cuantificador fuerte

Ejemplos: todos, ambos, cada, siempre.

Sinónimos: cuantificador universal.

Paradigma: cuantificador fuerte / cuantificador débil

Relacionados: , clase (de palabras) transversal, clase de palabras, cuantificador, cuantificación

Esquema: Ver esquema 8

Tabla: Ver tabla 8

Referencias: NGLE § 19.2-19.3 | GDLE § 16.2.1

Cuantificador que designa —por sí solo o junto con los elementos a los que modifica— la totalidad de las entidades de un conjunto, como siempre en Aciertas siempre (‘en todas las ocasiones’) o todos en todos sus libros. Estos cuantificadores también se denominan universales. Al abarcar todas las entidades de las que se habla, se entiende que no se excluye ningún subconjunto de ellas. Los cuantificadores fuertes se diferencian marcadamente de los cuantificadores débiles, como mucho, en este punto: {*Todos ~ Muchos} vinieron a la fiesta, pero algunos no pudieron hacerlo.

Los cuantificadores fuertes que funcionan como determinantes y como pronombres comparten con los determinantes definidos la propiedad de constituir sintagmas nominales definidos. Los adverbiales dan lugar a paráfrasis formadas con ellos (Se equivoca siempre ~ Se equivoca todas las veces). Estos sintagmas están sujetos a la llamada restricción o efecto de definitud (v. en determinante definido), lo que los excluye, con pocas excepciones, de la posición de complemento del verbo haber: *Hay {todos los regalos ~ cada regalo ~ sendos regalos}, al igual que *Hay {los ~ esos ~ tus} regalos. Sobre aparentes excepciones a la restricción de definitud (como en Hay cada niño…, con entonación suspendida), v. determinante definido. En las entradas a las que se ha hecho referencia se abordan otras excepciones aparentes a la pauta agramatical <*haber + expresión definida>, tales como No hay el menor peligro; Solo había la mitad; Hay la mar de problemas o No hay la fuerza necesaria.

Información complementaria

Son poco numerosos los cuantificadores fuertes que, como siempre, contienen léxicamente la entidad cuantificada (momento, vez, ocasión, etc.).

El cuantificador cada incide siempre sobre sintagmas nominales formados por nombres contables en singular (cada día); en cambio, todo puede hacerlo sobre sintagmas nominales definidos (todas las ideas), pero también sobre nombres contables en singular (toda casa), raramente en plural sin determinante (ropa de todas clases). En el primer caso (todas las ideas, todos estos problemas, todas sus obras), todos se denomina a veces predeterminante.

Solo algunos cuantificadores fuertes pueden aparecer con núcleo tácito. Es el caso de ambos, como en Si me preguntas qué reloj me gusta más te diré que ambos Ø, en lo que se opone a cada: Los niños se iban acercando, y el director les entregaba el premio a cada {*Ø ~ uno}, con escasas excepciones (Póngame dos de cada).

El cuantificador todos también puede aparecer con núcleo tácito (Discutimos un rato y al final todos Ø quedamos contentos con la solución). El sintagma definido sobre el que suele incidir el cuantificador todos se puede pronominalizar independientemente: Leyó todos los libros > Los leyó o Los leyó todos (v. en pronominalización).