oración (subordinada) adverbial final

Ejemplos: Estudia mucho para entrar en la carrera que ha elegido; Hizo la presentación en español con el fin de que la mayoría entendiera.

Sinónimos: oración final, subordinada final, construcción final.

Relacionados: conjunción final, conjunción subordinante, construcción consecutiva, oración (subordinada) adverbial causal, oración (subordinada) adverbial concesiva, oración (subordinada) adverbial ilativa, oración (subordinada) adverbial, oración de infinitivo, locución conjuntiva

Tabla: Ver tabla 20

Referencias: NGLE § 46.1-46.2, 46.4-46.10 | GDLE § 56.5-56.7 | OLE § III.3.4.2.2.4.3

Tradicionalmente, oración (subordinada) adverbial que aporta el significado de ‘propósito’ o ‘finalidad’ del evento o suceso denotado por la predicación de la oración principal.

En la actualidad, existe acuerdo casi general entre los gramáticos en que no existen las oraciones subordinadas adverbiales finales (v. oración subordinada adverbial, y también subordinación), que se reinterpretan como sintagmas preposicionales. Ello implica que la primera de estas dos segmentaciones se considera preferible a la segunda:

  1. «Preposición + subordinada sustantiva», como en [para] [que lo conozca]
  2. «Conjunción subordinante + oración», como en [para que][ella lo conozca]

Se espera desde el análisis a que la oración subordinada alterne con sintagmas nominales (para que lo conozca ~ para su conocimiento) y con pronombres (para ello, para eso). Además, la preposición para introduce oraciones de verbo en subjuntivo (Trabaja mucho para que sus hijos puedan estudiar), o en infinitivo (Te han llamado para invitarte a la fiesta), igual que sucede con las subordinadas sustantivas en función de complemento directo: Deseaba {venir ~ que viniera ~ su venida ~ eso}. En el análisis b, habitual en la tradición, para que sería una locución conjuntiva. Paradójicamente, no suele aparecer en los paradigmas de tales locuciones. Un inconveniente no menor de esta opción es el hecho de que fuerza a postular una supuesta locución para si en oraciones como para si alguna vez lo necesitas.

En resumen, si se analiza de la manera que se ha indicado, el segmento para que no es una locución conjuntiva final, sino una preposición seguida de una conjunción completiva. El mismo razonamiento se puede aplicar a otros segmentos de significado final como a fin de, con vistas a, con miras a, que constituyen locuciones prepositivas con una oración subordinada sustantiva como término. Esta oración subordinada expresa el objetivo o la finalidad de la acción denotada por el predicado principal, como en Ahorraba dinero para comprarse una casa o en Cerró la ventana con el fin de que no entrara frío. En el sintagma nominal introducido por la preposición (en el último ejemplo, el fin de que…) se reconoce a veces una relación apositiva, lo que se pone de manifiesto en las sustituciones: con el fin de que no entrara frío > con ese fin (no *con el fin de ello). Sucede lo mismo en el hecho de que vengas > ese hecho (no *el hecho de ello).

En ocasiones se emplea el término construcción final de manera laxa para hacer referencia al conjunto de sintagmas que tienen en común el hecho de que transmiten un significado final y cuentan con una oración subordinada (no adverbial, sino sustantiva) en su interior. Desde este punto de vista, son construcciones finales los sintagmas preposicionales subrayados en: Lo hizo para que viniera; Le llamó con el objetivo de pedirle un trabajo; Se publicó con la intención de que se difundiera. También son construcciones finales los sintagmas preposicionales encabezados por la preposición a, que casi siempre inciden sobre verbos de movimiento, como en Viene a que le den una solución o Entraré un momento a saludarla.

