oración (de modalidad) interrogativa

Ejemplos: ¿A quién no le gustan las vacaciones?; ¿Cómo que no han recibido la solicitud?; ¿Cuándo se vieron?; ¿No han comprado los regalos todavía?; ¿Tienen los pasajes?; ¿Tomarán agua o vino?; Dígame qué hora es.

Sinónimos: interrogativa.

Relacionados: acto de habla, enunciado, modalidad, oración, oración (de modalidad) declarativa, oración (de modalidad) desiderativa, oración (de modalidad) dubitativa, oración (de modalidad) exclamativa, oración (de modalidad) exhortativa, oración (subordinada) sustantiva

Tabla: Ver tabla 15

Referencias: NGLE § 26.11a, 42.6-42.12, 43.2a-b | GDLE § 31.2, 35, 36.3.3, 36.4.2.2, 41.3.2, 49.4.3, 60.1.1.3, 60.2.2.2, 61, 62.3 | OLE § II.3.4.3.2, III.3.4.9 | DPD § interrogación y exclamación

Oración con la que se pregunta algo o con la que el hablante introduce alguna incógnita que puede resolverse discursivamente de diversas maneras. En efecto, las oraciones interrogativas directas constituyen preguntas (¿Qué hora es?). En cambio, no las introducen necesariamente las interrogativas indirectas o subordinadas (No sabíamos qué hora era; Todo depende de qué hora sea). Unas y otras se construyen con palabras interrogativas (qué, quién, cómo, dónde, etc.). La incógnita que introducen (‘qué persona, cosa, lugar, modo, tiempo’) puede o no determinarse en el contexto.

Las palabras interrogativas suelen tener correlatos en las correspondientes voces relativas (cuándo ~ cuando; quién ~ quien, etc.) y en unos pocos casos dan lugar a alternancias de significado muy cercano, como en La critican por {cómo ~ como} se viste. En la primera opción, el verbo criticar posee un complemento proposicional (aproximadamente, ‘La critican porque se viste de cierta forma’); mientras que en el segundo posee un complemento nominal (‘La critican por la forma en que se viste’), lo que da lugar a un contenido muy próximo al anterior.

Las oraciones interrogativas se dividen en dos grandes grupos, que se establecen en función de dos criterios gramaticales igualmente diferentes:

  1. En función de su dependencia sintáctica:
    1. Interrogativas directas: ¿Quién ha llamado?
    2. Interrogativas indirectas o subordinadas: No sé quién ha llamado.
  2. En función de su estructura interna:
    1. Interrogativas totales o disyuntivas: ¿Quieres un café o un té?
    2. Interrogativas parciales: ¿Qué quieres?

Como estos dos criterios se cruzan, tanto las interrogativas directas como las indirectas pueden ser totales o parciales. Las interrogativas directas son oraciones independientes, en el sentido de «no subordinadas». Se escriben entre signos de interrogación (¿…?) y constituyen típicamente preguntas, por tanto un tipo de acto de habla. Sin embargo, con las llamadas preguntas retóricas (que también son interrogativas directas) no se solicita información, ya que estas preguntas contienen implícitamente su respuesta. Estas construcciones constituyen un recurso para emitir, de forma velada, aseveraciones afirmativas o negativas, así como para manifestar lo injustificado de algún comportamiento ¿No hemos hablado ya de ello?; ¿Acaso he dicho yo lo contrario?; ¿A santo de qué usas ese tono inquisitivo conmigo?; ¿A cuento de qué sacan ahora ese tema?; ¿Quién narices te pidió que intervinieras?

Las interrogativas indirectas o subordinadas constituyen una de las posibles variantes de las oraciones (subordinadas) sustantivas. A pesar de que el término oración interrogativa responde, en sentido estricto, a un tipo de modalidad, la etiqueta interrogativa indirecta no se diferencia en nada de interrogativa subordinada. De hecho, unas interrogativas indirectas tienen correspondencia en el discurso directo (Me preguntó a qué hora llegaré; Me preguntó: «¿A qué hora llegarás?»), mientras que otras carecen de ella (No sé a qué hora llegaré; *No sé: ¿A qué hora llegaré?).

