8.ª Entrega (marzo de 2020)
Versión del 31 de marzo de 2020
Equipo Real Academia Española
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helépola s. (1753-)
helépola, elépola, helepola
Etim. Voz tomada del francés hélépole, atestiguada en esta lengua al menos desde 1555, en Les douze livres de Robert Valturin touchant la discipline militaire, translatez de langue latin en françoyse, de L. Meigret (Paris, C. Perier, p. 187: "Callimache architecteur fuytif de l'Helepole, l´apprint premier aux romains: duquel aussi veritablement les Chefz se sont aydé contre les ennemyz"); y esta, a su vez, del latín helepolis, is Cf. TLF, s. v.

Se documenta por primera vez, con la acepción 'máquina bélica de asedio consistente en una estructura de madera en forma de torre, generalmente con ruedas y, en ocasiones, con un ariete, que lleva ocultos en su interior una gran cantidad de soldados preparados para el asalto', en 1553, en la Traducción de El gran diccionario histórico, o Miscellánea curiosa de la Historia sagrada y profana [...] Traducido del francés de Luis Moreri, efectuada  por J. Miravel Casadevante y en 1787 se consigna en el Diccionario castellano con las voces de ciencias y artes de Terreros y Pando. Posteriormente figura en diferentes textos, fundamentalmente de ambientación histórica, hasta el primer cuarto del siglo XX; a partir de ese momento la voz parece caer en desuso.

  1. ac. etim.
    s. f. Máquina bélica de asedio consistente en una estructura de madera en forma de torre, generalmente con ruedas y, en ocasiones, con un ariete, que lleva ocultos en su interior una gran cantidad de soldados preparados para el asalto.
    docs. (1753-2011) 17 ejemplos:
    • 1753 Miravel Casadevante, J. Trad DHistórico Moreri, II Esp (BD)
      CALLIAS [...]. Architecto è ingeniero celebre, natural de Aradus, isla de Phenicia, por su nuevas inveciones se adquirió en Rhodas no poca reputación. Hizo una maquina, con la qual levantava una Helepola por cima de la muralla. Era la Helepola una especie de torre portatil, que servia para aceecarse á una ciudad sitiada para comabtir á los enemigos que defendian sus muros.
    • 2011 Marín Riveros, J. "Bizancio siglo VII" [01-01-2011] vol. 30, p. 48 Byzantion Nea Hellás (Santiago de Chile) Ch (HD)
      Lo que sí está claro es que la ofensiva ávara contaba con un numeroso ejército, que superaba proporcionalmente a las tropas griegas, además de una poderosa y avanzada tecnología militar con variedad de máquinas de asedio —entre las que se contaban helépolas o torres de asalto, catapultas y otros ingenios— que se movilizaron contra Constantinopla, impresionando vivamente a sus habitantes.
    • 1753 Miravel Casadevante, J. Trad DHistórico Moreri, II Esp (BD)
      CALLIAS [...]. Architecto è ingeniero celebre, natural de Aradus, isla de Phenicia, por su nuevas inveciones se adquirió en Rhodas no poca reputación. Hizo una maquina, con la qual levantava una Helepola por cima de la muralla. Era la Helepola una especie de torre portatil, que servia para aceecarse á una ciudad sitiada para comabtir á los enemigos que defendian sus muros.
    • 1787 Terreros Pando, E. DiccCastVocesCienciasArtes (NTLLE)
      HELÉPOLA [...] máquina militar para batir murallas, que consistía en tres arietes armados, cada cual con tres puntas agudas de hierro debajo de una especie de boveda cubierta de pieles de buei recientemente quitadas, y humedecidas. Esta máquina se movía con poléas, que la hacian ir impetuosamente contra el muro que batían; dicen que tenia 405 codos de ancha, y 90 de alta.
    • 1840 Anónimo (M. O y J. C.) Trad HTierra Santa, Martin, I p. 454 Esp (BD)
      Al otro día los Romanos pegaron fuego al pórtico del norte construido en lo alto del valle de Cedron y lo quemaron hasta el ángulo que miraba á oriente. En vano Tito hizo batir una de las galerías del atrio de los sacerdotes con una helépola. Vióse obligado á colocar los arietes en una esplanada porco antes hecha, pero no hubo medio de desmoronar la muralla sin embargo de que al mismo tiempo estaba zapándola por los cimientos [...].
    • 1845 Domínguez, R. J. DiccFrancés-Español, II Esp (BD)
      Helépole [...] Mil. ant. Elépola, máquina terrible en forma de torre que empleó Demetrio hijo de Antígone con un éxito favorable en los sitios y tomas de ciudades enemigas.
