aspecto léxico

Sinónimos: modo de acción, Aktionsart, cualidad de la acción, accionalidad, aspecto inherente.

Relacionados: predicado, verbo, verbo auxiliar, verbo principal, flexión, desinencia, paradigma flexivo, tiempo, modo, aspecto (gramatical)

Tabla: Ver tabla 13

Referencias: NGLE § 23.3-23.4 | GDLE § 46

Modalidad del aspecto de los predicados determinada por el significado de estos, así como por las expresiones con las que se combinan. El aspecto léxico se denomina tradicionalmente modo de acción o cualidad de la acción. Aun así, ha sido siempre muy limitada la atención que se le ha dedicado en las gramáticas tradicionales, a pesar de que afecta a aspectos fundamentales de la sintaxis. He aquí un ejemplo simple: el hecho de que el complemento preposicional durante toda la tarde pueda aparecer con naturalidad tras las expresiones Te esperé, No llegó nadie o Entraron numerosas personas, pero no tras otras como Llegó Juan o Hubo un accidente, muestra que las primeras expresan duración a través del léxico y de la sintaxis, y también que la preposición durante introduce un complemento que pone de manifiesto ese mismo concepto. Como se comprueba, no son las piezas léxicas por sí solas las que expresan esta modalidad del aspecto, sino la concurrencia de varios factores gramaticales (la negación o el plural, entre otros, en los ejemplos propuestos). Por esta razón se acepta hoy generalmente que una de las principales características del aspecto léxico es su naturaleza composicional (v. composicionalidad).

Intervienen varios factores en el aspecto léxico de un predicado:

  1. la duración, que afecta a la existencia de un posible desarrollo interno de la acción (dormir, recitar un poema) o a su ausencia (despertar, alcanzar la meta);
  2. la delimitación, acotación o telicidad, que afecta al hecho de si la noción verbal expresada contiene límite temporal (y en tal caso el predicado es télico, como en ver una película, escribir un artículo) o no lo posee (y entonces es atélico, como en bailar, estudiar informática);
  3. el dinamismo, que implica la existencia de un cambio o un avance (coser un calcetín, corregir un examen), o su ausencia, especialmente si el predicado denota una situación homogénea que se da a lo largo de cierto período (saber inglés, ser atleta).

La última de estas tres propiedades permite distinguir los estados de los eventos o sucesos. Los primeros se dan de forma homogénea a lo largo del tiempo en el que tienen lugar. Los segundos, en cambio, implican cierto progreso en la situación que denotan, tanto si la situación desemboca en un límite natural como si no es así.

Existen varias clasificaciones de los predicados en función de su aspecto léxico. Tradicionalmente, era frecuente diferenciar entre las siguientes clases:

  • los estados, que describen una situación o propiedad carente de dinamismo (El noruego y el inglés pertenecen a la familia de las lenguas germánicas);
  • las acciones, que designan un evento dinámico en el que interviene algún agente, tanto si ello implica conciencia o voluntad (Los bomberos sofocaron el incendio) como si no es así (El calentamiento de la tierra está derritiendo los casquetes polares);
  • los procesos, que denotan cambios de estado, tanto si estos poseen cierto límite natural (Los narcisos florecen al final del invierno) como si no es así (La inflación seguía creciendo).

En la actualidad, está muy extendida una clasificación cuatripartita que divide los predicados verbales por su modo de acción en los grupos siguientes:

  • actividades (llover, correr por el parque),
  • realizaciones o efectuaciones (construir un puente, recitar un poema),
  • logros o consecuciones (caerse, ganar la carrera),
  • estados (saber algo, residir en un lugar).

Estas cuatro manifestaciones del aspecto léxico en los predicados poseen consecuencias gramaticales. Así, las actividades son predicados que describen situaciones sujetas a un desarrollo (por tanto, con duración) que no precisan de límite final para ser concebidas. Pueden cesar o interrumpirse (Dejó de manejar), pero carecen de término o límite final (*Terminó de manejar). Aun así, la información relativa al límite puede no estar presente y recuperarse ocasionalmente del contexto, como en terminar de correr, de llover, etc. Como poseen duración, son compatibles con complementos encabezados por las preposiciones durante o por, seguidas de expresiones que designen cierto período: Escribió novelas durante su excedencia; Corrió por el parque durante media hora; Faltó al trabajo por varios días. Rechazan los complementos temporales con en (como en media hora: *Te esperé en media hora), a menos que sea posible obtener la interpretación distributiva de un complemento plural o cuantificado, como en Escribe cartas en dos minutos (= ‘cada una de ellas’). Se descarta aquí la interpretación en la que en significa ‘dentro de, al cabo de’, como en Terminaré en media hora.

Como las actividades, las realizaciones (o efectuaciones) poseen duración, pero se diferencian de aquellas en que poseen límite. Si este no se alcanza (Estaba leyendo el diario) no puede decirse que hayan tenido lugar. Habitualmente, el límite es aportado por un complemento del predicado que incluye algún determinante, como en escribir la novela o escribir tres novelas (realización), frente a escribir novelas (actividad).

Las realizaciones, pero no las actividades, son compatibles con modificadores que acotan la duración del evento, como en Escribió tres novelas en cinco años (vs. *Escribió novelas en cinco años, descartada la interpretación distributiva a la que se aludió antes: ‘Fue capaz de escribir cada una en cinco años’). Muchos predicados de realización pasan a interpretarse como actividades cuando dejan en suspenso su límite final (Leí el periódico durante unos minutos).

Por su parte, los logros (o consecuciones) comparten la delimitación con las realizaciones, pero se diferencian de ellas en que carecen de duración, por lo que no son compatibles con los complementos que la expresan (*Llegó a la oficina durante un rato). Admiten a menudo ciertos complementos durativos (en dos horas) que no se refieren a la acción misma expresada por ellos (Llegó a la cima de la montaña en dos horas), sino al período previo que desemboca en dicha acción (en este ejemplo, el ascenso de la montaña). Los predicados de logro o consecución pueden reinterpretarse como predicados de actividad si reciben la lectura iterativa (Llegó tarde a la oficina durante años).

Por último, los estados se diferencian de las otras clases aspectuales en que carecen de dinamismo o de progresión interna (caber, peligrar, ser alto), de modo que son incompatibles con los adverbios que lo suelen requerir (cuidadosamente, lentamente, etc.). Comparten con las actividades la duración y la ausencia de límite temporal. Estas características se identifican tanto en los estados permanentes o propiedades (ser alto), como en los estados episódicos o transitorios (estar enfermo).

Tabla 13. CLASIFICACIÓN DE LOS PREDICADOS EN FUNCIÓN DE SU ASPECTO LÉXICO (O MODO DE ACCIÓN)

REAL ACADEMIA ESPAÑOLA Y ASOCIACIÓN DE ACADEMIAS DE LA LENGUA ESPAÑOLA: «Glosario de términos gramaticales», [versión 1.0 en línea]. <https://www.rae.es/gtg/aspecto-léxico> [2024-05-16].

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