Las interrogativas indirectas pueden reproducir preguntas (Me preguntó qué había escrito), pero también es posible que no lo hagan y que introduzcan en su lugar alguna incógnita relativa a personas, cosas, lugares, modos, etc.: No estamos seguros de cómo proceder; Ya sabían dónde tenían que ir; Todo depende de a qué hora salga el tren. Para asegurar que se desea repetir palabras citadas en preguntas previas se emplea a veces la conjunción que antes de la palabra interrogativa o del sintagma que esta forma (Me preguntó que qué había escrito; Nos preguntábamos que de dónde habría salido). La mayor parte de las interrogativas indirectas complementan a predicados que expresan tenencia, adquisición, obtención, ausencia, pérdida o transmisión de información (saber, averiguar, olvidar, desconocer, anunciar, etc.), pero algunos expresan, en cambio, otros tipos de significados (depender, estar en función de, etc.).

Las interrogativas totales se caracterizan por expresar opciones. Se dividen de la siguiente forma:

  1. Interrogativas de o no (también denominadas polares): ¿Quieres un helado?
  2. Interrogativas alternativas: ¿Quieres un helado o un refresco?
    1. Interrogativas de disyunción exclusiva
    2. Interrogativas de disyunción inclusiva

En las oraciones del grupo 1 se elige entre dos opciones opuestas, tanto si la segunda de ellas está expresa (¿Te gustó la película o no?) como si queda tácita (¿Te gustó la película?). En general la ausencia de elipsis se corresponde en estos casos con el grado de fuerza inquisitiva del hablante. Así pues, variantes como ¿Te gustó la película o no te gustó? y ¿Te gustó la película o no te gustó la película? expresan el mismo contenido que las oraciones anteriores, pero se diferencian de ellas en el tono enfático, apremiante o perentorio del que formula la pregunta. Las interrogativas polares suelen presentar el sujeto en posición posverbal como opción no marcada (¿Vendrá María el jueves?). No se descartan, sin embargo, otras opciones, especialmente cuando se reproducen informaciones ya presentadas o se desea confirmarlas (¿María vendrá el jueves?).

Las interrogativas totales alternativas (grupo 2) contienen un número limitado de opciones, que se enumeran expresamente (¿Te gusta el fútbol o el baloncesto?; ¿Es hoy miércoles, jueves o viernes?). Como se indica en la clasificación anterior, las interrogativas alternativas se subdividen en dos grupos en función de la forma en que se interprete la disyunción. Si el que dice ¿Quieres un café o un refresco? formula este enunciado con dos grupos melódicos (por tanto, con inflexión ascendente-descendente) estará preguntando cuál de esas opciones presentadas prefiere su interlocutor (disyunción exclusiva, tipo 2a). En esta interpretación, la pregunta significa aproximadamente ‘¿Quieres un café o quieres un refresco?’. Si formula, en cambio, la pregunta con un solo grupo melódico (por tanto, con inflexión ascendente), estará presentando esas bebidas como opciones posibles, a las que se podrían añadir otras no mencionadas (disyunción inclusiva, 2b). En esta interpretación, la pregunta significa aproximadamente ‘¿Quieres tomar algo, como por ejemplo un helado o un refresco?’. Es habitual que, en función del contexto y de la situación, algunas interrogativas alternantes solo admitan la interpretación exclusiva, o bien solo la inclusiva.

Las clases de oraciones anteriores se extienden a las interrogativas indirectas o subordinadas. Las interrogativas indirectas totales están siempre encabezadas por la partícula subordinante si (No sé si te gusta o no). Tradicionalmente se clasifica entre las conjunciones, pero hoy tiende a aceptarse el análisis de Andrés Bello, que la consideraba adverbio interrogativo, ya que, al igual que estos, puede ir seguida de infinitivos: No sé {si ~ dónde ~ cuándo ~ cómo} llamar (v. conjunción subordinante).