    • 1851 Conde de Clonard (Serafín María de Sotto) HArmas Infantería, I p. 22 Esp (BD)
      La antigua tormentaria ó balística puede dividirse en cuatro clases de ingenios. La primera comprende las máquinas de aproche que eran la Bastida de puentes y de torno, Mantelete ó Manderete, Fonda-fuste, Grua, Manta y Zarza: la segunda, las de accion horizontal, tales como la Balista, Catapulta, Escorpion y Gossa que arrojaban grandes dardos ó cuadriellos empeñalados é impregna dos y los Arietes ó Carneros, Buzones y Helépolas que herian el revestimiento del muro; la tercera, las de movimiento parabólico, como el Fundíbalo ó Fenevol, Mangaña ó Almagaña, Almojaneque, Trabuco, Garrote, Libra y Brícola; y la cuarta, las accesorias, como los Caños de arambre, Capsas de puente ó Semi-bastidas Galgas, Abrojos, Paneras, Terrazos de cal y jabon.
    • 1875 Latorre León, M. Trat elemental Fortificación III p. 438 Esp (BD)
      En los pisos inferiores de la helépola ó en tortugas de madera semejantes á las viñas, una gruesa viga guarnecida por un estremo con una gruesa masa de bronce y suspendida por el centro con cadenas ó cables, tomando un movimiento oscilatorio de atrás á adelante chocaba en el muro hasta derribarle ó abrir brecha; esta máquina se llamaba ariete, porque la bola de bronce semejaba la cabeza de un carrero y su acción era la de topar como este animal para amortiguar sus golpes, los sitiados interponían sacas de lana ó grandes haces de paja que suspendían con cuerdas desde las almenas. Otro de los medios de demolerlos muros y abrir brecha, era por las minas.
    • 1880 Morayta, M. Historia Grecia antigua II p. 190 Esp (BD)
      En él despliegan, él todos sus recursos militares, y los suyos, valor á toda prueba, acreditando la construcción de la famosa Helepola (tomadora de ciudades) sus vastos conocimientos y singular talento de ingenero. Más socorridos los rodios por Casandro, Lisimaco y Ptolomeo, aquellos esfuerzos resultan inútiles, y Rodas firma una paz honrosa, en cuya virtud conserva sus leyes y su independencia y continúa aliada de Antígono, á excepción cuando éste guerreara contra Ptolomeo.
    • 1901 Calleja, S. Explicación láminas p. 69 Esp (BD)
      Máquinas de aproximación: bastida de puentes y de torno, mantelete ó manderete, funda-fuste, grúa, manta y zafra. Máquinas de acción horizontal: balista, catapulta, escorpión y gosa, que arrojaban grandes dardos ó cuadrellos empeñalados ó impregnados, y los arietes ó carneros, buzones y helepólas, que golpeaban el muro. Máquinas de movimiento parabólico; fundibulo ó fenonel, mangaña ó almagaña, almojaneque, trabuco, garrote, libra y brícola. Máquinas accesorias: caños de azambre, capras de puentes ó semibastidas, galgas, abrojos, paneras, terrazos de sal y jabón.
    • 1917 Anónimo Catálogo Museo Artillería IV p. 138 Esp (BD)
      Modelos de arietes llamados helépolas, por la forma de las cabezas de hierro de que están revestidas sus vigas. Los caballetes de ellas están cubiertos por un techo, y uno de ellos, además, por uno de sus costados, para guarecerse de los fuegos y proyectiles de todas clases que los sitiados, en su defensa, arrojaban contra ellos.
    • 2011 Marín Riveros, J. "Bizancio siglo VII" [01-01-2011] vol. 30, p. 48 Byzantion Nea Hellás (Santiago de Chile) Ch (HD)
      Lo que sí está claro es que la ofensiva ávara contaba con un numeroso ejército, que superaba proporcionalmente a las tropas griegas, además de una poderosa y avanzada tecnología militar con variedad de máquinas de asedio —entre las que se contaban helépolas o torres de asalto, catapultas y otros ingenios— que se movilizaron contra Constantinopla, impresionando vivamente a sus habitantes.
    • 1753 Miravel Casadevante, J. Trad DHistórico Moreri, II Esp (BD)
      CALLIAS [...]. Architecto è ingeniero celebre, natural de Aradus, isla de Phenicia, por su nuevas inveciones se adquirió en Rhodas no poca reputación. Hizo una maquina, con la qual levantava una Helepola por cima de la muralla. Era la Helepola una especie de torre portatil, que servia para aceecarse á una ciudad sitiada para comabtir á los enemigos que defendian sus muros.
    • 1787 Terreros Pando, E. DiccCastVocesCienciasArtes (NTLLE)
      HELÉPOLA [...] máquina militar para batir murallas, que consistía en tres arietes armados, cada cual con tres puntas agudas de hierro debajo de una especie de boveda cubierta de pieles de buei recientemente quitadas, y humedecidas. Esta máquina se movía con poléas, que la hacian ir impetuosamente contra el muro que batían; dicen que tenia 405 codos de ancha, y 90 de alta.