La mayor parte de los sintagmas de interpretación final son adjuntos; es decir, no están exigidos por el predicado de la oración principal: Estoy ahorrando para irme de vacaciones; Cenaba pronto para que le diera tiempo a hacer la digestión. No obstante, algunos de ellos constituyen argumentos. En tal caso, son complementos de régimen (preposicional). Pueden serlo:

  • de un verbo (La tubería sirve para transportar agua),
  • de un adjetivo (listos para salir),
  • de un sustantivo (remedios para curar el resfriado).

De manera similar a lo que sucede con las oraciones adverbiales causales, los sintagmas de interpretación final se dividen en dos grupos si se atiende a la forma en que inciden sobre otros predicados:

  1. Del enunciado. Expresan el propósito de la acción o el proceso denotados por el predicado de la oración principal (Trabaja para ayudar a su familia).
  2. De la enunciación. Modifican a un verbo tácito que exprese afirmación (decir, asegurar). Estas oraciones manifiestan la razón que justifica la afirmación misma (He saldado mis deudas, para que lo sepas, parafraseable como Lo digo para que lo sepas). En este segundo grupo son frecuentes fórmulas metalingüísticas o metadiscursivas como para terminar, para resumir, para ser exactos, para no extenderme.

Información complementaria

Mientras que las causas pueden serlo de situaciones o estados de cosas de muy diversa naturaleza, los propósitos son relativos a acciones intencionadas, ya que constituyen manifestaciones de la voluntad: Viaja para tener nuevas experiencias. Por ello, los complementos de finalidad suelen exigir predicados agentivos (v. agente) y no se combinan con predicados que denotan estados. Las excepciones que se reconocen pueden agruparse como sigue:

  1. Los complementos de régimen introducidos con para no modifican necesariamente a predicados de acción. No son, en efecto, verbos de acción servir (Este destornillador no sirve para nada) ni bastar (Bastaba una cerveza para alegrarla), entre otros.
  2. Un predicado de estado (estar en un lugar) puede interpretarse como resultado de una acción (venir, acudir). En tales casos, no se rechazan los complementos finales: Estoy aquí para ayudar; Seré (= ‘me haré’) marino para ver mundo.
  3. Ciertos predicados de estado, llamados a veces disposicionales, se reinterpretan semánticamente y pasan a denotar comportamientos. En cuanto tales, aceptan complementos finales: Es amable para congraciarse con su jefe; Está siendo muy dura con él para hacerlo recapacitar.
  4. Las oraciones finales pueden aparecer en ausencia de un verbo de acción cuando —en función de determinados factores pragmáticos— es posible reconocer un responsable o un causante indirecto de la situación o el estado de cosas que se describen, como en Los ventanales son así de grandes para que entre más luz; El sofá es verde para que haga juego con las cortinas.

Con la excepción de los casos a los que se alude en a y en c, las construcciones finales requieren un agente, aun cuando este pueda quedar implícito: Fue contratada (se entiende que por alguien) para renovar el departamento de recursos humanos.

La partícula para no expresa finalidad cuando forma parte de oraciones adverbiales concesivas: Para ser tan pequeña, se expresa maravillosamente. Aunque para alterna en estos casos con a pesar de (A pesar de ser tan pequeña, …), su comportamiento se asimila al de las conjunciones subordinantes, por lo que no acepta un pronombre como término (Para ser tan pequeña, … > *para ello).

Sobre la relación entre subordinadas condicionales y sustantivas (para si alguna vez lo necesitas), véase oración (subordinada) adverbial condicional.

Pueden tener también valor final las oraciones independientes encabezadas por la conjunción que precedida del verbo en imperativo (Asómate, que te vea bien). Aun así, es probable que en estos casos el valor final no provenga de la conjunción completiva que, sino del contexto oracional.

Tabla 20. MANERAS DE EXPRESAR LA NOCIÓN DE FINALIDAD

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA Y ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPAÑOLA: «Glosario de términos gramaticales», [versión 1.0 en línea]. <https://www.rae.es/gtg/oración-subordinada-adverbial-final> [2024-05-08].

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