Las interrogativas parciales (también llamadas pronominales o abiertas) se construyen con pronombres, determinantes y adverbios interrogativos (quién, qué, cuándo, cómo, etc.), así como con los sintagmas que estos forman (qué otra posibilidad, en qué preciso lugar, de quién, para cuándo, etc.), casi siempre situados al principio de la oración. Como en los casos anteriores, las interrogativas parciales pueden ser directas (¿Qué quieres?; ¿Qué color prefieres?; ¿Cuándo llegan?; ¿En qué preciso lugar estaban ocultos?) o indirectas (Dime qué quieres; Me recordó qué color prefería; Depende de cuándo lleguen; Tengo que averiguar en qué preciso lugar estaban ocultos).

Las interrogativas de eco o interrogativas confirmativas son interrogativas parciales, de naturaleza en parte metalingüística, con las que se pide al interlocutor que aclare el referente de alguna información presentada antes: ¿(Que) te vas adónde?; ¿María pretende comprar qué? Las palabras interrogativas no suelen aparecer en estos casos al comienzo de la oración, a diferencia de lo que sucede en las demás interrogativas parciales. Otras veces, las interrogativas de eco solicitan que se confirme la veracidad de la aseveración que las precede, especialmente cuando esta causa sorpresa en el interlocutor: —Me voy mañana a París; —¿Que te vas mañana a París?

A menos que el sujeto de una interrogativa parcial sea una palabra interrogativa (¿Quién llamó?), este se pospone típicamente al verbo en las interrogativas parciales (¿Qué dijo ella entonces? ~ *¿Qué ella dijo entonces?). Aun así, se detectan numerosas excepciones en el español antillano y en otras regiones del español caribeño (¿Qué tú quieres? ~ ¿A qué hora el doctor atiende?), que se extienden al español general si se trata de interrogativas retóricas construidas con cómo y por qué (¿Por qué ustedes no están nunca de acuerdo?; ¿Cómo la situación ha podido llegar a ese punto?).

Información complementaria

Las respuestas a las interrogativas parciales no mantienen necesariamente la categoría de la palabra interrogativa con la que estas se forman. Así, cómo es adverbio en ¿Cómo era?, pero la respuesta a esta pregunta puede construirse con un adjetivo: enorme. Por el contrario, las preguntas formadas con grupos preposicionales se corresponden con respuestas de este mismo tipo: —¿Con quién irás?Con ella. No constituyen excepción diálogos como: —¿(A)dónde vas?Arriba, ya que el adverbio incorpora la preposición en estos casos (cf. *a arriba; v. en complemento locativo argumental).

Las oraciones interrogativas parciales pueden contener varias incógnitas. Las llamadas interrogativas múltiples o complejas son interrogativas parciales formadas con varias palabras interrogativas en funciones sintácticas diferentes, sean interrogativas directas (¿Quién dijo qué?) o indirectas (Ya no recuerdo quién dijo qué). No se consideran interrogativas múltiples las que presentan coordinadas las palabras interrogativas o los grupos que estas forman (¿De quién o de dónde ha salido esa información?).

Las interrogativas múltiples no admiten una sola expresión como respuesta. Reciben en su lugar alguna de las llamadas respuestas de lista, que están constituidas por varias oraciones: —¿Quién donó qué? —Paula donó los cuadros; su hermana, los muebles; y nosotros, las lámparas.

Al igual que las oraciones interrogativas, constituyen enunciados interrogativos muchas secuencias no oracionales que deben interpretarse en algún entorno discursivo (¿Contenta en el nuevo trabajo?; ¿Casualidad o planificación?; ¿Con gas?, etc.). Conviene recordar, por otra parte, que en ciertos casos es posible solicitar información sin usar para ello oraciones interrogativas, por ejemplo mediante los imperativos (Dígame, por favor, su nombre) o incluso usando enunciados declarativos (Seguramente, ustedes me pueden facilitar el número de teléfono).

Tabla 15. MODALIDADES ORACIONALES

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA Y ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPAÑOLA: «Glosario de términos gramaticales», [versión 1.0 en línea]. <https://www.rae.es/gtg/oración-de-modalidad-interrogativa> [2024-05-08].

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