agramaticalidad

Paradigma: agramaticalidad / gramaticalidad

Relacionados: corrección, norma

Familia léxica: agramatical, gramatical, gramaticalmente.

Referencias: NGLE § 1.2h

Irregularidad o inconsistencia de una expresión lingüística cuya estructura infringe alguna regla o algún principio gramatical, de acuerdo con el sentimiento lingüístico de los hablantes nativos de una determinada variedad. Estas construcciones se suelen marcar en los estudios de gramática con un asterisco (*). Así, la oración *Se ocurrió una idea brillante es agramatical porque ocurrirse es un verbo doblemente pronominal, que exige un complemento dativo, esté doblado o no (v. duplicación): Se le ocurrió una idea brillante (a tu hermano).

Las construcciones agramaticales se oponen a las gramaticales (v. gramaticalidad) y constituyen un recurso analítico que permite restringir las propiedades de las palabras y las construcciones. En efecto, el hecho de que estas expresiones no estén atestiguadas (al menos, en la interpretación relevante, aunque puedan estarlo en otras) pone de manifiesto la existencia de un sistema gramatical sujeto a determinadas constricciones, que deben ser descubiertas y analizadas. Así, es agramatical la oración *Juan lo vio en la lectura en la que las expresiones subrayadas son correferentes (v. en correferencia), pero no lo es en la interpretación en la que no lo son. Por el contrario, la oración Juan hablaba siempre de él es gramatical en la interpretación correferencial y en la no correferencial.

Información complementaria

El estudio de las construcciones agramaticales posee gran interés analítico porque ayuda a precisar los factores esenciales para caracterizar un gran número de fenómenos morfológicos y sintácticos.

Es importante no confundir las secuencias agramaticales con las incorrectas (v. corrección). Las segundas están repetidamente atestiguadas, a diferencia de las primeras, pero se recomienda evitarlas porque se consideran desacreditadas, aun cuando su desprestigio puede estar sujeto a grados y a variables geográficas y sociales que a veces se modifican con el tiempo (la valoración social del laísmo, por ejemplo, no es la misma actualmente que en el Siglo de Oro).

La agramaticalidad está sujeta igualmente a variables históricas y geográficas. En efecto, una construcción puede ser gramatical en el español medieval y agramatical en el contemporáneo (compárese, por ejemplo, la expresión antigua Sé que lo non fizo con la actual Sé que no lo hizo). También puede ser gramatical en un área lingüística del español actual y agramatical en otra. Por ejemplo, la oración No sé si lo prefieras así es hoy gramatical en muchas zonas del español americano, pero agramatical para otros muchos hablantes (americanos y europeos). Por el contrario, la variante en indicativo —también posible en esas áreas— pertenece al español común.

De lo anterior se deduce que un hablante nativo no produce secuencias agramaticales, aun cuando pueden interferir en su producción verbal factores externos a la gramática (falta de atención, sueño, cansancio, alcohol, etc.) que den lugar a secuencias ajenas a las posibles previsiones de cualquier sistema lingüístico, como son los anacolutos.

Las expresiones gramaticales pueden ser contextualmente inadecuadas o inapropiadas (v. en gramaticalidad) cuando no corresponden a un determinado fragmento discursivo. En estos casos se recomienda evitar los términos agramatical y agramaticalidad.

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA Y ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPAÑOLA: «Glosario de términos gramaticales», [versión 1.0 en línea]. <https://www.rae.es/gtg/agramaticalidad> [2024-05-10].

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