    • 1797 Connelly, T. / Higgins, T. Diccionario inglés español 2.ª parte, I (A-K) [1797] Esp (BD)
      HELÉPOLIS. s. A military machine for battering down the walls of a place besieged. Helépola, máquina militar para batir murallas.
    • 1840 Anónimo (M. O y J. C.) Trad HTierra Santa, Martin, I p. 454 Esp (BD)
      Al otro día los Romanos pegaron fuego al pórtico del norte construido en lo alto del valle de Cedron y lo quemaron hasta el ángulo que miraba á oriente. En vano Tito hizo batir una de las galerías del atrio de los sacerdotes con una helépola. Vióse obligado á colocar los arietes en una esplanada porco antes hecha, pero no hubo medio de desmoronar la muralla sin embargo de que al mismo tiempo estaba zapándola por los cimientos [...].
    • 1845 Domínguez, R. J. DiccFrancés-Español, II Esp (BD)
      Helépole [...] Mil. ant. Elépola, máquina terrible en forma de torre que empleó Demetrio hijo de Antígone con un éxito favorable en los sitios y tomas de ciudades enemigas.
    • 1847 Domínguez, R. J. DiccNacional (2.ª ed.) Esp (BD)
      Elépola [...] Helépola.
    • 1851 Conde de Clonard (Serafín María de Sotto) HArmas Infantería, I p. 22 Esp (BD)
      La antigua tormentaria ó balística puede dividirse en cuatro clases de ingenios. La primera comprende las máquinas de aproche que eran la Bastida de puentes y de torno, Mantelete ó Manderete, Fonda-fuste, Grua, Manta y Zarza: la segunda, las de accion horizontal, tales como la Balista, Catapulta, Escorpion y Gossa que arrojaban grandes dardos ó cuadriellos empeñalados é impregna dos y los Arietes ó Carneros, Buzones y Helépolas que herian el revestimiento del muro; la tercera, las de movimiento parabólico, como el Fundíbalo ó Fenevol, Mangaña ó Almagaña, Almojaneque, Trabuco, Garrote, Libra y Brícola; y la cuarta, las accesorias, como los Caños de arambre, Capsas de puente ó Semi-bastidas Galgas, Abrojos, Paneras, Terrazos de cal y jabon.
    • 1851 Conde de Clonard (Serafín María de Sotto) HArmas Infantería, I p. 27 Esp (BD)
      El Buzon, Bezon ó Belzon, era una especie de ariete que traia su denominacion de la voz italiana balzare, saltar, brincar y botar. Lo indica un pasaje de las leyes de Partida con estas palabras: «por feridas de buzones con que derribasen los muros»; y lo confirma Ducange, quien refiriéndose á los anales de Génova, dice: que en 1194, en el castillo de Oberto, aparejaron un madero llamado bulzon, con cuyo impulso agujerearon la torre nueva de Balbonosi, que se hallaba en el camino de Santa Siria, destruyendo la mayor parte y echándola por tierra. La Helépola era tambien una máquina del mismo género, y que servia para el mismo objeto.
    • 1855 Prado Torres, P. "Anales guerra Oriente" [14-05-1855] La Igualdad (Madrid) Esp (HD)
      Por su lado los sitiados empleaban iguales medios para desmoronar los terraplenes, y volcar las tortugas y helépolas del enemigo. Con frecuencia por medio de estas contraminas solian atacar las de los sitiadores y las hacian impracticables, ora inundándolas, ora ahumándolas como en el sitio de Ambracia. Cuentan que en el asedio de Themisciro por el ejército de Mithrídates, soltaron en las galerías de las minas hasta fieras y abejas.
    • 1869 Almirante, J. DiccMilitar Esp (BD)
      HELÉPOLIS [...]. Sobre las enorme dimensiones de algunas puede argüirse que se hicieron por gana de exagerar, lalvo el "no servir luego" como la famosa del mismo Demetrio de Rodas. Clonard (Hist. org. T. I pág. 27) no va muy acertado en esto de la helépola, como él dice.
    • 1872 Pz Castro, M. Arte guerra España p. 96 Esp (BD)
      En cuatro clases pueden dividirse los ingenios ó aparatos de la antigua tormentaria. La primera abraza todas aquellas que se empleaban en el aproche de las plazas y castillos, tales como la Bastida de puente y de torno, los Manteletes, Fonda-fuste, Grúa, Manta y Zarza: la segunda las que obraban horizontalmente como la Balista, Gossa, Escorpión, Catapulta y los Arietes ó Carneros, Helopolas, Buzones, etc. , que herian el revestimiento del muro; la tercera las de movimiento parabólico como el Fundíbalo, Almagaña, Trabuco, Almojaneque, Brícola, Garrote, Libra y otras y por último las accesorias, donde estaban comprendidos los caños de Arambre, Galgas, Abrojos, Capsas de puente ó semi-bastidas. Paneras, Terrazos de cal y jabón, etc.
