de las escalas, arpegios, estudios y un sin fin de despropósitos filarmónicos, con que los tocadores de pianos destrozan sin compasión los tímpanos de sus vecinos [...]. Pues bien: el bueno -que tal dictado merece- de M. Schanzenbach, ha tenido la bienhadada ocurrencia de adaptar al abominable instrumento, una sordina especial que amortigua y gradúa la intensidad de las vibraciones merced á una serie de tiras de bayeta superpuestas escalonadamente y fijas á un travesaño que sube y baja mediante un pedal. Con esto se consigue que el pianero y el pianista disfruten sin atolondrar á los vecinos, que ninguna culpa tienen de la pianomanía que ha contagiado á no pocos.
    • 1891 Anónimo "Clubs extravagantes" [21-08-1891] El Bien Público (Mahón) Esp (HD)
      El otro club reciente es el que podríamos llamar de los hombres "pianófobos". Sus miembros, poseidos de un santo horror por los progresos alarmantes del piano, se han comprometido formalmente: 1.º á no casarse con ninguna miss que cultivara tan nocivo instrumento: 2.º á no bailar ni "firtar" con ninguna que estuviese en el mismo caso; 3.º á reusar toda invitación á conciertos públicos ó caseros en que tomara parte ningún pianista; 4.º á romper toda relacion amistosa con profesores de piano y aficionados al mismo; 5.º á no prestar ningún auxilio personal en caso de incendio de una fábrica de susodichos artefactos; 6.º á hacer todos los esfuerzos que quepan dentro de la legalidad para desterrar la pianomanía, ejerciendo en tal sentido una propaganda tan activa como benéfica.
    • 1915 Gelabert, A. "Pro enseñanza musical (1)" [10-07-1915] Sóller. Semanario Independiente (Mallorca) Esp (HD)
      Mi propósito no es puntualizar, sino señalas en general los defectos que se notan en la enseñanza musical, debido al ambiente que nos rodea. Que la mayor parte de veces la música se toma como artículo de lujo, á título de inventario, esto es innegable. Dígalo la pianomanía que hace algunos años se infiltró en el bello sexo: ha dado ya sus desastrosos frutos: el couplet, lo chavacano, lo desabrido, ha llegado á todos los atriles del piano. Díganlo las casas editoriales.
    • 2003 Castro, D. Trad El piano Siepmann p. 140 Esp (BD)
      Es importante recordar que, a principios del siglo XX, la pianomanía, que había invadido a toda la población, empezaba a declinar. En las viviendas privadas había más pianos que bañeras. De hecho ningún establecimiento que vendiera bebidas podía permitirse carecer de uno de estos instrumentos. La alianza entre los pianos y la venta de alcohol tenía una larga tradición firmemente establecida.
    • 2010 Álvz Romero, M.ª A. "Educación musical mujeres" [30-10-2010] Andalucía Educa (Sevilla) Esp (HD)
      La instalación de las clases trabajadoras especializadas en este amplio marco de las llamadas clases medias contribuirá a extender entre el elemento femenino la práctica musical, aunque continúe siendo censurada en algunos manuales de ‘higiene moral’ y ‘educación femenina’, o en gacetas de opinión de los diarios. Aparece la ‘pianomanía’, que para Rengade consistía en que, a pesar de todas las dificultades inherentes en el medio social y en el tiempo en que vivimos, apenas hay mujer algo desocupada, desde la hija del portero hasta la más rica y noble heredera, que desde su infancia no se dedique a producir bajo sus dedos ese ruido llamado música que tan a menudo emite el piano.
    • 2010 Sanz, L. "Silenciosa conquista espacio público" p. 91 Historia y pensamiento en torno al género Esp (BD)
      En cualquier caso, y a pesar de su carácter aparentemente privado, la actividad musical de las mujeres vivió durante el siglo XIX una progresiva apertura al exterior. Las vertientes más visibles de dicha proyección permanecieron al margen de las instituciones, y se desarrollaron en el ámbito privado: en los salones musicales, como mecenazgo de otros músicos o a través de la enseñanza. La "pianomanía" del XIX permitió la extensión de cierta educación musical entre las mujeres de la burguesía europea y americana, pero también en las de extracción más humilde -las clases trabajadoras especializadas, que podríamos considerar como "clase media".

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