    • 1875 Latorre León, M. Trat elemental Fortificación III p. 438 Esp (BD)
      En los pisos inferiores de la helépola ó en tortugas de madera semejantes á las viñas, una gruesa viga guarnecida por un estremo con una gruesa masa de bronce y suspendida por el centro con cadenas ó cables, tomando un movimiento oscilatorio de atrás á adelante chocaba en el muro hasta derribarle ó abrir brecha; esta máquina se llamaba ariete, porque la bola de bronce semejaba la cabeza de un carrero y su acción era la de topar como este animal para amortiguar sus golpes, los sitiados interponían sacas de lana ó grandes haces de paja que suspendían con cuerdas desde las almenas. Otro de los medios de demolerlos muros y abrir brecha, era por las minas.
    • 1879 Conde de Clonard (Serafín María de Sotto) Discurso trage españoles p. 116 Esp (BD)
      Nos atrevemos pues con presencia de estos extractos á dividir la antigua tormentaria en cuatro clases de ingenios. La primera de preparacion á saber: la cappa, que se lomó del griego kapsa , que significa el armario; bastida, grua, manta, manco, gata y zarzo que por medio de rodillos se aproximaban á la muralla para que el zapador y minador trabajase á cubierto de los tiros de los sitiados: la segunda de accion horizontal, tales como la ballesta, catapulta, escorpion y gossa que arrojaban grandes dardos ó cuadriellos empeñalados é impregnados de combustibles y veneno; arietes, buzones, carneros y helépolas, que herian el revestimiento del muro: la tercera de movimiento parabólico como el fundíbalo ó fonevol, mangana, almajaneque, almagaña, algarrada, trabuco, cabrita, libra, garrote y brícola que despedian grandes piedras y balas de iluminacion ó carcasas con materias inflamables, y la cuarta las ofensas auxiliares, como galgas, abrojos, terrazos de cal , oleo-petroleo, jabon, alquitran, pez y otras resinas para detener los asaltos y quemar los reparos del sitiador.
    • 1880 Morayta, M. Historia Grecia antigua II p. 190 Esp (BD)
      En él despliegan, él todos sus recursos militares, y los suyos, valor á toda prueba, acreditando la construcción de la famosa Helepola (tomadora de ciudades) sus vastos conocimientos y singular talento de ingenero. Más socorridos los rodios por Casandro, Lisimaco y Ptolomeo, aquellos esfuerzos resultan inútiles, y Rodas firma una paz honrosa, en cuya virtud conserva sus leyes y su independencia y continúa aliada de Antígono, á excepción cuando éste guerreara contra Ptolomeo.
    • 1901 Calleja, S. Explicación láminas p. 69 Esp (BD)
      Máquinas de aproximación: bastida de puentes y de torno, mantelete ó manderete, funda-fuste, grúa, manta y zafra. Máquinas de acción horizontal: balista, catapulta, escorpión y gosa, que arrojaban grandes dardos ó cuadrellos empeñalados ó impregnados, y los arietes ó carneros, buzones y helepólas, que golpeaban el muro. Máquinas de movimiento parabólico; fundibulo ó fenonel, mangaña ó almagaña, almojaneque, trabuco, garrote, libra y brícola. Máquinas accesorias: caños de azambre, capras de puentes ó semibastidas, galgas, abrojos, paneras, terrazos de sal y jabón.
    • 1917 Anónimo Catálogo Museo Artillería IV p. 138 Esp (BD)
      Modelos de arietes llamados helépolas, por la forma de las cabezas de hierro de que están revestidas sus vigas. Los caballetes de ellas están cubiertos por un techo, y uno de ellos, además, por uno de sus costados, para guarecerse de los fuegos y proyectiles de todas clases que los sitiados, en su defensa, arrojaban contra ellos.
    • 2011 Marín Riveros, J. "Bizancio siglo VII" [01-01-2011] vol. 30, p. 48 Byzantion Nea Hellás (Santiago de Chile) Ch (HD)
      Lo que sí está claro es que la ofensiva ávara contaba con un numeroso ejército, que superaba proporcionalmente a las tropas griegas, además de una poderosa y avanzada tecnología militar con variedad de máquinas de asedio —entre las que se contaban helépolas o torres de asalto, catapultas y otros ingenios— que se movilizaron contra Constantinopla, impresionando vivamente a sus habitantes.

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